TAYLOR

–Enserio, sigo sin entender qué tienen ellos que no tenga yo –dice Dylan observando a los chicos de la banda

Una vez que finalizaron el concierto, dijeron que estarían firmando su primer y único disco. Así que Ashley, Emma y Diane están haciendo la fila para sacarse una foto con ellos, mientras que nosotros las estamos esperando

Me pregunto si esto es lo que quisiera hacer Jesse.

Para nadie en la familia es un secreto que mi hermano menor adora la música, siempre fue demasiado inquieto y buscaba cosas nuevas que hacer, por esto nuestro padre lo llevaba a diferentes talleres de deporte y arte. Hasta que aprendió a tocar la guitarra, el teclado y finalmente consiguió aprender a tocar la batería.

Eso volvía loca a mamá, porque lo primero que hizo fue tomar sus ollas y hacer ruido con ellas. Aun lo recuerdo.

No me cuesta imaginar a mi hermano en una vida así, él siempre ha sido mucho más extrovertido que yo y le suele agradar a casi todo el mundo.

Como este es su último año, debería de escoger una carrera, aunque no ha dicho nada al respecto.

En cuanto a ese tema se refiere, es bastante reservado

–Ellos tienen una buena voz y tú aunque te emborraches no conseguirás una igual –responde Ben divertido

–Al menos yo tengo suerte con las chicas, amigo mío. ¿Has tenido algún avance con Diane? –pregunta Dylan

–Puede que no lo parezca, pero sí hemos progresado. Ahora nos sentamos juntos cuando nos topamos en el metro. Conversamos hasta que ella se debe bajar para llegar hasta su casa. Logré que en vez de que lea sus libros, hable conmigo. Yo lo llamaría un progreso gigante –responde Ben con una enorme sonrisa

–Felicidades –digo palmeándole la espalda

–Lo sé, ya estoy grande. Me siento muy orgulloso de mí mismo. Sabía que mis intuiciones no se equivocaban cuando llamó mi atención...

–Me alegra que te esté yendo tan bien Ben. Ahora cuéntanos Taylor, ¿qué pasa entre la princesa y tú? –pregunta Dylan divertido

–Nada. Ya les dije que fingíamos salir, eso es todo

–Yo creo que eso de "fingir" es una estúpida excusa. Te conozco desde hace dos años y nunca te has comportado así con alguna chica

–Aquí le doy la razón a Dylan. Si yo puedo admitir mi interés en Diane, ¿por qué no puedes admitir tu interés en Emma?

–Porque no tengo interés en ella, simplemente la estoy ayudando. Es cierto que me agrada, pero no hay nada más

Si de algo estoy seguro es de que Emma hace algo más que agradarme, pero no estoy preparado para decírselo a los chicos, tampoco le pondré un nombre a lo que sea que sea esto.

Simplemente me dejo llevar con Emma. Me siento a gusto con ella y me parece atractiva, divertida y agradable en todos los sentidos de la palabra, pero nada más que eso.

–Es muy difícil creer eso, viéndolos "fingir" –dice Dylan haciendo entrecomillas en el aire

Decido mantenerme en silencio porque en parte tiene razón y no quiero que parezca que estoy tan a la defensiva si vuelvo a responder.

Recuerdo que por aquí me pareció ver a Zack, aunque no puedo estar cien por ciento seguro de que en verdad era él, aun así veo la fila en la que está Emma y al verla junto a sus amigas, me tranquilizo un poco.

Esta espera será larga.

(...)

Una vez que llego a casa, veo que Jesse está mirando una película junto a sus amigos.

–Hola Taylor –me saluda él – ¿dónde estabas?

–Jesse... ya sabes andaba por ahí. Haciendo cosas...

Mi respuesta atrae de inmediato la atención de Jesse y de los chicos, entre ellos como no, Connor.

Quién no debe de tener idea de que acabo de dejar a Emma en su casa.

Admito que la actitud de Emma al volver, era extraña. No sabría cómo definirlo, pero noté un cambio en ella, por supuesto que en cuanto le pregunté, aseguró que todo estaba bien, pero no le creo.

–Oh, espero que esas "cosas" te hayan salido bien. Nuestros padres te dejaron cena en el microondas, en caso de que quieras algo

–Bien, gracias por avisarme –en cuanto puedo salgo de ahí y subo a mi habitación.

No quiero estar en el mismo lugar que Connor y mucho menos después de que me observara como lo acaba de hacer.

¿Acaso Emma le dijo algo?

(...)

Estoy recluido en mi habitación, intentando estudiar, pero alguien golpea la puerta y creo que me hago una idea de quién puede ser.

Connor.

Si tuviera que apostar por quien es, sin duda diría que es el chico rubio que tiene el mismo apellido que Emma.

Lo conozco desde hace años y aun así saber qué está afuera de mi habitación me pone de los nervios y es menor que yo. Así que decido acabar con esto lo más rápido posible.

Me levanto y voy a abrirle.

–Hola Taylor –me saluda él

–Connor, ¿hay algo en lo que te pueda ayudar? –pregunto observándolo

–Sí, hay algo. ¿Puedo pasar? Creo que sería más cómodo si lo hablamos en privado.

Yo asiento con la cabeza y lo deja pasar a mi habitación. Y aunque es estúpido, me siento algo intimidado por él, puede ser menor que yo, pero se ejercita mucho más y tiene unos brazos enormes.

Jesse no tiene esa contextura y la expresión divertida y risueña que suele tener Connor casi siempre, no está. Luce serio y eso sólo me dice que ya sabe lo que ocurre con Emma.

–Te escucho, ¿en qué puedo ayudarte?

–Seré directo, no te preocupes... Sé que ocurre algo entre Emma y tú

Bueno, sí que fue directo.

–Yo...

–No estoy aquí para cuestionarte ni nada de eso, aunque debo admitir que sí que fue una sorpresa cuando me enteré. Sólo quiero saber que no la lastimarás.

–Yo no quiero hacerle daño

–Verás, sé que la mayor parte del tiempo soy demasiado egocéntrico y pareciera que no me importa nadie, pero eso es mentira. Mi familia es muy importante para mí y ahí también van incluidos los chicos. Josephine es mi niña, mi pequeña y por raro que parezca escucharlo, adoro a Emma. Es mi hermana mayor, su opinión siempre la tengo en cuenta y quiero que ella esté bien. Cómo sabrás su última relación acabó muy mal y no lo sé porque sea chismoso o algo por el estilo.

– ¿Ella te dijo...algo? –pregunto algo sorprendido, porque Emma no ha mencionado que Connor sepa lo de Zack

Admito que es raro conversar de todo esto con él, pero me alegra saber que es más listo de lo que uno podría pensar en un inicio.

–Emma no nos dijo nada, pero una vez Zack apareció por nuestra casa fingiendo que seguían juntos cuando ya no lo estaban y sé que discutieron por algo. La cosa es que la discusión fue tan grave que él la dejó llorando. Esto no te lo digo por andar de chismoso, pero no quiero ver a mi hermana sufrir por idiotas que no saben valorarla.

– ¿Está es tu manera de decirme que la trate bien o de lo contrario me golpearás?

Connor me mira y se ríe

–Me causa gracia que pienses que te puedo golpear. Te conozco desde hace años Taylor, no tengo intenciones de golpearte. Aunque no lo parezca, no me va eso de irme a golpes con los demás.

– ¿Entonces...?

–Sólo quiero que trates a Emma como lo merece. No quiero verla triste, ni frustrada. Aunque tampoco me apetece verla con marcas en el cuello –lo último me toma por sorpresa y siento algo de vergüenza –Así que para la próxima, contrólate un poquito más, ¿sí? O al menos avísale para que ella pueda cubrirlo, a nuestro padre tampoco le agradó verla así. Es su princesa mayor, casi le da un infarto cuando la vió

– ¿Cómo sabes que soy yo el que está con Emma?

–Bueno, primero porque desde que llegué aquí no lo has negado –dice sonriéndome –y en segundo lugar, porque escuché tu voz cuando le fui avisar a Emma que baje a comer. Admito que es error mío por escuchar tras la puerta, pero quería estar seguro de que no era Zack.

– ¿Me escuchaste?

–Por favor, no hablaban precisamente en voz baja. Me pareció que era tu voz y ahora lo comprobé. Soy bastante listo, ¿no crees?

– ¿Se lo has dicho a los chicos?

–No, no se lo he dicho a Jesse. Ni a nadie en verdad. Emma verá con quién se involucra, pero aun así quería que tú estuvieras al tanto...

– ¿Y si se lo digo a Emma?

–Puedes decirle si quieres, pero ella lo comprenderá. A fin de cuentas sólo vine a conversar contigo. Estoy preocupado por mi hermana, como el buen hermano que soy. No tengo ninguna intención de meterme en lo que sea que ustedes hacen, sólo quiero que ella sea feliz.

Viéndolo desde ese punto de vista, tiene razón. No ha hecho nada malo y después de ver a su hermana llorando, es lógico que se preocupe. Aun así debo admitir que subestimé a Connor.

No tenía idea de que él lo sospechara desde esa vez que estuve en su habitación.

–No pienso hacerle daño a Emma, así que puedes irte tranquilo –respondo finalmente

–Me alegra que nos entendamos tan bien futuro cuñado, ¿o ya eres mi cuñado? ¿En qué fase van? –pregunta divertido

Sí, este se parece al Connor de siempre.

–No pienso contestarte a eso, si ya no tienes nada más que decirme, puedes...

–Muy bien, me ha quedado claro... nos vemos luego cuñado. Debo ir a terminar de ver la película con los chicos abajo, pero debía de tener esta conversación contigo, ya sabes la familia es lo primero ¿no?

Y dicho esto, se va de mi habitación y todo vuelve a quedarse en silencio como si él nunca hubiera estado aquí.

¿Nosotros cuñados? Jamás.