Nunca me he esforzado por ser alguien que no soy, ni para agradar a alguien guay. Sinceramente me importa una mierda lo que la gente piense de mi.

     Pero a la vez tengo esa inseguridad de que seguro alguien que quiero me va a traicionar.

    Los sentimientos y el corazón son traicioneros, mejor confiar en un desconocido que en ellos. Nunca sabes qué puta locura llegarías a hacer por ellos.

      Nunca caigas en la tentación de escuchar esos sentimientos que te dicen hazlo, pero ni siquiera saben si va a salir bien.

     No trae nada bueno, lo digo por experiencia propia.

    Tampoco creas en eso que se llama justicia o por lo menos así se hace llamar.

     Porque puedes haber sido buena persona y que luego el mundo se te eche encima.

      Querer tanto a alguien que se va. Desear tanto algo y se rompe. Querer ser feliz y estar muerta por dentro. Luchar por quiénes te importan pero tú a ellos no les importas.

       Es ley de vida. Unos vienen y otros se van. Unos nacen y otros mueren. Una vida por otra vida, sangre por sangre, ojo por ojo.

        Muchos creían que la vida es un juego, a veces se gana y otras se pierde, pero... y un empate -¿?-

       Está claro que para ellos yo si que fui un juego, uno en el que ganaron, pero no por mucho tiempo.

      Soy Mackenzy y esta es la historia de por qué me suicidé.