Capitulo 3.

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Dipper.

—Listo ya termine, si que fuiste muy escandaloso...— me dijo que sujeto de cabellera castaña mientras retiraba el ultimo vibrador ya apagado de mi. —¿Quieres ver como termino el video? Seguro te encantara...—Ese maldito...me siento muy debil, me arde la garganta, trato de recuperar el aíre ahora.

Camino un tanto y después salio del cuarto dejandome en esa camilla atado, el video se empezo a reproducir en un televisor que al parecer siempre estuvo ahi en frente. No pude evitar verlo, que humillacion...n-no puedo creerlo todavia, sin darme cuenta ya estaba llorando.

¿Cuanto me mantuvo asi? ¿Una hora? ¿Dos horas?, ¿cuantas veces me corri?...entro alguien a la habitacion el mismo sujeto que me trajo aquí —Si que te hicieron sufrir...— Dijo mientras se acercaba al televisor para apagarlo ( lo cual hizo), me volteo a ver y empezo a desatarme de los tobillos primero, se sintio tan bien ya me dolian de tanto jalarlos desesperadamente, termino desatandome, seria una buena oportunidad para huir pero no tengo fuerzas para eso. —Por cierto me llamo Alexander creo que no me habia presentado. —

Empezo a limpiarme, el seme, la saliba mientras yo desviaba la mirada y trataba de no llorar —No aguanto verte asi...— hablo rompiendo el silencio, estaba por contestarle hasta que el otro sujeto castaño asoto la puerta al abrirla.

—¡Lo han comprado! — grito de alegria — ¡Jaja! Ni siquiera les he entregado el video y ya tiene un dueño— alexander y yo no le quitabamos la vista de ensima mientras que pude ver que el tenia una cara de frustracion. —Bueno mi pequeño angel de porcelana...tu dueño es nada más y nada menos que Bill Cipher.

—¡¿BILL CIPHER?! — le contesto alterado mientras aun lo veía pero con mas frustracion y preocupacion.

—¿Que? Es exelente es el mejor comprador el que da más dinero...quien diria que compro a este mocoso por $1000,000,000 en efectivo — ¡Qué! ¿¡Tan desquiciado es como para gastar esa cantidad?!.

—P-pero...no tiene ni una semana que compro a Armando...—

—Asi...dijo que no lo complecio, gritaba mucho y una vez trato de pegarle lo molesto tanto que pidio que se lo llevaran y pues antier termimamos con el...— ¡¿Como puede decir algo asi sin ningun gesto?!, ¡lo dice como si fuera algo normal!.

—¿Que...? Pero si antier se lo entregaron...—

—¿Por qué te quejas? El vendido es él, no tú.—paso moviendolo de su camino hasta llegar a mi, se me helo la sangre con solo escuchar eso sobre el. Me sonrio y se hagacho quedando enfrente de mi cara —Te comportaras bien con tu Daddy...o yo me encargare de ti, haciendo que lo que hoy te hice sera nada...— se retiro quedando a lado de Alexander.

—Limpialo bien...lo quieren para hoy mismo. Haz que quede exitable o la pagaras caro. — comento serio viendome de reojo para después salir, pude oir como arrancaban un carro.

Alexander suspiro y me volteo a ver, su mirada reflejaba tristesa —Lo lamento... — susurro.

—¿P-por qué te disculpas...? Tu no me hiciste nada...— le conteste, se que me ira mal pero...esta persona no es mala en realidad.

—Lo se...pero pensaba en comprarte — ¿comprarme? Lo mire — no me malentiendas, pensaba en comprarte después de liberarte de ahí al terminar de comprarte te dejaria libre, pero lo pense tanto que se me hizo muy tarde...—

Despues de vestirme y todo Alexander me dijo que tendria que dormirme para transportarme porque ya son dos dias y ya estarian buscandome. Platico un poco, trato de alegrarme, sin fuerza, sin ser cruel me puso el trapo en la boca lentamente y asi yo me quede dormido, pero mientras que me lo puso antes de cerrar los ojos vi que el empezo a llorar.

                           •••

—¡A-ahh! ¡N-no! ¡P-por favor! — le gemia, rogaba a quel rubio que daba embestidas sin piedad en mi.

El solo rio —Me gusta como te ves...sumiso ante mi, veste llorar...tu sufrimiento...todo me exita aun más— me dijo mientras que tenia una sonrisa masoquita en su rostro, sus ojos reflejaban lo mismo mientras que no apartaba la vista de mi.

—¿Que pasa...? ¿aun te duele? — dijo finjiendo dolor por mi — mmm...que hare para que ya no duela — no paraba con sus embestidas, cada vez sentia que eran más profundas, cada movimiento que me daba provocaba gritos y gemidos de dolor de mi parte, más el panico no son la convinacion perfecta. —~Vamos quiero oírte gemir mi nombre ~— trataba de no verlo a la cara, mientras mordia mi labio inferior en un inutil intento de no gemir.

—¿Acaso no me escuchaste?— Acelero las embestidas, tanto que mis gemidos  se hicieron más fuertes. —¡Gime mi nombre! — me grito aterrorisandome aun más.

—¡B...Ahh! ¡B-...ahh...bill! — no tengo de otra, no quiero terminar como todos a los que vi ayer.

—Si...asi me gusta, vamos gime más, mucho más..¡Mucho mas fuerte! —

—¡B-...ahh...! ¡B-bill! — el solto un gemido terminando por correrse dentro mio, solte un grito al sentir eso, horrible...solo eso puedo describir, yo tambien me corri en ambos adomenes, salio de mi lentamente.

—Eso estuvo facinante...— dijo mientras se acomodaba la ropa. —¿Sabes? tambien es facinante ver esa convinacion de seme y sangre salir de ti. — Trataba de recuperar mi respiracion mientras lo veía, ese maldito...¿Como puede decir algo asi?...

—Bueno mi pino, solo por hoy dormiras conmigo. No hagas nada de lo que arrepientas ¿me oíste? — dijo mientras se acurrucaba a lado mio, se tapo y se durmio.

¿Como puede dormir tan relajado después de lo que hizo?.
Mis muñecas me duelen estas ataduras...pareciera como si hubiera querido que se añadieran a mi piel.
Lentamente me quede dormido.

Bill.

Ahhh nunca habia dormido tan bien en mi vida, ese niño si que me hizo pasar placer ayer.

Me di la vuelta y me tope con el, que lindo se ve durmiendo, me sente en la cama y pude ver que habia sangre todavia en su entrada si sigue asi pensare que es mujer.

Le calculo unos 20 o 21 años, son las edades minimas que hay venden, cuando despierte se lo preguntare. Ayer fue muy escandaloso eso me molesta siempre, más con el ultimo ese maldito yo lo compre apesar de que era mayor que yo tenia que comportarse ya que era su dueño.

Suspire y camine fuera de la habitacion, creo que si me pase con el es solo que ayer tuve muchos problemas y termine desquitandome con este chico, y vaya que no me mintieron si era virgen. Termine ya con el desayuno, le llevare a este chico de una vez, si era virgen hoy tendra un dolor inmenso. Al llegar de nuevo a la habitacion el ya habia despertado, se alarmo al verme, que tierno...

Camine lento hasta el, comenzo a temblar del panico. —Bueenos días...pequeño pino — le dije entusiasta dejando la bandeja con comida en una mesita al lado suyo. —Que mal educado eres...creo que te tengo que enseñar. Si no me contestas te hira muy mal mocoso. — no me he enojado pero tengo que sonar firme.

—¡N-no!, b-buenos d-dias...— su voz tiembla, que exitante.

—Asi me gusta, Pino. — le sonreí. —Y dime cuantos años tienes, ¿21? ¿22? — guardo silencio, parece que no acerte —No me digas que tienes 20, vaya si que perdieron la cabeza esta vez a- — me interrumpio con un susurro, no me enojo, por alguna razon.

—¿Que dijiste? — me vio con temor.

—¡P-por favor...! ¡N-no quise interrumpirlo...l-lo siento... En verdad...! — sus ojos se cristalizaron, estaba apunto de llorar, ¡ja! Este mocoso cree que lo estoy regañando.

—Te pregunte que dijiste, no te estoy regañando. — le conteste un tanto serio. —Puede que mi habla suene asi, pero no siempre regaño. — aunque si tiene entre 20 a 22 se me hace extraño que aun haya sido virgen. — Bueno repiteme lo que habias dicho.

Lo penso un momento —T-tengo...16 a-años...— ¡¿Que?! ¡Compre un menor de edad! ¡¿ que mierda se fumaron ellos!?.

— 16...— repeti, bueno ahora entiendo porque era virgen.

Hola :v, aqui el capitulo.
Pd: Bill no es ni tan malo como parece pero tampoco es bueno :v.
Pd2: Habra mucho mas lemmon :v, pero como ya sabran no soy buena escribiendolo v:
Bueno adios ^^

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