Capítulo 17

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Pov. Jungkook

—Aquí Destructor y Caramelo Rosa, por redes sociales no hay avistamientos del objetivo —emitió firme desde su hogar— ¿nos copian?

—Aquí Zanahorias Arcoíris —respondí desde la puerta del restaurante— los copio. El centro de origen sin señales del objetivo.

—Pollito Amarillito y —aclaró su garganta como renegando por lo que iba a decir— Botella de Tequila, ¿me copian?

—Botella y yo te copiamos —respondió Jimin, que estaba a unas cuadras pegando carteles— llevo pegando ciento noventa y siete copias, pero no hay rastros.

—Aquí Tigrecito Morado, en las calles más cercanas tampoco ha sido visto.

Amo Yeontan ¿en dónde se metió? Es demasiado escandaloso como para dejar que cualquiera toque su costosa correa, así que se soltó intencionalmente, pero ¿por qué?

—Aquí Sprite, llevo tres horas buscando sin descanso por internet, —dijo exhausto— Tigrecito Morado, pido permiso para descansar, señor.

Taehyung lo pensó unos momentos y luego de soltar un suspiro pesado, habló.

—Permiso otorgado, todos aborten la misión hasta nuevo aviso, —accedió— Zanahorias Arcoíris tú no te muevas, voy para allá.

—Copiado —respondí de inmediato y sin dejar de mirar a todos lados.

No pasó mucho antes de ver a Taehyung que se acercaba a paso rápido hacia mí y quien se lanzó a abrazarme lo más pronto que pudo.

—No nos puede estar pasando esto otra vez, Kook —soltó de manera entrecortada, aferrándose más a mi cuerpo y hundiendo su rostro bajo mi cuello— antes tuvimos suerte y ahora... ahora quizá se perdió para siempre.

Sentí claramente una gotita mojando mi cuello y siendo aplastada por una de las mejillas de Taehyung.

—No volveremos a ver a Yeontan.

Negué varias veces y comencé a acariciar su espalda para darle el apoyo que necesitaba, sin embargo su voz al borde del llanto no me dejaba tranquilo ni siquiera a mí.

—Taehyung, —llamé logrando que él despegara su rostro de mi cuello y me mirara con su semblante todo triste— nuestro Yeontan va a aparecer, lo vamos a encontrar. Por favor no digas lo contrario o me sentiré realmente mal, después de todo quien lo perdió —aclaré mi garganta debido a la culpa que sentí en ese momento— fui yo.

—Tú no tienes la culpa, no te sientas mal, me podría haber pasado hasta a mí —replicó tratando de consolarme— y si le llega a pasar algo a Yeontan —esas palabras fueron acompañadas por otras dos lágrimas que bajaron de repente por su rostro y también por el nudo que se le había formado en la garganta— entonces al último que culparía sería a ti.

No pudo evitar desviar su mirada luego de lo que dijo ya que otro par de lágrimas siguieron a las anteriores, comenzando así todo un desfile de gotas resbalando por su cara.

Y a pesar de sus palabras de hace rato, el sentimiento de culpa dentro de mí seguía creciendo.

Al no saber qué otra cosa decir o hacer para lograr calmar el llanto de Taehyung, opté por la muestra de afecto que esperaba que él necesitara tanto como yo en una situación así.

Una de mis manos se posó sobre su nuca y ejerció una pequeña presión para acercar su rostro al mío hasta que nuestras frentes hicieron contacto y nuestras narices se toparon. Esperé un poco y al notar que no tenía intenciones de alejarse y en su lugar, su vista bajó a mis labios, seguí.

Ladeé ligeramente mi cabeza, sin darme cuenta ya estaba regalándole el beso que ambos esperábamos.

No duró tanto y a la vez fue infinito, a menos eso sentimos las mariposas en mi estómago y yo.

—No va a pasarle nada malo al Amo Yeontan, ¿entiendes?

Él asintió de inmediato, me dirigió una sonrisa antes de soltarme. Observé como limpiaba las lágrimas que había derramado con la manga de su camisa.

Luego bajé mi vista por un instante y sentí una luz caer sobre mis ojos, me extrañé y bajé mi rostro hasta dar con lo que no me esperaba encontrar. La placa del Amo Yeontan.

Agradecí que se hubiera quedado atascada y ejercí una pequeña presión para lograr sacarla y mostrársela a Taehyung.

—Esto —llamé su atención a lo que él me giró a ver— esto es del Amo Yeontan.

Taehyung abrió los ojos en grande para luego tomar la placa entre sus manos y confirmar que era el costoso accesorio que hace poco le había obsequiado a su mascota justamente para que si se llegara a perder, la gente pueda llamar.

—Las personas deben pensar que es un perro callejero.

Mi comentario lo hizo pensar un poco.

—¿Y a dónde llevan a los perros callejeros? —cuestionó dándose cuenta de la respuesta obvia.

No esperé mucho antes de tomar mi teléfono y buscar el contacto que nos serviría.

—Hyunwoo —hablé con preocupación— por favor, necesito que me ayudes a buscar todas las terminales de refugio posibles. 

Buscamos por tantas horas, fue un milagro que a las once y cuarenta de la noche las luces encendidas de un refugio descuidado fuera divisado por Hyunwoo, también fue un milagro que el pequeño perro que tanto estábamos buscando se encontrara bien en una de las jaulas del lugar.

[...]

Tres semanas, tres semanas sin regresar con Taehyung.

Tan solo almorzamos y pasamos ratos agradables de conversación, pero nada más, ni siquiera un beso corto o un abrazo largo. Tampoco indicios de querer volver conmigo.

Lo único que puedo hacer para sentirlo cerca en las noches es observar fotografías suyas en mi teléfono pues hasta ahora no quiso compartir cama conmigo. Insiste en dormir en la cama del Amo Yeontan para darme mi espacio.

El lado bueno es que viene más temprano, aunque no sé lo que ocurrió hoy...

—¿Extraña a Taehyung, Amo Yeontan? —cuestioné triste, con la vista fija en mi teléfono— ¿Extraña a papá?

El perro lloriqueó bajito y posó su hocico sobre mi pecho sin dejar de mirar la foto.

—Yo también lo extraño.

Ambos nos quedamos observando la imagen hasta que el brillo de la pantalla fue lo único que iluminaba la habitación, dejando mi rostro y el del perro ser visibles.

Yo ya comenzaba a cerrar mis ojos, cuando la vibración del teléfono me hizo despertar de golpe, soltando el teléfono que cayó sobre mi nariz.

—¡Auch! —renegué cubriendo mi nariz con mis manos, cerrando fuertemente mis ojos.

Cuando el dolor bajó, tomé el teléfono para ver de quién se trataba.

Taehyung~ 💜

Quiero que nos veamos en la biblioteca de estudios. En quince minutos llega un auto blanco por ti.
11:07 pm

Trae a Tannie contigo.
11:08 pm

Solté el teléfono nuevamente por algún lado de la cama y giré a ver al Amo Yeontan con los ojos bien abiertos y el corazón a mil por hora.

—Taehyung quiere verme —solté a lo que él perro movió la cola.

Volví a tomar el teléfono y leer el mensaje para comprobar que fuera verdad. Me levanté de la cama al notar que sí.

Corrí al baño y me lavé la cara con todas las cremas que tenía a mi alcance, humecté mis labios y acomode un poco mi cabello. Salí del baño y de Amo Yeontan ya me esperaba con mi abrigo entre sus dientes así que me lo coloqué rápidamente.
Al ser gigante, logré colocar al perro dentro para evitar que sintiera frío.

Guardé mi teléfono en uno de los bolsillos y salí de la habitación, baje gracias a uno de los elevadores y en poco tiempo ya estaba fuera del hotel. Fue cuestión de minutos de divisar un auto blanco estacionarse.

—Jeon Jungkook? —el conductor cuestionó bajando la ventana— and Kim Yeontan?

Asentí e ingrese al auto, esperé nervioso todo el camino, jugando con el Amo Yeontan y pensando en todo lo que podría surgir a raíz de la conversación.
Lo único que esperaba es que no fueran malas noticias.

—Mr. Jeon, we arrived five minutes ago... (Joven Jeon, llegamos hace como cinco minutos) —insistió el taxista sacándome de mis pensamientos para que me bajara de su auto.

Me disculpé y bajé del vehículo quedando frente al establecimiento. Bajé mi vista al perro que me miraba atento y decidí acercarme al portón, el vigilante al conocerme me abrió al verme en las rejas.
Saludé para luego encaminarme a la biblioteca como había pedido Taehyung.

Ingresé y no había ni un alma, tan solo él. Recargado sobre la mesa de estudios, al verme se incorporó.

—¿Taehyung? —hablé mientras me acercaba temeroso— ¿Qué querías decirme?



[...]

Disculpen si el lunes no actualicé, estoy preparándome para la universidad y no pensé que requeriría todo mi tiempo. Espero me comprendan <3

También quería decirles que la obra ya está llegando a su final, pues como ya lo había mencionado antes, esta sería una temporada bastante corta con respecto a la primera.

¡Tengan linda noche!

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