Al día siguiente todos estaban nerviosos por la llegada del gran día en el que se decidiría quienes formarían parte de la banda intercolegial Seúl - Busan. 

Se notaba en aquellos que corrían por todos lados buscando o llevando cosas, aquellos afinando instrumentos en los pasillos o quienes llamaban a sus compañeros que aún no habían llegado. Por ejemplo, teníamos a Minho llamando a Lalisa, quien seguía - probablemente - durmiendo a unos minutos de empezar. O, también, a Nayeon y Chaeyoung quienes intentaban tranquilizarse sin éxito: ambas estaban temblorosas.

O Jennie, quien entraba al pasillo repleto de músicos cargada de varias cosas como su guitarra y su pesado bolso. Francamente lo estaba llevando con bastante facilidad, acostumbrada a acarrear tantas cosas al colegio, pero al ver a cierto muchacho tropieza mágicamente con un obstáculo invisible. Yoongi, el más cercano - y a quien Jennie esperaba llamar la atención. - acude a ayudarla.

- ¿Estás bien? - la muchacha no era su persona favorita en el mundo, pero no podía simplemente dejarla en el suelo. 

No lo habían criado así.

- Si, gracias oppa... - Yoongi asiente, con intenciones de devolverle sus pertenencias. - ¿Podría pedirte que me ayudes a llevar eso a la sala de ensayos? - pregunta.

- ¿Eh? - realmente no quería pero... Ah, ya. Será sólo un minuto. - Está bien.

Yoongi entra a la sala de ensayos con la guitarra de Jennie en sus manos y la pelinegra demasiado cerca mientras Jimin observaba todos sus movimientos junto a Siyeon y Taehyung.

- Él es tan inocente... - suspira Jimin. - Hyung es demasiado bueno como para entender que Jennie está coqueteando con él. 

- Y yo que pensé que Jennie seguía enamorada de Jungkook... - murmura Tae.

- ¿Quieres que hable con ella? - murmura Siyeon, enarcando una ceja. Ambos la miran mal y levanta los brazos en señal de rendición. - Hey, sólo decía... Pero coincido, tu chico es demasiado inocente.

Jimin simula darse la cabeza contra la pared mientras Jungkook observa a lo lejos la situación en todo su esplendor con una expresión algo triste. Siyeon lo nota y disimuladamente se lo comenta a los dos muchachos.

- ¿Qué le pasa al chico tattoo? - pregunta. Ninguno comprendió. - A tu ex, el chico de cara de atropellaron a mi perrito hoy.

- ¿Jungkook? 

- Ajá.

- No lo sé, pero no le prestes atención. Si sabe que estamos observándolo va a ser peor.

De repente aparecen en escena el profesor Jinki, bostezando como si no hubiese dormido una semana, junto a la profesora Irene, elegantemente vestida. Ambos saludan a Todos y les piden ingresar al salón de ensayos para una charla pre - audiciones. 

Antes de cerrar la puerta tras de sí, Lalisa aparece.

- ¡Disculpen, disculpen...! - murmura, haciendo varias reverencias a los mayores. - El autobús se retrasó. 

- Bien, pasa. - permite Jinki.

Todos se acomodan donde pueden, sorprendidos al notar que Yoongi y Jennie seguían adentro del salón para ese entonces: la pelinegra demasiado cerca del guitarrista y este demasiado incómodo. 

Al ver entrar a Jimin le sonríe exponiendo sus encías, recibiendo el mismo gesto del menor. Jennie se aleja de Yoongi.

- Bueno, principalmente quería saludarlos a todos. - comienza Jinki. - Es una pena que no podamos trabajar todos juntos como banda intercolegial, pero como ya saben los cupos son de siete personas distribuídas en distintos puestos preestablecidos. - todos asienten.

- Así que si Jinki oppa está de acuerdo podemos anunciar ya el inicio de las audiciones... ¿Qué opina, oppa? 

- Me parece bien, señorita Irene... Pero creo que antes deberían enterarse de un pequeño detalle que les ocultamos, ¿quieres comentarles, Irene? - ella asiente.

Todos se miran entre sí. ¿Qué les habían ocultado sus mayores? ¿Porqué se hacían los misteriosos?

- Las audiciones serán frente a todo el colegio. - suelta sin anestesia. En los alumnos se genera una expresión en común: sorpresa.

Excepto Jennie, ella estaba lo que sigue a molesta.

- Jinki oppa, Irene unnie... - llama. - ¡No creo que sea justo, deberían habernos notificado con antelación! ¿Cómo es posible que nos enteremos minutos antes de audicionar?

¿Enserio? 

Jimin iba a contestarle pero el siempre callado Minho se le adelanta, tomando el asunto en sus manos.

- Tendrías que saber ya que en medio de un show siempre hay imprevistos, noona. - suelta. - Cualquier artista sabe eso... ¡The show must go on! 

Mic drop.

Jinki sonríe, orgulloso de su alumno mientras Jennie se cruza de brazos y rueda los ojos. Jimin no puede evitar sonreírle con complicidad al amigo de su hyung favorito. Lalisa, Wendy, Jaebeom y Siyeon estaban apunto de estallar en una ruidosa risa.

Bueno, Siyeon de todas formas terminó rompiendo el tenso ambiente con sus carcajadas.

- Exactamente lo que dijo Minho, Jennie. Esa es la razón por la que tomamos esta decisión, tienen que aprender a adaptarse a imprevistos. - explica.

- Ahora vámonos a preparar todo en el auditorio... - indica Irene. Jennie levanta la mano. - Primero iremos a quitar las colchonetas que utilizaron los alumnos de expresión corporal y luego volveremos a buscar los instrumentos.

- ¿Puedo ir al baño mientras tanto, unnie? Los alcanzo en el auditorio. - Irene asiente.

Claro que alguien iba a arrepentirse de aquello, quizá la persona menos pensada.