Capitulo 6: Conociéndonos mas a Fondo, Pareja Enamorada y Curiosos Hermanos

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 Desde que regresaron de la isla se tomaron un tiempo en responder ciertas preguntas sobe su ¨pequeñas vacaciones¨, desde hace poco días empezaron a salir mas o menos, también por algunos incidentes como el baile para ganase poder llegar al aeropuerto y el hecho de que leo despertó abrazando la anaconda gigante de su hermano, era obvio que no quieren habla de que uno miaba al otro como un depredador, cosas un no listos para hablar tan normal de que: ¨casi termina leo sin sello de seguridad¨, solo esperaban llegar a su casa unidos; gracias al sensei no tuvieron que responder cuando llegaron casi muertos a la guarida.

 Las tortugas estaban descansando en la guarida, la tortuga de bandana naranja estaba con vendas y varias curitas, como también lo estaba el bandanas moradas, por otro lado raphael y leonardo estaban recuperándose también de la batalla, con algunos rasguños, vendas e moretones en sus escamas verdes. Y justamente estaban lado a lado en el sofá luego de entrenar un poco, y era el momento justo para sus hermanitos pequeños de hacerles preguntas tan profundas como el alma; justamente miraban un documental de la isla.

 Donatello: Miro a ambos desde su silla de skates, arreglaba sus lentes - ¿Como lo pasaron?, digo... fueron al otro lado del país - pregunto curioso el genio, preocupado - Bueno estuvimos un poco ¨estresados¨ pero todo salio bien, excepto makey - dijo con calma, aun con las secuelas por dentro.

 Raphael: Miro a su hermano de lentes - Bueno... - hablo para acomodarse en el sofá, colocando sus pies en la mesa de madera - Con todo y que caímos en medio océano - alza los hombros mirando de reojo a su hermano de bandana azul - Era... era diferente, demasiado, naturaleza y libertad - dijo con cariño e tanto añoro.

 Donatello: Parpadea, siempre imagino un lugar así pero mas en la ciudad y asintiendo, era interesante ver como su hermano se abre a ellos - Bien, eso suena a muchas emociones - le responde.

 Raphael: Se levanta mas emocionado - Debían ver eso con sus propios ojos, el mar e su olor, la arena en su cuerpo y los arboles, todo era tan real y... - el se detiene, no puede encontrar con la palabra - Es como un sueño, ¿esas cosas que dicen en documentales u propagandas de viajes? - le pegunto.

 Michelangelo: Lo mira y alza la mano - ¿Que ensueño, deseo, ideal o utopía?, ¡yo también quiero ir! - salta emocionado, tropezando con el regazo de leo - ¡Me hubiera tirado con ustedes para poder haber ido! - dijo o mas bien exclama en voz alta - ¿Y que dices leo? - le pregunta.

 Raphael: Señala a makey - ¡Eso mismo!, era... tan agradable e hubieran visto, seguro vayan querer quedarse - exclamo cuando escucho y miro a leo - Vamos leo diles - dice emocionado.

 Leonardo: Respiro profundo, acaricia la cabeza de su hermano menor - Fue.. agradable, hermoso si puedo decirlo, es una maravilla, como lo era brasil, no pudimos pasar tiempo allí era... hermoso - declaro, se sonroja mientras sonríe.

 Michelangelo: Sus ojos se agrandan mas, leo era una parte importante y esto le daba mas ilusiones, suelta un gruñido leve - Eso es vedad, la paliza que nos dieron esos dos tipos - dice mientras, se soba su colita.

 Donatello: Ríe un poco, igual de adolorido que su hermano menor, no la paso bien - Tal vez podamos ir alguna vez, no se si bueno.. - alza los hombros con algo de duda - Solo hay que planear - sonrió.

 La tortuga de bandana azul levanta al menor y busca a su hemanito mas alto, raph miraba en silencio, su cola se movía ante la mirada sin ideas de ambos menores que no esperaban que este fuera para abrazarles con tanto cariño, su abrazo era mas cálido e como recordaban de pequeños.

 Leonardo: Respiro agitado, sin soltarles a ninguno - Me hicieron mucha falta, lamento lo que... lo que dije y paso no quería tratarles así - dijo con las lagrimas corriendo por sus mejillas.

 Michelangelo: Corresponde al abrazo de su hermano mayor - .... - no esperaba esto, no tiene palabras - Esta bien, estábamos preocupados por ustedes dos - susurra o solo puede decir mientras las lagrimas caen.

 Donatello: Corresponde a su hermano, no era normal verle con sus lagrimas - Esta bien, esta bien... solo que pensamos que algo les paso, cuando quedaste inconsciente - su voz quebrada en las completas lagrimas de alivio.

 Leonardo: Los abrazo mas con instinto maternal de protegerles - Estoy bien, estamos bien - murmuro, siente unos brazos a su alrededor.

 Raphael: Con un brazo en los hombros de leo y el otro cuidando de sus hermanos - Puede que en algún momento estaremos separados, pero como dicen allí, aloha es hola e adiós - dice con suavidad.

 Leonardo: Asiente, quitándose las lagrimas de sus ojos - Y ohana significa familia - sonriendo, un sonrojo en su rostro.

 Los dos menores se quedan mirando a leo que estaba feliz por que aceptaron sus disculpas, raph estaba con una sonrisa en su rostro y acariciando el hombro de su pareja, antes de que makey volviera a abrazar a leo con lagrimas y una sonrisa por parte de donnie; con eso salio el tema de stich ganándose un poco del enojo de ambos.

-Con las cuatro tortugas y su padre ratoncito, en la guarida-

 La tortuga de las katanas estaba haciéndole un poco de limpieza a estas y algo de afilado, solo en la área de los cojines parecido una pequeña área frente al dojo e cerca de la estructura algo elevada donde discutido hace días con raph, solo el con sus armas gemelas o lo que podían decirse primas que al ojo de alguien puede pasa desapercibido, una de ellas era mas larga que la otra solo por pocos centímetros , pero eso no quita que sean especiales para el, estuvieron a su lado desde que era un niño; el sensei se las dio cuando tenia cinco años, miro a la flor a su lado para tomarla en su mano con cuidado.

 Escucha un suave tararear llegando a su lado, voltea para ver a su padre y con una ligera reverencia que este responde de igual forma, su pelaje esta algo de marañado, la tortuga traga saliva al ver que su padre paso por mas estrés de lo normal, seguro era por no saber de ellos y casi cae la flor de sus dedos, pero el sensei lo toma con su cola y luego con sus garras con cuidado.

 Sensei splinter: Se sienta frente a su hijo, sintiendo la energía de ese delicado ser - Veo que han aprendido de cosas en ese lugar, se nota que te has quitado un peso, lo veo en tu espíritu, ¿me equivoco? - pregunto con una sonrisa, regresando esta a su dueño.

 Leonardo: Siente las mejillas calentarse, esta era la flor que raph le dio y tenerla le recuerda toda su ¨aventura¨ - Creo que algo cambio entre nosotros, sentimos algo y esto solo, no lo se - dijo con una mezcla de emociones - No se si lo hago bien o mal - bajo la mirada.

 Sensei splinter: Acaricia su barba con cuidado - Ya veo... - se susurra para el mismo - Pero si ese cambio los hace felices, esta bien para mi, se que puede ser un turbulento destino.. pero todo tiene una razón - le aconsejo y señala a su corazón y luego al pecho de su hijo - Si ese sentimiento sale de ti y de el, deben conocerse un poco mas, eso antes de que hagan algo que se arrepientan - asevera con cariño pero firme.

 La tortuga de azul se sentía un poco incomodo mientras el sensei hablaba sobe metáforas del destino y de como ese viaje cambio a ambos por algo mas, dejando a una tortuga de ojos azules con las mejillas muy sonrojadas y el sensei con una sonrisa comprensiva cuando le acaricia la mejilla; ¿que puede hacer el viejo ratón?, esa isla les tiene muchas cosas que vivir y espera que ambos se apoyen mutuamente.

 Mientras del otro lado de la guarida en el área de ejercicio de raph, donde este se encontraba fuertemente haciendo de nuevo su rutina luego de casi tres días, makey e donnie estaban con el por seguridad pues mucho esfuerzo luego de tanto ajetreo nervioso podría causarle algo peor; también aprovechaban en sacarle detalles de su ¨estadía¨.

 Michelangelo: Comiendo sus papas fritas mientras ve el de rojo hacer su trabajo - ¿Que comiste?, ¿caminaste con la gente?, ¿conociste una chica linda? - le pegunto con una sonrisa picara - No me digas que no viste a las chicas en bikinis, ya sabes, como en las pelis cochinonas - mueve sus dos cejas en indirecta.

 Raphael: Deja las pesas en el soporte antes de patear a su hermanito en su asiento - Pues no mucho pero admito que fue sabroso eso, mas o menos creo que las personas no tienen tanto miedo - dice, alzando los hombros y se seca el sudor - No, las turistas o las que vi no pueden ¨soportar me¨ - dijo en respuesta, con algo de asco.

 Donatello: Tomando su juguito, ocultando sus nervios y preguntas mas profundas - ¿Y sus teléfonos que les paso, no llamaron?, ¿no les dolió nada cuando bueno llegaron a tierra?, creo que mejor los interrogante en el laboratorio - dijo mientras alza los hombros.

 Michelangelo: Pasa un brazo sobre los hombros de donnie - ¡Hermano, somos indestructibles! - exclama emocionado - Seguro vieron chicas lindas, y por eso no llamaron - dice en broma.

 Raphael: Se levanto, acercándose al borde del medio túnel - Simplemente dejaron de funcionar cuando salimos del agua - responde al de morado, trata de mantenerse lo mas sereno posible al voltea a ver a los dos - Como tu quieras donnie, solo dime cuando y te ayudare, makey espero limpies antes de irte - le advierte a su hermano.

 Sin mas preguntas del genio o comentarios molestos de la naranja regañada, se dejo caer para aterrizar en sus pies con algo de elegancia en la sala frente al dojo, que encontrarse con la tortuga de ojos azules frente a los suyos y este miro a los ámbares de raph; un momento antes de que los menores llegaran a cada lado del bandana roja.

 Leonardo y Raphael: Miran al otro lado, tratan de no sonrojase o ponerse nerviosos - Hola/ He.. si, hola - dicen por su parte, al unisono e lo mas normal, una expresión fingida de molestia, mientras toman caminos diferentes.

 Los dos menores, no pueden notar el nerviosismo de ambos pero tal vez, bueno.. tiempo lejos de casa y sorpresas de esa forma... no pueden evitar reírse al escuchar los murmullos y el suave suspirar de leo o su estado amargado volviendo a el, antes de tomar su camino a seguir descansando; raphael estaba duchándose con leo en la mente y leonardo estaba en la sala de meditación.

-En la habitación de leo, esa noche-

 Estaba algo nervioso o mas bien avergonzado, pensar en las palabras de su padre sobre el ¨viaje no planeado¨ con raph y mas con el encuentro incomodo que tuvieron, como quería que se lo tragara el alcantarillado y termino escondido en su habitación, estaba con la cara enterrada en la almohada, su vista a la mesa de noche donde sobre un libro descansaba la flor blanca de hibiscus.

 Leonardo: Suspiro al voltearse en su caparazón, para ver el techo - ¿Como no debería pensar en ti?, ¿si hasta el sensei dijo que estaba bien?, unidos los dos... - dice en voz alta, gruñendo al sentarse para tomar la flor - Te amo, no sabes cuanto raph... ¿quieres estar conmigo? - resopla rindiéndose dejando esta en su pecho, calmándose al recordar esa mirada de raph en el.

 El sonido de un zumbido debajo de su cuerpo le hace saltar de la cama por el ruido, continuo sonando y el busco entre las mantas, logrando conseguir el teléfono nuevo que donnie le hizo a el y al ver, era un mensaje perteneciente a raph y siente las mejillas algo calientes; y se asusto cuando sonó el móvil en sus manos, contesto a este.

/Raphael: Tarareando, una leve risa se le escapa, al oír la respiración de leo - Hey, sin miedo, ¿creo que te asuste?, estabas hablando a sensei, ¿que haces ahora? - pregunto con algo de interés./

 Leonardo: Suspiro con una sonrisa, no estaba tan ajeno a lo que pasaba - Creo... creo que nuestro padre nos acepta como somos, que nos queremos... - dice con calma, las palabras de su padre llegaron a el - ¿Podemos hablar en persona? - pregunto.

 /Raphael: Se tomo un tiempo, estaba sorprendido esto, se lo imagino diferente - Bien, tu dices cuando leo, sabes que no podre dejarte ir, saltaría de otro avión por ti y incluso si splinter no nos acepta - dice con cariño - Nos vemos mañana - colgando./

 Dejo el teléfono en la mesa de noche, la sonrisa estaba en su rostro y un sonrojo para admirar la flor blanca, ahora necesitaba poder estar a solas con raph para hablar con el, acostado en su cama ahora para cerrar los ojos y suspirar para descansar.

-En el área de las pesas con raph a la mañana siguiente-

 La tortuga de bandana roja estaba en ese escondite para estarse dando auto-cariñitos mañaneros, desde que despertó algo malhumorado pensando en leo en la noche y los recuerdos de la isla, encontrándose a leo y este invitándole a acompañarle luego de una interesante horas de meditación, para poder levantar pesas o aliviar a la otra pesa de gran tamaño en sus manos; se limpio con una de los tantos trapos que usa para secarse el sudor.

 /Leonardo: -[ ¿Estas con makey? ]- le pregunto, en el primer mensaje -[ Me encanto que estuvieras a mi lado esta mañana al meditar, me sentí... mejor ]- en el segundo./

 /Raphael: -[ Estoy solo por ahora, bueno... aun no esta aquí ]- responde el mensaje -[ Creo que lo haré mas seguido ]- se adelanto a la respuesta del otro./

 /Leonardo: -[ Bien, te espero esta noche estés listo, debo ocuparme de algo llamado desayuno, te amo ]- responde./

 Con las últimas palabras de leídas no puede mas que acelerar su mano en su gran miembro, el gran tamaño de este ocupaba gran parte del pequeño escondite de ejercicios, por su tamaño y por como este dejaba los pantalones abiertos si alguien entraba no podría ignorar monumental miembro, y con solo unas pocas movidas pudo liberarse por segunda vez esa mañana, disfruto el momento de tener a leo en su cabeza y que este sabia exactamente lo que hace en ese momento; continuó tocándose mientras se aseguraba que no hubiera nada mas, tomo una foto con su teléfono y la paso a su "compañero".

 Se limpiaba un poco mas calmado el desastre, mientras ese gran apéndice seguramente que pagaba impuestos estaba volviendo a su tamaño normal para poder amarrarse los pantalones para disfrutar de estar mas tiempo solo, justo cuando su hermano de naranja llego cantando a todo volumen y dándose cuenta que el estaba allí; se acerco a el de naranja con algo de molestia.

 Michelangelo: Saluda quitándose los audífonos, pausando la música y su juego - ¡Hola!, ¿que haces despierto?, ¿nueva rutina? - pregunto con una sonrisa.

 Raphael: Le responde con una media sonrisa, mas bien nervioso de que viera gran parte de su asunto - Algo así, no se, creo que tener que despertar temprano es ahora parte de mi - dice a medias, alzando los hombros y se cruza de brazos - Solo quería estar un tiempo en algo familiar - miente, no quiere decir o detalles de lo que hacia.

 Michelangelo: Entre cierra los ojos, antes de mirarle con sorpresa - ¡Nos extrañaste!, bueno cualquiera extrañaría su espacio y hogar - exclamo, su cola se mueve, aunque se detiene un momento - ¿Es como cuando perdimos nuestro.. primer hogar? - pregunto jugueteando con sus dedos, su emociones cambiaron cuando su nariz se mueve - Deberíamos como limpiar aquí, huele algo ¨raro¨, ¿no? - comento, sonrojado.

 Raphael: Traga grueso, en una parte era cierto y por la otra su mano fue a la nariz de hermanito para que entrara en detalles - Bueno, espero no se algo que a veces pasa ya sabes.. ¨edad, cambios y hormonas¨- dijo tratando de cambiar de tema, sonando como donnie en el proceso, pero el menor se logra sacar la mano de esta.

 Michelangelo: - ¡Me estaba escondiendo de donnie para poder ver cosas que no debo de algo que tiene nombre de regla!, ¡solo sentí que debía hacerlo, como una voz para bueno, ya sabes! - grito lo mas bajo posible, frustrado y arrepentido.

 Raphael: Respiro, suelta un leve gruñido para sentarse de nuevo - Eso cambia la cosa, cuando llegue para un poco de calentamiento no olí nada, fui a las duchas primero - declaro con calma, una coartada lejos de leo y meditación, no quería molestas burlas u malos entendidos con su hermano, su pánico se calmaba -(De ahora en adelante hasta que leo no me permita tenerlo, no mas auto-deliciosos en este lugar)- prometió en su mente.

 La tortuga de naranja le abraza con rapidez, solo para bombardearle de preguntas tan directas sobre ese lugar, chicas y sin notar que esa mirada de ¨esta viendo chicas ricas¨, era en realidad de comerse mentalmente al mayor de azul quien en su mente haciendo el baile hula en forma algo exótico, aunque trata de responder lo mejor que puede; trata de que no despierte cierta cosa.

-En la cocina, con leonardo y donatello-

 La tortuga de bandana azul estaba haciendo algo de te para el, donde el tiempo pasaba mientras los recuerdos de ambos meditando esa mañana y unos cuantos besos por parte de raphael con tanto amor que el correspondió de igual, le hicieron sonreír junto con los recuerdos de la isla por mucho tiempo y unos mensajes intercambiados entre ambos, demasiado temprano incluso para el líder que estaba algo cansado aun de todo el estrés de todo lo que paso y estar casi tres o cuatro días despierto; sin olvida que no pudieron comer, desde que regresaron estaba experimentando alguna especie de ansiedad cuando dormía y se repetía en su mente que solo lo debe controlarlo.

 Abre el refrigerador para sacar algunos huevos y algo de tocino, para hacer el desayuno de todos en la guarida, su hermanito de naranja fue corriendo al baño cuando el salia de allí luego de una ducha, escucho unos pasos y murmullos cansados acercarse, cuando se voltea a verle con algo de preocupación quien era donnie que se despertaba algo mas que casado por dormir en el laboratorio; se lo estaba llevando el chamuco por no descansar lo necesario, solo por estos días no quería molestarle como recompensa de cuidar de la ciudad y de makey.

 Donatello: Se sienta en la mesa quejándose del dolor en el cuello y de cabeza - ¿Hola? - dice dudando, estaba sin lentes, casi ciego, casi un milagro que no se mataba en el proceso de llegar - ¿Leo? - dijo, forzando sus ojos en el borrón azul.

 Leonardo: Se acerco con un plato de huevos con tocino y algo de pan - Buenos días, ¿amanecido? - le pregunto con tono maternal, una sonrisa en su rostro y amable - Come un poco y vete a dormir, yo le diré a sensei que no estas bien - dijo, antes de dejarle un jugo de cartón.

 Leo regreso a seguir haciendo la comida, leyó los mensajes de raph y sonrojándose mucho cuando este paso una foto de su gran... gran atributo paga impuestos, trato de quitar el nudo en su garganta, mientras el siente sus mas puros instintos e con permiso de su relación ponerse algo caliente, en un mal momento, continua cocinando aun sonrojado, su hermanito de morado seguro o tal vez se permitir otro plato, escucho a makey tararear feliz hasta donde estaba raph; un escalofrió mientras la escena digna de un hentai, escucha un leve gruñido.

 Donatello: Miro a leo o bueno no puede saber mucho de la expresión de su hermano, estaba medio mareado, cansado y un poco ciego por este cóctel de cosas - ¿Tu y raph son algo? - pregunto, solo parece algo cansado y curioso - Salí un rato y los vi muy juntos, creo que esa isla les hizo bien - continuando, con interés.

 La tortuga de bandana azul se detiene en seco y asustado, cuando el sonido de crujir fuerte miro a sus manos dándose cuenta por lo viscoso que estaban por el pobre huevo destrozado en las manos, se quita en la sarten lo que puede para dárselo a raph y el susto le quito la posible erección vista, se lavo las manos y las seco en un paño limpio de la cocina para tratar de ignorar la pregunta; lo dejo con mas escalofríos cuando se acerco y dejo el plato de makey en la mesa, donnie espera respuestas ahora.

 Leonardo: Alza los hombros, sonrojado y buscando calmarse - Creo que si, nos hizo bien a ambos - le responde, le palmea en el brazo - Termina de comer, te quiero encerrado en tu habitación durmiendo - le advierte, teniendo cuidado con las expresión mas calmada y su no tan pequeño hermano -(Estuvo cerca, todo es por ti raph, ¡estúpido y sensual raph!)- se dijo en su cabeza.

 Donatello: Asiente, comiendo lento alzo la mirada a leo y se levanta, toma a leo de las mejillas, y coloca su mano en la frente - ¿Leo tienes fiebre? - pregunto mas preocupado.

 Leonardo: Niega, mientras donnie lo sienta en la silla de la cocina - No no no, no tengo fiebre, debes descansar - le recordó, pero un termómetro estaba en su boca - Bien, pero estoy bien - dice trata de no romper esta cosita en su boca -(Raph... ¡¿como te saco de mi cabeza?!)- grito en su mente, mas rojo.

 Leo se sentía avergonzado mientras llego makey y raph a comer, topándose con la escena del líder con el genio e doctor, el bandana azul giro la cabeza para evitar mirar a sus hermanos, mientras donnie lo reviso y al parecer leo tenia un leve resfriado que no era problema si se cuidaba, leo estaba con una manta traída por makey quien estaba comiendo, dando varias hipótesis mientras raph quitaba la sarten con huevos quemados al lavaplatos tratando de salvar a la pobre; cuando el menor de naranja fue a ver sus series y el de morado a domi, raph se acerco a leo, le besa la mejilla y comparten desayuno.

 Mas calmado leo y raph un poco mas cuidadoso con todo, si eso fuera que no dejara de acariciarle y besarle cada dos minutos, cuando el sensei llega, se le sirve su comida con el te, leo le informa sobre el descanso de donnie y raph solo trata de no mirar el perfecto trasero de su hermano por estar limpiando el mesón; una reverencia por parte de ambos y se van al dojo.

 Pasaron un tranquilo día, entrenaron los tres hermanos bajo la mirada de sensei, donnie se recupero con una buena siesta o inducida de sueño cuando fue atrapado por leo, makey haciendo muchas peguntas e pequeñas bromas hacia el matodonte; una buena paz en el día e tarde de familia para sensei.

-En la noche-

 La noche cae cubriendo lentamente en el cielo con un manto oscuro sobre la ciudad donde calles y edificios reconstruidos luego del intento de invasión extraterrestre estaban repletas de personas, turistas, familias, grupos de amigos e hasta personas que solo fueron por algo de aire fresco, los centros de entretenimiento abiertos, bares y restaurantes estaban preparados con empleados listos para la jornada laboral; la policía estaba en las calles para mantener un poco seguras las calles, tal vez en caso de alerta para calmar a las personas.

Debajo de tanto bullicio humano, en el sin fin de laberintos subterráneos e lineas de metros en uso e desuso, en la madriguera de nuestros cuatro tortugas y su cariñoso padre ratón, las cuatro tortugas estaban terminando de estar listos para salir, con unos quince minutos antes de salir y el mayor estaba un poco preparado.

 Leonardo: Sale de su habitación, en su cabeza aun estaba lo de esta mañana con donnie -(Solo debes fingir que nada paso)- se repitió en su cabeza mientras respiro, cambiando su expresión preocupada por un semblante estoico, buscando a sus hermanos con la mirada - ¡Chicos en cinco salimos! - grito lo mas fuerte posible, ya frente a la salida.

 Tan pronto como grito como una mama ya cansada de sus crias que hasta leo sin pensarlo estaba de brazos cruzados, solo fueron segundos en llegar cada uno y el primero era raph presente con algo en su mano quien no le importo acorralarle en la pared detrás de leo con un leo apunto de regañarle, colocando un hibiscus de papel atado a la bandana de leo, no sin antes dándole un pequeño beso en la frente, poniendo nervioso al líder cuando se alejo de su espacio personal; justo a tiempo del menor de naranja y del genio, ante la presencia de ambos.

 Michelangelo: Entre cierra los ojos, haciendo que bandana azul se sienta mas nervioso- Leo.. - nombro a su hermano de azul, acercándose a su cara y viendo sospechoso hasta darle la vuelta - ¡¿Cambio de look?!, ¡te queda bien esa flor y es de papel! - dice con una sonrisa.

 Raphael: Se cruzo de brazos, cuando lo ve tomar la flor - Si llegas a tocar eso te juro que te golpeare tan dolorosamente - gruño fuerte para evitar que le quitaran ese regalo a leo, los celos atacaron pero era esa flor solo de leo y por la mirada seria de reojo de este, suspiro para evitar sospechas - Si quieres te hago una cuando regresemos - dijo con una sonrisa burlona.

 Michelangelo: Entrego la flor a leo con cuidado en sus manos, aun maravillado de esta, antes de acercarse sonriente al mastodonte - ¿Enserio?, quiero poder pintar un cuatro de ellas - pregunto moviendo la cola.

 Leonardo: Asiente viendo esta flor delicada en sus manos, ver - Me encantaría acompañarles - miro a donnie, quien parece notar una rara tensión, siente el sudor en sus escamas - ¿Te unes con nosotros donnie? - le pregunto amable, aunque sus ojos estaban fijos a los marones.

 Donatello: Asiente, le gustaba la papiroflexia y cosas en papel - Estoy de acuerdo, espero esas búsquedas sirvan de algo raph - dijo sin malicia alguna en su voz, mientras escanea las leves reacciones de ambos.

 Un escalofrió aun recorría por las escamas de la pareja, sobretodo para leonardo que estaba congelado ya que parece que donnie sabe mas de lo que aparenta y los recuerdos de la mañana no se disiparon, para evitar preguntas e miradas de confusión de los dos menores, raph con suave empujón al de azul y rentando en voz alta si los iba a tener toda la noche de pies sin hacer nada, leo lidero por la salida de la guarida con sus hermanos detrás, en un paso rápido hasta convertirse en trote y luego en una carrera; hasta llegar a las escaleras de salida.

 El primero en subir se aseguro de un par de cosas de vital importancia en una regla primordial, que estaba solo a su alrededor y que fuera un callejón, recuerdos de casi morir por intentar escapase cuando apenas tenían entre los doce u trece años de edad, bonitos recuerdos de infancia u vietnam pensaron en sus mentes mientras subían por las escaleras hasta la superficie; se decidieron por dos grupos, quedando el mastodonte con el naranjito y el líder con el genio.

 Con el equipo del mastodonte y del naranja, estaba algo tranquilo y muy bullicioso de su lado, las luces en las calles y las personas caminado sin notarles, las sombras son parte de ellos ahora, eso quedo marcado para los cuatro, cosa que el mas pequeño estaba mas alejado del borde cuando pararon de correr un momento; raph estaba sentado en el borde y lo miro, necesitaba poder disculparse con este y lo ocurrido en la estación de policías.

 Raphael: Miro al de naranja sentado algo - ¿Por que no te acercas? - pregunto, lo ve encojarse de hombros desde el aire acondicionado - ¿Puedo saber que paso? - pregunto, lo mas amable posible.

 Se acerca a su hermano, con la cabeza baja, explico lo mejor que pudo, estaba bien que le reconocieran a los cuatro que salvaron la ciudad, bueno todo era demasiado rápido para ellos y que casi perdieran a los mayores, pero... se quedo muy grabado los agentes de policía y sus armas hacia ellos, estaba aun muy fresco.

 Michelangelo: Sus piernas abrazadas contra su pecho - ¿Que hubiera pasado si donnie y leo no hubieran llegado?, ¿hubieran disparado?, ¿¡hubiéramos muertos!? - exclamo con lagrimas, se tapo la boca - ¿La jefa nos hubiera engañado?, ¿que hubiera pasado si ustedes no regresaban? - bajo la cabeza con esto ultimo.

 Raphael: Le acaricia la cabeza con su mano para calmarlo - Te hubiera protegido para que escaparas y yo me hubiera encargado de matarlos - afirma instintivo, haciendo que el lo mirara algo asustado - No lo se, no puedo ver el futuro o entre cosas, no soy como leo y menos un genio sobre otras dimensiones - le responde con calma - No lo se.. pero te aseguro que si hubiera sido diferente yo hubiera hecho lo posible para que leo llegara con ustedes dos, después de todo es mi error, en ambos casos, ¡ahora levántate! - dijo levantando al menor del brazo.

 Le seco las lagrimas con cuidado, quiere mucho a su hermanito, quien deja una leve sonrisa, claro que le duele y aun tiene miedo, pero sabe que sus miedos solo son eso, y si pasara sabe que de alguna forma ellos dos hubieran estado juntos a su lado.

 Con el genio y el líder, estaba el mayor en tener un paso mas liviano con el genio que estaba un poco mas cansado, o casi ya que tuvo que el mayor robar un café antes de que se le muriera en el proceso, estaba agotado aun, pero el mayor mantiene el paso mas calmado, aunque las preguntas de este estaban un tanto recurrente; se toman un momento para descansar.

 Leonardo: Respirando el aire frió - Y sobre esta mañana, estábamos despiertos los dos, nos acostumbramos a ser mas diurnos, tal vez el sol nos afecto, nos sentimos muy bien - dijo sin mirarlo, no quiere que vea su sonrojo - Tal vez me resfrié por el cambio de clima - miente, alzando los hombros.

 Donatello: Deja de teclear - Bueno, makey estaba mas triste y cuando hablaba de humanos estaba mas retraído sobre ese tema - dice, con algo de sinceridad, miro al mayor que estaba viéndole - Pero esta bien, aun tengo el mutageno para cambiarnos a humanos o hacerlo a el, creo si quiere ya que el mismo me contó que no quiere, el esta.. en una lucha de metas - dijo a secas.

 Leonardo: Asiente, mentalmente colocando su problema con raph en segundo plano por el momento, preocupado por el menor - Cuando lleguemos a casa hablare con el, lo has cuidado bien - dijo acariciándole la mejilla de manera maternal - Estoy orgulloso de ti - su voz lleno de amor y cariño.

 Los dos comenzaron de nuevo a correr, encontrándose al bandana roja y al de naranja jugando en un techo y algunas tuberías de ventilación expuestas, como si entrenaran o festejaran por llegar antes, el de morado se acerco a la estructura en pie, era una nueva vaya publicitaria por algunas cajas que ve, el de naranja estaba subiendo y bajando con sus brazos, donnie lo imito para activar sus energías; mientras ambos mayores estaban apartados, viéndoles jugar.

 Raphael: Sonrió un poco, las ganas de besarle era casi un desafió - Creo que llegamos a tiempo - le dijo en broma, se sienta a su lado - Makey, necesita un poco de cariño, habla con el - le dice al oído - Deberíamos hablar mas tarde sobre.. ya sabes, decirles, casi nos atrapan - dijo lo mas bajo posible.

 Leonardo: Lo miro a los ojos ámbar, llenos de sentimientos y preocupación - Esta bien, raph, hablaremos con el, donnie me dijo también sobre eso, ¿notaste como estaba algo mas nervioso de lo normal allí en la ceremonia? - pregunto y lo ve asentir, cerro los ojos e suspira - Creo que tomara algo de tiempo, primero ellos y luego podremos decirles - dice con un leve sonrojo, en sus mejillas.

 La mano de raph estaba posada en el frió cemento a solo centímetros de la de leo, lentamente y mientras vigilan a los dos hermanos menores, estas se acercaron, poco a poco hasta estar una sobre la otra y entrelazando sus dedos en apoyo al otro; los menores les gusto correr un poco y los mayores verlos felices.

 Eso hablaron un rato, mientras lo menores estaban distraídos con un desfile del orgullo pasaba por debajo de ellos, estaban felices y makey haciendo muchas preguntas a donnie, dejando a los dos mayores con privacidad mientras se acercaron lentamente fijos en los ojos del otro, labios listos para un pequeño beso en las sombras... hasta que la voz del sabio y preocupado padre de los cuatro por el pequeño radio en las correas de ambos les hace saltar del miedo; casi soltando un grito agudo, bueno ese fue leo que termino casi cayendo del techo.

 Los dos se separan lo mas que pueden uno del otro para aparentar que nada estaba pasando entre ellos, raph estaba nervioso y con corazón acelerado pero con una expresión de molestia, obviamente no por la cercanía de leo y ea por no obtener su beso, y hablando del dueño del corazón del mastodonte, leo estaba completamente sonrojado mientras se levanto con el corazón casi saltándose de su pecho y cuando hablo estaba un poco mas titubeante que le hizo sacar unas carcajadas a los dos menores.

-En la sala de meditación, madrugada del siguiente día-

 Leo no podía dormir con muchas cosas en su cabeza, donnie estaba cansado por lo que decidieron que la papiroflexia podría ser para el otro día con todos de acuerdo, con el sensei splinter ya como un padre pasando tiempo con sus hijos mientras un poco de pizza antes de dormir para las tortugas, leo se aseguro que ambos menores fueran a dormir y quitando cualquier distracción que no fuera dormir bien; incluso si era el mismo mastodonte tomando cerveza fue echado a su habitación y no le importo mucho. Leonado estaba envuelto en su cobija favorita, en su cama... disfrutando de esa sensación familiar luego de asegurarse que todos estaban bien y viendo a la flor sobre la mesa de noche, lentamente hasta que su cabeza entrara en un estado de nulo sueño, sin sueños o miedos en su cabeza por esta noche.

 Despertándose un poco mas de las cuatro y media de la mañana, por mas que se moviera en la cama no puede dejar de pensar, ahora completamente despierto, la ansiedad se arrastraba por su cabeza con varias incógnitas, ¿y si hubieran muerto los dos?.. siente como un peso en su pecho no le dejaba levantarse estaba rodeado de mar y no puede moverse, hasta que abrió los ojos mientras se tensaba al sentarse.

 Leonardo: Respiro agitado, su pecho sube y baja mientras siente todo frió - Necesito.. necesito meditar, si eso... - se ordena así mismo con la suficiente calma -(No íbamos a morir, no íbamos a morir, regresaríamos juntos)- pensaba para matar esa voz.

 Estaba desde hace hora y media, ya siendo las cinco y algo, no necesitaba aquejarse por la hora en esos momentos, sus pensamientos fluyen con cada latido de su aun asustado corazón, su conciencia lo hizo por lo que pasaba a su alrededor e como el mismo se retuvo de esos miedos, las preguntas y miedos de sus hermanos; tan retraído de todo exterior, que no siente como alguien a su lado y algo húmedo paso primero en sus labios, hasta que un roce un poco mas fuerte en sus labios le hace saltar. era un pequeño beso.

 Al abrir los ojos se encuentra cara a cara con los ojos ámbar contra sus ojos azules profundos, una seria expresión del mastodonte de la bandana roja antes de volverse una leve mueca de burla picara al verle su expresión de sorpresa, dejando ahora desorientado y sonrojado al líder antes de que se sentase frente a el con la espalda o caparazón mas erguido posible; leo le imito fingiendo no haberse asustado, aun cando la mirada del otro se suaviza en mas que aprecio e sarcasmo, aunque ahora pudo notar que el traía un plato lleno de rodajas.

 Raphael: Extiende la rodaja hacia los labios de leo ahora, quien acepto morderla - No debes de estar sin comer, te vas a enfermar, y luego me enfermo por verte así - le recordó esa frase de cuando pequeños, buenos recuerdos y al ver el sonrojo en las mejillas de leo - Aunque tu eras el único que estaba mas enfermo que nosotros, come conmigo, la piña es buena - le guiño un ojo.

 Leonardo: Trago algo silencioso - Gracias, raph, solo meditaba un poco antes de empezar el día , ya lo sabes - dijo, vio como raph alzaba la ceja inexistente, no muy seguro de esto, suspira en la derrota - Lamento preocuparte, estaba, bueno, muy concentrado en ver que me pasaba - murmuro con un poco de vergüenza.

 Raphael: Su semblante cambia a uno mas calmado cuando se acerco con facilidad a este, tomando a leo en un abrazo mientras los sonidos guturales de gruñidos e rononeos salen de su pecho, para calmar al otro - Esta bien, ahora estas conmigo - le susurro acariciando su caparazón - Si quieres podemos hablar en mi habitación - le propuso.

 Leo acepto, no sin antes de tomar las rodajas de piña enlatadas que raph estaba comiendo y muy galante ha ofrecido comer con el, con una sonrisa genuina antes de tener un toque de burla en el rostro del líder antes de salir corriendo seguido de rebelde de la familia con una sonrisa maliciosa en su semblante, ambos estaban lo mas callados posible pero con las risas mientras jugaban por todo el lugar antes de encerrarse en la habitación del mastodonte; mientras un suave picar estaba sincronizado con las gotas e sonidos subterráneos, un sonrisa en su rostro.

-En la habitación de raph-

 El plato vació completamente sobre la mesa de noche justo a lado de ambos teléfonos, la tortuga de bandana azul estaba sentado en la cama abrazando una almohada contra su pecho mientras el trataba de expresarse con toda sinceridad y sin estar a la defensiva mientras el mastodonte de bandana roja escuchaba atento, si iban a ser algo serio era necesario que leonado se pudiera abrir y igualmente el mismo raphael, para que se puedan entender dentro de lo que puedan ambos; cuando desde siempre las discusiones eran algo complicadas pero encontraría una forma de disculparse, si llegaban a los golpes esto era por seguridad.

 Fue interesante que leo le contara sobre esa ¨pesadilla¨, abrazando un poco mas cuando estaba en silencio mientras se deleitaba del aroma del otro, ya que sabe que por las palabras de makey y su inquietud por sus hermanos mayores, el mismo no pudo dormir hasta que salio en silencio de su habitación y se tomara varias botellas para poder dejar de pensar un rato, estar en paz un momento, entonces raph se acuesta sobre su caparazón con los brazos apoyando su cabeza.

 Raphael: Suspiro algo cansado, siente en su cuerpo esa pesadez de nuevo - Mi cuerpo estaba hundiéndose, por mas que trataba de nadar, ¿fue tan vivido? - le pregunto con cierto tono inquieto leve pero estaba cubierto por curiosidad - Creo que fue el sueño mas raro de mi vida, mi pecho dolía tan fuerte hasta que desperté - dice con sinceridad, viendo el caparazón de leo.

 Leonardo: Respirando mas calmado al acostarse en el estomago de raph, aun con la almohada de este en brazos - Makey le teme a los humanos ahora, pensó que íbamos a morir, ¿y si hubiéramos muerto? - dijo en voz alta, mientras trata de calmar su respiración - Eso mismo, en mi pecho y me arrastraba - murmura al encogerse como puede para girarse y verle a la cara.

 Raphael: Sonrió con cariño al ojos azules, antes de sacar uno de sus brazos para acariciarle la mejilla, notando un sonrojo en el rostro de leo - Vamos a hablar con el, ahora o mas tarde, pero es mejor que le demos - le aseguro, con una mirada amable.

 Leonardo: Se acuesta a su lado, poniendo la almohada en su lugar, esta vez sin miedo y queriendo estar cerca de el - Makey, te ve como su modelo a seguir, ¿sabes? - dice con honestidad y una sonrisa dibujada en su rostro por la expresión de sorpresa del mastodonte.

 Las dos tortugas se abrazaron, hasta que la alarma del teléfono de leo le dijo que era hora de irse, sus hermanos ya deberían despertarse, sobre todo el ratón que para nada estaba chismeando en la puerta, refunfuñando mentalmente por que hablan tan bajo de lo normal; cuando escucha el suave clic corre como puede... dejando aun leo sospechando saliendo de la habitación.

 Continuara...

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 ¡Hallo!, ¿como han estado todos en casa?, espero que muy bien, he estado algo ocupado... haciendo cositas mientras la uni empieza, bueno les guste este cap como a mi escribirlo, donnie y makey están muy interesados en los detalles que se pudieran omitir de alguno o ambos hermanos, no todos los días van a otros lugares e como no pudieron pasar un tiempo en brasil, sin que casi murieran o proteger el mundo, ¿donnie sospecha?, ¿makey superara su miedo a los humanos? y ¿cuando le dirán sobre bueno... ellos?, ¿que hubiera pasado si hubieran muerto?, esto y mucho mas en los próximos caps e historias en actualización!, matanee~

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