Después de unos minutos todos bajaron al invernadero en donde se serviría la comida.

-¿Le he dicho que amo su casa?-Habló Sirius.

-Gracias-Contestaron los 3 hermanos.

Una vez todos estuvieron en su lugar la comida fue servida por los 3 elfos de la casa, todos agradecieron y empezaron a comer entre risas y platicas.

-Sirius ¿Porqué no nos tocas algo en el piano?-Pidió el Señor Lorenzo una vez todos terminaron.

-Claro ¿Qué les gustaría?-

-Lo que quieras Cariño-Contestó Anne.

Sirius tomó asiento y empezó a tocar una hermosa melodía que el mismo había compuesto estando aburrido en su casa.

El Black conectó su mirada con la de su amiga y empezó a tocar por inercia ya que todo el estaba perdido en la mirada y sonrisa que ella le regalaba en ese momento, la misma Alessandra también se perdió en la mirada color plata de su amigo y este le sonrió de una manera extraña.

Los padres y hermanos de la niña observaban todo, las dos mujeres con una sonrisa y los dos hombres con mirada de asesinos.

Amelia fue por la cámara en el salón, se colocó junto a su madre y tomó una foto justo en el momento que ambos se sonreían aún más, su madre tomó la varita y replicó la foto cuatro veces.

Una para el álbum que iba a armar sobre esos dos y que presentaría el día que se casen, todo esto en su mente claro. Dos serían para cada uno de los niños de la foto y la última para Fede que se la quedaría para molestar a su hermana.

Una vez Sirius terminó de tocar ambos voltearon a donde estaba el resto de la familia de rubios, los dos se pusieron más rojos que cabello de Weasley.

-Les saqué una foto ¿Quieren ver? -

Alessa se acercó a su hermana y tomó la foto sonrió y dijo que iba a guardarla en su cuarto.

-¿Te llevas la mía por favor?- Preguntó Sirius

Alessandra asintió y salió como si hubiera visto a Voldemort entrar en el invernadero y no planeaba volver pronto.

-¿Quieren ir a patinar? Vamos Sirius, cariño, te traeré un par de patines de Fede-

La señora Di Lessio salió de la sala acompañada de su hija menor y el joven Black, este miró hacia atrás y se encontró con Fede y su padre con miradas de asesinos ambos levantaron tu dedo índice y lo pasaron por sus cuellos, Sirius tragó duro y se puso como meta personal no acercarse a ninguno.

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Pasaron dos días y el día de la cena de navidad había llegado, Alessandra estaba haciendo un mural en su habitación con fotos de sus amigos y ella, aunque también hizo pequeños murales en las paredes de su cuarto con fotos individuales de cada uno de sus amigos.

Como ya tenía uno con Remus solo le agregó más fotos, creó uno con James y otro con Sirius y se decidió a tomarse más fotos con Peter para poder crear uno de él.
Su madre apareció en la habitación justo cuando ella terminaba el mural de James.

-Que lindo mi amor- Alagó.

-Gracias madre ¿Qué es eso? -

Alessandra señaló una bolsa que traía su madre.

-Son dos marcos, se adaptan a cualquier foto y se pone de un color según lo que sientas por la persona de la foto, pensé que a ti y a Sirius les gustaría para su fotografía-

-Gracias madre-Alessa tomó el marcó y sonrió a su madre.

Después de que su madre se fue la niña abrió una de las cajas sacó el marcó y puso la foto, ante ella el marco se adaptó a la foto y se fue haciendo de una tonalidad caoba.
Leyó las instrucciones:

-Amarillo: Odio
-Verde: No está claro
-Blanco: Amor
-Marrón: Amistad.

Sonrió, puso la foto en su mesa de noche y salió para ir a la habitación que ahora tenía el nombre "Sirius Orión Black" entró cuando escuchó un "Pase" y encontró a Sirius luchando con su corbata, se rió un poco y luego fue hasta el.

-Dame eso, ya lo hago yo Orión-

En unos segundos la cortaba ya estaba hecha y Sirius sonrió apenado.

-Toma, mamá nos compró esto, son para las fotos-

Salió de la habitación para arreglarse, Sirius colocó la foto y vio como se ajustó al tamaño de la foto después vio como se volvía de un tono blanco leyó las instrucciones y se puso rojo.

No podía ser esa niña era su mejor amiga, tal vez le había tomado cariño de hermana, pero nada más. Alejó esa idea de su cabeza, puso la foto en la mesita de noche y salió rumbo a la cena.

Sé encontró con los señores Di Lessio y Amy esperando a que bajarán los mellizos que pronto hicieron su entrada ya que los Lupin llegarían pronto.

Sirius estaba bobo viendo a la niña que sonreía mientras hablaba con su hermano. Amy alejó un poco a Sirius de sus padres y habló en un susurro.

-Te gusta mi hermana rulos-Aseguró divertida.

El niño abrió los ojos como platos y negó varias veces con la cabeza.

-No-

-Sí-

-No-

-Que sí-

-Que no-

-Sirius vas a perder esta discusión- Advirtió Amelia.

En ese momento llegaron los Lupin por la chimenea, los cuatro niños mayores se fueron a sentar todos juntos de inmediato, pero Sirius estaba blanco cuál papel.

-¿Estas bien Sir? Te ves pálido- Habló Alessandra cuando la cena estuvo servida.

-Estoy bien Alessa-Aseguró viendo a Amy sonreír frente a él.

Toda la cena se llevó acabo entre risas y juegos, claro que después Anne Di Lessio se dedicó a contarle a Hope Lupin lo que había pasado hace unos días en el piano y en cómo pensaba ella que Sirius y su hija iban a acabar juntos.

-Estoy haciendo un álbum de fotos que presentaré el día que se casen- Decía.

-¿No estas pensando muy a futuro Annie?-

Hope reía de las ocurrencias de su mejor amiga.

-Para nada Hopie, recuerda que así inicié yo con Enzo y miranos ahora-

-Pobre niña a de tener paciencia para aguantar a esa suegra- Murmuró la señora Lupin.

El señor Di Lessio estaba quejándose con su amigo de Sirius y su creciente cercanía a su hija mientras este agradecía mentalmente el tener un hijo pues si ya era celoso con su esposa no se imaginaba con una bebé.

Pasadas las 11 los Lupin se fueron y todos se dirigieron a sus habitaciones. A la mañana siguiente Sirius se despertó porque sus dos amigos le habían saltado encima.

-¡ES NAVIDAD ORIÓN LEVÁNTATE!-Gritaba Alessa.

-5 minutos más rubia-

-No nos hagas traer a Amy a levantarte- Amenazó Fede.

De un salto Sirius ya estaba en pie con cara de dormido, ya había experimentado el que Amy lo levantará y no era bonito.

Todos bajaron corriendo a la sala donde estaba el enorme árbol de navidad, Amy se les unió en el camino.

-¡REGALOS!-Gritaron los mellizos.

Ambos padres ya los esperaban a todos con una taza de chocolate para cada uno.

Sirius se sorprendió al ver el montón de regalos que llevaban su nombre, la mayoría siendo de sus amigos y de los padres de estos.

Alessandra recibió por parte de Remus un libro muggle llamado Romeo y Julieta, de parte de su madre un equipo de mantenimiento de escobas, su padre le regaló la escoba más nueva y esto hizo que la niña empezará a bailar y gritar por todo el salón.

James le había enviado un relicario con una foto de ambos en la que el le besaba la mejilla una y otra vez con las iniciales "JP y AD", Sirius le regaló un suéter con la inspiración "Black" ella rió de esto, pero aún así la usaría y Peter le envió dulces.

Fede había recibido lo mismo por parte de sus padres mientras que sus amigos y compañeros de cuarto le enviaron una montaña de dulces que rápidamente fue robada por Alessa y Sirius.

James le envió un collar de bludger, ya que el juega como bateador, Remus un artefacto muggle que hacía ruidos y Sirius un marco con una foto de los 6 amigos.

Sirius recibió dulces por parte de Peter y Andromeda, un collar con un bate por parte de James ya que el también juega de bateador, por parte de los señores Di Lessio recibió un equipo de mantenimiento de escobas y por parte de su madre una carta que decía lo poco que lo quiere y que es la deshora de la familia.

Abrió el último paquete y había una pulsera con un dije largo y rectangular que unía ambos lados leyó la inscripción "Soy de la rubia" también estaban su nombre por detrás "Sirius" Alessandra veía la reacción de su amigo, este sonrió de oreja a oreja.

-Sí tú puede yo también- Dijo esta cuando Sirius la vio.

-James se va a poner celoso- Decía Sirius feliz presumiendo su nueva pulsera a la hermana de su amiga.

-James tiene una igual-

-No se vale-Gruñó Sirius.

Para sorpresa de todos en la tarde llegó la lechuza de Lily Evans con un paquete. Eran unos broches muy lindos color azul cielos que le envió a Alessandra por navidad.

-Parece que tuvimos la misma idea, yo le envié unos rojos- Contó la rubia a su familia y amigo.

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Al día siguiente James y Remus llegaron a la casa de los Di Lessio todos se pusieron a hablar de sus regalos de Navidad y James y Sirius discutían por quien era el favorito de  Alessandra hasta que Fede habló.

-Yo siempre voy a ser su mellizos, literalmente nos creamos juntos, yo siempre voy a ser su favorito-

Ahora el se unió a la discusión también, la rubia se acercó a Remus y dijo en un susurro.

-Tu eres mi favorito-

Remus sonrió y la abrazó.
La señora Potter se acercó a la chica que ulizaba el suéter que James le regaló.

-Hola cariño- Saludó

-Hola señora Potter-

-¿Podemos hablar un minuto?-

Ella asintió y se alejó rumbo al jardín con la señora mientras que su hijo y sus amigos se miraban entre sí para saber que pasaba.

-Cuénteme Señora Potter-

-Dime Euphemia cariño-

-Jamás, sería de mala educación-

-Entonces dime mami Euphe como me dicen Sirius y Remus-

Alessandra lo consideró antes de sonreír y asentir.

-Me parece-

-Bien quería darte algo, yo ya lo llevé por mucho tiempo y pensé que te quedaría mejor a ti-

Sacó un collar con un diamante en el medio era de color rojo intenso.

-Señora... He digo mami Euphe no puedo aceptarlo, es muy costoso y es suyo-

-Yo lo llevé por mucho tiempo, es hora de que alguien más lo cuide-

Se lo puso y este se tornó de un azul cielo tan claro como los ojos de la chica.

-Es hermoso, muchas gracias-

Abrazó a la mujer con una sonrisa mientras ella  asentía.

-Ese es el collar de la familia Potter, verás durante generaciones los Potter lo han guardado- Comenzó Euphemia- Es tradición que la mejor amiga del heredero o la persona en la que más confía lo guarde hasta el momento de que llegue la próxima señora Potter- Siguió sonriendo- Le pregunté a James hace unos días quien era la persona en la que más confiaba y el dijo que después de mi, en ti- Alessa sonrió inmensamente- Así que creo que ya llegó su próxima guardiana-

-Gracias por confiar en mi. ¿A usted se lo dio la mejor amiga del señor Potter?-

Euphemia rió a carcajadas por unos segundos.

-Yo era la mejor amiga de Fleamont-

Alessandra abrió los ojos y se sonrojó rápidamente.

-Yo...-

-Tranquila, sé que eso no va a pasar en este caso, James ya me lo dijo y ya me acostumbré a que no siempre obtengo lo que quiero- Alessa sonrió al mujer con diversión- Solo cuando llegue la hora de dárselo a alguien por favor asegúrate de que no sea la equivocada-

-Eso se lo prometo, si alguien le hace daño yo misma la mato a golpes-

-Así me gusta-

Ambas volvieron a la casa y Alessandra fue corriendo al lado de James.

-Gracias Jamie-

-¿Yo que hice? -

-Por confiar en mi-Dijo ella señalando su nuevo collar.

James enrojecido salió corriendo hacia su padre, pues el conocía otra historia de eso collar.

☆゜・。。・゜゜・。。・゜★

Después de eso pasaron las dos semanas de vacaciones y todos volvieron a la escuela para continuar el curso.

-Lily espérame- Llamó la rubia a su nueva amiga.

Ambas, Lily y Alessandra, llevaban los broches que la otra le regaló.

-Hasta que te encuentro, vamos- Saludó la Evans.

-Ven hoy te sientas con nosotros-Dijo la chica rubia llevándola con sus amigos.

-Lindo collar- Alagó la pelirroja.

-Gracias, pienso que te quería bien- Contestó la rubia con una sonrisa maligna.

Ahora que conocía la maldición Potter y era la guardiana del collar se propuso una meta para si misma "James y Lily Potter" 

En cambio Lily se había propuesto otra cosa "Sirius y Alessandra Black".

Nota:

Buenas amigos ¿Cómo seguimos?

Para los que leyeron un Fénix de fuego ¿Notan como la amistad de Amy y Sirius no cambia?

Lily y Alessandra me dan ternura. ❤️🥺

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