Shanghai,  China.

El aire frío pega fuerte en mi rostro, el trago de whisky que acabo de tomar quema mi garganta y mi mente no hace más que llenarse de dudas y malos pensamientos, todos referentes a ella, esa mujer que hace que toda mi existencia tenga sentido y a la cual perdí de la peor manera.

"Desaparecete de una vez y por todas de mi vida"

"Nunca, escúchame bien, nunca voy a perdonarte"

"Para mi desde hoy, estás muerto"

Recuerdos como esos y otros más atacan mi cabeza una y otra vez.

Jamás voy a olvidar sus palabras, ese día en el hospital. En cierto modo se han vuelto un karma en mi vida.

Se que merezco todo su odio, pero al contrario de ella, lo único que hago desde ese día es amarla cada vez más.

Eso es lo único que me motiva a seguir buscándola, a pesar de no tener ninguna pista aún.

— ¿Sigues aquí afuera Namjoon? — su voz me trajo de vuelta al mundo real.

— Más bien, ustedes regresaron algo temprano, ¿no? — respondí de vuelta.

— ¿Le llamas temprano a esto? O sea, son casi las tres de la mañana. — puse mis ojos en blanco, sabía que ya comenzarían los regaños.

— ¿En dónde dejaste a tu hombre? — pregunté.

— Se fue a casa, luego de dejarme en la puerta; pero no trates de cambiar el tema. Más bien, sé sincero con tu hermana aquí presente y acepta, que todo este tiempo desde que me fui a esa fiesta, has estado aquí en el jardín, pensando solamente en ella.

Realmente no me sorprende que lo sepa, pero en este momento no quiero hablar de eso.

— HyeJung, no comiences por favor. — pedí amablemente, aunque ya un tanto irritado.

— Sabes que tengo razón, te estas dejando dominar por esos malos pensamientos nuevamente. — giré sobre mis talones y emprendí mi camino al interior de la casa, sabía que me estaba siguiendo.

— Kim HyeJung, ya basta, hablo enserio. — respiré hondo tratando de mantener la calma.

— Nam, yo se que esto es...

— ¡Dije que ya basta! — grité.

En ese momento me fue imposible el controlarme. Sentí como todos esos recuerdos de lo que pasó hace años, se apoderaron de mi, desatando mi ira en contra de mi hermana.

Vi en su rostro una expresión de impacto ante mi comportamiento y fue cuando volví a la realidad. Era la primera vez en mucho tiempo, que me mostraba en este estado, y me sentí mal de que precisamente fuera mi hermana quien lo presenciara. La única mujer en el mundo después de mi mamá, que me tiene paciencia es HyeJung y no se merecía que le hablara de ese modo.

— Perdón. — pedí.

Apoyé mis manos sobre el mueble que tenía frente a mi, dándole la espalda a Hye, no me atrevía a verla a los ojos, después de semejante grito que le di. Sin embargo, al contrario de la mala respuesta que esperaba, sólo sentí sus brazos rodear mi cintura y su cabeza apoyarse en mi espalda.

— Yo sé que esto es difícil y también se perfectamente lo que sientes por ella, pero tienes que tener paciencia y dejar esos pensamientos negativos de un lado. La vamos a encontrar y todo se va a solucionar. — no pude evitar que una lágrima se escapara de mis ojos.

— ¿Crees que algún día me perdonará? — pregunté, ya incapaz de poder controlar la frustración que sentía.

— Estoy segura de que lo hará. Todo volverá a la normalidad, Joonie.

Sus palabras de aliento, su abrazo y esa forma tan peculiar de ella de llamarme, fueron muy reconfortantes y me hicieron darme cuenta de lo mucho que necesitaba encontrar a esa mujer y de cuanto necesitaba su perdón.

Pero sobretodo, me hizo ver lo mucho que la quería en mi vida.

Porque si, la quería para mi, y la tendría para mi.

Haría todo lo posible para que eso sucediera.

Mis babys!

I missed you so much!

He vuelto y con esta sorpresita. Espero que les encante y que le den mucho amor.

Que opinan del prólogo?

Las leo en los comentarios.

Nos leemos en el próximo capítulo.

❤😘