"Si no quieres decirme nada entonces puedes ir directamente al infierno. Pero primero voy a enseñarte algo, jodiste esto tú misma."
—Jaymes Young

A pesar de lo ocurrido el día anterior y para la propia sorpresa de Jungkook, Taehyung y Baekhyun recuperaron la normalidad de forma realmente rápida. Esa mañana la lluvia todavía era fuerte y el viento que atravesaba las frondosas ramas de los árboles causaba silbidos en el entorno. Aunque el clima no era excesivamente frío Kook no pudo evitar abrazarse a sí mismo mientras caminaba descalzo y con esos pantalones cortos que Taehyung le había prestado para dormir.

Sus pies hicieron un leve sonido mientras apartaba las cortinas para observar el tiempo a través de la ventana, cuando abrió esta las gotas de lluvia refrescaron su frente y a juego con el viento su cuerpo se estremeció en consecuencia. Baekhyun pasaba su brazo sobre los hombros de Taehyung mientras caminaban por el jardín de la casa hasta la entrada trasera, probablemente habían ido a revisar los establos.

Ambos sonreían y bromeaban juntos, parecían tan unidos que nadie hubiese imaginado lo que sucedió la noche anterior.

—Interesante - Jungkook se estremeció antes de cerrar la ventana y se envolvió a sí mismo con su enorme sweater antes de ir hacia la cocina.

Después de unos minutos el par de amigos ya estaba en la casa así que se limitó a saludar mientras comenzaba a desayunar cualquiera de las cosas que los empleados habían dejado en la nevera antes de tomar sus días libres.

—¿Cuándo volverás a ese piso? - la voz de Baekhyun llegó hasta sus oídos.

—Cuando termine el fin de semana, tengo que ir a la universidad el lunes para recoger apuntes. - contestó Taehyung mientras se deshacía de su empapado chubasquero y buscaba algo de comer como Jungkook lo había hecho antes - Kook, ¿vas a querer café?

Jungkook levantó la mirada de su desayuno para mirar a Tae quién tenía el pelo húmedo y desordenado.

—No, gracias - respondió sin interés.

Aquella pregunta, como muchas otras, se había convertido en rutina, Taehyung siempre le preguntaba y él siempre negaba. Daba igual si la respuesta era la misma cada día porque el muchacho seguía asegurándose y por supuesto nunca dejaba de ofrecerle cualquiera de las cosas que hacía para sí mismo. Lo que Jungkook todavía no sabía es que Tae hacia lo mismo con todo el mundo, que él no era especial en ese aspecto. Sus cuidados no eran exclusivos.

—Baek, ¿quieres algo? ¿Café, galletas, lo que sea? - una vez más Jungkook alzó la mirada curioso y comprobó que el amigo de Taehyung, al contrario que él, asentía dejándose mimar.

De alguna forma agradeció aquello, saber que no era el único y que cuando rechazaba las atenciones de Taehyung no estaba enviándole dardos envenenados incluso si  terminaba haciéndolo de otras maneras.

Ambos regresaron al apartamento antes de lo pensado cuando el tío de Jungkook los llamó para notificar de la queja de un vecino, debida a que había algo provocando goteras en la casa situada bajo el lugar en el que residían. Tan pronto como pusieron un pie en el piso notaron la gran cantidad de charcos situados a lo largo del suelo.

—Mierda - Jungkook fue el primero en entrar y por supuesto el primero en observar el desastre que la lluvia había causado - Otra vez no.

—¿Había pasado antes? - las manos de Taehyung se posaron sobre la cintura de Jungkook para que le dejase pasar, un toque inocente y casi reflejo - Ni siquiera me sorprende, el techo está hecho un desastre. Deberíamos hacer algo con la humedad.

Jungkook miró con cara de pocos amigos a Taehyung, él sabía mejor que nadie que su casa era un desastre y necesitaba muchos parches, pero en ningún momento lo había obligado a residir allí por lo tanto no le gustaban sus opiniones ni sentía que tuviese derecho a tenerlas. Era solo un inquilino más, si no estaba a gusto podía irse, buscar otro lugar y Kook planeaba decírselo, porque sabía que era imposible que alguien como Taehyung, quién se había criado en la riqueza, estuviese bien en ese lugar.

— Puedes irte cuando quieras si esto no te gusta, es lo que hay, lo sabes. - Jungkook se apartó de Taehyung y se movió rápidamente hasta la cocina para obtener algunos recipientes con los que evitar que las goteras siguieran mojandolo todo.

— Nunca he dicho que no me guste, pero no podemos simplemente conformarnos cuando la casa se nos cae encima. Sé que no lo arreglas por cuestión de dinero, aún así apuesto a que encontraremos algo con lo que evitar que esto suceda de nuevo.

— No lo entiendes, nunca has alquilado algo en tu vida y se empieza a notar. Es mi tío quién tiene que arreglarlo, es el dueño. Si no quiere no podemos hacer nada al respecto - contestó Jungkook comenzando a colocar los recipientes sobre el suelo, donde los focos de las goteras eran mucho mayores.

Taehyung sonrió levemente.

— Dudo que quiera perder el dinero que le proporcionamos, tienes razón no sé de alquileres porque nunca he alquilado un piso, pero sé de negocios porque he trabajado con mi hermano de la empresa familiar varias veces. Y también conozco aún buen abogado que pueda ayudarnos.

Jungkook dejó caer con furia uno de los recipientes y se acercó a Taehyung, sus manos se posaron sobre la chaqueta de este haciéndole notar su enfado.

—Te dije que no te metieras en mi vida. Somos dos personas independientes en esta casa, si no te gusta puedes irte. No vas a hablar con mi tío ni mucho menos traer a un abogado, no vas a pagar para arreglar lo que yo no puedo. No necesito tu ayuda, tu dinero ni mucho menos a ti.

Las manos temblorosas de Taehyung se posaron sobre las de Kook, sus ojos se habían comenzado a cristalizar y su mirada era ahora similar a la que un cachorro asustado mostraría mientras agachaba la cabeza tratando de evadirse de la realidad.

La mente de Tae volvió a volar hacia el pasado, todos esos recuerdos que siempre trataba de evitar y tanto lo lastimaban clavándose como alfileres por todo su cuerpo. Jungkook lo percibió al instante pero incluso tardando solo unos segundos era demasiado tarde. Sus brazos envolvieron el cuerpo de Taehyung cuando sus temblorosas piernas lo hicieron caer.

—Tae es un chico bueno… - susurro agonizando - Tae es bueno, Tae no ha hecho nada malo. Perdón, Tae solo quería ayudar… Perdón. Perdón. No me lastimes…

Jungkook apretó a Taehyung contra su cuerpo notando la culpabilidad cubrir por completo todo su interior, sus manos le acariciaron la espalda antes de buscar en el bolsillo de este las pastillas que portaba para la urgencias.

—Taehyung es un chico realmente bueno - Le susurro sin dejar de acariciar su espalda - y nunca le haré daño a Taehyung. No te voy a lastimar, me he enfadado por una tontería. ¿Está bien? Tae es precioso y no merece vivir en un sitio como este con una persona que no sabe apreciarlo.

Los fuertes brazos de Jungkook levantaron en volandas a Taehyung quién escondió su cabeza, todavía aterrado, en el cuello de este.

—Todo va a estar bien.

—Tae es un buen chico… Perdóname… Perdón… - la temblorosa voz de Taehyung seguía repitiendo aquellas palabras que Jungkook conocía por experiencias pasadas.

—Shhh, no tengo nada que perdonarte. Está todo bien precioso.

Jungkook miró a su alrededor buscando algún sitio seco en el que depositar a Taehyung para que este pudiese tomar sus pastillas y dormirse. Maldijo sin embargo en voz baja al comprender que prácticamente toda su casa era un desastre de goteras y posó por un momento a Taehyung sobre la mesa de la cocina para obtener toallas y llamar a Yugyeom. Este iría a trabajar en una hora por lo que podría prestarles su casa.

—Kookie… - Taehyung tomó la mano de Jungkook cuando este trató de moverse hacia el baño.

—Vuelvo en unos segundo TaeTae - susurró acariciándole las mejillas cubiertas por lágrimas.

—¿Tae es bueno? - sus manos temblorosas y la manera en la que hablo le informaron que seguía en medio de uno de sus ataques - Si Tae es bueno quiere un regalo.

Jungkook sonrió levemente y lo observó con cuidado.

—Realmente debo aprender a comportarme contigo, a veces olvido que aunque eres más fuerte que antes sigues siendo delicado en cuanto a la violencia. Tendrás un regalo. ¿Está bien?

—¿Kookie me conseguirá un regalo? - los ojos de Taehyung se iluminaron.

—Lo haré pero antes debes tomar tus pastillas, deja que alcance un vaso de agua para ti.

Taehyung soltó las manos del hermano de Yoongi por unos segundos y fue el propio Jungkook quien volvió a unirlas después de alcanzar el vaso.

—Ten, toma tu medicación Tae.

Jungkook estaba situado ante esa pastelería tan exclusiva del centro de Seúl, había acudido allí después de dejar a Taehyung durmiendo y bien arropado en la casa de su amigo. En sus manos llevaba todo lo que había logrado ahorrar ese mes y se preguntaba si acaso estaba loco, probablemente el chico ni siquiera recordarse que había pedido un regalo cuando se despertase en consecuencia de los fuertes medicamentos sin embargo necesitaba obtener algo lo suficientemente bueno para él como para hacerlo un poco feliz, los dulces eran la mejor opción porque le regalaban al cuerpo dopamina, la clave de la felicidad.

Se sentía realmente culpable por lo que su carácter había ocasionado, nunca pretendió pegarle a Taehyung. No lo hizo y jamás lo haría, pero este asoció su enfado a aquello. Creyó que lo golpearía y entró en pánico.

—Siguiente.

Jungkook avanzó en la cola confundido y observó el escaparate de la selección de pasteles que quedaban disponibles a esa hora. Recordaba a Hoseok comprando ahí las tartas para los cumpleaños, era una pastelería que la gente de clase alta frecuentaba debido a que el chef que allí cocinaba era bastante conocido. Algo que sin duda era adecuado para Tae pero que a la vez se escapaba de su economía.

—Eh… Deme algo con mucho chocolate por favor… ¿Conoce por casualidad a la familia Jung? Ellos suelen comprar aquí.

La dependienta de la pastelería le dedicó una sonrisa y asintió.

—Se trata de algo para Jung Taehyung, sé que le gusta el chocolate pero no tengo más información acerca de sus gustos. Si por casualidad recuerda qué es lo que él suele pedir cuando…

—Claro, el señorito Taehyung suele escoger pasteles hechos con chocolate Cadbury.

Cuando la empleada señaló los pasteles y Jungkook observó los altos precios un escalofrío le recorrió todo el cuerpo.

—Tanto él como su hermano suelen seleccionarlos para fiestas. ¿Es usted un nuevo empleado?

Jungkook se rasco con nerviosismo la cabeza antes de negar.

—Soy algo similar a familia… Deme el más barato de esos que tenga y envuelvalo para llevar por favor.

Kook volvió a mirar el dinero en sus manos, lo único que le había quedado después de pagar el alquiler y su material de estudio. Todo por Taehyung, al fin y al cabo él había provocado que el chico entrase en pánico y ahora sólo quería verlo bien de nuevo.

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Es corto pero tenía poco tiempo y no quería dejaros sin capítulo, espero que os haya gustado.

Por cierto, os gustaría que haga esto que hacen muchas autoras de que podáis entrevistar a los personajes de la historia? Si os gusta la idea dejad vuestras preguntas para los personajes y me ingeniare respuestas de estos. Responderé con lo que cada personaje diría.

Un beso, Mel