Capítulo 11: Nuevas amistades

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Al final del día, sí había asistido al último entrenamiento de esa semana de Louis, ya que, para suerte de él, nuevamente no habría nadie además de Liam.

Como le prometió Louis, le apartó un lugar donde los rayos del sol apenas llegaban. Resulta que en la esquina de la cancha había un espacio amplio donde podían estar, claramente se arriesgaban a recibir algún balonazo en la cara, pero era eso a soportar los rayos que le causarían deshidratación. Además, el golpe había posibilidad de evitarlo gracias a los dos jugadores que estaban al pendiente de ellos.

Convivió un poco más con Liam y nuevamente este le pregunto si iría con ellos el sábado, a lo que Harry asintió en respuesta, mencionando que llevaría a un amigo más.

Luego la tarde paso normal, Louis llevó a casa a Harry, al día siguiente se vieron nuevamente para el proyecto y se despidieron para verse al día siguiente. Está vez, el rizado ya sabía a donde irían; se encontrarían en la plaza que estaba cerca de la universidad de ellos, justamente en la entrada para que todos fueran juntos al restaurante y nadie se perdiera.

Ya era el día siguiente y Niall llegaría a la casa del rizado para irse los dos juntos caminando, le hacía falta, además sólo eran veinte minutos; claro, si Harry se decidía por qué ponerse.

Quería algo elegante, pero casual, pero tampoco algo extravagante. Lo único que tenía decido era que llevaría sus botas negras y unos jeans negros y estaba dudando si llevar un sombrero o una bandana, la mejor opción era la segunda, por el lugar.

Faltaba la parte superior; manga larga o manga corta, playera o camisa o ambas, ¡dios era tan difícil!, sobre todo porque quería causar buena primera impresión. En playera tenía muchas extravagantes con diseños floreados o muy coloridos, su única opción eran las de cuadros.

Tal vez esa era la indicada, además todo el tiempo lo han visto con camisas de manga corta. Antes de tomar una decisión final, se acercó a su ventana recorriendo un poco la cortina para ver el clima: sol intenso. Por lo que eligió la playera de manga corta que era de color vino. Se vistió con las otras prendas que había elegido y fue al baño a mirarse en el espejo que estaba detrás de la puerta.

Le gustaba, pero la bandana le quitaba el estilo, por lo que se la quitó y empezó arreglar sus desordenados rizos, tal vez tendría que volver a que se lo cortaran un poco más; hizo varias muecas hasta que su cabello por fin quedó como le gustaba.

Se colocó sus accesorios, y acomodo la parte del cuello de la playera dejando sólo dos botones desabrochados. Antes de salir, coloco un poco de perfume (bastante) y en el último minuto tomo sus lentes oscuros para dejarlos sobre la cadena de su collar. Tomo su teléfono, cartera y llaves y salió de la habitación.

Justo cuando empezó a llegar a las escaleras, Gemma salió de su habitación, observando al rizado divertida.

—Mira quién se arregló muy elegante.

—Cállate, mamá y papá están abajo—respondió murmurando, Gemma rio.

—No tienes que preocuparte, les mencionaste que vas a salir con Niall y unos amigos, ¿no? —Harry asintió con la cabeza, tímido—Ahí está, no creo que te pregunten nada más.

—Nunca se sabe—Gemma rodó los ojos divertida.

—Te diviertes y recuerda que vas con más personas no sólo Louis.

—Sí, sí, sí, lo sé nos vemos—dijo bajando rápidamente las escaleras con cuidado.

Llego a la cocina donde estaba su madre guisando, su padre leyendo en su computadora sobre la mesa que estaba en medio y Niall recargado en el lavamanos teniendo una conversación animada con Anne.

—Al fin llegas Hazz—exclamo Niall acercándose a su amigo, el chico rio apenado—, llevó diez minutos esperando.

—Lo siento—dijo bajando la mirada.

—Qué guapo Hazz—exclamo Anne girando la cabeza ligeramente para observarlo.

—Gracias mamá—empezó a sonrojarse.

—Se nota que quieres impresionar—susurró Niall en su oído haciendo sonrojar más al rizado.

—Bueno ya nos vamos mamá, papá, que nos esperan—dijo nervioso tomando al ojiazul por los hombros y saliendo de la cocina.

—De acuerdo se cuidan y llaman cualquier cosa—dijo Anne en voz fuerte para que ambos chicos los escucharan.

—Note a Harry algo nervioso, ¿no? —Mencionó Robín cuando la puerta principal se cerró.

—Dijo que iba salir con sus amigos, ¿crees que vaya una chica y por eso está nervioso? —Pregunto Anne.

—Quien sabe—se encogió de hombros—, pero Harry hablarán con nosotros cuando quiera decirnos.

—Créeme que haces que me arrepienta de haberte invitado—mencionó Harry.

Niall llevó una mano a su pecho, haciendo una expresión exagerada—¿Por qué dices eso Harry? —Pregunto divertido, claro que sabía la razón, pues durante el camino a estado molestándolo con Louis.

—Por favor, no me hagas ponerme más nervioso de lo que ya estoy—mencionó esto al mismo tiempo que se empezaba a colocar los lentes oscuros.

—Relájate Hazz—abrazo a su amigo por los hombros, sin detenerse—, todo va estar bien, es solo un día más con él, con sus amigos...y yo.

—Vaya gracias—dijo sarcástico y continuaron.

El camino fue silencioso, sin embargo, nada incómodo, tardaron unos quince minutos más en llegar y encontraron la entrada de la plaza. Harry buscó con la mirada a los otros chicos, Niall intentaba buscar al castaño o al pelinegro, ya que eran los únicos que conocía a simple vista.

Al no verlos decidieron acercarse un poco más a la entrada, donde había sombra, en lo que continuaron buscando. Harry iba a sacar su teléfono después de esperar diez minutos para mandarle mensaje a Louis, cuando Niall toca su hombro señalando a los tres chicos que venían.

Sentían que el corazón se le detuvo por un momento en cuanto ambos chicos flechados se observaron.

El sol sobre Louis le beneficiaba en absoluto, ya que lo hacía brillar ante sus ojos, vestía como normalmente lo hacía en la universidad, pero su cabello estaba un poco más arreglado. El castaño hizo este gesto de acomodarse el cabello de enfrente y eso hizo que las piernas de Harry empezaban a temblar.

Louis no se quedó atrás; si creía que Harry era atractivo por naturaleza, sin duda verlo con esa playera y con esos lentes lo hacía el doble de atractivo. Sentía tantas ganas de ir a tomar esos lindos labios que estaban ligeramente abiertos ¡Dios sentía todo su cuerpo temblar!

Cuando ambos estuvieron frente a frente, ninguno menciono nada, ya que alguno de los dos estaba a punto de desmayarse si se atrevía a abrir la boca, por suerte para ambos, alguien más hablo sacándolos de su trance.

—Perdón el retraso, había mucho tráfico—menciono Zayn—, hola Harry—saludo dirigiéndose al chico.

—N-no se preocupen, hola—saludo.

Se quedó callado unos momentos sin saber qué más decir hasta que sintió el codazo de Niall.

—Oh si claro este... él es Niall; Niall, Louis, Zayn y Liam—señaló a cada chico—y yo soy Harry—dijo sin pensarlo y todos rieron.

—Un gusto Niall—hablo primero Louis, pues ya lo conocía.

—Igual un gusto Niall—mencionó esta vez Liam.

—Encantando—dijo por último Zayn—, bueno andando—dijo tomando de la mano a Liam y empezaron a caminar hacia la plaza.

Niall al verlo todavía perdido tomo al rizado por los hombros y fue detrás de los otros dos chicos, Louis se fue acercando tomando lugar a lado de Harry.

—No sabía que Zayn era gay—mencionó Niall, así como la primera vez que Harry lo supo.

Iba responder, pero Louis tomo las palabras—.  Sólo pocas personas lo saben porque nunca lo ha anunciado, simplemente es el mismo y no se limita.

Niall asintió con la cabeza a las palabras de Louis.

Caminaron un pequeño trayecto, subieron un piso y caminaron por la zona de restaurantes. Liam y Zayn iban a la delantera, al parecer ellos sabían perfectamente a que restaurante iban a ir.

No iba negarlo Niall, pero se sentía algo incómodo por el silencio que ambos chicos tenían desde que se vieron, digo fue obvio el impacto, pero no era para tanto.

Los dos chicos se detuvieron en la entrada de un restaurante con temática retro, los otros tres llegaron a su lado y pidieron su mesa.

Harry se quitó los lentes para observar el lugar. Era realmente increíble, todo estaba ambientado en la época de los cincuenta de Estados Unidos, desde el establecimiento, como mesas, sillas, luces y muebles, hasta la música, los meseros, y la comida; sorprendentemente te hacía sentir que viajaste al pasado.

Los cinco chicos llegaron a una mesa que estaba en una de las esquinas del lugar, tomando el siguiente orden de asientos; por obvias razones Liam y Zayn quedaron juntos, Harry se sentó enfrente de Zayn, esperando a Niall, pero como es tan buen amigo, se sentó en la silla que estaba en medio de la mesa, por lo que Louis aprovechó la oportunidad y se sentó a lado del rizado, quedando enfrente de Liam.

La mesera llegó a su mesa entregándoles los menús para después irse en lo que ordenaban. Después de un tiempo ya todos sabían que pedirían, por lo que empezaron una conversación en lo que venía la mesera a tomar su orden.

—Es gracioso que estemos en la misma universidad y jamás nos hemos topado—mencionó Zayn a Niall.

—Bueno, todos estudiamos carreras distintas, diferentes horarios, diferentes salones—respondió.

—¿Entonces cómo se conocieron tú y Harry? —Preguntó esta ves Liam.

—Nos conocemos desde secundaria y coincidentemente la misma universidad tenía nuestras carreras—respondió esta vez Harry.

—¿Qué estudias? —Preguntó Louis uniéndose a la conversación.

—Gastronomía, ¿y ustedes?

—Leyes—dijo Liam.

—Mecánica—respondió Zayn.

—Música—mencionó Harry a pesar de que tres de los presentes lo sabían.

—Psicología—dijo finalmente Louis encogiéndose de hombros. Harry notó aquello, pero no dijo nada.

La conversación se interrumpe con la llegada de la mesera para tomar sus órdenes que en resumen eran hamburguesas, con la diferencia de que Harry, Louis y Liam pidieron malteadas de vainilla, chocolate y fresa, respectivamente y Niall y Zayn pidieron refrescos. Una vez con la orden lista, la chica volvió a retirarse y la conversación continuó.

—¿Y qué tal sintieron sus carreras con este primer año? —Preguntó Liam.

—Creí que me liberaría de la química—murmuró Niall recargándose sobre su brazo, Harry rio.

—¿Tú por qué crees que en secundaria hacíamos mermelada? La preparación de una comida son reacciones químicas—dijo Harry.

—Pensé que había sido clase libre—murmuró para sí mismo.

—Es algo pesada, tener que aprender y memorizar muchas cosas...—continuó hablando Liam—, pero cuando algo te gusta, no es tan difícil de hacerlo—terminó mirando disimuladamente a Louis. Liam también sabía de la situación del ojiazul.

—Lo que Liam dijo—expresó Louis con algo de ironía en su tono, no queriendo hablar mucho de su carrera.

—Para mí es muy interesante—continuó Zayn tratando de evitar un ambiente tenso—, a pesar de que el primer año vimos mucha teoría, ¿qué hay de ti Harry?

—No por favor—exclamo Niall divertido, sentándose correctamente en la silla, sabiendo que a Harry le gusta hablar mucho de su carrera, antes de hablar le enseñó la lengua a su amigo de forma divertida.

—Hay un equilibrio de teoría y práctica, aunque si hubiera más de la teoría, realmente no me quejaría, es igual de interesante y entretenida. Yo la siento muy fácil.

—Pero también es mucha habilidad con las manos, ¿no? —Cuestionó Liam.

—Eso le sobra—respondió Niall por él—, si algún día lo escuchan cantar o tocar algún instrumento, siéntanse afortunados.

Harry bajo la cabeza, tímido, empezando a jugar con sus manos—. Niall no exageres—murmuró. Louis lo miró causándole ternura por la actitud del rizado.

—Sabes que no lo hago Hazz—dijo seguro—. Volviendo al pasado—volvió a comentar—¿Ustedes de dónde se conocen? —Preguntó señalando a Louis y a Zayn.

—Éramos vecinos desde muy chicos—respondió Zayn—y fue a finales de secundario que conocimos a Liam—mencionó tomando por debajo de la mesa la mano del mencionado.

—¿Alguno tiene pareja? —Preguntó Liam sin dejar de mirar a Zayn.

—Sí—mencionó Niall.

—No—dijeron Louis y Harry al mismo tiempo, haciendo que ambos soltaran una risa nerviosa y apartaran la vista.

—¿Cuánto tiempo llevan? —Cuestionó Zayn a Niall.

—Este mes cumplimos dos años juntos—respondió—¿Ustedes?

—Llevaríamos tres, pero...

—Creo que los dos sobramos en la conversación—susurró Louis a Harry acercándose más.

—Debes estar acostumbrado, ¿no? Niall no ve a su novia siempre y por eso Taylor y yo no somos mal tercio la mayor parte del tiempo—respondió Harry de igual manera, también acercándose a Louis.

—Admito que, sí lo estoy, pero por suerte no son tan cursi como otras parejas—ambos rieron por la respuesta.

—¿Tú hiciste algo en San Valentín? —Continuó hablando Louis.

Harry se encogió de hombros y suspiró antes de responder—. Un día normal para mí la verdad, Taylor y yo vimos algunas películas, pero luego ella se fue con sus amigas, y bueno eran obvio que no podía contar con Niall—señaló al chico con la cabeza, quien seguía hablando con Zayn y Liam.

—¿No tienes más amigos además de ellos? —Se atrevió a decir Louis, esperando que eso no incomode a Harry.

—No, no soy de tener muchos amigos, me cuesta confiar en los demás, por eso mismo también soy cuidadoso con elegir mis amistades.

—¿Entonces tu confías en mí? —Preguntó Louis acercando un poco su mano por debajo de la mesa. Harry también lo hizo por inercia.

—Te has vuelto alguien cercano a mí, así que... claro que confió en ti—mencionó. Sintió el roce entre sus meñiques, además de su respiración aumentar, decidió continuar con el tema principal sin alejar su mano.

—¿Tú que hiciste?

—Liam y Zayn me habían invitado a una noche de película también, pero ya sabes, me negué; mi hermana salió con su novio, así que me quedé en casa viendo películas solo.

—¿Y tus otros amigos? —Cuestionó confundido Harry, Louis era popular, ¿no se supone que incluso debió de haber tenido un montón de propuestas para salir?

El chico negó con la cabeza, sonriendo sutilmente—. Claro que me invitaron, pero eran fiestas y la verdad no tenía ganas de alocarme—mencionó divertido haciendo a ambos reír.

—Fíjate, pudimos haberla pasado juntos viendo películas—señaló.

—A la próxima, si no tienes a nadie podemos hacer algo los dos—propuso Louis, esta vez su meñique estaba completamente encima del de el rizado causándoles a ambos un pequeño sonrojo, muy leve de distinguir para ellos.

Como respuesta Harry asintió con la cabeza sin dejar de mirar esos azules y brillantes ojos del castaño.

Habían olvidado por completo dónde estaban y con quienes estaban, sólo eran ellos dos, sin el ruido de las personas ni de la música; su propio mundo y burbuja donde todo era borroso y sólo sobresalía la persona que tenían enfrente, algo que le había empezado a gustar a Harry desde la primera vez que Louis fue a su casa y viceversa.

Lamentablemente ese lindo momento se terminó cuando Niall llamó a ambos chicos, haciendo que sus manos se alejasen y sus miradas volvieran a sus amigos.

—Lamentamos interrumpir lo que sea que hablaban, pero la comida ya llegó—señaló con la cabeza a la mesera que venía en camino con sus platillos. Ambos asintieron con la cabeza, nerviosos.

La chica dejo los platillos de acuerdo a la orden de pedido, después de eso se retiró y los chicos empezaron a comer.

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