⃝⃕Úɴɪᴄᴏ

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"¡¿Estás loco?!"

No era la primera vez que escuchaba esas palabras, no sería la última vez y en realidad no le importaba escucharlas un millón de veces y seguir adelante con su decisión.

"Ya te lo dije, seguiré adelante sin importar qué" el joven lobo estaba terminando de acomdar los sacos de papas en la montaña de los demás sacos con otras verduras para el pueblo.

"¡Oh!, ¡Vamos!, Jungkook, hermano" el joven de cabellos rojos le había tomado el brazo para poder jalarle haciendo que se girase y mirará detrás de ellos "Ve a todas y todos esas omegas locos por ti"

Jungkook pudo ver que muchas de las omegas que se suponía que debían de estar arreglando todas las verduras en los respectivos sacos, estaban en la mesa recargadas con una mano apoyando su barbilla y dejando que su mirada se perdiera y su baba cayera.

"No me interesan" contestó jalando de su mano para que le soltase y él siguiera con su trabajo de jalar los sacos del sembradio al granero.

"No entiendo que le vez a Kim Taehyung" se quejó su amigo, el cual al decir aquello se había terminado por caer por el pie juguetón del rubio que había dejado a su amigo con la cara en el lodo y su saco de cebollas en la espalda regada por toda la tierra y parte de él.

En realidad Kim Taehyung no tenía una cosa especial, tenía muchas más todas las omegas de aquel lugar y eso que eran muchas y muchos omegas, sin embargo para Jungkook el de cabellos negros y mirada molesta a cada segundo del día le mataba.

Nadie, ni siquiera Hoon que era su mejor amigo sabía algo super secreto. Él había espiado por accidente a Kim Taehyung en el bosque y en su casa, aunque la parte de su casa no era accidental realmente.

"¡Puta mierda!" Gruño el alfa al golpear el lodo a su lado, todo su cuerpo estaba lleno de él y su figura se había marcado en el suelo de la cosa café y pegajosa.

"Estás más sucio que un cerdo" se burló el rubio al ir caminando hacía el granero metiendo junto a los demás sacos de rabanos, el suyo.

"¡Jodete, Jungkook!" Gritó el lobo más joven al ver la risa del rubio al salir del lugar.

"No es mi culpa que hables mal de mi omega" el más alto se alzó de hombros con una mueca de diversión y venganza en sus labios.

"Que Taehyung no es tu omega"

"Aún" atacó Jungkook al buscar acercarse a Hoon que mirada detrás de él y tragaba duro, su cara mostraba miedo y se preguntaba desde cuándo le causaba eso a su mejor amigo.

"¿Tu qué?" La suave, pero profunda voz en su espalda le hizo temer y pensar si girarse era buena idea en realidad, su mirada estaba fija en como Yong Hoon buscaba colocarse de pie para huir, lo cual hizo con agilidad una vez se colocó de pie, el lobo huyó de la escena dejando a Jeon Jungkook solo con el omega que era denominado la fiera indomable.

"¡Hola!, Tae" saludo con una emoción y miedo a su vez en su pecho, no le había costado nada girarse para ver la cara de molestia palpable en el de cabellos negros.

"Soy Taehyung, no Tae" gruño el pequeño omega al frente de él.

Jungkook había tenido que bajar la mirada para evitar ser asesinado y enterrado bajo tierra por los ojos verdes del omega. Con su vista baja había podido ver que sus botas a diferencia de lo que portaba el omega, eran de un color verde fosforescente, no era extraño, pues Kim Taehyung era así, mientras otros omegas lloraban por se molestados por los demás, el de cabellos negros te rompía la nariz y te golpeaba en los bajos, estaba seguro de que cualquier ser que ofendiera sus botas tendría una probada de calidad de ellas en sus bolas.

"Lo siento" se disculpa con nervios el alfa al pasar su mano por su nuca. Amaba y a su vez odiaba la manera tan estúpida y patética, pero a la vez maravillosa y perfecta que le hacía sentir el omega.

Cuando Taehyung le hablaba perdía el sentido de autoridad, se creaba una clase de trance en su mente y en su lobo que le obligaban a bajar la cabeza ante el menor.

"Quita esa cara, pareces idiota"

"Yo lo siento, tratar..." un gruñido seguido de un sonido de irritación le contestó.

"Deja de ser tan patético, sólo vine a avisarte que habrá junta de alfas guardianes así que mi padre quiere hablar contigo" Jungkook pudo notar como la mirada verde del omega no estaba en él.

El rubio había tenido que mover su cara a un lado para ver como el menor observaba a los omegas a sus espaldas de ambos, todos estaban hablando de ellos dos y apenas que guardaba silencio ambos se daban cuenta de sus palabras.

"¡¿Cómo puede tratarlo así?!"

"¡Dios! ¡Es Jeon Jungkook!"

"Es el alfa más caliente"

"Yo me lanzaría a besarle y no le hablaría de esa forma tan altanera"

"Taehyung siempre ha sido así, arrogante hasta la muerte"

El alfa pudo ver como varias chicas y chicos hablaban entre ellos de manera nada disimulada, estaban siendo descarados y groseros y él lo sabía bien, pero por más que estaba listo de cortarles el diálogo, un olor amargo le llegó a sus vías nasales, su lobo se había movido de una manera extraña como nunca y no sabía cómo describirlo, pero sólo sabía que ese olor tan especial era fuerte y que jamás en su vida lo había olfateado.

"Hijos de perra" el leve gruñido entre dientes del omega a su lado había centrado su atención y mirada en el de cabellos negros, el cual era el dueño de ese aroma, Taehyung olía a cerezas, un extraño, pero buen olor.

Jungkook pudo ver que el omega balbuceaba más y más palabras hasta que algo le hizo temblar como idiota.

"¡Ustedes!" Gritó el omega que parecía más un perro rabioso que un omega delicado y pequeño.

Pues Kim Taehyung era mucho más pequeño en muchos sentidos que él, eran tal vez cerca de siete centímetros de diferencia de altura, de peso le calculaba que le aumentaba de diez a quince kilos y su anchura corporal era el doble del omega, hasta en su edad le ganaba por meses y eran muchos en realidad.

"¡¿Acaso son imbéciles?!" Exclamó el omega al dar dos paso más hasta estar al frente al lado del alfa y no a su lado "¡¿Qué su cerebro no sirve?!"

Esas y más preguntas acompañadas de gritos y ofensas siguieron hasta un punto donde Kim estaba a unos dos pasos de los demás, por lo que decidió ir a su lado para tratar de calmarle, pero una parte de él sabía que si intentaba algo antes de tiempo lo empeoraría, tal vez por ello sólo se quedó a su lado incómodo.

"¿Creído, arrogante y orgulloso?" Jeon no había podido evitar sentirse sorprendido de ver que esas palabras no eran acompañadas de gritos y ofensas para todos los que estaba al frente "Se le llama tener pantalones, el hecho de que podamos tener crías no nos hace sinónimo de cobardes y débiles"

Kim estaba con los brazos cruzados sobre su pecho, la mirada de él era altanera y sólo por un segundo estaba de acuerdo con los idiotas de que el menor lo era, pero eso no era malo o un sinónimo de ofensa a él.

"Les diré algo, soy Kim Taehyung y no me da miedo nada"

Jungkook no entendía demasiado la situación, sólo sabía que había sido jalado por su camisa para poder agacharle a la altura del rostro de Taehyung, el cual ya había estampado sus labios en contra de los del alfa para poder sentir el roce húmedos de estos contra los suyos propios.

"¡Por la luna!"

Loa gritos de sus espectadores le importaban una mierda, lo único que Jungkook había podido hacer era abrir sus ojos como platos ante la sorpresa de ver a Kim Taehyung con su cabeza ladeada mientras que abría sus labios pidiendo que Jungkook lo hiciera, lo cual no dudo en hacer, pues ese era su sueño desde la primera vez que había visto a Kim Taehyung de cachorro, el golpe en la cara con la pelota rosada del omega no le había molestado, en cambio le había divertido y encantado.

Jeon abrió aún más sus labios una vez que el más bajo le había jalado más hacia él desde su nuca con su mano derecha, su palma subía hasta sus cabellos rubios sujetandole con algo de fuerza que no le extrañaba mientras que al final sentía la lengua del menor en su boca descaradamente.

¡Era su primer beso! ¡¿Por qué carajos el omega sabía más que él?!

La lengua de Taehyung jugaba con la suya en un leve toqueteo mientras que sus respiraciones eran aguantadas o al menos la de Jungkook, el cual ya sentía que su pantalón iniciaba a doler y eso que eran los jeans de trabajo.

Una vez que su mano de Taehyung bajo al pecho de Jungkook y acarició en centro de éste para empujar de él y separarse logrando que de entre sus labios un gran hilo de saliva se creará y fuera testigo de la evidencia de la clase de tragada de bocas de los lobos.

"Eso es ser creído y arrogante" fue lo único que dijo el omega antes de girarse e irse por donde había llegado con una sonrisa falsa en sus labios y desapareciendo lo más rápido posible.

Nadie debía ver sus mejillas rojas y su vergüenza inevitable en ellas, el haber visto miles de dramas le había ayudado a saber besar, aunque fueran algunos más puros que la virgen María.

Por otro lado Jungkook sólo había permanecido con la mirada fija en la figura del omega que se había largado sin darle una compensación por su erección en sus pantalones.

"¡Jungkook!" El golpe en su espalda del cuerpo de su amigo pelirojo contra él, le había hecho que entrara en el mundo de nuevo "Veo que tienes problemas ahí abajo" se burló sin pudor alguno señalando a su parte baja.

El alfa había tenido que empujar el cuerpo de su amigo lejos para poder liberarse de las miradas chismosas de los demás y huir con su erección incómoda a su casa para buscar una vez más de su mano.

"Te veo mañana" se despidió por fin al correr por los alrededores del campo para ir a la zona central de su manada. Si recordaba bien el omega le había avisado de la Junta de guardias y él al ser por el momento el tercero al mando seguido del hermano menor del alfa de la manada debía de estar presente sin ninguna escusa.

Además de que no sólo iría a hablar con el alfa de su posición en la defensa y social en su manada, tenía otros planes en mente y eran de suma importancia, aún más con la época de apareamiento a un mes de ellos, de la sucesión del poder del alfa de la manada a su heredero y sobre todo ese detalle que tenía que ver con su querida fiera indomable, tenía más trabajo en esos meses.

"¡Jungkook! Muchacho, me alegra ver que no faltaste"

"Yo nunca falto, señor Kim" la leve risa con la que decía aquello el joven dejaba ver a gran relación de amigo que tenía con su líder.

"Te he dicho que me digas Seung, muchacho" el golpe en la espalda por parte amistosa del alfa de la manada le había dolido más de lo que deseaba admitir, la fuerza era hereditaria.

"Ahora para lo que les llame" dijo el señor adulto dejándose caer en la silla de ruedas frente a su escritorio en su estudio.

"Es que por fin vas a dejar de tirarte gases y echarle la culpa al primero a tu lado" el lobo no mucho más joven que el señor al frente de ambos dejó decir con una sonrisa maligna en sus labios.

"Young Min, deja de ponerme en ridículo"

"Lo haces tú solo, incluso Jungkook es víctima de tus malas mañas" los dos hombres mayores vieron al rubio más joven con expectación en espera de su veredicto, a lo que con miedo a las consecuencias, pero con el lema de la manada en su pecho, el joven asintió.

"¡Por la luna!"

"¡Dirás por tu culo, máquina de pedos!" Gruño el hombre más joven que el alfa líder.

Jungkook había tenido que aguantar las quejas de ambos hermanos, mientras que ellos peleaban, el lobo rubio no podía evitar pasar su vista por todo la oficina de trabajo de su líder, su casa había sido construida con su esfuerzo al igual que la manada por su bisabuelo. Su líder se había encargado de seguir el negocio familiar creando a esas alturas de actualidad y tecnología una de las mejores empresas de distribución de alimentos y animales, creando no sólo dinero, sino una base de trabajo para todos los de su manada e incluso algunos podían superarse y subir de nivel en el negocio.

"¡Ya deja de decir historias estúpidas!"

"¡Que no son ni historias, ni estúpidas si son verdad!"

Los gritos no paraban y estaba seguro de que iban a tardar en esa junta más de lo normal. En realidad ver a la familia líder de esa manera era por encima perfecto, no había rivalidad en ellos, envidias o inconformidad en nadie y si llegaba a haber, el fuego se apagaba antes de cualquier incendio. No había ninguna clase de soberanía absoluta o injusta, pues Seung era el alfa perfecto y esperaba que el siguiente líder lo fuera también.

"¡Ya!" Gritó el líder al pegar con su mano en el escritorio "¡Lo acepto!, Le echo la culpa al de al lado por mis gases"

El joven se alegró de ver que tras veinte minutos la junta podía seguir su ritmo normal, aunque lo normal era lo anterior que había sucedido.

"Me alegra de saber que aceptaras toda la culpa por fin" comentó Young.

"Ya, de eso luego hablamos" calló el alfa a su hermano "Lo que me interesa hablar es que se acerca la sucesión del poder al siguiente alfa lider"

La seriedad del asunto se notó enseguida, pues el alfa estaba ya con la mirada fija en el joven y en su hermano.

"Lo sabemos bien, la pregunta es ¿será por medio del enlazamiento de tu cría o sólo se limitará a un combate por el lugar?" El segundo al mando habló mientras observaba a su hermano sacar de su cajón una caja de puros, de la cual le ofreció uno a ambos, Jungkook negando ante la invitación, mientras que Young ya iba encendiendo el suyo.

"Ambos sabemos que las tradiciones son lo que reinan en la manada, sin embargo ahora las nuevas generaciones inician a querer romper con ello, sin embargo deseo que mi cría sea el que siga con el poder familiar"

"Concuerdo con eso, después de todo es de familia el lugar"

Jungkook concordo con ellos, no era justo que alguien que no había trabajado como ellos en la construcción de la empresa y la manada se llevará todo tan fácil.

"Por eso mismo Jungkook, tras la petición que me hiciste, no voy a negarla, pues eres en el primer lobo que pensé para eso" Jungkook no había evitado sonreír ante las palabras de su líder, lo cual no dudo en agradecer.

"¡Se lo agradezco mucho señor!" Jeon había empujado la silla hacía atrás para poder dejarse caer de rodillas y darle una completa reverencia a su líder dejando caer su cabeza al suelo de madera y sus manos a cada lado de ella.

"Pero muchacho, no es necesario eso" el alfa canoso se había colocado de pie negando con sus manos para que dejase de hacer aquello.

"No se arrepentira, se lo aseguro" dijo el rubio aún en el suelo.

"Lo sé, Jungkook, pero recuerda que aún está pendiente eso" le recordó el líder haciendo que el alfa elevará su rostro y le mirase sin entender sus palabras, por lo que el líder no dudo en hablar "Por más que deseé darte lo que me pediste recuerda que hay dos cosas en medio"

"Eso mismo, está la cosa de que todos los jóvenes de la manada tienen derecho a participar en un combate por ver al ganador" el humo que soltaba Young era molesto, mas el rubio no se atrevía a decir nada.

"Exacto, cualquier lobo joven sin omega puede pelear por la mano de Taehyung y ser el alfa lider" corroboró el alfa al dejarse caer de nuevo en la silla.

Aunque Jungkook deseara negarse ellos tenía razón, no era justo que sólo lo colocarán a él por su lugar o preferencia, incluso si era el único que se atrevía a pedir la mano de Kim Taehyung, el hijo del alfa, futuro omega de la manada.

"Sabemos que quieres a Tae desde que te tiro al río" contó el tío del menor mientras reía de aquella anécdota.

Pues un pequeño y lindo Kim Taehyung de seis años había empujado a Jungkook de unos siete años por haberle querido robar un beso.

"En realidad fue desde la fiesta de cumpleaños de sus cuatro años, él me golpeó con su pelota favorita, la que tiene Sakura por juguete" corrigió el menor al alfa más grande a su lado con una sonrisa estúpida en su rostro.

Jamás olvidaría ese golpe y la manera en que Taehyung le había dado una paleta para que dejará de llorar. Desde pequeño el omega había sido diferente y eso enamoraba cada segundo al lobo, tal vez por eso se encargaba de poder acosarle de niños hasta que llegaron a la preparatoria, donde Taehyung le alejaba cada vez más y más, hasta que el alfa decidió dejarle para que no le odiara, más de lo que ya creía.

"Ves, por eso decimos que es injusto, lo sabemos, no hay alfa en la aldea que ame tanto a Taehyung como tú" la queja en la voz de Kim Seung Joon frustrada le obligó a actuar.

"No se preocupen por eso, ¿No soy el alfa más fuerte de la manada?" Preguntó divetido el joven con una sonrisa al colocarse por fin de pie porque las rodillas le mataban por el frío.

"Eso es verdad" alabó Young tomando un nuevo puro de la caja de su hermano, él cual le dio la caja dejando una sonrisa genuina en ambos.

"Les ganare a todos, de eso no tengan duda"

"Bueno de eso viene el segundo tema que me tiene más preocupado" aviso Kim al ver a su hermano buscar en los cajones de su escritorio, pues el lobo se había colocado de pie en busca de algo de comida "Todos debemos como es Taehyung"

"No por nada le llaman la fiera indomable"

"La situación es que si deseas tener a Taehyung, no sólo debe dar buena pelea, sino también debes mostrarle que no eres ese alfa ñoño de su infancia de ambos"

El hecho de que su líder le dijera ñoño tal vez había dolido un poco más de lo esperado, pero tenía razón, su imagen que tenía Taehyung de él tal vez era la de su amigo/acosador de su infancia y no era la de un Dios inalcanzable que tenían algunos omegas del pueblo, tal vez porque ellos no sabían que de niño mojaba la cama y se comía la tierra de las plantas de su madre, además de que no sabían que le tenía miedo a las arañas y quien le salvaba era Taehyung.

"Lo entiendo"

"No, no lo entiendes, Kook" las palabras que había dicho el tío del omega antes de meterse en la boca un gran puñado de gomitas de figuras de insectos le habían dado ganas de vomitar.

"Sabes que mi única cría es el omega más problemático de la manada, ni siquiera yo mismo puedo hacer que me obedecza, así que debes hacer algo antes de que te deje como un... ¿cómo les dicen?" Preguntó a su hermano a su lado.

"Un mamilon" contesto al escupir las gomitas en su mano para contestar. Jungkook casi vomitaba.

"No eso no"

"Mamelon"

"Tampoco es ese"

"¿Melón?"

"Creo que tienes retraso mental" gruño exasperado el alfa lider la ver su hermano meterse en la boca lo que había sacado de gomitas.

"Y tú un mal agradecido" atacó al meter de golpe las gomitas llenas de babas a su boca.

"Dirán mandilón" aclaró el lobo con una sonrisa nerviosa en sus labios y dejando ver que estaba sin ganas de vomitar tras ver esa escena un tanto asquerosa.

"Exactamente" dijo el líder con una mueca en sus labios al ver que el joven no parecía estar preocupado.

"El hecho de que Taehyung sea el omega más mal educado y grosero de la manada tal vez te deje libre el camino, pero una vez que tengan que vivir juntos las cosas no van a ser igual en su hogar"

"Yo me encargaré de eso" dio por terminada la discusión, bueno él no, más bien el azote de la puerta de madera contra la pared dejando caer varios libros al suelo.

Los tres alfas llevaron su vista a la imagen del omega de cabellos negros como su madre, sus ojos verdes eran tallados por sus dos manos dejando ver como si fuera un niño mientras que llevaba un pijama que por una muy loca y extraña razón era un short y una camisa holgada que llegaba a la misma altura que el short corto.

"Que vayan a sentarse a comer, animales" la voz adormilada y apagada en el omega le decía que el menor tenía aún por costumbre dormir por las tardes hasta la hora de la comida.

"Esos modales, Taehyung" regaño el padre del joven haciendo que jalara de sus manos a sus costados para que que pudiera ver a su anciano padre. Sin embargo en vez de ver a sólo dos ancianos decrépitos también estaba el mismo chico a quien le había robado su primer beso y Kim le había regalado el suyo.

Jungkook estaba seguro de que había visto una clase de shock en el omega, pero eso se fue abajo una vez que le vio rodar los ojos y girar para irse dejando azotar de nuevo la pobre puerta con fuerza y con ello a más libros en el suelo.

"Tienes mucho trabajo por delante" anuncio el tío al ser el primero en caminar lejos del rubio para salir por el mismo lugar que el omega.

Sin duda Jungkook iba a necesitar acabar cuanto antes de pagar la casa que tenía preparada, desde que le dejaron trabajar sus padres, Jungkook había ahorrado para comprar aquel hogar que siempre pensó para Taehyung y él.

No estaba seguro si era obsesión o amor verdadero, sólo sabía que si el omega de tes algo morena y ojos verdes no era suyo, no tenía motivos para vivir.

"Escuche que vas a ser el retador en el combate para el lugar de alfa de la manada" comentó la madre de Taehyung una vez que dejaba servido en el plato de su cría algunos trozos de pollo agridulce que tanto amaba.

"No hablemos de eso ahora" pidió el señor Kim al ver la mueca en el rostro de Taehyung.

Él sabía su lugar, su destino y su deber, sin embargo eso no significaba que él iba a ser el mejor omega de la manada, porque aunque fuera Jungkook su alfa, no se la iba a dejar tan fácil. Porque para un Kim Taehyung que odiaba el hecho de tener que ser débil, delicado y sumiso, odiaba la idea de hacerle la vida imposible a alguien que no fuera Jungkook y aún más si se trataba de que tendrían que compartir su cama.

Pero aunque fuese él, el ganador, no dejaría sus ideales de lado y le haría la vida imposible a Jeon Jungkook.

"Aún sigo diciendo que puedes retirarte de esto" Hoon no era de mucha ayuda al colocarse a su lado en el medio de la manada, las casas estaban en los alrededores rodeando y dejando en él centro un gran espacio donde se llevaban a acabo los duelos justo frente de la casa del alfa lider de la manada.

"Ya deja de joder, Hoon" Jungkook limpiaba la herida de su labio mientras que veía al hijo del alfa en las escaleras de su casa, su mirada impasible frente de él, sus manos tenían rodeadas sus piernas dobladas.

Jungkook se había tenido que enfrentar a tres alfas, al menos en lo que dictaba la tradición familiar de los Kim habían sido muchos, pues era la primera vez que se hacía un duelo por la mano del hijo del alfa lider. Sin embargo aunque él estaba feliz de haberle ganado la batalla a los tres lobos, no sabía sí Taehyung lo estaba o no, pues al igual que siempre mostraba una faceta de él más fría de lo que estaba acostumbrado.

"¡Felicidades, Jungkook!" Alabó el padre del omega que ya se había colocado de pie.

Por unos leves segundos, en los cuales Taehyung limpiaba la nieve de su trasero y su cabello, Jungkook creyó que bajaría y le regalaría un beso como hacía dos semanas atrás, sin embargo el omega se había colocado de pie para girarse por sobre sus talones, subir los dos escalones, caminar cinco pasos y empujar la puerta de su hogar.

"Sí, ese es mi hijo" dijo Seung al poder palmear la espalda del joven en modo de apoyo "Dan, ve y prepara a Taehyung"

El padre del omega había dicho a su pareja para que fuera a alistar a su cría, sin embargo la omega de la manada no parecía estar convencida de sus palabras.

"¿Ahora?, Creí que Jungkook se llevaría a Taehyung después de la presentación frente al pueblo" anuncio la mujer al acercarse a ambos lobos.

Los demás alfas y omegas del pueblo alababan a Jungkook y su pelea, la manera de resistir ante los alfas más fuertes de aquella manada así como había leves murmullos y quejas de parte de los omegas del lugar por las acciones del omega de cabellos negros.

"Es tan esperado de él"

"No entiendo porque Jungkook quizo a un omega de esa clase"

"Taehyung sólo será una carga para él"

Esos y más comentarios llegaban a sus oídos y no sólo de él, sino de su padre del omega y del amigo del rubio.

"Creo que es mejor que entres a casa" le comentó por lo bajo el lobo al más joven al alejarse sin despedirse como siempre de los lobos que formaban parte de su manada, dejando a más de uno extrañado de su actitud.

"Odio que hablen así de mi bebé" Gruño la omega mayor al entrar a su hogar dejando de mala manera sus zapatos en la entrada y caminando a la cocina en busca de una bolsa de hielo para el pómulo derecho del rubio que iniciaba a ponerse cada vez más hinchado.

"Lo sé, Dan, pero tampoco puedo meterme demasiado en ello" anuncio el mayor al dejarse caer en su sofá.

La alegría se había ido de picada de ellos al escuchar las horribles palabras de los demás lobos para su hijo.

"Me encargaré de eso una vez que Taehyung y yo nos unamos en lazo" advirtió el alfa al ver a los mayores que no dudaron el regalarle una sonrisa e incluso la señora le entregaba ya la bolsa de hielos para si rostro.

"Muchas gracias por eso, Jungkook" la mujer le había regalado una leve sonrisa "Iré a preparar a Taehyung una vez que me expliquen por qué se llevan a mi cría antes del tiempo de apareamiento"

Seung ya esperaba esa pregunta por parte de su esposa, por lo que no fue difícil señalar a Jungkook y luego al techo, justo donde estaba la zona de la cocina, pues arriba estaba el cuarto del omega.

"Ambos sabemos que si Taehyung sigue con esa actitud no va a tener ni el respeto de su alfa ni el de la manada" comentó el hombre mayor dejando que el rubio continuara.

"Estuve pensado que tratar de convivir antes del lazo con Taehyung es buena idea, una vez que deje de seguirlo en la preparatoria perdí su cercanía y con eso el conocerle bien"

"Por eso mismo Jungkook desea llevarlo a la casa que él mismo construyó"

La sorpresa en la cara de la omega le dijo al rubio que no esperaba que fuera tan responsable en relación a su lazo y a su comodidad de su omega.

"No deseaba llevar a Tae a mi casa con mis padres, quiero que él mismo haga su propio hogar a su gusto"

Sin duda esa clase de ideas hacían a Jungkook un alfa especial, no todos los alfas se encargaban de tener un hogar antes del lazo, preparar todo para su pareja y también desear su comodidad completa, normalmente los alfas llevaban a los omegas a casa de sus padres, los enlazaban y poco a poco trabajaban en su hogar.

Tal vez por esa clase se acciones era que Taehyung había sentido algo de cariño por Jungkook, o tal vez era admiración, no estaba seguro aún de su sentir, lo único que sabía era que odiaba la idea de que los demás omegas fueran siempre unos pesados con él desde pequeño, tal vez era arrogancia, orgullo y altivez como decían, pero sabía que esos idiotas le trataban así por envidia, dado que él no tenía ni pelos en la boca ni nada de pudor en hacer lo que le placiera, a los demás les molestaba aquello.

"Que se jodan" gruño colocándose de pie del último escalón de las escaleras de su habitación.

Ni loco se dejaría llevar por el idiota del rubio, jamás iba a dejarse marcar por él y mucho menos iba a ser un omega digno de ser un idiota dominado y obediente, él haría a Jungkook obedecer.

"Tienes un gran chichon en la cabeza, pareciera que estas listo para poder evolucionar con dos cabezas" Hoo estaba entretenido tocando la cabeza de Jungkook buscando como bajarle esa gran bola en su cabeza.

Tras que la mamá de Taehyung subiera por él y el omega buscará escapar por la ventana, se lo había tenido que llevar casi a rastras y lo peor de todo eso no había sido el hecho de que le iba pegando en la espalda, sino que le había tirado su bota de piel en la cabeza todo porque le había adentrado a su alcoba, todo eso en menos de una hora.

"Ya deja de molestar y dame esa bolsa de hielos" se quejó el alfa rubio jalando la bolsa de hielos de la mano de su amigo a su cabeza.

"Amigo, sabes que te quiero como a un hermano, pero creo que es buena idea que hagas algo más que tratarlo como la princesa que lo crees en tu cabeza" le aviso el de cabellos rojos al señalar detrás de ellos la casa que había construido para el omega y él.

"No quiero que piense que lo creo igual que los demás"

"Ya sé muy bien que no lo es, pero al menos tratar de obligarlo a que te escuche, ya sea por las malas o por las buenas es una opción" advirtió el alfa más bajo al estirar sus piernas y luego impulsarse hacía adelante para estar de pie.

"No entiendo muy bien tu idea" Kook pudo ver como los ojos de Hoo rodaban por la frustración.

"Habló de que a menos que desees ser toda la vida la presa de tu omega no hagas nada, sin embargo sé que no te gusta esa idea por lo que mi mejor consejo es que tu mismo lo hagas sentirse la presa y no la fiera detrás de ti" el pelirojo levantó su mano en despedida para caminar rumbo al camino de piedras que Jungkook había diseñado para que Taehyung no tuviera que llenarse de tierra como tanto odiaba.

Si bien Jungkook había perdido tal vez cinco o seis años de la vida del moreno, sabía que muchas de sus costumbres no habían cambiado desde pequeños, como el hecho de odiar pararse temprano, tener que ensuciar sus manos y pies, sus ropas debían ir siempre bien limpias y combinadas, así como odiaba el olor a cebolla y la misma verdura.

"Sentirse que él es la presa" murmuró al jalar de la puerta de su ahora hogar en busca de entender lo que su mejor amigo decía.

Si bien la idea estaba en su mente no estaba seguro de cómo llevarla a acabo, una cosa significaba que debía de poder hacerle sentir asustado, pero esa no era su idea y Jungkook jamás se atrevería a dañar de esa manera a Taehyung, sin embargo influir miedo era una buena opción para alguien como el menor.

Taehyung se caracterizaba por su manera de poder actuar rudo, temerario y fuerte, sabía bien que el omega le tenía más miedo a una araña que a un arma.

"Tal vez funcione" se trató de convencer a él y a su lobo una vez que optó por preparar la cena, porque era claro que el menor no iba a salir de la habitación, así que si él no salía, Jungkook no llevaría comida a ningún lado que no fuera la mesa de la casa.

Taehyung estaba acostumbrado a que todos a pesar de cualquier cosa que hiciera le consintieran sin buscar un reproche o regaño, así que su primer plan era, hacer que el príncipe se diera cuenta de que ya no tenía ni castillo, ni sirvientes, ni título real que le ayudaran.

Su estómago dolía desde la mañana que había llegado y eso había sido ayer, el día estaba por acabar de nuevo y tenía tanta hambre que se había atrevido a comerse la planta junto a la cama matrimonial de la habitación.

En realidad Jeon se había esmerado en lo que había hecho, la decoración era de su color favorito, además de llenarla por completo en lo necesario para una vida en aquel lugar y por supuesto una de sus cosas favoritas, una gran tele para secarse el cerebro.

"Tengo hambre" lloriqueo al rodar por la cama, se movía de la cabecera hasta el final donde iban los pies, girando hasta que en una de esas el omega no calculo bien y terminó en el suelo con un gran golpe y estruendo.

Mi cabeza lloró el omega en su mente una vez que se acarició la frente, se había pegado en ella contra el suelo de madera.

"Nada me sale bien" lloriqueo al sentarse en el suelo terminar por golpear su estómago que le pedía cada vez más comida y que le suplicaba que dejará de lado su orgullo y bajará a comer algo.

Algo pareció que llegó a los oídos del alfa porque una vez que miró al rededor se dio cuenta de que en realidad el olor pizza llegó a sus fosas nasales y estaba listo para salir corriendo por la puerta para poder ir por ese gran manjar, sin embargo sentía que moriría por el primer paso que diera, así que optó por arrastrarse hasta la puerta y de ahí por las escaleras, las cuales bajo uno por uno aún arrastras jalando de su cuerpo al frente, era un milagro que no rodará por los escalones.

"Veo que por fin decides bajar" cuando Taehyung ya estaba en el último escalón listo para jalarse de él a la cocina se encontró con la imagen de Jungkook con un plato en mano y una rebanada de pizza que sólo era de queso... oh, eso era ser malo.

"Tengo hambre, dame de comer" le ordenó el omega al alfa, el cual le ignoro y siguió su camino hasta la sala dejándose caer en el sofá frente de la pantalla.

"Ve y sirvete, la pizza está en la mesa, busca los trastes en los estantes"

La indiferencia con la que Jungkook le había hablado le había dolido, pero también molestado.

"¡¿Cómo te atreves a tratarme así?!" Gritó el omega recuperando sus energías de golpe, tanto como para colocarse de pie y poder hacer que señalase al alfa "Tú me trajiste aquí en primer lugar, pudiste negarte como todos los demás y..."

"Exacto, pude negarme al ser el líder como todos los demás o hablar con tu padre y hacer que me diera a otro omega, sabes bien que él también está cansado de tu actitud" le explicó el alfa ante lo obvio.

"No está fastidiado" murmuró el omega al estar cohibido de lo que pasaba, más al ver que Jungkook -El alfa que jamás le había tratado mal, pese a lo mal que le trataba-.

"Tienes razón, no está tan fastidiado, pero si has colmado la paciencia de muchos, entiendo tu punto al defenderte de los demás, pero jamás he hecho algo para que me gane tan mal trato de tu parte y aún así estoy a tu lado pidiéndole a tu padre que me dejase poder convivir un poco más contigo para poder conocerte como antes"

El rubio ya se estaba colocando de pie con la comida en su plato y caminando hasta poder hacer que se posara frente del moreno.

"En cambio te tengo con muy mal humor y ni siquiera tienes ningún interés ni en mí como tu alfa ni en nada, así que si tanto te molesta no dudare en regresarte a tu casa y obtener a un omega que este interesado en hacer una vida a mi lado sin peleas o malos tratos de por medio"

Taehyung había sido testigo de la manera en que el lobo se había girado para caminar hasta los escalones y poder subirse, hasta que escuchó el azote de una puerta en la planta de arriba pudo sentir más que un leve temblor y dolor en su estómago, tal vez, sólo tal vez había fastidiado todo por su inseguridad y mal humor.

En realidad Taehyung había creído que todo era un juego, pero se dio cuenta de que no cuando Jungkook se la pasaba en la misma habitación de la casa que él y le ignoraba por completo haciendo que el omega sintiera culpabilidad, miedo y dolor.

"Hay comida en la nevera" dijo como aviso el alfa al caminar lejos del chico ignorando su presencia. Si fuera el mismo Jungkook de antes le hubiera preguntado ya cómo estaba y le haría sentir cómodo diese lo que fuese para ello.

Si recordaba su infancia al lado de Jungkook se daba cuenta de que en realidad el lobo jamás había sido malo con él, en cambio el oemga le golpeaba al sentirse apenado de tantas emociones y sentirse acosado, pues Jungkook se encargaba de tratar de acarciarle la cara, las manos y hasta una vez su cabello y eso lo odiaba, porque la mayor parte de niños le decían que era feo, que era malo y que era un estorbo caprichoso, así que se alejaba de todos e incluso trataba de alejarse del rubio.

Sabía que se lo había ganado, estaba seguro de eso al ver que durante esa semana el alfa salía de la casa para ver a la manada y le hablaba de manera animada a los omegas del lugar, mientras que él era ignorado como una peste, ¿Así se había sentido Jungkook todos esos años por su culpa?

"Jungkook" le llamó al ver que el alfa se encargaba de poder ver la aldea desde el balcón de su habitación que se suponía era la de ellos, pero desde la leve pelea ahora sólo era del omega, Jungkook sólo le pedía permiso para entrar al ver como iba todo en la aldea, pues el padre de Taehyung preparaba todo para cuando el rubio tomase el lugar como alfa.

Aunque no estaba seguro de que él fuera a ser el omega de la aldea, sabía que un lazo no funciona entre una pareja de lobos jamás daría frutos y además de eso sabía que Jungkook tal vez ya no deseaba tener a alguien tan problemático como él por pareja, porque el rubio se había ganado el respeto de todos con facilidad.

"¿Mm?" Fue lo único que obtuvo por repuesta del alfa que observaba al grupo de alfas y omegas que preparaban todo para la gran noche de apareamiento, la cual estaba casi a la vuelta de la esquina y él apenas hablaba con el rubio, lo que le daba cierto miedo.

Jungkook en cualquier momento podría decirle que guardase sus cosas y que era tiempo de llevarle a su casa para que él tomase de una vez a una buena omega obediente.

"No...nada" contestó al darse la vuelta y salir de la habitación sin saber exactamente qué era lo que pensaba o lo qué debía de hacer.

Sólo tenía una noche, que era esa misma antes para hacer algo, pues la noche siguiente sería su celo de él y de Jungkook, sabía bien qué hacer para sí mismo, mas sabía que para un alfa era más complicado y aunque había pastillas para eso, Jeon debía tomar a alguien para poder ser el líder y no estar solo.

Su labio era mordido con fuerza a la vez que trataba de no tener más ideas erróneas de lo que pasaría con él, en realidad no le importaba ser desechado por la manada, incluso por su familia, sin embargo la idea de ver a Jungkook con otro omega le daba ganas de vomitar y no lo dudo en hacer una vez que corrió por el pasillo hasta el baño, por donde por accidente hizo que una mesa cayera al suelo al tropezar con ella, dejando en trizas el florero que le adornaba.

Lo limpiaria luego, en ese momento le interesaba más poder dejar salir todo lo que su garganta y estómago le pedían sacar, ni siquiera había comido nada ese día por la falta de apetito, estaba molesto con la situación y no se engañaria más. Jungkook le gustaba de muchas maneras, tantas que se avergonzaba de algunas.

"Es asqueroso" gruño/gimió de asco una vez que elevó su rostro.

El vómito había bajado un poco, sin embargo el dolor de los nervios, enojo y miedo eran cada vez más y sobre todo cada vez que pensaba en Jeon con otro omega. Odiaba ese ardor en el estómago y en el pecho, odiaba todo en relación a ver a Jungkook lejos de él y en realidad no sabía qué hacer para recuperar esos malditos años perdidos.

"¿Taehyung?" Preguntó el alfa al ver el desastre en medio del pasillo y al final, en el baño, al menor con sus manos aferradas a sus rodillas mientras que dejaba el último jalón de vómito salir de su garganta.

"No vengas" le pidió en súplica una vez que notaba que pasaba la pierna por alto de la mesa y los vidrios para poder caminar hasta él "¡No vengas!"

Gritó de nuevo parando el caminar el alfa, Taehyung se regaño al ver su propia reacción estúpida.

"Lo siento, es que es asqueroso esto y no quiero que me veas así" suplico al jalar con su mano un trozo de papel limpiando con el sus labios y dejándolo caer a la taza una vez que acabo, el moreno jalo de la palanca para luego colocarse de pie y poder jalarse al fregadero.

"¿Sucede algo malo?" Dijo el joven rubio al poder acercarse con pasó cauteloso a donde estaba el omega al cual ya estaba lavando su boca.

"No es nada, sólo he tenido el estómago revuelto estos días" le dijo el omega al alejarse del baño, pudo ver el caos que había hecho su descuido al correr por el pasillo "Lo siento" murmuró con la mirada baja apenado por sus acciones "Me tropecé con la mesa, me interesaba más no ensuciar la alfombra de vómito que ver qué tiraba o no"

Taehyung evitaba ver a los ojos a Jungkook y éste no tardó en darse cuenta de eso, porque sus manos se tocaban entre ellas y jalaban de sus mangas de su suéter tratando de poder evitar que un grito agresivo por sus nervios se hiciera presente.

"No importaba si la ensuciabas, yo podía limpiar, Tae. Pudiste cortarte los pies con los vidrios."aquellas palabras habían salido en un tono preocupado, algo que le hizo a Taehyung desear llorar y aún más al elevar su rostro y ver como el alfa le miraba como antes, con preocupación y cariño, por lo que tal vez la bomba de emociones no tardó en explotar en él.

Taehyung ya estaba hecho un mar de sonidos lastimeros, sus lágrimas corrían por sus ojos y en realidad el omega parecía más un bebé que perdió su dulce que un omega dolido y desconsolado, porque sus leves hipidos y jadeos de llanto eran más fuertes de los que debían, sus manos tallaban sus ojos en busca de limpiar cada vez más las nuevas lágrimas y sobre todo sus mocos.

"¿T-tae?" Preguntó el alfa al ver semejante escena del omega frente de él, no sabía qué carajos hacer y sólo sabía que en realidad había hecho algo mal y no sabía qué.

Jungkook no había obtenido ni una respuesta por parte del omega, sólo más lloriqueos y la imagen del moreno correr a la habitación que había preparado para las visitas donde él se quedaba mientras que el menor estaba en su supuesto cuarto de matrimonio.

"¿Qué dije?" la pregunta vino a él una vez que se dio cuenta de que en realidad no entendía nada.

A Taehyung le dolía la cabeza de tanto llorar, se había golpeado su pie al intentar tirarse en la cama y ahora no sólo dolía su pecho sino también su pie y sus ojos de tanto llorar como bebé, no se había dado cuenta de cuándo se había dormido, sólo sabía que en realidad estaba pasando un mal rato y no tenía a nadie porque él mismo había alejado a todos de él.

Estaba molesto de lo que pasaba a su alrededor y además de eso estaba asustado de que ese día le dijera Jungkook que se fuera y decidiera tomar a otro omega, tal vez por eso estaba ya en la bañera hasta la barbilla, con agua caliente y algunas esencias, sin embargo el llanto no le abandonaba y él tampoco hacía nada para que le dejase de una buena vez.

"Taehyung" la voz gruesa del lobo rubio al otro lado de la puerta saco de sus casillas al moreno, que no tardó nada en aferrarse más a las cobijas de la cama y además de eso buscar hacerse bolita en la cama.

"No estoy" se le escapó estúpidamente de sus labios a la vez que miraba sus manos sobre las cobijas jalando bien de ellas hasta que logró por fin hacer que se aferraba cada vez más dejando sus rodillas apoyadas sobre ellas.

"Claro que estás, voy a entrar"

El menor no tuvo tiempo de negar o hacer nada cuando el sonido de la puerta se escuchaba una vez y seguido el seguro de que estaba de nuevo en su lugar, sus manos se aferraron a las cobijas en busca de que nada y mucho menos el alfa, le alejasen las cobijas de encima.

"Dime que estás bien o será mejor que te lleve a..." Jungkook estaba ya frente de la cama con sus manos sobre su nuca rascando con desespero, pues en realidad estaba algo asustado de lo que había hecho su maldito plan con ayuda de su amigo, que seguramente dejaría de serlo pronto.

"¡No!, ¡no!, ¡no quiero!" Gritó el omega al quitarse de su cuerpo la tela de las cobijas, no deseaba irse a su casa.

Jungkook sólo sintió el golpe en la cabeza y espalda, la madera del suelo había sonado y en realidad su cuerpo estaba más pesado por el hecho de tener al omega encima suyo, jamás -y cuando dice jamás, era en realidad literal- había estado cerca de Taehyung como en ese momento, el menor jamás le deseaba cerca, por alguna extraña razón se ganaba un mal golpe cada vez que intentaba poder acercarse a él de alguna forma.

"Lo siento, perdón por todo"

Taehyung estaba de nuevo llorando y apenas en esos momentos en donde el mismo omega se sentaba sobre su regazo dejando que sus manos se apoyasen en su pecho del rubio mientras que no dejaba de llorar le hicieron ser consciente de lo que pasaba y la posición comprometedora.

"Taehyung, no te entiendo" atino a decir el alfa al ver por primera vez de aquella manera tan rota al menor, se sentía tan culpable de eso que deseaba golpear a su amigo y a si mismo por semejante plan de mierda que había llevado.

"Y-yo lamento haberte tratado tan mal estos años" sollozo el menor al poder ver al alfa, había una clase de mar de lágrimas cayendo de sus ojos del menor.

"Tae, eso no importa ahora, lo que importa es que estés bien, por eso mismo creo que es buena idea llevarte al hospital" opinó el alfa al ver que había una clase de shock en Taehyung.

"¿H-hospital?" Dijo el menor con lágrimas en los ojos aún, incluso se talló la nariz al sentir que sus mocos se escapaban y no deseaba dejar que Jungkook los viera.

"Estuviste vomitando, no has comido como antes y además de eso te veo delgado y pálido, no me gusta eso" comentó el mayor al irse a si mismo elevando para poder acariciar la cabeza del omega el cual estaba calmando los leves sollozos de su boca.

"¿No me llevarás a casa?" Preguntó en vez de hablar de su salud.

"A no ser que me lo pidas no te llevaré a casa, Tae" Jungkook relamió sus labios ante la atenta mirada cristalina de Taehyung "Quiero decir que yo realmente he deseado desde que te conocí ser tu alfa, esa idea no se ha alejado de mí y estoy seguro de que no lo hará a menos que tú me pidas que la aleje"

El moreno permaneció en silencio, tratando de analizar más las palabras del rubio, su cerebro parecía no creerse del todo sus palabras.

"¿Entonces por qué actuaste así?" Preguntó con cierto tono de reproche tallando sus ojos, se sentía tan pequeño con el alfa después de ver que él podía ser la persona más fría si se lo proponía.

"Quería saber si me querías o no" tino a decir, evitando decir algo como deseaba respeto de mi omega, porque en realidad las cosas parecían ir bien como para arruinarlo todo.

"Yo..." Taehyung evitaba la mirada ya del alfa "Yo siempre te he querido" confesó con vergüenza en sus mejillas "Siempre lo hice, sólo que no sabía, sólo sabía que cada vez que te acercabas me ponía tan nervioso que por eso te golpeaba como fuera posible"

Jungkook asintió entendiendo el lugar del omega, al parecer Taehyung no era para nada bueno en entenderse y ni mucho menos en controlarse.

"Me di cuenta de eso una vez que hablaste de tener otro omega me molestaba tanto que me daba tanto asco hasta vomitar" aceptó por fin el omega "No tenía apetito ante esa idea y tampoco sabía cómo arreglar las cosas sin que me odiaras"

Jungkook juraría que escuchó el sonido de su corazón partirse ante las palabras del omega sobre de él.

"Mierda, no, Taehyung. Jamás haría algo así" Jungkook elevó por fin su cuerpo hacía arriba para poder sentarse y estar frente a frente con el omega que no dejaba de tallarse la nariz y los ojos, parecía Rodolfo el reno, tampoco le diría algo así cuando en realidad sabía que lloraria más por su comentario.

"¿Entonces?"

"Sólo fueron palabras estúpidas por mi enojo, quería estar a tu lado por una maldita vez sin que las cosas fueran tan complicadas"

"Pero estamos juntos, tú vas a ser mi alfa y yo tu omega"

Jungkook suplicaba a cualquier deidad que el moreno no sintiera su falo que iniciaba a despertar. Ambos estaba sensibles, por la situación Taehyung lo estaba más y de una manera negativa, sin embargo el rubio estaba más ocupado en pensar en cosas pervetidas con el omega que en otra cosa más.

"¿Verdad?" La pregunta con el tono de voz temerosa en el omega le hizo saber que las cosas no estaban del todo bien en su seguridad por ello.

"Claro que sí, Taehyung" aclaró el mayor al llevar sus manos a la altura de su mejillas del omega y limpiar sus lágrimas de ellas, su rostro estaba rojo por el llanto y en realidad Jungkook de sentía culpable de creer que era muy lindo aquello.

"¿De verdad?"

"Tae, no esperé veinte años para poder estar a tu lado y retirarme ahora" contestó Jungkook jalando del pequeño cuerpo del omega más a su pecho.

"Kook" le llamó escondiendo su rostro en su cuello.

"Dime" contestó al acariciar la cabeza del omega.

"¿Vamos a tener sexo? Porque siento tu bulto en mi trasero y la noche ya va cayendo" comentó sin pudor el omega.

Jungkook amaba esa actitud rebelde de Taehyung, jamás cambiaría el hecho de que era su pequeña fiera indomable para él.

"Escuché que Jungkook ha estado ayudando mucho en la nueva construcción del preescolar" comentó una omega que estaba en medio del jardín de infantes donde los niños jugaban.

"La noche de apareamiento ya ha pasado hace dos semanas y no he visto a Taehyung por ningún lado" comentó otra a su lado.

"Taehyung siempre ha sido así de arrogante, además de que siempre trata mal a Jungkook"

"Toda su vida lo ha hecho"

"En algún punto va ha perder el cariño de él y otro omega le quitará el lugar"

"Eso sin duda"

Entre más comentarios había más hablaban las omegas en medio del jardín, algunas de las jóvenes recién enlazadas estaban con otras que ya lo estaba hacía años y otras que aún estaban solteras.

Todas estaban tan distraídas en hablar y hablar que no se dieron cuenta de que el alfa de la manada estaba ya caminando con su pareja entre sus manos directo a ellas.

"Buenos días" saludo el alfa de manera cortés mientras que hacía a Taehyung aferrarse más a él. Sus ojos verde del menor siendo tallados al estar tan agotado tras la larga semanas de apareamiento con el rubio.

Las omegas gritaron un leve chillido de susto que hizo a Taehyung abrir sus ojos y girar su rostro a donde se encontraban ellas, que era su costado derecho.

"Coño, callense o harán que mi cabeza duela más que mi culo" gruño de mal humor buscado aferrarse al cuello de su alfa aspirando el aroma a menta que venía de él.

Las mujeres se quedaron en silencio ante semejantes acciones, no era raro que Kim Taehyung las tratará mal, lo raro en eso era que estaba actuando de manera melosa con el alfa, él cual, apenas miraban, tenía una marca en su cuello al igual que la nuca del omega moreno entre sus brazos.

"Me disculpo por mi omega, las dos semanas pasadas fueron pesadas para él y..."

"Pesado tú" se quejó el omega al ver al rubio y luego a las omegas, ninguna del grupo que estaba en ese lugar le caía bien, bueno a excepción de una sola, asi que usaría algo de lo que su alfa había dicho para hacerles pasar un mal rato a esas zorras odiosas.

"Taehyung" le llamó el alfa, sin embargo el menor le sonrió malicioso y luego hizo un gran puchero hacía las tipas para parecer inocente -cuándo en realidad no lo era para nada-.

"Pesado no es que te rompan el culo con una polla más grande que un pepino grueso, Jungkook" chillo el omega al llevar sus manos para tratar de sobar su espalda baja, había mirado de nuevo a Jungkook con una cara maliciosa.

"Me duele tanto el cuerpo"acuso al ver a las tipas que le miraban con sus ojos bien abiertos "Jungkook parece un pan de Dios, pero en la cama es una bestia y más en celo, tengo marcas en todo el cuerpo, hasta en lugares que no sabía se podían marcar y..."

"Bien, creo que eso no les importa a ellas, Tae" corto el alfa con una sonrisa incómoda y divertida "A lo que veníamos no era a contarle nuestra noches de sexo, más bien a saber si han visto a la doctora Lee"

Las omega se atrevieron a tragar, sólo una de ellas que era la mayor habló por fin, divertida de lo que pasaba, pues era la única a la cual el moreno no le trataba mal y viceversa.

"La doctora Lee ya iba para la casa del ex lider" Aviso la mujer "Me alegra ver que están juntos por fin"

"Gracias, Jisoo" contestó Taehyung con una sonrisa genuina.

"Adiós y gracias por la información" se despidió Jungkook al seguir su camino derecho por el costado de las demás omegas.

"No puedo creer que lo hicieras" Jungkook ya estaba a más de tres metros de las omegas cuando hablaba con el moreno.

"El hecho de que me dejará domar por ti no significa que cambiaré con los demás"

"Touché"

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