Ivelisse O' Neal

La vida es mía y me pertenece el mundo si así lo decido, este año fue liberador. Recuperé una diminuta parte de mi familia y estoy feliz porque se agrandará cuando sea tía. Tengo tesoros para mi que nunca voy a soltar, no son objetos así que es más difícil resguardarlos y no tener miedo de perderlos.

Me puse cursi, lo siento. Estoy emocionada por el lindo ambiente de hoy, Año nuevo no es mi fiesta favorita y aun con eso esta noche fue inolvidable. Me encanta venir a ver a la familia Davies, tal vez deberíamos mudarnos a California porque sería más fácil que viajar horas en coche para llegar y quedarnos apenas unos días.

¿Dije alguna vez que amo la casa de la madre de Asher? Pues lo hago.

Esta noche me reí mucho con Skye y los niños, Rebecca me obsequió un collar muy bonito, Clyde bailó con Charles una canción country y yo besé al hombre más hermoso (porque a mis ojos no hay quien lo supere) justo a las doce.

Él es una rara variable física. No sé como, ni cuando, ni porqué apareció en mi vida. Nos tomó tiempo encontrarnos, ya que éramos como líneas paralelas. Pero ahora que esta aquí, espero que no se vaya nunca. Quiero una noche o una hora con él, un día o toda la vida, quiero que se quede aquí. Quedarse para bailar juntos. Quedarse y sorprendernos cuando las noches son muy cortas para nuestros insomnios, de como somos caos y tormenta que se encuentran en un beso amarillo.

Hey, Asher... siento que se inunda la atmósfera, simplemente gracias por tu compañía. Amo que tus brazos sean mi hogar y tu pecho mi almohada ¿Sabias que tu pulso se acelera terroríficamente cuando digo que te amo?

Quedémonos hasta que se caigan todas las estrellas y derribemos todas las teorías de Einstein. Quédate porque solamente tu boca sacia mi sed de amor. Quédate porque mi felicidad es mirarte, extrañarte y soñarte: saber que existes tú y que yo puedo darte la mano.

Estas en el sofá ahora, acurrucado despreocupadamente. Hablas con tu amigo Matthew por teléfono para desearle un feliz Año Nuevo, te ríes y arrugas un poco el ceño. Esas diminutas cosas. Yo simplemente las miro, tienes misterio y costumbre en tus ojos; me gusta verte y oír tu voz.

Me haces pensar:

¡QUÉ MALDITA SUERTE TENGO DE TENERTE!

Propósito de Año Nuevo: Amarte y que me ames.

Posdata: Ya sé que estas leyendo mi diario, Asher. Lo dejé abierto a propósito sobre la cama porque sé la manía que tienes de chismosear y me gusta tentarte.

Estoy esperándote en la playa, ven a caminar conmigo un rato. No le tengo miedo a la oscuridad de la noche si te tengo a ti y a las estrellas.

Ah, por cierto... te amo.