Capítulo 5

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"Ya puedes abrir los ojos, Sev" dijo Harry.

Severus abrió los ojos y se quedó boquiabierto ante el flamante y reluciente laboratorio de pociones en el que se encontraba, "¿Esto es para mí?" tartamudeó.

"Para responder a tu pregunta, sí, es para ti, quería que tuvieras algo que te permitiera volver a casa y un lugar donde pudieras tener tiempo para ti".

"Es increíble, Harry" exclamó Severus.

Se paseó por la habitación observando cada detalle que Harry había añadido. Pasó las manos por las superficies blancas y lisas de los bancos, cogió los frascos y los hizo girar suavemente en sus manos.

En un rincón de la habitación había un armario de madera con un intrincado tallado en la puerta.

Cuando Severus miró más de cerca, observó que las tallas representaban el escudo de la familia Prince. Al abrir las puertas se encontró con estantes llenos de diversos ingredientes, algunos comunes y otros no tanto.

Imaginó que Neville podría haber participado en la obtención de algunas de las plantas y hierbas más difíciles de conseguir que vio.

La voz de Harry rompió el trance en el que se encontraba Severus.

"Nunca nadie había hecho algo así por mí Harry" Severus seguía asombrado

'Tú lo vales" Harry sonrió.

Severus cruzó la habitación y recogió a Harry en sus brazos. Mirando fijamente esos orbes esmeralda que tanto adoraba.

"Eres el hombre más amable y generoso que he conocido, Harry James Snape, y te quiero con todo mi ser, gracias".

"De nada" Harry besó ligeramente los labios de su marido.

"Deja que te muestre lo agradecido que estoy", ronroneó Severus.

Tomó la mano de su esposo y lo llevó a su habitación, durante las siguientes dos horas Severus agradeció a Harry por su laboratorio de pociones muchas veces con tanta pasión y amor como pudo reunir.

Hacer el amor con este hombre era nada menos que exquisito, Severus saboreaba cada sonido de éxtasis que hacía Harry, gozando del hecho de haber provocado esos sonidos.

Saciado y relajado, Severus pasó la tarde familiarizándose con su nuevo laboratorio y ordenando las cosas a su gusto.

No alteró el orden en el que Harry había colocado las cosas con mucho detalle encontrando que Harry casi había dado en el clavo con el sistema que había ideado. El maestro de Pociones encontró más pequeñas sorpresas a lo largo de la tarde, encontrando un sistema de archivo que su marido había construido en uno de los cajones más grandes.

Una serie de carpetas de colores habían sido etiquetadas apropiadamente distinguiendo cada poción y una categoría en la que podía ser colocada.

Draco, Neville, Ron y Hermione se unieron a ellos para cenar. En otros tiempos, Severus se habría encogido y se habría burlado de la idea de pasar una velada con estudiantes que, además, eran Gryffindors.

Ahora, sin embargo, podía decir con total honestidad que estaba deseando que llegara la noche y el entretenimiento que iba a suponer. Limpió el pequeño desorden que había creado, se lavó las manos y subió en busca de su marido.

Harry estaba en la biblioteca organizando los estantes cuando Severus lo encontró. Estaba estirando la mano para colocar un libro en uno de los estantes más altos, lo que hizo que su camisa dejara al descubierto su piel bronceada. A Severus se le hizo la boca agua al verlo.

"Bonito trasero", comentó Severus.

"No dejes que mi marido te oiga decir eso", ronroneó Harry.

"¿Es un tipo celoso?" Severus se acercó a Harry

"Muy" murmuró Harry rodeando con sus brazos el cuerpo duro y delgado

"Entonces no debería hacer esto", susurró Severus mientras acariciaba el firme trasero de Harry y lo apretaba suavemente.

"Probablemente no" murmuró Harry mordiendo el cuello de su marido.

"O esto" gruñó moviendo su mano sobre la ingle de Harry.

"Definitivamente no" Harry se derritió en los brazos de su marido gimiendo por la sensación que le provocaba.

⚜⚜⚜

Ron se preparaba para ir a cenar con Harry, Severus, Draco y Neville. No hace mucho tiempo hubiera preferido sacarse un ojo antes de pasar una noche en compañía de dos Slytherins, especialmente Draco y Severus.

Eso hizo que Ron se diera cuenta de lo mucho que había madurado en el último año y desde que la guerra había terminado. Le dio una perspectiva diferente de las cosas. Si la batalla le había enseñado algo era que los rencores y los malos sentimientos pertenecían al pasado, ahora era el momento de un futuro mejor y más brillante.

Cogiendo su varita y su cartera, Ron bajó las escaleras, se despidió de su madre con un beso y salió por la puerta trasera.

Acababa de darse la vuelta y aparearse cuando otra persona hizo lo mismo. Ni Ron ni su madre se habían dado cuenta de que le habían seguido. Ron entró y saludó a Harry al abrir la puerta, de nuevo ninguno de los dos se percató de que otro invitado no deseado se había colado en su cena.

El pelirrojo entró en el salón para ver que Hermione ya estaba allí copa en mano. Le besó la mejilla y se sentó en el gran sofá.

Draco y Neville llegaron poco después, la conversación estaba en marcha y Ron descubrió que estaba disfrutando de la compañía más de lo que había pensado.

Severus les mostró su laboratorio, agradeció calurosamente a Ron y Hermione por el Caldero que habían comprado como regalo, agradeció a Neville por las plantas y las Hierbas.

Draco se quejó de la falta de agradecimiento que no le habían dado y Severus le dijo que debía agradecer su compañía y que se callara antes de terminar en una poción

La cena estuvo deliciosa y la conversación fluyó con facilidad alrededor de la mesa. A Severus le pareció que todos los invitados eran una excelente compañía.

Draco estaba fascinado con lo mucho que sabía Hermione sobre Transfiguración y meditó la idea de preguntarle a Minerva si podía ayudarle de vez en cuando. Le planteó la pregunta a Hermione, que chilló de alegría y se lanzó sobre el rubio abrazándolo con fuerza.

La velada terminó y pronto Draco y Neville se plantearon volver a Hogwarts.

Harry fue a la cocina a envolver algunos de los postres que habían sobrado para que los tres se los llevaran, cuando se encontró inmovilizado en el banco, con las manos manoseándolo. Un gruñido que helaba la sangre hizo que los demás entraran corriendo en la cocina con las varitas desenfundadas.

Lo que encontraron fue a un Harry con la cara roja y temblando de rabia y a una Ginny Weasley indignada que intentaba continuar con sus atenciones a Harry.

⚜⚜⚜

Arthur y Molly estaban sentados en la mesa de la cocina sorbiendo una taza de té cuando Ron irrumpió por la puerta trasera sujetando fuerte el brazo de Ginny.

"Suéltame", gritó Ginny mientras Ron la arrastraba hasta la cocina.

"¿Qué pasa, Ron?" Preguntó Arthur.

"Estaba en casa de Harry para la cena, él estaba empacando algunos postres para que todos se llevaran a casa cuando escuchamos un grito. Pensando lo peor corrimos a la cocina con las varitas desenfundadas sólo para encontrar que Ginny lo tenía inmovilizado contra el banco con las manos sobre él. La saqué de allí antes de que Harry la maldijera hasta el olvido" espetó Ron.

Arthur suspiró apoyando la mano en el tablero de la mesa

"¿Cuándo vas a aceptar que Harry no quiere una relación contigo, Ginny?" Dijo Arthur con cansancio.

"No quiere una relación, le han lavado el cerebro el murciélago de las mazmorras y el hurón", resopló ella.

"Madura Ginny, nadie le está lavando el cerebro no puedes manejar el hecho de que es feliz y no es contigo". escupió Ron

"Mamá di algo" gimió Ginny

"Tu padre y tu hermano tienen razón Ginny, tienes que aceptar que él ha pasado página. Cometí el error de pensar que Harry debía estar contigo, pero después de lo que tu padre me ha contado veo que me equivoqué" explicó.

"¿Cómo ha entrado?" preguntó Arthur a su hijo

"Lanzó un hechizo de No me notes, esperó a que Harry me dejara entrar y se coló detrás de mí".

"Te das cuenta, Ginny, de que Harry está en su derecho de acusarte de allanamiento". Dijo Arthur con firmeza

"Él no haría eso" Ginny desechó la idea

"Nunca he visto a Harry tan enfadado como esta noche. Estaba tan enfadado que temblaba, Severus le estaba dando un calmante cuando me fui" replicó Ron.

"Dame tu varita Ginny, desde ahora hasta que vuelvas a Hogwarts tienes prohibido salir de esta casa a menos que sea con tu madre o conmigo, no usarás ninguna forma de magia hasta entonces" Arthur extendió la mano y esperó a que Ginny le entregara la varita.

"No puedes coger mi varita, mamá dile que no puede cogerla" se lamentó Ginny.

"Entrégala Ginny, esto ya ha durado demasiado" Molly echó humo

Dejó caer la varita sobre la mesa y subió las escaleras hacia su habitación, instantes después el sonido del portazo resonó en toda la casa.










***
N. T:
Ginny me saca de mis casillas

Nueva actualización de esta historia nifflersitos

Esta semana estaré actualizando esta historia uwu

Nos leemos

Los tqm

Ranita de chocolate 🐸🍫

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