Capitulo 12

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Narra Kayla

Tras la revision medica y confirmarnos que estamos bien, Eyla y yo nos cambiamos de ropa cogiendo la que tenia George en la mochila del maletero. Como era de esperar, habia una camiseta de Mercedes y a la pequeña no ha habido forma de ponerle otra que no sea esa, y vamos a no mentir, yo tampoco he dudado en ponermela. Y no puedo estar mas contenta al saber que los tres hemos salido practicamente ilesos. 

Y si, he dicho los tres porque el embarazo sigue adelante, por no haber comido adecuadamente el bebe es algo mas pequeño de lo esperado pero nada que no se arregle volviendo a la normalidad, ademas de que me han dicho que es un niño, la verdad esque me hubiera gustado no saber el sexo hasta el nacimiento (como con Eyla) pero no voy a estar mas triste o quererlo menos por eso.

Despues de cambiarnos, la pequeña esta mas contenta que antes, esque como su padre es muy presumida, por algo George y yo le solemos decir que es nuestra ratita presumida, la he echado demasiado de menos.

Cuando volvemos con las chicas, estas respiran aliviadas cuando saben que esta todo bien aunque obviamente me guardo lo del embarazo, creo que con quien primero debo habararlo es con el padre de la criatura, que es mi chico.

Lily: Menos mal que estais las dos en condiciones
Sandra: Llegais a tener el mas minimo rasguño y ahi nadie para a Russell
Raquel: Tranquila, que ya Charles se encargará de frenarlo porque si yo no puego pegarle un sartenazo en la cara, se lo lleva el monegasco
Kayla: Yo que os tengo dicho de violencia delante de la niña???
Eyla: Porque la tita quiere darle con una sarten al tito????

No voy a negar que yo soy igual de violenta que la pequeña Norris, pero intento que mi hija no crezca asi, y digo intento porque ni George, ni Alex ayudan, a ellos les cuesta bastante morderse la lenguan con la niña delante

Raquel: Porque el tito es un bocachancla pequeña
Eyla: Pero la violencia no es la solucion, eso me dice mama
Kayla: Y es cierto princesa, pero esque papa y los titos son especiales y a veces es necesario para que piensen
Sandra: Pero tela
Lily: No te preocupes pequeña, nosotras sabemos lo que hacemos para que no les pase nada malo

La niña asiente y me da la mano, esque es demasiado linda, por favor. Las cuatro la miramos con ternura y cuando bajamos de la nube de algodon, vemos que es buena idea volver al circuito porque no sabemos si los chicos siguen enteros porque lo que vienen siendo señales de vida no dan y mandar a Lando a que vea si hay alguno entero no es que sea la mejor de las opciones porque la puede liar mas aun mas. En el trayecto Eyla va jugando con algunos muñecos que habia en la puerta del coche (los tipicos de cuando vas al McDonals o al Burger King y vienen con el menu infantil, optamos por dejarlos en el coche y cuando hay demasiados o se rompen pues se tiran, pero cuando vamos en el coche al menos va entretenida si no tiene a Don Orejitas cerca) y las chicas vamos hablando tranquilamente

Kayla: Bueno, me he perdido algo interesante estos meses??
Raquel: Quitando a tu novio totalmente desesperado o como gato enjaulado cuando se fastidio el tobillo, todo bastante normal
Sandra: Además de estar buscandoos hasta debajo de las piedras no ha habido cosas fueras de lo común
Lily: Y tu hermano entre depresivo y entusiasmado, yo no sé si se ha vuelto bipolar o algo

Nos reimos las cuatro y miro de reojo a mi niña, viendo como se le cierran los ojitos

Kayla: Tienes sueño princesa????
Eyla: Mucho mami
Kayla: Duérmete un poco si quieres
Eyla: No mami, quiero estar contigo
Kayla: No voy a dejarte sola ni permitir que te aparten de mí, si tienes sueño duerme un poco
Eyla: No mami, me falta Don Orejitas

Como no, su conejito. No sé cómo habrá podido dormir este tiempo sin él, y sólo espero que el peluche esté bien o si no va a montar un drama digno de una película. Cuando me doy cuenta ya hemos llegado al circuito, me cuelgo la identificación y se la pongo a la niña antes de que, junto a las chicas, bajáramos del coche. Solo espero que nadie haya muerto ni que George o Alexander sean culpables de asesinato

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