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Martes 09:00 pm





















Con la decisión final de el grupo de investigación, luego de la inspección exhaustiva ahora tenían la oportunidad y necesidad de exponer lo que sabían.

Aún así, Kai y TaeHyun decidieron no hablar hasta el final, simplemente escuchando lo que decían los demás.

—Me tomé el atrevimiento de visitar el club de forma civil, así como pedir un servicio con una de las víctimas del caso, Susy —habló uno, mostrando la foto de la mujer en pantalla, exponiendo lo que había investigado— La interrogué y pedí la identificación de todos nosotros aquí, para descartar más de un sospechoso... Evidentemente fue una respuesta afirmativa cuando mostré a Oh, pero lo sorprendente es que reconoció también al agente Kang —señaló, TaeHyun asintió, recibiendo las miradas de todos.

—He estado frecuentando el club luego de un evento personal, tengo familia que ha hecho festejos allí y Susy ha sido anfitriona, así como Choi BeomGyu, otra de las víctimas —explicó, el otro asintió, los demás escucharon y entendieron, además de escuchar la demás información que tenían los demás agentes.

Casi todos habían investigado sobre Oh, con el foco puesto en el alfa así que la información era parecida.

Pero nada se comparaba con los datos que tenían Kai y TaeHyun.

—Al igual que todos, habíamos hecho investigaciones por nuestra cuenta... Aprovechando mi vínculo en el restaurante con el señorito Choi BeomGyu, pudimos entrevistarlo y tener muchas... Revelaciones de su parte —contó colocando le miniatura del vídeo donde participaba Oh— Como primera instancia, en este video, el sujeto censurado no es más que el agente Oh —reveló dejando la sala en silencio, los demás mirándose con sorpresa— Se confirma el uso de drogas para grabar, así como que el agente Oh no estaba bajo efectos de narcóticos en este video... —contó, dándole pasó a Kai que empezó a hablar de lo demás que habían hecho, omitiendo las partes en dónde se comía la boca con el jefe del club, simplemente explicando cómo habían obtenido todo.

—Hay que sacar a Oh de la agencia, definitivamente, una suspensión no es suficiente.

—Para eso, necesitamos pruebas más que la confesión de este muchacho —señaló otro. Kai alzó una mano.

—Propongo desmantelar por completo ese club, lo más pronto posible, tendremos acceso a las computadoras y las grabaciones que hay allí, obtendremos la prueba de Oh, así como más pruebas y neutralizaremos el lugar de los hechos...

—Primero, necesitamos a Choi BeomGyu aquí...

—¿Para qué? —preguntó TaeHyun mirando a ChangBin.

—Él nos dirá todo lo que sabe del club, nos puede guiar y si tiene más cosas que decir, las dirá a todos y no sólo a ustedes dos, pero esto debe ser ésta semana, si Oh está suspendido puede que avise a los demás, y muden la información y drogas a otro lugar —opinó, todos asintieron, empezando a aportar lo que debían a hacer.

Nuevamente estaban todos trabajando en grupo, aportando sus cualidades a cada cosa y creando un plan para desmantelar el club.

TaeHyun tragó grueso, mirando que las cosas estaban apuntando a qué necesitarían una distracción, un evento masivo para que el club tuviera las suficientes personas para ellos entrar.

—Si Oh está ahí no dudará en delatarnos, lo mejor es que podamos mezclarnos entre el montón de gente...

—Necesitamos acceso a la oficina...

—Yo puedo conseguir entrar —propuso Kai, sabiendo que había dejado el collar ahí, y podía entrar con la excusa de buscarlo.

—Nosotros iremos de civiles, el grupo de ataque serán los encargados de neutralizar a los empleados... —comentó otro, TaeHyun escuchaba y aportaba cuando era necesario, escuchando que todos insistían en un evento masivo, en tener una distracción y atracción.

TaeHyun sólo esperaba que esa distracción y atracción no fuera su novio.

Aunque era lo más probable.










[...]











12:00 AM








—Hola, Príncipe bonito —saludó cuando entró a la casa, las luces aún encendidas, Príncipe bostezó en su camita, dándole un ladrido antes de quedarse acostado.

—¿Cómo te fue? —preguntó el omega saliendo de la cocina, secando sus manos, TaeHyun le sonrió.

—Todo bien... ¿Tú qué haces despierto? —preguntó acercándose a él para besarlo.

—Estaba limpiando los platos y un poco la cocina —contestó apagando la luz de la cocina, miró a Príncipe unos segundos, ambos entraron a la habitación, TaeHyun desabrochando su camisa poco a poco.

—Uhm... Pensé que te encontraría durmiendo —murmuró, el omega cerró la puerta de la habitación, entrando al baño para lavar sus dientes.

TaeHyun se quitó los zapatos, los calcetines, desabrochó su pantalón mirando al omega cepillarse en el baño, sólo tenía una playera, con uno de sus típicos shorts ajustados.

—¿No tenías sueño? —preguntó acercándose a él, dejando sus manos en sus muslos, besando su nuca, el omega tomó agua, escupiendo luego, el alfa pasando sus dedos por su piel expuesta.

—No... —negó secando sus cara, se volteó, riendo cuando el alfa metió sus manos por la tela del short, notando que no había nada por debajo. Besó su nuca, una y otra vez, el omega apoyando sus manos en la encimera.

De un momento a otro, las cosas se tornaron más... Calurosas.

—Mañana vas a trabajar, ¿Cierto?

—Si... —afirmó el omega con un suspiro, ladeando su cuello para darle acceso al alfa que besó con insistencia, metiendo sus manos debajo de su ropa, mordió su labio inferior, dándose la vuelta para abrazar por los hombros al alfa, besándolo.

La tensión seguía intacta a pesar del paso del tiempo, tal vez al inicio sólo era TaeHyun el que la sentía, pero ahora era algo compartido, era como un imán y un metal invisible que los hacía querer estar juntos todo el tiempo.

Además, el omega había salido de ese hueco de "sólo sexo" si, estaban teniendo sexo, pero... Era diferente.

Eres precioso, ojitos... —susurró el alfa levantando al omega por sus muslos, dejándolo sentado en la encimera, quitándole los shorts ajustados y acercando sus manos cada vez más a la entrada húmeda del otro.

Esas palabras ya las había escuchado antes, había escuchado a otros hombres decirlo sin problemas, en medio de alcohol y drogas, en medio de un placer momentaneo.

Pero ésta vez se lo estaba diciendo TaeHyun, se lo estaba susurrando en el oído mientras le acariciaba los muslos, mientras pasaba sus dedos por su piel con el fin de hacerlo sentir bien, no con el fin de usarlo.

TaeHyun podía repetir todas las palabras que le habían dicho sus clientes en algún momento, pero sonaría tan diferente que le erizaba la piel.

—Ah, si... Ahí me gusta, si... —susurró aferrado a los hombros ajenos, arrojando la cabeza hacia atrás, jadeó, sintiendo un dedo empujar su entrada, dejó sus pies también en la encimera, cubrió su boca con ambas manos al ver al alfa agacharse, acercando su boca a su entrada, arqueó la espalda, apretando los ojos, dejó una mano en el cabello ajeno para separarlo.

TaeHyun lo tocaba para hacerlo sentir bien, para que ambos se sintieran bien, lo tocaba con cuidado, lo escuchaba, le pedía opinión y pedía permiso para hacer algunas cosas.

—No quiero eso... —murmuró explicando explícitamente lo que quería, llevando uno de sus pies a la entrepierna ajena, el alfa ladeó la cabeza, acorralando su cuerpo en la encimera.

Por otro lado, TaeHyun sentía que no era suficiente con tocarlo, con verlo, con oírlo, se sentía con la necesidad de más, y más, cada vez se sentía más atraído, le gustaba demasiado el omega y con el tiempo que habían pasado juntos iba descubriendo más detalles que no notaba antes.

Podría estar escuchándolo hablar por horas, podría verlo por horas, estar abrazado a él por horas y días, con ese exquisito aroma a fresas que lo cautivaba aún más.

Le encantaba saber qué le gustaba y que no, le gustaba saber qué ropa no le gustaba, qué música le encantaba y qué comidas odiaba.

Y sentía que a pesar de eso, quería más.

El omega soltó un gemido, enterrando sus uñas en los hombros del alfa que lo embistió con fuerza minutos después, sujetándolo de los muslos, sin darle tiempo a asimilar, una y otra vez embistiendo con fuerza y creando un sonido de chapoteo.

Lo observó gemir, cerrando los ojos y apoyarse en el espejo tras él, gozando de las sensaciones que le daba.

Sabía cómo le gustaba el sexo, sabía en dónde tocar, sabía que hacer y qué no, cuando debía pedir permiso.

Sabía que le gustaba fuerte, que le gustaba ser embestido hasta más no poder, que sus muslos chocaran.

El bailarín gimió, sujetando la nuca ajena, gimió dejando la boca abierta, el alfa besando sus clavículas mientras embestía sin parar, sintiendo que faltaba algo...

Se tensó en su lugar, alzando la cabeza con rapidez, mirando al omega que mordió su labio inferior, mirándolo.

—¿Por qué... Te detienes? —preguntó con la voz sumamente agitada, mirando al alfa.

—N-no... No me puse condón —negó, asustado, siendo esa la primera vez en muchos años que se le olvidaba algo tan importante.

El otro suspiró, mirando en medio de sus piernas, el alfa no estaba por completo dentro.

—Con razón se sentía... Tan delicioso —murmuró dejando una mano en lo que sobraba del miembro ajeno, el otro lo observó.

—Hay que detenernos, necesito-...

—Pero ya estás dentro, ya... Ya estás a nada de venirte, ¿Cierto? —preguntó apretando el miembro ajeno voluntariamente, el alfa jadeó relamiendo sus labios, sintiendo cosquilleo en su vientre— Yo... Me estoy cuidando como siempre, ¿Bien?... Sólo no anudes... —pidió sonriendo cuando el alfa lo sujetó de la cadera, accediendo a terminar lo que habían empezado.

La sensación era muchísimo más intensa, podía sentir el calor ajeno, si se concentraba podía sentir algunas venas, y eso lo excitaba aún más, por eso, luego de gemir con insistencia, tuvo su orgasmo en medio de los dos, jadeando cuando el alfa salió mucho antes de anudar.

Se dejó besar, sintiendo al alfa acariciar sus muslos.

Ha aumentado de peso, por la Luna que alegría. Pensó el alfa al besarlo, alegre de que se notara un cambio de peso en el omega, tal vez no era mucho pero con cualquier mínima cantidad TaeHyun estaría feliz.

—Te enviaron una petición... Al correo —contó con la voz agitada, el omega aún sentado en la encimera, observando con atención.

—Oh...

—Hicimos una limpieza, el único infiltrado es Oh... Es completamente seguro que vayas, enserio... No tienes porqué preocuparte de-...

—TaeHyun —lo cortó acunando las mejillas del alfa con sus manos— Confío en ti —asintió peinando su cabello con suavidad— Sé que si dices que es seguro, es porque lo es...

—Necesitamos que vayas... A declarar y ayudar... Te daremos protección, así como una cantidad de dinero, seguro médico también...

—Está bien... —asintió besando su mejilla, TaeHyun relamió sus labios, abrazando su cintura.

—Tu sólo me conoces del restaurante, ¿Bien? Y me viste en el club hace un tiempo en reuniones familiares...

—Bien —afirmó bajando de la encimera, bostezando entrando a la ducha, invitando al alfa con una mano.

¿Cuál era el tiempo perfecto para hacer algo? ¿Cuál era el mejor momento?

Si vivimos pensando en cuál es el momento correcto, perderíamos el tiempo y nunca haríamos o diríamos algo.

—Te... Te quiero muchísimo —murmuró el alfa abrazando al omega por la espalda, el otro tomó el jabón en sus manos, cerrando el grifo.

Se volteó en sus brazos, dándole una sonrisa.

—Yo te quiero mucho más —contestó besando sus labios castamente, TaeHyun le devolvió la sonrisa, mirando su espalda.

TaeHyun no sabía bien cuando era el momento correcto para decir lo que pensaba, no sabía si eso arruinaría las cosas, no sabía cómo se sentiría el omega al respecto.

Pero él ya no quería quererlo más.

Ya no quería decirle te quiero, ya no quería decir te quiero mucho.

Quería amarlo, quería decirle que lo amaba.

Quería verlo a los ojos y decirle que ya no lo quería.

Que lo amaba con todo el corazón.











































Feliz jueves 😘

The_Dark_Diamond04

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