Narra George 

Y si, soy un manojo de nervios. Es tanto pedir ver a mi novia y a mi hija?????? Después de lo que ha pasado el personal de la escudería me ha mandado a la habitación donde me preparo para la carrera para que lo haga, pero en lugar de eso estoy dando vueltas de un lado para otro como león enjaulado con el mono hasta la cintura y el casco en la cama junto a Don Orejitas, lo único que me mantiene cuerdo porque ahora mismo estoy a punto de perder la cabeza.

Suspiro y vuelvo a pasarme la mano por detrás del cuello, tengo que intentar calmarme o les daré la razón de que tengo que estar vigilado 24/7, pero mira por donde estar calmado cuando no sé donde están las dos personas mas importantes de mi vida y sabiendo que seguramente quien las apartara de mi lado este suelto, no puedo, de verdad.

Se que me puede traer problemas a nivel profesional, pero ahora mismo no me importa en absoluto si lo comparamos con mi familia, le tendré miedo a mi jefe pero aun mas se lo tengo a perder a mi chica y a mi princesa, es lo que hay.

Cojo mi acreditación, al peluche y la llave de la habitación y, sin pensármelo dos veces, me subo el mono dejando al peluche donde estaba y salgo de la habitación para bajar los dos piso que me separan del paddock por la escalera. Oigo voces llamándome pero las ignoro totalmente, no dejare que nadie me frene en mi objetivo, ni mi jefe a pesar de que me juegue mi carrera.

Consigo llegar al paddock sin pegas y respiro profundamente poniendo los brazos en jara mientras miro al cielo, si pienso en la opción mas sensata de donde pueden estar se me ocurre Red Bull por Alex, pero ir hasta allí cuando falta nada para la carrera no creo que sirva de mucho, por mucho que el tailandés sea mi cuñado para Hornet soy el enemigo número 1

Me paso las manos por el pelo totalmente desesperado porque no se que hacer, las lagrimas se me acumulan de rabia e impotencia, ya no sé que narices mas hacer joder. Me pellizco el puente de la nariz a punto de derrumbarme pero la vocecita mas adorable del mundo me frena

Eyla: Papiii!!!

Abro los ojos y miro a mi alrededor buscando a mi princesa, y empiezo a desesperarme cuando no la encuentro, hasta que la voz de la otra persona que mas quiero en este mundo me hace recobrar de nuevo la calma

Kayla: Mira hacia arriba William

Hago lo que mi chica me dice teniendo que ponerme la mano a modo de visera para que el sol no me moleste y no puedo evitar sonreír al ver a mi novia y a mi hija en la ventana de la habitación donde estaba hace unos minutos, como no os hemos cruzado???? Aunque tranquilamente nos hemos podido cruzar y no las he visto de lo encerrado que iba en lo mío, no lo descarto. No lo pienso y empiezo a correr hacia dentro del edificio y a ese ritmo subo las escaleras y solo freno cuando llego a la habitación, en ese momento que veo a Kayla y a Eyla en sus brazos y sonrío, lanzándome a abrazarlas a ambas y dejando que alguna lagrima caiga por mi mejilla. La anglotailandesa corresponde rodeándome el torso con el brazo que tiene libre y nuestra pequeña rodea mi cuello con sus bracitos, la pesadilla por fin ha terminado

George: Como si tengo que buscarme la forma de entrenar sin salir de casa pero no vuelvo a separarme de vosotras, estamos???
Eyla: Vale papi
Kayla: No pensemos eso ahora, ya paso todo

Le doy un beso en la frente a Kayla y luego miro a Eyla que se esta frotando los ojitos, mi princesa tiene sueño

George: Tienes sueño peque???
Kayla: Antes en el coche me ha dicho que si, pero que no quería dormir
Eyla: Esque me falta Don Orejitas mami

Me rio y me separo un poco de ellas para abrir la cremallera del mono y sacar el conejo de peluche que tanto adora mi pequeña

Eyla: Don Orejitas!!!! Lo encontraste papi
George: Claro que si bebe, lo he cuidado para que lo encontraras perfecto cuando volvieras
Kayla: Ahora puedes descansar tranquilamente mi niña

Le doy el peluche a Eyla y ella lo abraza sonriendo mas que antes si es posible, algo que me provoca que sonría mas aun si es posible y que la coja de los brazos de su madre para dejarla tumbada en la camilla que tengo en la habitación y echándole mi sudadera por encima para que no tenga frio. Le doy un beso en la frente y ella cierra los ojos aferrándose a  su peluche y quedándose dormida al instante. En ese momento me giro para mirar a mi chica y no lo dudo al cogerla de la cintura y levantarla del suelo para abrazarla, ella rodea mi cintura con las piernas y mi cuello con los brazos correspondiendo al abrazo

George: Te he echado muchísimo de menos amor
Kayla: Y yo a ti cariño, hubo momentos que pensé que no volvería a verte
George: Hubiera hecho lo que hubiera hecho falta para volver a tenerte conmigo, no lo dudes
Kayla: Me quitaron a la niña y no sabia nada de ella, yo creía que si le pasaba algo me ibas a odiar y....

No la dejo terminar porque uno mis labios con los suyos en un beso que enseguida mi chica corresponde, otra cosa que había echado en falta además de su compañía es la sensación que se me genera en el cuerpo cuando nos besamos, estaba empezando a olvidarlo. Nos separamos por la falta de aire y dejo mi frente pegada a la suya

George: No te odiaría nunca, primero porque te amo demasiado como para poder odiarte, aunque quisiera que no es el caso no podría hacerlo porque eres el amor de mi vida, y segundo porque yo fui el primero que falle a Eyla como padre y a ti como pareja, porque si os secuestraron fue por mi culpa

No puedo evitar que las lagrimas se me escapen aunque enseguida mi chica me las quita

Kayla: Ya ha pasado, tranquilo. Echarnos las culpas mutuamente no sirve de nada, solo hacernos daño, y ya bastante nos han hecho como para herirnos mas nosotros, si????

Asiento con la cabeza y ahora es ella quien me besa a mí y yo quien corresponde, por fin recupere a mi familia