Los preparativos para la boda de Gemma ponían muy feliz a Harry. Le fascinaba la idea de escoger las flores, de montar todo lo necesario para los invitados, la vestimenta e incluso elegir a los mejores músicos. Aunque no era él quién iba a contraer nupcias, su niño interior saltaba de alegría al ver a su hermana haciendo las invitaciones para ser enviadas.

Él estaba ayudándola, y también estaban presentes su madre y Niall en la estancia de los reyes. Ésta era lo triple de espaciosa que la suya, los muebles ahí eran mucho más grandes y ostentosos, era un lugar lujoso, en dónde de niño pasaba mucho tiempo.

Acostumbraba ir y sentarse a la orilla del ventanal, justo donde podía ver su jardín. Las cortinas de esa pieza, eran las únicas que podían mantenerse abiertas cuando quisieran. El menor no entendía aún la afición que su padre tenía por mantener la cristalería de su castillo cubierta.

"Ahora, ¿el príncipe William y la princesa Irina?" Anne miraba una larga lista escrita con anterioridad. "¿Deseas que asistan?"

"Irina si, William no." La princesa le respondió, tomando más tinta con la punta de su pluma.

"Cielo, están casados. Vendrían ambos, no puedes invitar solo a ella."

Harry se río en voz bajita al igual que Niall, la reina miraba a su hija con ironía mientras ella fingía no prestar atención.

"¿Entonces?" Anne vaciló, antes de escribir los nombres en la invitación. "¿Están invitados o no?"

La princesa buscó a su hermano, este solo apretó los labios y sacudió sus rizos, esquivando cualquier cosa que Gemma tuvieran la finalidad de preguntar. Ella lo notó, y ahora posó sus ojos en Niall... el consejero tenía toda su atención enfocada en el candelabro del techo.

Era muy bonito al parecer.

"Ugh." Al notar que no tenía el apoyo que esperaba, no tuvo más remedio que aceptar. "Bien, a los dos, pero que quede claro que a la única persona que me interesa ver aquí es a Irina."

La reina sonrió con gracia, y la risa de Harry, de nuevo se hizo presente de forma natural. Gemma era todo un caso.

"Su majestad." Habló Niall, mientras le entregaba más hojas del papel adornado. "¿Cuanta gente vendrá aproximadamente?"

"Mhn, no lo sé hijo." Musitó, mirando al muchacho con confusión. "Van a venir bastantes reinos vecinos, y con ellos, familiares y amigos."

"Mhn, ¿y el gran salón podrá albergar a todos los invitados?" El rubio se mortificó, rascando su nuca.

"No, no será en el gran salón Niall." La reina se levantó de su lugar, y comenzó a mecerse de un lado a otro. "Lo haremos en el jardín trasero, queremos darle un toque diferente al evento." Anne extendió su mano hacia el príncipe, y cuando él lo notó, se puso de pie entendiendo lo que su madre quería. "Debe ser magnífico, no todos los días mi hija se casa."

"¿Y por eso necesitas más espacio?" Harry indagó, tomando postura frente a su madre.

"Si, no me juzgues."

La reina y el príncipe estaban bailando ahora, sin ninguna composición de fondo, solamente se balanceaban y giraban sin ningún patrón. El consejero les observaba con dulzura, y la princesa recargó su barbilla en su mano, sin despegarles los ojos de encima.

Harry amaba con todo su corazón compartir ese tipo de ratos con su familia, era vivir en armonía y paz, en un ambiente de cariño, dónde todos se preocupaban por todos.

Harry se preguntó si algún día tendría una familia así.

Ya sabía con quién quería compartir su vida.

Luego de un par de pasos y vueltas de baile más, Anne se detuvo, estrechando a su hijo con fuerza en un abrazo. Los ojos del príncipe se cerraron, inhalando el habitual aroma tan familiar de su madre.

Después se separaron, y Harry llevó a la reina al sofá donde estaba sentada. Hizo una reverencia en agradecimiento, y él también volvió a su lugar.

"Son divinos, en serio los amo. Pero, ¿podemos continuar con esto?" Gemma mostró las invitaciones sin terminar. "Siento que nunca vamos a acabar." Le mostró la lengua a su hermano, y él repitió la acción.

"¿Cuántas más faltan?"

"No lo sé, pero ya me cansé de escribir."

"¡No has escrito nada!" Replicó el rizado, entrecerrando los ojos. "Solo te dedicas a poner tu bonito nombre y el de tú futuro esposo."

"De hecho, soy yo el que las está redactando." Niall se incorporó, tomando su pluma de ave.

"Bueno, yo me quejo por ti." Gemma le mostró los dientes en una despampanante sonrisa, y el rubio le rodó los ojos.

"Mi mano se va a caer en cualquier momento." Se quejó el consejero, sobando su muñeca izquierda. "En serio, ¿cuántas faltan?"

"No querrás saber, corazón." La reina se inclinó, depositando un beso en la cabellera del chico. "Tú continúa."

Niall se lamentó en silencio, y siguió con lo que le correspondía. Harry se encargaba de enrollar con delicadeza todas las hojas y las iba acomodando dentro de un bolso hecho de terciopelo. Su madre tachaba y tachaba de la lista a todos los que ya estaban invitados, descartando a uno que otro que la princesa no quería presente. Eso era trabajo en equipo.

"Tenemos que terminar esto hoy o mañana, ya no hay mucho tiempo." Espetó Anne, contando con sus dedos los días que faltaban. "Quedan pocas semanas, amor."

"Si mamá, lo sé. No me pongas más inquieta que voy a terminar cancelando todo." La princesa refunfuñó encaprichada, sintiendo su estómago revolverse. "Entre la emoción y los nervios, terminaré por no asistir ese día."

"Exagerada." Su hermano recalcó, jalándole un mechón de su cabello fino y largo.

"¡Hey!" Gemma le dio una palmada en el dorso de su mano. "Ya te quiero ver Harry, el día de tu boda estarás orinando tus pantalones."

"¡Gemma! ¿Qué es ese vocabulario?" Su madre la reprendió.

"¿Qué? Es la verdad. El día que Harry se case, tendremos que cerrar todos los baños del castillo para que no se encierre como cuando era niño y lo ibas a castigar."

"¡Ah, si me acuerdo!" Niall contribuyó, riéndose con ganas.

"¡Tú también te escondiste conmigo algunas veces!"

"¿Y? Estamos hablando de ti" El rubio le empujó con suavidad, contagiándolo del buen humor.

"¿Por qué hablan de la boda de mi hijo, como si yo no estuviera aquí?" La reina se cruzó de brazos, enarcando su ceja. "Para empezar, Harry es muy joven, pasaran años antes de que se case con alguien."

El príncipe y su mejor amigo se miraron impasibles, el menor con las mejillas coloreadas de un tono más fuerte del común y Niall tragándose la risa que disfrazó con tos. Por su lado, Gemma hizo una cara de compasión a su madre, que por supuesto ella no notó.

Anne algún día, quizá pronto, sabría que su hijo ya estaba enamorado.

Un rincón del bosque era utilizado para el lanzamiento de proyectiles desde dos armas, las aves huían despavoridas, creyendo que estaban buscando matarlas sin saber que el objetivo era diferente.

"¡Eso! ¡De nuevo Zayn!" Un disparo más. "¡Louis, tu turno!" Y otra descarga se sumó. "¡Bien hecho!"

Se habían logrado escabullir del castillo sin ningún problema aparente, Krov no se presentó a su entrenamiento y sabía perfectamente que iba a levantar sospechas, así que intentó reportarse como enfermo rogando que la noticia tardara en llegar a los oídos de su superior.

Louis y Zayn aprovecharon que Harry iba a estar ocupado con su hermana y le pidieron un rato libre o un descanso en palabras del ojiazul. Harry no se pudo negar, accedió de inmediato ya que de igual forma, Paul, Bennet y Maxime estarían en su práctica en el horario usual.
Así que todos podrían tener la privacidad que necesitaban, dejando guardias en cada puerta y ventana de la habitación de los reyes. De todas formas, no tardarían mucho.

Los muchachos estuvieron muy intranquilos cuando sostuvieron las escopetas que Krov les brindó. Sus amigos habían accedido a prestarlas, e incluso le dieron municiones.

El mosquetero agradeció infinitamente eso.

Estando listos y en el lugar adecuado, Krov no perdió tiempo; se dedicó a explicarles el funcionamiento de manera rápida ya que tenían que apresurarse y no se iban a detener, las dudas que surgieran, las iban a aclarar después de la lección.

Para la sorpresa del más alto, ambos chicos resultaron buenos desde el primer tiro, de verdad buenos. Zayn tenía una puntería increíble, y Louis aparte de eso, lograba cambiar de posición con rapidez y dar en el blanco.

En contrario al combate con espadas, Krov quedó impresionado y con la boca abierta. Les cuestionó varias veces si alguno de ellos había intentado o usado una antes, y cuando la respuesta negativa llegó, quedó asombrado.

"Ahora, Lou, trata de darle a esa rama, y después a esa." El muchacho señaló dos puntos en el árbol. "Pero haciendo lo que hiciste hace un momento, muévete del lugar y regresa."

Louis procedió a hacerlo, soltando el primer disparo y dando en el punto específico, pero antes de celebrar se movió y corriendo volvió a jalar el gatillo, tirando la segunda rama indicada por su entrenador.

"¡Caray, esto es fabuloso!" Krov estaba tan feliz que casi se pone a brincar de gusto. "Son buenos, en verdad lo son."

"Eso creo, por primera vez siento que sirvo para algo." Louis sacó de golpe el aire de sus pulmones, y acomodó el cinturón de cuero que también le habían prestado. Este tenía unos pequeños depósitos donde se colocaba la medida exacta de pólvora para cargar el arma. Y también, había una bolsita a un lado, donde se guardaban las balas de plomo.

Krov les había dicho que aquel fusil se llamaba mosquete. Les dio una explicación corta de las trayectorias que las balas seguían, les comentó como podían perder fuerza luego de ser expulsadas y también les dijo que al no llevar ellos una armadura, se volvía lo triple de peligroso. Así que tenían que ser muy astutos y saberse esconder.

Zayn no cabía de la emoción, por fin estaban logrando algo a la primera y eso tenía que contárselo a Liam, él no había venido para no causar más desconfianza y que Maxime no tuviera la oportunidad de sospechar.

"Creo que ya saben lo básico." El mosquetero mencionó con mucho orgullo. "Solo necesito que enfoquen su destreza en deslizarse a distintos puntos para esquivar las balas contrarias."

Louis tragó saliva, mirando el mosquete entre sus manos. "¿Cuánto tiempo tardaste tú en eso?"

"¿En qué?"

"En evadir los misiles."

El suspiro del mayor, le obligó a posar sus ojos azules sobre él. "Mucho tiempo Lou, no te puedo mentir, ni siquiera lo domino aún. Eso si lleva mucho tiempo, es cuestión de-"

"Práctica." Zayn terminó la oración.

"Todo es práctica, todo es entrenar, todo es tiempo y este no se detiene para permitirnos aprender." Y ahí estaba Louis otra vez, cayendo en desesperación y dejándose acabar por el terror.

"Louis, tú sabías que de esto se trataba, yo te lo dije desde el primer día, mencioné que los ayudaría pero que necesitaba paciencia de su parte." La voz de Krov fue sólida.

El castaño quitó su sombrero, y lo tiró al suelo con fuerza, levantando un cúmulo de polvo que le causó varios estornudos a Zayn. Luego de ello, se sentó en el suelo con las piernas flexionadas hacia su pecho, y dejó reposar su frente sobre sus rodillas.

Últimamente la poca fé que podía sentir, se esfumaba por una u otra razón, y si hace minutos estaba muy contento con el buen tino que habían mostrado, el hecho de saber que una bala igual podía acabar con sus vidas y la de su príncipe, le mandaba los ánimos al inframundo.

"¿Habrá otra lección como esta?" El pelinegro susurró en el oído de Krov.

"No creo que sea posible, con hoy, nos he arriesgado mucho." Fue honesto, cuando Kéven supiera que se había ausentado, lo más seguro es que le mandara a llamar a la oficina con reitero.

"¿Y si pedimos apoyo? Quiero decir, a tus compañeros, los mosqueteros verdaderamente reales se pueden encargar de proteger como es debido a la nobleza." Zayn insistió.

"A estas alturas, ya no sé en quién podemos confiar, Zee. Mis amigos pueden ayudarnos, Dean es muy bueno pero no me gustaría involucrar a más gente, puede ser negativo y así como Paul, nos pueden terminar delatando con tal de no ponerse la soga al cuello."

Lo cierto era que Krov si había pensado en buscar ayuda, pero luego de consultarlo con su almohada, definitivamente supo que no era buena opción. Un mal paso, podía conllevar a un pésimo resultado.

"¿Ese que viene ahí es Liam?"

La conversación dio un giro de trescientos sesenta grados, cuando vieron al ojimiel acercarse a lo lejos. Pero al parecer no venía solo, una persona más venía caminando con la mirada gacha a un costado.

"¿Con quién viene?" Cuestionó Krov, notando que Louis también ya estaba mirando hacia esa dirección.

"Es Maxime." Zayn logró distinguirlo.

El ojiazul de inmediato se puso de pie, acercándose a sus dos amigos. La silueta de Liam cada vez se veía más cerca junto a la de su acompañante, ambos venían en silencio, caminando con tranquilidad.

Cuando por fin estuvieron frente a los tres muchachos, Liam divisó el sombrero de Louis en el suelo; así que se agachó para levantarlo, sacudiéndolo de los bordes y retirando el polvo. Luego de ello se lo extendió al dueño y él lo tomó sin quitarle la mirada interrogativa de encima. Maxime se colocó detrás del ojimiel.

"Dijiste que no vendrías."

"Hola a ti también, Boo."

"Li, no quiero sonar grosero, pero, ¿quisieras explicar que hace él aquí?" Haciendo un movimiento con su cabeza, Krov señaló al mosquetero.

"Yo se los puedo explicar." Liam se hizo a un lado, dejando a Maxime expuesto frente a los ojos de sus amigos. "Pero dejaré que él lo haga."

"¿Qué tienes que explicar? Ayer fue muy claro que Paul, Bennet y tú están aliados a Kéven, ¿qué pretendes?"

"Yo no pretendo nada, Krov." El muchacho espetó sin titubear, con una gota de enfado en sus facciones. "Si estoy aquí es porque así como ustedes, yo también estoy arriesgándome."

"¿Arriesgándote a qué? ¿No ha sido suficiente? Los conozco, ¡tú y tus dos amigos son igual de abusivos!" No iba a dar el brazo a torcer. "¿Qué es lo que le dijiste a Liam para que te creyera?"

"Amigo, para." Zayn intervino. "Déjalo hablar."

"Gracias." Su timbre de voz fue agudo. "Sé que no tengo motivos para estar aquí, o eso creen ustedes, pero la última vez les advertí algo que hoy les vengo a corroborar."

"¿De qué carajo estás hablando? ¡Nunca nos advertiste nada?"

"¡Krov, basta!" Louis puso su mano en el hombro del más alto, y este le miró incrédulo. "Permite que hable, yo sé lo que te digo."

"Pero no-"

"En serio, dale la oportunidad." Murmuró el ojimiel, acortando más la distancia que había entre ellos. "Escuchenlo"

Krov no podía con el coraje que sentía, y no esperaba la reacción tan amigable de Zayn y Louis, sin embargo, se abstuvo a discutir más y guardó la calma como pudo, haciéndose unos pasos hacia atrás.

"Voy a empezar diciendo que no obligué a Liam absolutamente a nada. Hablé con él ayer y me contó lo que estaba pasando con ustedes y Kéven." Maxime relamió sus labios, antes de continuar. "Ahora, lo que dice Krov es cierto, Paul y Bennet son aliados del jefe y las intenciones que tienen no son buenas, de verdad no lo son."

"Antes que sigas, ¿cómo nos encontraron?" El que interrumpió ahora, fue Zayn.

"Seguimos el sonido de los proyectiles y las huellas de las botas, deben alejarse más." El mosquetero prosiguío con su discurso. "De acuerdo, como les dije la última vez, es necesario que tengan cuidado. Ayer después de que Krov se fue de la oficina, Kéven nos pidió que lo mantuvieramos vigilado porque dijo que no era sincero. Yo me ofrecí a hacerlo, afortunadamente el jefe me tiene confianza porque he tenido encargos y he cumplido con ellos, y quiero aclarar que ninguno ha sido para perjudicar a alguien... Y precisamente, porque nunca he participado en ese tipo de cosas, esta no va a ser la primera vez."

"¿Qué quieres decir con eso?" Louis avanzó un poco al frente.

"Quiero decir que no sé con exactitud cuál sea su plan, nunca nos da detalles, pero... ¿recuerdas el día del altercado con el carruaje y el consejero?"

"Lo hago, me dejó una cicatriz en el brazo qu-"

"Kéven los mandó." Maxime finalizó, cortando el habla del castaño. "Ese día, Kéven envío a esos tres hombres a llevar a cabo el secuestro, pero nunca esperó que tú y Zayn... bueno, que lograrían defenderse. A lo que sé, la idea era deshacerse de ustedes y del consejero para llevarse al príncipe."

Los mencionados pestañearon escépticos y la boca del ojiazul se abrió varias veces para decir algo que nunca llegó. Krov tenía los brazos cruzados, sin saber del todo que pensar.

"Se lo conté a Liam y me dijo que yo mismo se lo tenía que decir a ustedes. Y la finalidad de esto, es únicamente que sepan que yo soy el encargado de vigilarte." Intentó hacer contacto visual con Krov, y este se lo negó, mirando hacia otro lado. "Pero cuenten con que yo no voy a decir nada de sus prácticas, de esta reunión y de nada de lo que estén haciendo porque todo es para un bien común."

"¿Cómo sabes lo de las prácticas?" La lluvia de preguntas estaba por comenzar.

"Yo se lo dije ayer, Lou. Cuando platicamos en la bodega, me di cuenta que necesitábamos un apoyo extra. Maxime me ha demostrado amistad y supe que podía confiar en él." Los hombros de Liam subieron y bajaron con simpleza, respaldando lo dicho.

"Por eso, cuando Kéven mencionó lo de mantener bajo supervisión a mi compañero, supe que tenía que ser yo quién se ofreciera antes que Paul, Bennet o cualquier otro..." Empezó a jugar con sus dedos. "No sé qué es lo que tenga en mente al cien por ciento, pero sé que es algo grande porque ha estado reclutando gente de las afueras, incluso delincuentes expertos en artillería."

"Lo sabía. Sabía que todo lo que estaba haciendo era raro, desde que falsificó sus firmas, hasta quitarles el derecho a las prácticas, ¡ahí está! Necesitaba novatos para poder llevar a cabo todo con mayor facilidad." Dijo Krov, haciendo ademanes con sus manos. "Jamás esperó que el día del atentado, Zayn matara a uno de sus hombres y como el fin parecer ser ir contra la corte real, se deslindo de las responsabilidades."

"Por eso puso a Pierre en sus fichas, él no se iba encarcelar por algo que él mismo planea provocar." Complementó Maxime, dejando caer sus manos a los costados.

"Sabes demasiado ahora, ¿cómo aseguras que podemos confiar en ti?" Zayn demandó.

"Solo les queda hacerlo, no pueden hacer mucho. Si no creen en mi palabra, será cosa suya."

Los cinco presentes estaban claramente dudosos, había muchas interrogantes que ni el mismo Maxime iba a poder resolver, pero estaba dispuesto a colaborar en lo necesario.

"Hay que regresar, necesitamos conversar y quizá podamos hacerlo en la bodega al atardecer, creo que todos tenemos preguntas y piezas que unir."

Todos estuvieron de acuerdo con Louis, ahora que tenían a una especie de infiltrado de su lado, era necesario empezar a investigar.

Holaaaa♡.

Tarde pero seguro, acá les dejo el capítulo de hoy. Estoy emocionada, jsjs.

Nos vemos mañana, besitos y buenas noches♡.
-María Tommo.