Lo observaba desde lejos, admirando su belleza, su personalidad y cada uno de sus gestos. Lo amaba con todo su corazón y finalmente, ese día daría un paso adelante.

—Nate. —Pronunció Mello, captando la atención del mencionado y de sus amigos que lo observaban fijamente; uno con curiosidad y los demás con molestia.

—¿Pasa algo, Mihael? —La suave voz del más bajo se alzó sobre los murmullos de las personas en ese jardín, casi hipnótica.

Mihael dirigió su mirada al albino y con determinación y seriedad se acercó amenazadoramente.

—¿Qué estás haciendo? —Preguntó Beyond de manera amenazante al ver al rubio acercarse a Nate.

—Tranquilo, Beyond, no pasará nada. —Extendió la mano para detenerlo, su voz calmada apenas dejaba entrever preocupación.

Mihael se aproximó a él y lo agarró con fuerza del cuello de la camisa, acercando sus rostros hasta que sus respiraciones se encontraban.

—Tendrás una cita conmigo. —Soltó con un leve rubor en sus mejillas, sus ojos azules clavados en los suyos con una mezcla indescifrable de cariño y molestia.

—¿Qué? —Preguntó Nate confundido, sin poder ocultar su sorpresa.

—Mañana a las 16:30 en el parque de la calle siguiente. —Apretó con más fuerza la camisa, acercando su rostro aún más. —Si no vienes, te arrepentirás. —Amenazó sin apartar la mirada.

¿Era una broma? Podría ser una broma infantil y estúpida, pero ¿realmente Mihael, quien lo había odiado desde su ingreso a la universidad, le estaba "pidiendo" una cita?

Un beso fue depositado en su mejilla confundiendo su mente aún más, razón por la que no alcanzó a reaccionar cuando fue soltado perdiendo el equilibrio, fue gracias a Light que no calló al piso.

—Espero te haya quedado claro. —Y sin darle tiempo a responder se dio la media vuelta dejando a un sorprendido Nate atrás que lo miraba fijamente entre los brazos de Light que al igual que sus demás amigos tenía una expresión de molestia.

¿Qué acaba de pasar?