"Bueno, sé que pueden llegar lágrimas desde sus ojos pero es posible que así sea en vano, aunque sé que estas lágrimas me traerán dolor aún así y de la misma manera, haz que llueva."
—Ed Sheeran.

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A pesar de la insistencia de Hoseok, Taehyung decidió que prefería quedarse en el piso que compartía con Jungkook en lugar de en la mansión, quería ver a sus caballos y también mantenerse en ese lugar que poco a poco se había convertido en una casa para él… a la vez sentía que Kook se sentiría mucho más cómodo en su propio ambiente, ese sitio podría ser una miseria para muchos sin embargo todavía era su propio pedacito de mundo. Fue complicado por muchos motivos pues subir la silla de ruedas por las escaleras les resultaba imposible a no ser que Kook sostuviera al jinete en brazos o lo llevase a caballito en su espalda y el viejo ascensor realmente no les daba sensación de seguridad a ninguno de ellos, por no hablar del pequeño espacio que tendría para situarse. Ese fue el primer instante en el que Tae se sintió como un obstáculo en la vida de su novio. Era prácticamente un objeto con el que cargar de un lado hacia otro.

A pesar de que cuando se encontró en esa situación decidió darle la razón a Hoseok argumentando que en la mansión sería todo más sencillo, Jungkook decidió por sí mismo que él también prefería que se quedase en su apartamento, quizás en un intento por calmar la mente de Taehyung, que parecía estar funcionando a mil por hora mientras miraba las escaleras ante ellos.

—Vamos, puedo llevarte sin problema - Kook se agachó ante Taehyung dándole la espalda y esperando a que esté se sujetase a sus hombros - Taehyung, vamos, no es para tanto.

El jinete suspiró sin saber que hacer pero finalmente se subió a cuestas de Jungkook. Sentía las ganas de llorar posarse sobre su garganta haciendo que su pecho doliera a medida que su novio subía las escaleras. No le gustaba aquello, que él tuviese que hacer eso para ayudarle a llegar hasta casa, si lo hubiera pensado con más tranquilidad ahora estarían en la mansión y el hermano de Yoongi no tendría que hacer un esfuerzo así. La mansión también tenía escaleras que superar pero una vez esquivadas las de la entrada podría haber pedido que habilitasen uno de los cuartos de la planta baja para él y Kook en caso de que esté decidiera quedarse allí, a su lado .

—Jungkook para, te vas a lastimar si subes hasta nuestro apartamento. - protestó sintiendo que la voz se le quebraba, le dolían la garganta y el pecho mientras trataba de evitar el llanto. Tenía que ser fuerte, mostrar que todo aquello no lo derrumbaba a pesar de que realmente lo hacía, tal y como había hecho durante su estancia en el hospital, forzar sonrisas no era tan difícil después de todo. No podía mostrarles lo asustado y dolido que se encontraba en esos momentos, había evitado cualquier conversación referente al tema y por su parte los demás parecían haber entendido que no estaba listo para hablar de aquello todavía.

Jungkook negó infantilmente ante las protestas de Taehyung con una pequeña sonrisa. Si bien era costoso subir, no era algo que se le fuese de las manos en lo absoluto. Tae no pesaba demasiado y las escaleras tampoco eran tantas, solo vivían en el segundo piso, estaba en buena forma física… Podía, desde luego que podía ayudar a su pareja, e incluso si no pudiese todavía querría intentarlo. Podría con aquello ese día y los siguientes.

Su sonrisa, en cambio, se borró cuando al llegar hasta su habitación y posar a Taehyung sobre la cama pudo percibir sus ojos aguados así como el temblor en sus labios. Jungkook había puesto cuidadosamente las sábanas de seda así como una manta mullida que pensaba que podría serle útil a su pareja si sentía frío en la noche, también había comprado uno de esos árboles de gatos en el veterinario para que Swag se encontrase cerca de Tae en todo instante, montar aquello había sido difícil incluso con Yugyeom echándole una mano. Lo había preparado todo para que el hermano de Hoseok pudiese estar tranquilo y cómodo en esa habitación tan pequeña… sin embarcó cuando trató de acercarse el jinete lo apartó de un empujón instintivamente. Había algo mal, algo que se le escapaba y estaba dañando a Tae. Lo que más le preocupaba era que tal vez no estuviese ligado a un daño físico sino a un dolor más profundo y mental, al estado de su alma, su corazón, o como la gente quisiera llamarlo.

Taehyung estaba triste, demasiado. Y él podía entenderlo, toda su vida dependía de la rehabilitación para recuperar el movimiento de sus piernas pues por debajo de las rodillas no había ni un poco de movilidad. El baile, su pasión por la hípica, simplemente poder caminar por las calles y muchas otras cosas corrían peligro de no volver a recobrarse en cierta forma, porque incluso si se recuperaba nadie había afirmado que lo haría por completo.

—¿Qué ocurre? ¿Te duele algo cariño? - preguntó sentándose a su lado. Jungkook sabía la respuesta pero se había obligado a aceptar el hecho de que Taehyung todavía no quería admitir su parálisis en voz alta. Habría tiempo más adelante para ayudarle a aceptar la realidad, sin embargo sólo habían pasado unos días y tal vez lo mejor para el jinete sería tener un mínimo periodo de tranquilidad y engaño propio antes de golpearse de lleno contra su situación.

Taehyung no quiso responder, se mantuvo en silencio total hasta que Hoseok entró en la habitación con la silla de ruedas que anteriormente habían subido, Yoongi se encontraba a sus espaldas dudando entre si entrar a la habitación o no. El jinete ss sentía inútil por completo, un problema para los demás y la esperanza no parecía encontrar un lugar en su mente, mucho menos en sus sentimientos. Estaba hundido por completo en todos los aspectos. No quería meter a Jungkook en todo aquello, estropear y ajetrear más su vida. Después de tantos meses el chico estaba empezando a vivir como alguien de su edad, aquello podría hundirlo de nuevo en el estrés y conociéndolo tan bien como Taehyung lo hacía, sabía que de hecho volvería a estresarse con suma facilidad.

Tan pronto como percibió a su hermano apartó la mirada de su pareja buscando el cariño familiar que Hoseok podría darle. Por su parte Kook lo miró todavía preocupado a la par que extrañado, generalmente el chico aceptaba sus muestras de cariño con total felicidad, las había recibido de igual modo en el hospital con cada visita que podía darle. Entendía que tal vez todo lo que había pasado en los últimos días podía estar causando que Tae necesitase más que el amor romántico que le podía ofrecer él, un amor fraternal. Pero él no quería ni estaba dispuesto a dejarlo solo rebozándose en el dolor y los malos pensamientos, aún teniendo a Hoseok quería mantenerse cerca de su novio. Necesitaba ser el hombro en el que Tae podría llorar, no por egoísmo o envidia, sino porque temía que su pareja pudiera ahogarse en la angustia y su ciclotimia apareciese con excesiva fuerza de nuevo.

—Kookie, ¿puedes ir a comprarme hotteok? Mi cartera está en la mochila. - susurró el jinete tratando de ocultar el llanto.

Jungkook asintió y posó un suave beso sobre los labios de su novio antes de salir del apartamento seguido por Yoongi, su mente no estaba tranquila y temía que Taehyung pudiese pensar en locuras. Caer en una depresión no era descabellado viendo su actual situación y lo cierto es que si él podía evitar aquello haría todo lo posible. Sí, Hoseok estaba ahí para Tae sin embargo Yugyeom, el resto de chicos del grupo de baile, Yoongi, Baekhyun y él también estaban completamente dispuestos a permanecer a su lado buscando las formas de animarlo y apartarlo de la oscuridad de su enfermedad.

Su chico no estaba ni estaría nunca solo porque siempre lograba ganarse el corazón y amor de todos aquellos que se daban la oportunidad de conocerlos.

—¿Qué ocurre? - Hoseok acarició la mejilla de su hermano pequeño en cuanto estuvieron a solas - No pienses en tonterías Tae, te conozco bien.

Al magnate no le hacía falta decir en voz alta lo que estaba pensando que podría estarsele pasando por la cabeza a su hermano pequeño. Lo conocía lo suficiente para entender que esos ojos repletos de sufrimiento mostraban una agonía totalmente real. No era la primera vez que lo observaba sufrir así, sin embargo en esa ocasión el sufrimiento no venía dado de la ciclotimia sino de una clara sensación que nublaba la enfermedad. Taehyung era plenamente consciente de lo que le ocurría.

—No puedo hacerle esto a Jungkook, si me quedo aquí tendrá que cuidarme y se verá obligado a descuidar sus estudios…

Hoseok pellizco levemente la mejilla de su hermano.

—Él se ha ofrecido, creo al igual que tú que quizás es demasiado y por eso he llamado a alguien para que revise el ascensor e instale algunas ramblas reglamentarias para que sea más sencillo para vosotros funcionar con la silla. Si crees que lo mejor es ir a la mansión tu palabra es la que cuenta y sé que Kook lo comprenderá y acabará por aceptar. Solo tienes que ser claro con él…

Taehyung suspiró, el hipo salía de su boca inconscientemente en consecuencia del llanto. Sentía que pronto necesitaría algo para poder dormir. Un calmante realmente sonaba bien en ese momento.

—No quiero apartarme de él y tampoco apartarlo de su hogar. Si me sigue me sentiré mal y si decide quedarse lo echaré de menos…

—Sé que no es fácil pero es hora de que empieces a pensar en ti, he pensado en que será buena idea cederle un coche a Jungkook. Ha dicho que irá a rehabilitación contigo pero Baek y yo también lo haremos así que no te preocupes por cosas así , no va a descuidar sus estudios.

Taehyung bajo la mirada sintiendo repentinamente ganas de vomitar. Realmente la ansiedad y angustia estaban mareandolo por completo.

—No quiero ser una carga para nadie…

—Y no lo eres, solo eres mi hermano. El amigo de Baek y el novio de Jungkook. Los seres humanos solemos dar mucho o nada por aquellos que amamos y tienes la suerte de que tres personas han decidido dar muchísimo por ti. Es algo que hacemos porque necesitamos verte bien, no eres ninguna carga Tae. ¿Acaso no me ayudarias si estuviese en tu lugar?

—Claro que lo haría pero….

—Pero nada enano - Hoseok sonrió antes de tomar del bolsillo de la chaqueta de Tae la bolsa con sus pastillas y cederle uno de los calmantes flojos que el psiquiatra había cambiado debido a las protestas de Jungkook - Ten, quiero que te tranquilices y sepas que eres alguien importante para nosotros. Vamos ayudarte en todo y no quiero que creas que nos causas molestias.

Taehyung suspiró y acurruco con la ayuda de Hoseok en la cama. Una pequeña sonrisa llegó hasta sus labios cuando notó que la manta que Jungkook había dejado sobre la cama olía a coco, como su champú habitual. ¿Acaso el hermano de Yoongi había impregnado la ropa de cama con su olor mientras estaba en el hospital?

Probablemente eso era imposible pero a Taehyung le gustaba soñar.

Taehyung se encontraba recostado en la cama con Swag entre sus brazos cuando Jungkook regreso a la habitación y se tumbó a su lado, los ojos de este se encontraban fijos en la ventana dónde las gotas de lluvia dibujaban figuras redondeadas.

—Hoseok mencionó que estabas dormido - dijo con la voz calmada mientras posaba un plato con hotteok al lado de Tae. Estaban fríos después de la siesta del chico, por lo que los había calentado levemente - Come tranquilo, si necesitas que me vaya…

—No - Taehyung soltó a Swag quien rápidamente tomó la posición entre ambos formando ese muro que nunca parecía querer romper - Quédate, quiero mimos.

Jungkook no logró evitar dejar escapar una sonrisa cálida antes de atrapar la barbilla de Tae con su mano y posar un casto beso sobre los labios de este. Sus manos buscaron las del chico inevitablemente, mientras observaba como Taehyung escondía la cara en el hueco de su cuello sintió que incluso con todo lo que iba mal en esos instantes, todavía se sentía como en un hogar real. El apartamento no había perdido la calidez que el hermano de Hoseok había instalado en este.

—Come - susurró con tranquilidad mientras jugueteaba con los dedos de la mano de Tashyung - No has probado bocado desde esta mañana.

—Me apetece comer hamburguesas - confesó mirando la manera en la que el hermano de Yoongi jugueteaba con sus manos juntas.

Jungkook sonrió, sin tan siquiera pensarlo llevó uno de sus besos hasta la frente de Tae para a continuación llenar sus mejillas de pequeños besitos que lograron hacer sonreír al jinete de nuevo. Parecía en mejor estado después de dormir, aunque quizás solo era algo temporal.

—Siempre te apetecen hamburguesas Tae.

—¿Debería dejar de comerlas entonces? - un bonito puchero que hizo vibrar el corazón de Jungkook tomó lugar en los labios de sus novio.

—Nah, puedes tener lo que quieras si eso te hace feliz lindo.

Taehyung volvió a acurrucarse contra el cuerpo de su novio disfrutando de la cercanía, estaba convencido de que este lo acabaría dejando. Nadie podía querer a su lado a un obstáculo como lo era él en ese instante, procuraria sin embargo disfrutar del poco tiempo que tal vez le quedaba a su lado.

Había comenzado a rogar mentalmente, quería recuperar su movilidad y esperaba que Hoseok tuviese razón al decir que varias personas estaban dispuestas a ayudarle porque lo querían, tal vez su hermano lo hacía sin pensar en su discapacidad como una molestia, de todas formas a lo largo de su vida le había supuesto gran cantidad de problemas al magnate por su enfermedad… quizás este simplemente estaba acostumbrado. No lo sabía, pero lo cierto es que su miedo permanecía presente.

—Mañana iré a inscribirte en el programa de rehabilitación avanzado con Hoseok y Baek - Jungkook hablaba mientras acariciaba el cabello de Taehyung pues notaba los temblores que inevitablemente cubrían el cuerpo de su pareja de vez en cuando. El marrón había comenzado a aparecer de nuevo sobre el rubio regresandole el aspecto más real de Jung Taehyung. El verde de sus ojos era más notable ahora - Los médicos han dicho que nos indicarán como ayudarte con los ejercicios diarios para la recuperación que tienes que hacer en casa y tu hermano está dispuesto a ayudarme con el objetivo de arreglar del todo el salón y baño para adaptarlo a ti…

El jinete sabía que Jungkook solo estaba tratando de ayudarle a tranquilizarse pero sus palabras tenían el efecto totalmente contrario, cada vez que narraba una de las muchas cosas que su hermano, sus amigos y él mismo planeaban hacer para ayudarle, se sentía una carga más pesada para ellos.

Tenía miedo de perder todo lo que había logrado conseguir en los últimos meses, incluía en eso sus estudios y no sólo el noviazgo con Jungkook sino también a los amigos que había hecho en el local de baile. Sabía que Sehun había mostrado amabilidad y le había enviado algunos regalos al hospital por medio de Jihoon, entendía que ahora muchas más personas que antes se mantenían alrededor de su vida y lo cierto es que eso era lo que lo mantenía tan tremendamente asustado.

Estrechó sus brazos alrededor de la cintura de Jungkook y cuando notó el suave toque de este apretandolo contra sí no pudo evitar sumirse en el llanto de nuevo.

—Está bien TaeTae, todo mejorará. Eres fuerte - Jungkook sentía un nudo en la garganta que pocas veces antes había sido de tal intensidad. Quería ayudar al chico que amaba pero no sabía cómo hacerlo, así que solo pensó en aquello que generalmente tranquilizaba a Taehyung y con la voz afectada cantó aquella canción de cuna tan frecuente últimamente - You are my sunshine, my only sunshine when sky's are gray. You'll never know dear, how much I love you. Please don't take my sunshine away. The other night, dear, as I lay sleeping I dreamed I held you in my arms. When I awoke, dear, I was mistaken and I hung my head and cried. You are my sunshine.

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Holiiii!!!!!
Pregunta obligada : ¿A qué os recuerda Tae usando lentillas verdes??

Espero que os haya agradado el capítulo, como siempre:

Un beso, Mel 😘