tenía sus ojos rojizos igual que su padre y era de piel algo pálida, no tardó en pasársela a una enfermera para que la limpiara y vistiera, pasaron unos minutos y nació la pequeña jazmin, su pelo oscuro como el de su padre, ojos violeta como los de su madre, pasó un rato y ambas pequeñas ya estaban dormidas, abrazadas en una misma cuna, las dejaron en su cuna ya que marina estaba dormida, estaba agotada por el parto, por otra parte samuel estaba más que feliz por ver a sus pequeñas en su cuna, mientras las miraba acariciaba el cabello de Marina con delicadeza, pasaron unos minutos y la menor no tardó en comenzar a despertar, mirando a samuel

Samuel: cómo te sientes amor!?-le acarició su mejilla con una sonrisa
Marina: un poco cansada, pero estoy bien y como están nuestras pequeñas!?
Samuel: están dormidas-las miro y me es tierno ver el el pequeño huesito de sus futuras alas
Marina, si y estoy segura que una de las 2 sacara tus alas
Samuel: tú lo crees-la miro
Marina: si mira-señaló el huesito de belén, era parecido a la forma de las alas de samuel
Samuel: tienes razón, así eran mis alas de bebé
Marina: serán muy lindas sus alas, me alegra que hayamos podido formar nuestra propia familia
Samuel: jeje, a mí igual

Le dio un beso en los labios pasaron unos minutos y escucharon que sus pequeñas despertaron, eso les saco una sonrisa a ambos mayores, ambas pequeñas eran su mayor alegría, las cuidarían mucho, además que sus alitas crecerían hasta que tuvieran 2, 3 años, el mayor cargo a una de las pequeñas y se las pasó a Marina y luego el cargo a la que quedó en la cuna, ambas los miraban con curiosidad, al tener sus bracitos envueltos no podían moverlos, pero si los miraban muy curiosas, pasaron 2 años y ambas pequeñas estaban jugando en el salón del trono con sus juguetes, samuel y marina habían tomado el trono, como no podían dejarlas solas las llevaban con ellos a todos lados, ambos mayores estaban en un pequeño balcón que había ahí, mientras veían a sus pequeñas, es que a belén ya se le habían empezado a extender sus alas, en cambio jazmin no, tenían miedo que el huesito desapareciera y nunca salieran sus alas pero ahora marina y samuel discutían, evitaban hacerlo frente a sus pequeñas

pero esas peleas se debían a que las personas del pueblo empezaban a ver mal la relación entre marina y samuel y el mayor al ver eso le reclamaba a la menor, lo que no sabían era que la pequeña jazmin siempre los escuchaba

Marina: y yo que tengo que ver, no le he dicho a nadie del pueblo eso
Samuel: ya sé que no les dijiste nada pero trata de hablar con ellos, no puedo volver a mi reino, es por eso que estoy aquí mari, no quiero que se desate una guerra