Midoriya y sus compañeros se fueron en dirección a un terreno baldío para su combate.
Gabriel y Joaquín sus oponentes habían llamado a un tercer integrante, Edmundo Ramírez el Speed Demon (nombre de héroe dado por su madre la cual es americana).
Mientras tanto la multitud se veía agitada, querían ver pelear a Edmundo, el era considerado el más fuerte de esa escuela aunque muchos creían que también lo era a nivel nacional.

Edmundo Ramírez
Cruz: Propagación.
Es una habilidad mixta resultado de la fusión del poder de su padre con el de su madre, gracias a su padre posee una velocidad de hasta Mach 5 y gracias a su madre es capaz de
[Datos censurados por orden del general Garza, a petición de su protegido, el a ahora coronel Damián Ramírez Delgado]

- Hola - dijo con gentileza - ¿Son los extranjeros que insultaron a mis compañeros? - dijo Edmundo a los tres jóvenes recién llegados.

- Eso es mentira ¡Ellos nos provocaron! - contesto Bakugou haciendo explosiones mientras se acercaba.

- Mentiroso, estábamos en nuestras cosas cuando estos chismosos se metieron - contesto Gabriel sacando un Bat de su bolsa al mismo tiempo Joaquín sonreía, el pensaba que con el Speed Demon serían invencibles .

- Eso no importa ahora, antes de iniciar cualquier cosa ¿Me pueden dar sus nombres? - dijo Edmundo calmado, los tres héroes extranjeros se sintieron extrañados de la calma de ese chico, así que le hicieron caso, una vez dijeron sus nombres Edmundo obtuvo una mirada vacía al oír eso, sus ojos parecían el más profundo de los abismos.
Antes de decir otra cosa sus dos compañeros habían salido volando para estrellarse contra árboles cercanos.

- Pendejos - dijo frustrado mientras se paraba frente a la multitud con el simple hecho de pasar su pulgar a través de su garganta hizo que los presentes temblarán, acto seguido toda la multitud corrió asustada ellos querían ver una paliza, no recibirla.

Rápidamente el volvió junto a los extranjeros que estaban confundidos por sus acciones.
- Disculpen a estos bárbaros, ellos no sabían que son invitados para el torneo - dijo de forma respetuosa - Puedo darles un recorrido por la instalación o guiarlos por la ciudad si eso les complace - agrego con educación el joven mientras Bakugou furioso se le acercaba.

- ¡Oye, yo iba a derrotar a esos tipos y a ti también, era una pelea pactada para ponerlos en su lugar por lo de Miguel! - dijo haciendo explosiones que iluminaban el claro rostro de Edmundo.

- Una pelea ahora es innecesaria, si quiere puedo agendar una de exhibición en el torneo de mañana - dijo Edmundo que realmente quería hacer eso, la intención del torneo era demostrar magnificencia del país a los turistas y fuerza a los oficiales extranjeros, una pelea callejera no era nada. Por lo tanto aunque Bakugou lo irritaba debía esperar para partirle su madre.

- Yo decido cuando una pelea es necesaria - contesto el chico explosivo antes de ser detenido por sus amigos.
- Cálmate Kacchan - dijo Deku mientras lo sostenía y Todoroki contaba todo el incidente a Edmundo.

- Mi padre se encargará de resolver todo el asunto, no se preocupen - contesto señalando que castigaría al maestro corrupto y a sus compañeros.

- Es bueno ver a alguien que si quiere hacer las cosas bien - dijo Deku a sus amigos mientras esperaban a qué Edmundo terminará de hablar por teléfono con su padre del asunto.

- Todo arreglado - Edmundo se veía calmado, en eso Midoriya se le acercó y con cierta gracia infantil preguntó - ¿Cuál es tu poder? - el mexicano dudo un rato pero al final decidió mostrarlo.

- ¿Ves ese manzano de allá? - dijo a los tres chicos que querían saber que tenía eso que ver con todo.

- ¿Quieres que te dé una manzana muy rápido? - antes de que Midoriya pudiera contestar soplo un fuerte viento e instantes después Edmundo reapareció - ¿Quieres verme hacerlo otra vez? - Edmundo colocó la manzana en la cabeza de Midoriya.

Los tres jóvenes están impresionados "es más veloz que Iida" pensaron mientras el Edmundo los atendía.

Luego de encontrar a sus compañeros faltantes, Midoriya y su grupo recibió un pequeño recorrido de parte de Edmundo.

- Créanme cuando les digo que esto fue un, ¿Cómo se dice? ............ Caso aislado, si eso - dijo mientras les invitaba unos tacos, los jóvenes agradecieron y comieron en paz, salvó por Bakugou que seguía berreando pidiendo pelea.

- Tu amigo es muy enérgico - dijo sarcásticamente a Midoriya que se rascó la cabeza avergonzado.
- No le hagas caso en el fondo es buena persona - contesto el chico.
- Te creo que es bueno en el fondo - una sonrisa se dibujo en el rostro de Edmundo - Pero del mar - este empezó a reír mientras que su acompañante se puso algo serio.

- Ya uno ni puede hacer bromas - dijo Edmundo decepcionado, su conversación fue interrumpida por Iida.

- Ramírez, se que dijiste que tú padre arreglaría todo, pero aún así me parece muy grave el simple hecho de que esto ocurrió, me he puesto a investigar y se que esto es más común de lo que parece, los índices de corrupción son ....... - el de lentes movía sus brazos cómo robot mientras recitaba los problemas del país, que si bien se redujeron comparados a los tiempos de guerra, el país estaba lejos de ser perfecto, sus palabras molestaron a Edmundo.

El buscaba evitar que ellos se preocuparán de cosas como esas, su padre decía que se debía hacer lo posible por dar una buena imagen para atraer inversiones y esas cosas que lo aburrían. Pero ahora todo era inútil, sin embargo había algo positivo de ello, podía dejar de hacerse el bueno.

- Se llama corrupción, un problema contra el que luchamos desde hace generaciones, aquí mucha gente vive bajo la ley de Herodes - al nombrar la Ley de Herodes los presentes se le quedaron viendo al no saber que era eso.

- La Ley de Herodes "O chingas o te jodes" - contesto molesto - A diferencia de su pueblo, mi gente, sobretodo la que ostenta el poder, tiene la tendencia a ponerse a si misma por sobre todas las cosas - Edmundo explicaba porque la lucha del bien y el mal era un mito en México, la verdadera elección del mexicano es la de cuál es el mal menor.

El estaba algo feliz por contar esto ya que le gustaba romper la burbuja de aquellos que consideraba "niños de papi", que diferencia de él que es hijo de un militar no tienen ni idea de lo que es la realidad (según el, claro está).

- Pero ¿Tú eres una buena persona? ¿O me equivoco? - dijo Uraraka al pensar que eso del mal menor tenía cierta implicación en la moral de Edmundo.

- No lo sé, en mi opinión todo aquel que se autodenomina "buena persona", en realidad no lo es.

Prefiero que mis actos hablen por mí, cachetona - contesto al tiempo que le guiñaba un ojo a la joven, poniéndola nerviosa.

- Es como si tu tierra fuera gobernada por villanos - contesto Iida a Edmundo, este joven estaba sumamente escandalizado, un mundo así era un imposible para él.
Edmundo como si se estuviera burlando empezó a picar la frente de Iida para luego hablar.

- Perdón por romper tu burbuja pero todos somos villanos o héroes dependiendo de quién cuente la historia - dijo escandalizando a todos.

- Eso no es cierto, hay cosas que las veas cómo las veas son correctas o incorrectas - contesto Deku fiel a sus creencias.
- Midoriya tiene razón hay actos inexcusables - Todoroki pensó en lo hecho por su padre que no tenía perdón.

- No tiene caso discutir con niños inmaduros, mejor sigan creyendo que el bueno y el malo siempre usarán letreros que te digan quién es quién - Edmundo provocó la ira de Bakugou que se paro de su asiento para ir a soltarle un puñetazo a la cara.

- ¿Te parezco inmaduro? Yo he peleado con villanos reales, ojos de aceituna - declaró soltando el puñetazo mientras que Edmundo lo detuvo fácilmente.

- A parte de inmaduro con déficit de atención ¿No viste lo rápido que soy? - dijo Edmundo con desdén.

- Desgraciado - Bakugou y Edmundo fueron detenidos de empezar a pelear por el dueño del puesto de tacos, este los amenazó con llamar a la policía si no se calmaban, eso los obligó a calmarse al menos por ahora, sus acompañantes se llevaron las manos a la cara por la vergüenza que estaban pasando.

Luego de terminar de comer lo más rápido que pudieron todos los jóvenes salieron del puesto, la cuenta fue pagada por Edmundo como disculpa, y aunque no todos estaban de acuerdo con su forma de pensar, el fue bastante agradable, pero antes de dejarlos por su cuenta se acercó a Bakugou después de todo le parecía el más desesperante.

- Tu y yo arreglaremos nuestras diferencias después, el resto, por favor disfruté su estadía - antes de que Bakugou le contesté le tapo la boca con un limón que había guardado, luego de burlarse de él, se despidió con un ademán educado antes de desaparecer en un parpadeo del sitio.

- ¡Voy a hacer pedazos a ese tipo! - grito Bakugou mientras hacía una pataleta, sus compañeros lo vieron algo apenados pero estaban acostumbrados a esto. Sin embargo la gran pregunta es ¿Podrá vencer a este tipo?

Un par de días después el torneo daría inicio, gente de varias partes del país llegaba para ver el espectáculo, los más fuertes estaban presentes y sería simplemente impresionante lo que aquí ocurriría.

Los miembros de la clase A estaban en un palco propio, como los que tenían las otras delegaciones internacionales, admirando las bellas decoraciones con motivos prehispánicos.

Serpientes emplumadas, grabados de piedra, una imagen de Huitzilopochtli en el centro mientras esté degollaba a sus enemigos, jaguares que escupían fuego adornando las entradas y salidas.

También habían detalles de la época de independencia y la revolución, marcando su carácter más romántico con un montón de Adelitas y Valentinas en ferrocarriles, ignorando por completo el carácter bárbaro del conflicto.

Otras decoraciones muñecos con vestimentas de los héroes de la patria puestos entre las filas de los espectadores, también habían músicos y bailarines que servían de aperitivo antes del gran evento.

- Realmente este sitio es muy vivo - Todoroki consumía un pozole mientras veía el espectáculo, era algo muy distinto a lo que estaba acostumbrado.

- ¡Yo no puedo esperar para ver a Águila Real, el héroe número 1 de los técnicos! ¿Sabías que tienen dos rankings distintos? - dijo Midoriya emocionado por estar apuntó de ver este evento tan interesante.

De un momento a otro las luces de todo el estadio se apagaron, y una corriente de viento cruzo todo el lugar, esta corriente formó un pequeño tornado en el centro que se hacía más y más grande.

Una vez que esté tornado llego al tamaño de una casa este termino deshaciéndose desde adentro por una corriente contraria.
Ahora que las luces fueron nuevamente encendidas se veía a Ehécatl posando junto a Águila Real, aquellos que eran llamados los más fuertes, se aparecieron para dar inicio a un discurso a todo el país.

- Me complace ver a toda esta gente reunida - inició Ehécatl con voz calmada mientras su gente lo aclamaba, se veía a una gran cantidad de niños y adultos con máscaras rojas iguales a la suya que lo aclamaban.

- Después de todo que estén aquí reunidos significa, que tienen fe en nosotros - continúo el héroe de viento mientras se elevaba ligeramente del suelo, para continuar el discurso el micrófono fue cedido al héroe Águila Real.

- Significa que tienen esperanza en los jóvenes que hoy demostrarán su fuerza, para asegurarles que este país será un lugar mejor - elevándose por los aires mientras fuegos artificiales eran arrojados a su alrededor el héroe termino de discurso en medio de rosas de fuego con los colores de la patria.

-¡Viva México cabrones! -

Gritó con entusiasmo al público que contesto de igual manera, con jubiló y gratitud por sus héroes que les daban algo de luz en este país oscuro.

Una vez terminado el jolgorio, el torneo podía dar inicio.
La diferencia más grande entre este torneo y el de UA, es que todos los participantes ya iban con sus trajes y nombres de héroe, eso y que conforme avanzaban las peleas el ritmo del torneo era más frenético además de agregar más dificultades a las peleas.

La primera ronda daba inicio con peleas normales a una caída sin límite de tiempo siguiendo las básicas reglas de la lucha libre.

En esta ronda se vieron a algunas personas interesantes, que prometían bastante a futuro (aparte de los tres ya vistos hasta ahora).
Una chica con trenzas que se veía bastante alegre cuya habilidad le permitía sacar tentáculos de la espalda, un chico de ojos rojos cuyos brazos se convertían en serpientes, una chica chaparrita que se teletransportaba y por último, un extraño jorobado cuya habilidad era  ralentizar los movimientos de sus oponentes, este último, conocido como Tortuga se notaba particularmente entusiasmado en el torneo, como si de este día dependiera su destino.

Durante esta primera ronda la batalla que más llamó la atención fue la de Edmundo Ramírez el Speed Demon, pero no por las mejores razones.

- ¡Te derrotare! - dijo un joven con un Quirk que le permitía controlar metales, este chico intento atinarle al Speed Demon, sin embargo sus tiros ni siquiera estuvieron cerca de tocarlo por su velocidad demoniaca.

- Seré honesto, la única razón por lo que está pelea aún no termina es porque debe haber algo de espectáculo - Edmundo se mostraba algo molesto por tener que alargar algo que pudo terminar en cinco segundos.

- ¡Cállate! - gritó el burlado a su oponente arrojando esferas metálicas con más y más velocidad, este chico tenía todas las intenciones de ganar para obtener algo de prestigió y el premio de $500,000 que recibiría el ganador.

- Creo que ya es suficiente - sentenció Edmundo que finalmente dejo de correr y simplemente empezó a mover las manos a alta velocidad, todo proyectil que le arrojaban era destruido por sus rápidos golpes mientras avanzaba lentamente y con indiferencia.

- ¡No puede ser que seas tan fuerte! - lamentaba su rival que quizá pudo avanzar más si su oponente fuera otro.
En el momento en que la distancia entre ellos fue pequeña, fue cuando la pelea tomo un tono completamente distinto.

- Puños metralleta - siseo el Speed Demon con malicia para iniciar con una lluvia de puñetazos a alta velocidad que daban una y otra vez en las carnes de su rival haciéndolas temblar como si fueran algún tipo de gelatina.

Una vez su oponente estuvo desecho en el suelo el lo volteó y arrastró cuál bolsa de papas al centro del cuadrilátero.

Una vez ahí puso su pie sobre el estómago del derrotado y junto al referí hizo el conteo.

- Uno - exclamó mientras algunos lo abucheaban.

- Dos - Exclamó mientras otros lo aclamaban al grito de "¡Los rudos! ¡Los rudos! ¡Los rudos!"

- Tres - Exclamó fijando su mirada en los palcos, ahí su vista choco con la de Bakugou, Edmundo saco la lengua y se pasó el pulgar por el cuello para mandarle de forma clara el mensaje.

"Tu sigues"