｡ : ✿ : ｡

Capítulo 26: Me alejaré de Yoongi

Aquel viernes luego de clases, Jimin se junta con Jungkook y Hoseok para realizar uno de los últimos ensayos. El bendito examen finalmente será el lunes. Ya no les queda ni tiempo para cambiar un solo paso, ahora sólo pueden practicar lo que ya tienen hecho y rogar que todo esté en orden.

Por suerte, ese ensayo en uno de los pocos de los que han tenido en que las cosas salen bien. No está seguro del por qué, será porque ya está harto de pensar tanto y sólo decide bloquear sus pensamientos con su baile. Será porque decide quitarse a Yoongi de la cabeza al menos por un rato y sólo disfruta de su danza. 

Es decir, no es que la situación no le esté carcomiendo internamente, no es que no quiera ir corriendo hacia Yoongi e intentar enmendar las cosas, pero también entiende que el mayor necesita tiempo, y honestamente, él también necesita alejarse un poco de él. Bueno, es lo que siempre quiso desde que regresó a la universidad y lo vio allí. La única excepción es que en aquel momento Yoongi no tenía pensado dejarlo a solas, mientras que ahora no muestra interés en cruzar ni siquiera una palabra con él. Ah, de verdad está enojado... 

—¿Jimin? —inquiere Hoseok. Jimin sale de su trance y le observa—. ¿Puedes o no?

—¿Ah?

—El domingo, ¿puedes juntarte a ensayar?

—Oh, sí. Claro, me haré el tiempo. 

—Jungkook ha propuesto que vayamos a su casa. 

—Wow, ¿finalmente conoceremos a tu familia de bailarines?

Hoseok suelta una risa, mientras que Jungkook toma su mochila y se la cuelga en el hombro, encaminándose hacia la salida del aula.

—No creo que sea posible —responde.

—¿Ah? ¿Por qué no?

—Ellos viven ocupados. El sábado y el domingo tienen una presentación realmente importante.

—¿Y no irás a verles?

—No. Ya he visto bastante.

—De acuerdo... —se ríe Hoseok ante tu inexpresividad tan constante—. Igualmente, seguro ha de tener un gran salón para practicar, ¿a que no? —bromea en complicidad con Jimin, pero él no responde, pues sus ojos están plagados específicamente en la persona que está abriendo la puerta del aula que estaba pegada a la de ellos.

—¿Por qué está aquí?

—¿Ah? ¿Yoongi? —le pregunta—. Ha de estar ensayando para el examen. 

—¿Y quién es él? 

—Oh —expresa, observando a la persona que Jimin señaló. Es un sujeto algo alto, con el cabello de un color rojo oscuro y una sonrisa contagiosa. Parece haber dicho algo gracioso, pues la risa de Yoongi puede distinguirla a kilómetros—. Si no me equivoco, es un estudiante del conservatorio. 

—¿Conservatorio?

—En resumidas cuentas, quienes estudian canto y etcétera. Le habrá pedido que le ayude en su examen.

—¿Pueden hacer eso?

—Bueno, según me ha comentado Namjoon, si su composición tiene lírica, entonces sí podían pedirle a un estudiante de conservatorio que les ayude. Pero Namjoon ha estado buscando a alguien y... Bueno, todos le han parecido aburridos.

—En el examen todos los de composición están presentes, ¿cierto?

—Sí —confirma Jungkook—. Todos los de la carrera están presentes. En nuestro caso, será igual. Así que si tienes nervios por la exposición escénica, deberías ir calmándolos desde ahora.

—Dile a Namjoon que yo le ayudaré.

—¿Ah? ¿Eso es posible? 

—Nada dice que sí o sí tiene que ser un estudiante de conservatorio —expresa el menor de ellos, mientras revisa su teléfono.

—Bien, ¿Namjoon se encuentra trabajando hoy?

—Es probable... ¿Irás a preguntarle en persona? Pero primero y principal, ¿tú cantas?

Jimin sonríe y no responde, observando de reojo el aula donde Yoongi se encuentra y alejándose de allí. No tarda mucho en despedirse de sus compañeros, más bien decide regresar a su casa para darse una ducha y en cuanto la noche cae le comenta a su familia que no cenará junto a ellos.

Su padre no está muy contento con esa idea, puesto que pareciera que su madre tenía pensado cenar junto a ellos y él realmente cree que su ex-mujer lo está intentando. Pero tampoco se siente en el lugar para no permitirle a Jimin hacer lo que quiere hacer, después de todo, ya es un adulto. 

Al llegar al bar, se encuentra que hay muchas más personas de lo que se me imaginaba. Bueno, tampoco es que se puso a pensar en que es un viernes por la noche y todo el mundo decide salir para despejarse de sus rutinas diarias. Es por ese mismo motivo que debe hacer una fila bastante larga hasta que finalmente los ojos confundidos de Namjoon se posan en él.

—Wow, Jimin, ¿qué haces aquí?

—Hey, ¿qué tal? —inquiere, pero la otra persona continúa mirándolo esperando una respuesta que, con esos ojos serios,  le hace entender que debe mentir respecto de su presencia allí—. He venido a tomar algo con... Con... Taehyung.

—Ah, tu amigo. ¿Y dónde está?

—Está en camino. No sabía que trabajarías hoy... —miente. La persona frente a él sonríe con cierta ironía.

—Bueno, es viernes por la noche. Creo que era bastante obvio. Y bien... ¿Qué quieres tomar?

—Ah, ehm... —En realidad, no tenía en mente consumir alcohol nuevamente. Luego de la salida del otro día, había prometido mantenerse alejado de esas cosas por un tiempo. Sin embargo, la mirada insistente de Namjoon sobre él lo hace decir el primer trago que le viene a la cabeza—. Ah, ehm... Gin Tonic.

—Bien —se gira a prepararlo. En ese instante de soledad decide escribirle a Taehyung y rogarle que se encamine hacia aquel bar. Taehyung no está muy a gusto con el pedido, expresando que se encuentra a punto de cenar con su famila, pero Jimin le ruega tanto que finalmente acaba accediendo. Unos minutos después, Namjoon regresa con su trago.

—Taehyung ha dicho que no tardará demasiado en venir —le comenta. Namjoon hace una sonrisa suave, a punto de atender otro cliente, pero Jimin entiende que es su única oportunidad de preguntarle sobre el examen—. Hey... Así que el lunes es el examen...

—Oh, sí. No me hables de ello —ruega, malhumorado.

—¿Todo bien?

—No es posible que no haya una sola persona interesante en el maldito conservatorio. Uno creería que alguna de ellas mínimamente podría saber trabajar con un compositor, pero por supuesto, sólo saben pensar en sus propios egos. Es exhaustivo. Terminaré quitándole la lírica a mi composición.

—Wow, wow, hey... No es necesario —intenta calmarlo. Namjoon lo observa con interés, indicándole a uno de sus compañeros que atienda al siguiente cliente por él—. Yo podría ayudarte.

Ante ese comentario, Namjoon hace una media sonrisa. —¿Tú sabes cantar?

—Por supuesto. Es un hobbie que tengo desde pequeño.

—¿De verdad? Interesante... ¿Y alguna vez has trabajado en equipo?

—Ah... Sobre eso...

—Entonces no creo que sea posible —expresa, agarrando uno de los tickets de pedidos pendientes y realizando muy rápidamente el trago. Jimin, en la espera de que regrese, se siente desilusionado por su rechazo—. Lo lamento, de verdad, pero es muy arriesgado intentarlo siendo que sólo tendríamos dos días para prepararlo, ¿no te parece? —continúa al ver su rostro triste, una vez que ha entregado el trago.

—Yo creo que no perderíamos nada con intentarlo...

—¿Tú presentarías una rutina de baile que sólo has practicado dos días? —inquiere. Park baja la cabeza, pues claramente no lo haría—. No, ¿verdad? ¿Entiendes a lo que me refiero? Lo lamento, pero este examen es importante. No quiero presentar algo que no me convenza.

Y se retira a servir a otras personas. Jimin se ve tomando un sorbo de su trago con bastante desilusión.

—¡He llegado! —expresa una nueva persona, específicamente su mejor amigo, quien con la respiración agitada se sienta a su lado—. ¿Por qué tenías tanto apuro con que viniera? Oh, ¿y por qué tienes esa cara triste?

—Lo lamento... Te he llamado por nada...

—¿Es una broma...? ¿Acaso tienes idea de lo que estaba por cenar en mi hogar? De verdad, ha pasado tanto tiempo desde que mi madre no prepara kalguksu...

—Perdóname... Estaba intentando de que Namjoon me aceptara como su ayudante para el examen del lunes, pero no hay caso. Él se toma muy en serio su trabajo. 

—¿Y yo en dónde entro en eso...? Olvídalo, no es importante. ¿Por qué no quiere que le ayudes?

—Es que sólo quedan dos días. Tiene razón, es muy arriesgado preparar algo en este momento. Sólo acabaremos fracasando y la idea es ayudarlo a aprobar...

—Ah... ¿Pero por qué no pueden intentarlo al menos? Aunque en verdad, estoy sorprendido. No recuerdo la última vez que te escuché cantar, ¿y ahora has elegido cantar frente a toda la carrera de composición?

Aquel comentario le remueve el estómago, cerciorándose un poco de la locura que estaba intentando cometer. 

—No lo había pensado así... Es cierto, es arriesgado... Pero creí que de esa forma podría acercarme a Yoongi...

—¿Ah? ¿Y por qué necesitas de un examen para eso?

—Oh... Taehyungie... No te lo he comentado... De verdad, se me ha pasado completamente. Sólo he podido comentarlo con Hoseok.

—¿Qué ha ocurrido? No me digas que... ¿Se lo has dicho...? ¿De verdad? ¿Yoongi lo sabe...?

—¿Yoongi sabe qué? —regresa junto a ellos Namjoon, observando a Taehyung—. Oh, realmente has venido.

—No es importante... —trata de dispersar el asunto Jimin, viendo el estado de shock que tiene su mejor amigo.

—Es increíble pero siempre acabas hablando de Yoongi de alguna forma u otra —se recuesta sobre la mesada—. ¿Cómo van las cosas entre ustedes? 

—Ah, bueno... Él se ha enojado conmigo —le comenta, pero más bien, está hablándole a Taehyung, intentando de que sepa lo que ha ocurrido—. Le he tomado por sorpresa.

—¿Sorpresa? ¿Sorpresa de qué?

—Digamos que se enteró algo de mí que... Bueno, no es lo mejor. Y ahora no quiere verme.

—¿Por eso quieres hacer el examen conmigo? —vuelve a su posición inicial, pero esta vez, se cruza de brazos—. ¿Por eso estás aquí?

Jimin se muerde el labio. Namjoon es demasiado inteligente, fue bastante estúpido de su parte el creer que podría engañarlo.

—Lo lamento...

—Mmm... —duda la persona frente a él—. Quizá sí podamos realizar el examen juntos.

—¿De verdad? 

—Pero necesito de tu compromiso. Si no respondes a mis mensajes o requisitos, entonces en sólo un instante decidiré borrarle la lírica y sólo enviar lo instrumental. ¿De acuerdo?

—¡Bien! Sí, te ayudaré. Seré totalmente servicial. Ni siquiera dormiré en caso de recibir un mensaje tuyo.

—Va... —se ríe Namjoon, poniendo su mirada en Taehyung—. ¿Y a ti qué te sirvo?

Taehyung pide un vaso de whisky y vuelve a poner su mirada en Jimin en cuanto la tercer persona se ha retirado luego de explicarles que no puede quedarse a charlar demasiado.

—¿Whisky, de verdad?

—No puedo creer que se ha enterado... ¿Pero cómo? 

—Intenté decírselo, pero acabó dándose cuenta por sí solo. Supongo que era predecible... No fui lo suficientemente disimulado. Más bien, creo que inconscientemente le dejé bastante servido todo lo que ocurrió. Quizá una parte de mí quería que se enterara de una vez por todas, no lo sé.

—¿Y él no está hablándote? ¿De verdad? Wow...

—Por eso quiero intentar acercarme a él, al menos un poco... Ah, Taehyungie... Todo se ha vuelto tan complicado... Literalmente no sé qué hacer a continuación, la única idea que se me ocurrió fue esto.

—Está bien, ni yo sabría bien qué hacer. Me he quedado en completo shock. Es decir, me esperaba que se enterara en algún momento, es sólo que no pensé que tan pronto... ¿Eres consciente del nivel de conexión que ha tenido que sentir contigo todo este tiempo como para que comenzara a tener sospechas tan rápidamente?

—No lo había pensado así...

—Es que sino, de verdad, no se me ocurre otra forma de que lo haya descubierto a menos que tú se lo hubieses dicho directamente. Pero no lo hiciste, ¿o sí?

—No, no lo hice. Ni siquiera me permitió explicarle bien todo lo que ocurrió. Él sólo me quiso lejos de él lo antes posible.

—Rayos... —farfulla, refregándose la parte trasera de su cabello con irritación—. Debe necesitar tiempo...

—Eso mismo me dijo Hoseok, y juro que trato de entenderlo, pero todo me parece tan injusto. He tenido que sufrir ver su accidente, tener que olvidarlo a la fuerza, reencontrarme con él y tener que pretender que mis sentimientos habían dejado de existir, ¿y ahora también debo soportar su cara de odio hacia mí? ¿Qué rayos he hecho mal? 

—No has hecho nada mal, Jiminie. Has hecho lo que tenías que hacer y estoy seguro que Yoongi podrá comprenderte con el paso del tiempo, pero por el momento, creo que estás comportándote de forma correcta. Intenta esto del examen, ve qué siente al volverte a ver, al escucharte cantar, quizá hasta al verse obligado a hablarte, pues después de todo, estarás en el mismo salón que él por una gran cantidad de tiempo. Realmente espero que un rastro del Yoongi viejo que aún debe quedar intente lastimarte lo menos posible. 

—Yo espero lo mismo...

—Aunque me gustaría que me prometieras algo, Jiminie.

—¿Sí? ¿Qué cosa?

—Sé y entiendo el amor que le tienes a Yoongi y por qué motivo quieres bajo toda adversidad que las cosas vuelvan a funcionar entre ustedes. Pero también veo todo el daño que te ha causado esta situación y realmente me asusta que las cosas vuelvan a salir mal. Así que por favor... Si no hay ni un mínimo de cambio en él, si no quiere escucharte, si la forma de tratarte te lastima, aléjate de Yoongi. Jimin, yo sé que eres capaz de continuar con tu vida sin él.

Jimin lo observa por unos segundos, sintiendo un nudo en la garganta que le dificulta darle un trago a su vaso de alcohol, sin embargo, para aceptar esa promesa, ha de sentirse lo menos consciente posible. Por lo que baja todo el vaso, y sintiéndose la garganta arder, murmura un muy suave:

—Si toda esta situación vuelve a lastimarme, entonces, es una promesa. Me alejaré de Yoongi.

｡ : ✿ : ｡

Hasta acá la actualización de hoy! Les pido disculpas por la tardanza, estuve bastante ocupada:(

Nos veremos en próximos capítulos, gracias por leer!

｡ : ✿ : ｡