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Tal y cómo TaeHyun dijo, BeomGyu no estaba en la lista del inventario. No había sido difícil sacarlo, siquiera se había visto muy obvio.

Tal como prometió, nadie se había dado cuenta. Así que BeomGyu tenía dos días exactos libres.

—¡Corre! —animó BeomGyu soltando la correa de su cachorro que sólo lloriqueó, quedándose recostado en su pierna, mirando todo— Vamos, Príncipe, hay mucho espacio —animó caminando, el cachorro lo siguió completamente pegado a su pierna.

—¿Le da miedo el parque a Come Almas? —preguntó TaeHyun con las manos en los bolsillos, mirando al cachorro.

—Te dije que no le dijeras Come Almas —señaló BeomGyu animando al pequeño que empezó a oler el césped. Empezaron a caminar, el pequeño siguiéndolos muy pegado a BeomGyu.

Fueron cuestiones de minutos para que el pequeño agarrara confianza y empezara a correr por el parque, saltando por todos lados y ladrando, sonrió mirándolo jugar, meneando su colita.

Estaban en un parque privado, no había más perros por ahí y BeomGyu lo agradecía, era la primera vez de Príncipe en un parque, y no quería un desastre con otro perro.

—Se está alejando un poco —comentó, TaeHyun observó al pequeño.

—Silva.

—No sé silbar —negó BeomGyu, escuchando luego al alfa soltar un silbido seguido del nombre del cachorro que sólo soltó un ladrido, respondiendo— Para odiarte, te hace caso...

—Un poco —afirmó con una risa mirando al cachorro acercarse corriendo con la lengua afuera y agitando su colita.

—¿Tienes sed, Príncipe? —preguntó el omega en un tono dulce, sacando de su mochila una botella de agua junto a un envase transportable, lo dejó en la grama y sirvió agua al pequeño que bebió con desespero, salpicando a los lados.

A los minutos de acabar el agua, salió disparado de nuevo, corriendo por la grama y oliendo algunas zonas, ambos atentos a lo que hacía el cachorro.

—¿Te puedo hacer una pregunta?

—Ya lo estás haciendo —señaló BeomGyu con su índice, sonriendo de medio lado cuando el alfa sólo tomó su mano, entrelazando sus manos en medio de ellos.

—Es sobre... Mark...

—¿Qué quieres saber? —preguntó mirando a Príncipe ser acariciado por un par de personas que pasaban, el cachorro meneando la cola con emoción.

—¿Tu lo amabas? —preguntó el alfa mirando el perfil del omega que asintió luego de unos segundos.

—Si... Lo amé hasta el final lamentablemente —afirmó, hablando de ello en pasado y con relajación— No por nada volvía con él cada que me daba un poquito de amor... Lo amaba demasiado, y a pesar de que me fui cuando pasó lo de mi embarazo, internamente volví a ese apartamento con la esperanza de que me dijera algo... Que me amaba y que se iba a responsabilzar... —rió luego de eso, TaeHyun sólo escuchó con atención— Era una relación muy tóxica, y el final no fue muy... Lindo...

—Lo entiendo —asintió acariciando el dorso del omega con el pulgar.

—Pero lo amé... Y demasiado, y creo que eso fue mi error... Amar mucho al hombre equivocado —asintió volteando a ver a TaeHyun que sólo le dió una media sonrisa— ¿Por qué preguntas eso?

—No lo sé... Sólo quería saber —alzó los hombros alzando la mano del omega para besar su dorso, aún mirándolo a los ojos.

—Chismoso —acusó con una risa, TaeHyun sólo sonrió.

—Yo te acepto con tu pasado, BeomGyu —habló el alfa llamando su atención— Acepto lo que fuistes y lo que eres, acepto en dónde trabajaste y en dónde trabajas, acepto y no juzgo  tu vida entera... Y agradezco que la hayas compartido conmigo en su momento —agradeció, el omega desvió la mirada sintiendo calor en sus mejillas.

—¿P-por qué estás romántico de repente? —preguntó en voz baja, mirando a Príncipe ir a ellos, caminando y jadeando. Sintió algo deslizarse por su dedo, volteó de nuevo al alfa que dejaba un fino anillo dorado en su dedo medio— Eso... E-eso...

—Quiero salir contigo... Estar contigo todo el tiempo... Formalmente... —habló jugueteando con el anillo del omega que no paraba de ver lo brillante que era, era sencillo, sólo con un leve grabado de oleaje, pero sin algún tipo de incrustación— Vamos a cenar hoy... —pidió, sonriendo con coquetería, el omega tartamudeó un poco.

—¿Y el anillo qué? —preguntó mirando su mano con el anillo, TaeHyun sólo se acercó a él besando sus comisuras.

—Tal vez a ti te parezca muy apresurado... Pero ya quisiera estar formalmente contigo... Cómo...

—Novios —completó recibiendo un asentimiento del alfa, BeomGyu sintió las patitas de su cachorro en su pierna, así como varios ladridos.

—Si tú sientes que es muy apresurado o que no te dejo pensar las cosas... Está bien, pero no me rechaces el anillo ni la cena —pidió con una sonrisa, el omega frunció el ceño.

—¿La... Cena?

—Si, reservé en un lugar que te va a gustar, y a Príncipe también —señaló al cachorro, BeomGyu abrió la boca, impresionado.

—¿A Príncipe?

—Si, admiten mascotas en el lugar —asintió mirando que el omega no quitaba la vista del anillo.

Había seguido las opiniones de su amiga, y además, había planeado todo como le parecía mejor y más romántico a su perspectiva.

—¿Te gustó? —preguntó mirando al cachorro acostarse a los pies de ambos, dejando la cabeza en sus zapatos.

—Es precioso —murmuró aún mirando la joya, en unos segundos observó a Kang— Yo-...

—Ah ah —negó con su dedo índice— Hablamos en el restaurante —pidió, inclinándose a besarlo con cariño, el omega dejando sus manos en su regazo.

BeomGyu lo observó fijamente, dándole una pequeña sonrisa.

Sea cual sea la pregunta, él ya tenía la respuesta.

Si se lo preguntaba ahorita, si se lo preguntaba en el restaurante, si lo preguntaba a la noche o en cualquier momento...

Él diría que .



















[...]






















8:30 pm.















—No voy a entrar...

—BeomGyu, pasa...

—¡No, estás loco! —dramatizó el omega con su cachorro en brazos, Príncipe adormecido y cómodo en brazos del omega, estaban en la entrada del restaurante, pero el omega al ver a las mascotas de los demás comensales se asustó y no se sentía capaz de entrar.

Pastores alemanes, pitbulls, perros grandes, perros adultos.

Y él iba con su cachorrito bebé, que peleaba con cualquier cosa y no era consiente de su tamaño.

—¿¡Y si se le lanzan encima!? —preguntó acariciando la cabeza del cachorro que se levantó, TaeHyun relamió sus labios— ¿Te imaginas una pelea de perros ahí? No, no, no —negó retrocediendo de nuevo al notar que no todos tenían una correa y estaban libres por el lugar.

TaeHyun miró a la recepcionista.

—¿No hay puestos libres en la parte de arriba? —preguntó, la mujer revisó en la pantalla, estaba libre arriba, y había menos comensales que abajo.

—Si, aún así siguen habiendo perros obviamente... Sólo que menos feroces —rió un poco entendiendo la situación del omega, TaeHyun hizo el cambio de mesa, pagando en efectivo la diferencia.

—Ven, pasa —pidió el alfa tomando la cintura del omega que avanzó con cautela, mirando a todos lados, Príncipe alzó la cabeza, detectando a los demás perros.

Inevitablemente ladró, el omega volteó de inmediato cuando otro perro le contestó, un pastor alemán que le llegaba por la cintura.

Príncipe le devolvió el ladrido, gruñendo también y captando la atención de los demás perros.

—Ya, basta  —calmó el omega algo asustado de que ambos perros empezaran a pelear, TaeHyun se quedó del lado del pastor alemán, pasando con rapidez— Deja de pelear, Príncipe —regañó el omega cuando su cachorro siguió ladrando. Peleando con los perros grandes que sólo le contestaban o lo ignoraban.

—No es consiente de su tamaño —carcajeó el alfa subiendo las escaleras a la planta de arriba, había uno que otro Chihuahua y otra raza pequeña, pero los pocos que habían, con correas.

BeomGyu suspiró, dejando la correa de su cachorro en su muñeca, lo dejó en el suelo, dejándolo oler todo al límite que le permitía la correa.

—Tienes un come almas y no lo dejas ser —señaló TaeHyun extendiendo la carta al omega que rodó los ojos— Todos esos perros están entrenados, ya están grandes...

—Bueno, Come Almas no está entrenado aún y se pelea hasta contigo... ¿No viste como le ladró a ese perro? Es el triple o más de su tamaño y él es una pulga con rabia —señaló mirando a su cachorro que le ladró— Si, es contigo —lo señaló, recibiendo una lamida en el dedo, suspiró volteando a ver al alfa que sólo soltó una carcajada, leyendo la carta.

—Bueno, tiene un poco de parecido al dueño —señaló ganándose una mala mirada del omega que leyó la carta, pensando en qué comer, sin tener tanta hambre.

TaeHyun en cambio si tenía mucha hambre, así que se decidió por el plato con más cosas, además de aperitivos de entrada.

—¿Cómo elegiste a Príncipe? —preguntó señalando lo que quería al alfa que leyó el plato, asintiendo para alzar la mano, llamando al mesero.

—Sinceramente, me dió ternura —habló, haciendo el pedido hacia el mesero, señalando todo lo que quería y avisando ciertos detalles, para cuando se fue, siguió hablando— De todos los cachorros él estaba en una esquina dormido, hecho bolita... Y me dió mucha ternura, no sabía que era una fiera agresiva —rió al final mirando al cachorro sentado, viendo a los demás cachorros y soltando uno que otro gruñido.

—Tu... Trabajas hoy, ¿Cierto? —preguntó recibiendo un asentimiento del alfa que observó su reloj.

—En unas cuatro horas —comentó, BeomGyu hizo una mueca con la boca, mirando la vista del lugar, era una terraza, y estaba algo alejada de la ciudad, así que se veían las luces maravillosas y la brisa fresca de la noche.

—¿Por qué no... Dejas el caso? —preguntó en voz baja, aún así, TaeHyun lo escuchó, abrió de más sus ojos y negó de inmediato.

—¡No! ¿Por qué lo dejaría?

—Bueno... Debe ser incómodo... Tu mismo lo dijiste...

—Ah... —suspiró relamiendo sus labios, era cierta la incomodidad y también la molestia que le generaba la situación— No voy a dejar el caso ni loco, BeomGyu —negó con una risa— Tal vez sea... Incómodo y me da mucha rabia la situación de cierta manera, pero número uno, es mi trabajo... Número dos, la ayuda y protección que puedo darte por medio del caso es mayor al que puedo darte si no estuviera en él —aclaró tomando su mano por arriba de la mesa, acariciando el anillo qué le había dado.

—No estoy orgulloso de esos vídeos, TaeHyun...

—Eso lo entiendo, por eso, te juro que voy a borrar todos de la red, cueste lo que cueste, ojitos —prometió dándole una sonrisa, BeomGyu suspiró.

—No deberíamos hablar de esto en una-... —se mordió la lengua cuando el alfa le dió una mirada de emoción.

—¿Una qué? Dilo —animó dándole un pellizco en el dorso.

—Una salida de amigos —señaló con una risa, TaeHyun chaqueó la lengua.

—Amigos no...

—Compañeros, camaradas...

—Que no —negó mirando los platos de entrada ir hacia ellos, miró al omega con el ceño fruncido, BeomGyu rió mirando el anillo en su mano.

—Bueno... Digamos que una salida de padres separados con su hijo —propuso, agradeciendo cuando le dejaron la comida en frente, TaeHyun también lo hizo en un murmullo.

—No me parece... Dilo —pidió con un lloriqueo, entrelazando su mano con el omega que lo observó.

—¿Qué quieres que diga? Gracias, amigo por ésta comida —agradeció con una risa, TaeHyun rodó los ojos antes de erguirse en su puesto.

—Choi BeomGyu —lo llamó mirándolo directamente a los ojos— ¿Quieres dejar de ser mi amigo?

—Uhm... No —negó dándole una mirada juguetona al alfa que suspiró.

—BeomGyu, ¿Quieres ser mi novio? —preguntó directamente, mirándolo a los ojos, esperando la respuesta.

BeomGyu sólo sonrió, tomando el tenedor para empezar a probar las entradas.

—No lo sé... Hace algo de frío...

—¿Frío? ¿Q-qué tiene que ver el frío, BeomGyu? —preguntó confundido, el omega soltó una carcajada, inclinándose a besar sus comisuras.

—Baboso, desde el parque te dije que sí... —le habló con una pequeña sonrisa, TaeHyun tartamudeó un poco.

—P-pero-...

—Lo dije en mi mente —justificó, sonriendo de más al ver cómo al alfa se le subían los colores al rostro, teniendo un leve sonrojo en las mejillas.

—¿Enserio me dijiste que si?

—Si, baboso...

—Entonces...

—Soy tu novio —se señaló empezando a comer en silencio, bajo la mirada feliz de TaeHyun— ¡Ya, come! —lo regañó sin saber qué hacer por la mirada tan fija. Cerró los ojos cuando el alfa acarició su cabello, y se inclinó a besar su frente.

—Gracias por aceptarme —murmuró antes de empezar a comer en silencio, con sus manos entrelazadas sobre la mesa, dándose pequeñas miradas que el omega sólo contestaba con una ceja arqueada.

Era diferente, su relación había avanzado.

Ya podían seguir tratándose como novios.

Porque oficialmente, ya lo eran.














































Tal vez el término "novios" para dos adultos no sea el mejor o el que más les guste a la gente, pero como saben ésta relación va a pasitos de bebé (cosa que no está mal)

Cada relación es diferente, cada cosa empieza diferente y espero no juzguen a ninguno de los dos personajes cuando en lugar de decir 'te amo' digan "te quiero"

Es un decir válido, no lo hagan de menos, ésta relación va a ser muy diferente a las del TaeGyu, de hecho todas las relaciones son diferentes

Les pido comprensión con ambos personajes, sus historias y sus pasados.

Respecto a Mark y BeomGyu, sí eran una relación tóxica MUY tóxica pero de una forma u otra había amor de parte de BeomGyu... Así que si, BeomGyu sí ha amado antes por si no había quedado claro :D

Nos vemos en el siguiente!

The_Dark_Diamond04

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