Aerin

Se que dijo que no debo de preocuparme por nada, pero está en mi naturaleza hacerlo, todo me da desconfianza, más de un mundo que no conozco, esta ciudad es tan grande que apenas puedo aprenderme donde están las calles de la casa de Hobi y su esposa, en unos días comenzaría con las clases de manejo para poder tramitar una licencia y moverme un poco mejor, pero aún me movía en autobús, sin mencionar que debía de salir sola, ya que no pueden verme con Yoongi por la calle, no porque oculte que estamos saliendo si no por el hecho de que es una personalidad famosa no lo dejarían de perseguir de un lado a otro para ver qué es lo que hace cada minuto del día.

Esta semana casi me dejo sola todo el tiempo, se la paso con su manager y esa pelirroja indeseable trabajando en lo que sería la rueda de prensa, aun no debe andar moviéndose por todos lados, pero creo que es un poco adicto al trabajo, porque apenas inicio sus juntas, ha estado centrado en proyectos futuros y algunas cosas más a largo plazo.

Ahora estaba sentada en una enorme cama sola, con un tazón de cereal entre mis piernas encendiendo la televisión para a Yoon en su entrevista general el día de hoy. Cuando encontré el canal en el que estaría apenas estaba llegando Yoongi a una especie de mesa con su manager sentado a su derecha y la tipa a su izquierda, lucia tan irreal, como un ser inalcanzable, su vestuario lo hacía resaltar de entre los demás, en verdad se veía como una estrella, mi corazón se aceleró cuando escuche su voz gruesa por el micrófono.

—Buenas tardes, me alegra que pudieran venir, sé que han estado preguntándose ¿Dónde estado estos meses? ¿Y el porqué de mi hospitalización?

Las personas presentes empezaron a murmurar y querer preguntar, pero Yoon levanto la mano para silenciarlos, todos callaron.

—Había decido tomarme unas vacaciones, había terminado muchos proyectos y era momento de tener algo de tiempo para mí, así que anduve viajando un poco y disfrutando de un tiempo libre, pero estamos de vuelta para continuar trabajando con nuevas colaboraciones y próximos conciertos.

Se escuchaban gritos de algunos fans que habían llegado al lugar de la entrevista, la prensa tomaba miles de fotos, los flashes se escuchaban uno tras otro acompañado de los destellos de las luces.

—Tommy Land del Heraldo de los ángeles, ¿Es verdad que la razón de su ingreso al hospital fue un ataque a mano armada?

A Yoongi se le tensaron los músculos de la mandíbula, el odia a esa clase de reporteros, acaba de anunciar nueva música, pero solo están interesados en el morbo.

—Lamentablemente fue un asalto que paso a mayores, pero gracias a que todo mi equipo se movió rápido seguimos fuertes y en pie.

—¿Es verdad que iba con su nueva pareja? Las fans están interesadas en saber ¿Está saliendo con alguien?

Yoongi suspiro y vi como Carter le dijo algo al oído, el solo asintió.

—Solo responderé que si, efectivamente estoy en una relación, pero les voy a pedir de favor que estén conformes con esa información, ella no pertenece al medio y prefiero que la dejen tranquila.

Sabía que llegaría un poco de mal humor después de esta entrevista, aunque se preparo para todas las preguntas que era lógico que le harían, aun así, es molesto para él toda esta situación. Termino la entrevista y apagué la televisión, fui directo a lavar mi plato, secarlo y acomodarlo.

Quería tener una rutina al menos, pero la limpieza era sencilla, Yoongi no estaba mucho en casa así que no había mucho por hacer, cocinaba solo para mi y eran pocos los trastes que utilizaba, lavar la ropa era dos veces por semana, estaba libre de mis clases hasta dentro de dos meses. Me estaba aburriendo demasiado sin ninguna actividad.

—Creo que iré a visitar a la Sra. Jung.

En lo que se llenaba la tina de baño, aliste mi ropa seleccionando unos vaqueros negros, un jersey gris, botines y un bonete junto a la bufanda, como aquí hace más frio del que acostumbro me llevare un abrigo amplio.

—¿Iras a algún lado?

Di un salto cubriendo mi pecho ya desnudo por instinto, no lo había escuchado entrar, estaba parado en el marco de la puerta con una sonrisa de lado mirándome con detenimiento.

—Me espantas Yoon.

Se acerco a mi quitándose la chaqueta, lanzándola al piso, quito el cinturón de su pantalón para continuar desabrochándolo, cuando estuvo muy cerca me tomo por la cintura y rozo su nariz por mi cuello.

—Aun no me contestas, ¿A dónde iras?

Su nariz estaba algo fría, causándome escalofríos, sentir sus labios en mi hombro y sus manos deslizando mis pantaloncillos del pijama.

—Iría  a la casa de Hobi, pensaba tomar un café con la señora Jung, pensé que no vendrías hoy tampoco.

Suspiro y puso su frente en mi hombro, me abrazo fuerte contra él.

—Perdona Rin, se que te he dejado sola mucho rato, quisiera pasar más tiempo contigo.

—Lo entiendo —me separe un poco de él para tomar su rostro entre mis manos —se que es algo que debes de hacer, tienes un trabajo muy pesado —tomo mi mano para besarla —pero se cómo me puedes compensar.

Termine de desvestirme, lo jale de la cintura de su pantalón para besarlo un poco.

—Vamos a la tina.

Caminamos hacia el baño él iba deshaciéndose de la ropa que le quedaba, me encantaba como relucían sus tatuajes en su piel tan blanca, ese aspecto de hombre rudo que solo lo demuestra cuando esta conmigo en la cama, su perforación del oído, su cabello blanco algo rebelde, quisiera saber que sienten todas esas mujeres que lo desean y no lo pueden tener porque es mío.

El entro primero a la tina haciéndome señas para que no lo hiciera esperar y entrara con él, cuando entre me senté sobre el con mi rostro hacia el suyo, sus manos callosas y delgadas recorrían mi espalda, mientras nuestras bocas se unían en un beso desesperado necesitado de atención, ambos nos habíamos vueltos dependientes de este contacto, donde nuestras pieles chocan, nuestras respiraciones se entrecortan con el palpitar del corazón del otro.

—Me hacías falta Rin —su erección pegaba en mi estomago mientras acariciaba mis muslos por debajo del agua —Hoy estaré contigo todo lo que resta del día, no quiero saber nada de nadie más, más que de ti.

El sabor de sus labios es embriagante, mis brazos estaban alrededor de su cuello, mis manos se metían en su cabello rebelde, dejaba que marcara la piel de mis hombros con sus mordidas lentas, mis pechos se frotaban en su torso desnudo, ya estaba ansiosa levante un poco mi cadera el sabia que era lo que quería sin necesidad de pedírselo, acomodo su miembro para alinearse en mí, yo baje de manera lenta jadeando en su boca al sentir mi carne abrirse por su miembro caliente.

Movía mis caderas de manera lenta y en círculos sobre él, sus besos callaban un poco mis gemidos, sentía que gruñía cada que entraba por completo, sus dedos apretaban mis nalgas causando un poco de dolor, un dolor placentero.

Una

Dos

Tres veces

Toda la tarde no la pasamos desnudos, complementándonos el uno al otro, sin duda el sexo con el es de otro nivel, pero no es solo eso, la manera en que me mira cuando habla, sus manos cuando acomoda mi cabello, cada cosa que el hace me tiene mal, su voz ronca cuando susurra hace que mi piel se erice, nunca había sentido nada así por nadie, me sentía plena y feliz.

A la mañana siguiente el estaba haciendo el desayuno de ambos, yo me encontraba bebiendo una taza de café, mis manos jugaban con el recipiente un poco analizando lo que le diría a Yoongi.

—Esta semana tengo algo de trabajo, pero espero para el fin de semana poder llevarte de paseo a la ciudad, o alguno otro lado.

—Suena maravilloso —le di un sorbo a la taza —Yoon

—Dime

—Voy a buscar un trabajo de medio tiempo.

—No —apago la estufa y se acerco a la barra dejando sus manos apoyadas en esta —No necesitas trabajar, si requieres  algo solo debes de pedírmelo.

—No es eso —suspire —estoy aburrida, necesito aprender a moverme mas por la ciudad, si quiero entrar a la universidad debo de ser un poco más independiente.

—¿Tienes algo en mente?

—Por la zona de los Jung, esta una pequeña cafetería y están solicitando ayudantes, no queda lejos de aquí.

—¿Y si mejor tomas clases de algo? No lo sé, ¿Defensa personal? ¿Baile? ¿Manualidades?

—¿Dejándome salir de la casa?

Se quedo callado, mejor se puso a servir el desayuno, su cara notaba es muy expresiva así que se que no esta de acuerdo con mi idea, pero también sé que terminara cediendo.

—Solo será en lo que empiezas la universidad, no quiero descuides tus estudios, por un trabajo que no necesitas.

—Mil gracias.

Camine para dejarle un beso en la mejilla, pero me tomo por el cuello haciendo el beso mas apasionado, creo que el desayuno esperaría un poco más.

Yoongi

Tiene dos semanas que esta trabajando en esa cafetería, no quiero sonar como una pareja psicópata, pero tuve que investigar el lugar, no permitiría que trabaje en algún lugar peligroso o donde pudieran lastimarla. No había tenido mas recaídas, su apariencia era demasiado diferente del día que la volví a encontrar, sus ojos brillaban con más intensidad, su actitud era la de la niña que conocí, recupero un poco de su inocencia, cuando la veo en las noches, me platica todo lo de su día sin dejar el más mínimo detalle como cuando éramos pequeños.

Ella ha traído tranquilidad a mi ajetreada vida, por eso detesto tanto dejarla sola por tanto tiempo, se que es comprensiva, pero me molesta saber que "siempre ha estado sola, es normal que no me necesite"

—La letra me encanta.

La respuesta de Halsey ante la canción me saco de mis pensamientos.

—Es muy profunda, nunca me decepcionas Snake, supongo que ahora estas mas inspirado que de costumbre.

—¿Por qué lo dices?

—Se que te encanta crear música, la cual tus fans adoran, pero ahora que hemos estado trabajando en los arreglos y demás te he notado de un humor diferente, mas tranquilo, más alegre, se deberá ¿A cierta chica?

—Solo espero que cierta chica sea paciente conmigo.

—Se que no quieres que este en todo esto del medio, pero deberá participar alguna vez si no tendrás que tenerla prácticamente encerrada, eso no le gustaría a nadie.

—Estoy algo jodido con eso, tengo dos semanas diciéndole que saldremos a algún lado, pero la maldita agenda no se vacía.

—Tráela al estudio, sirve y también la conozco, tengo demasiada curiosidad de saber el aspecto de la chica que se llevó el corazón del duro Snake.

—Comencemos a grabar, prometí llegar temprano hoy.

Las horas pasaron, entre las grabaciones, la junta con algunos de los inversores de la disquera y arreglar algunas fechas se hicieron las once de la noche, llegue a casa y ella ya estaba dormida abrazada de una almohada, no tengo cara para disculparme.

Me puse el pijama y me acomode a su lado, su rostro apacible mientras duerme es hermoso, toque su mejilla, ella reacciono y entreabrió los ojos.

—Hola Yoon.

Se acomodo entre mis brazos, metiendo su rostro entre mi cuello y hombro sentí su respiración volverse pausada volvió a quedarse dormida, y yo junto con ella. No tenia del agotamiento que había acumulado que no escuche la alarma.

—Yoon, Yoon —Abrí los ojos y Rin estaba con el teléfono en la mano —te habla tu manager.

—¿Qué hora es?

—Las diez de la mañana.

Me levante de golpe, tome el teléfono avisándole a Carter que ya iba en camino.

—¡Mierda ya es muy tarde!

—¿Iras al estudio hoy?

—Si, ayer quede de entregar lo que falto, son solo unos detalles, vendré a casa en cuanto termine.

Bese su frente y me cambie rápidamente, conduje bastante rápido y logre llegar a tiempo. Hice los pendientes del día y cuando menos recordé ya eran las ocho de la noche, fui a ver mi teléfono, tenia como veinte llamadas perdidas de Hoseok, cuando me pongo a trabajar se me olvida donde dejo este aparato.

Me senté un momento para regresar la llamada a Hoseok, sonó un par de veces el teléfono y luego contesto.

—¡Hasta que contestas!

—Perdona, sabes que me pierdo en el trabajo, ¿Qué sucede?

—¿Qué sucede? ¿QUE SUCEDE? —Estaba demasiado molesto —¿Si quiera sabes que día es hoy?

—¿No entiendo porque estas furioso?

—No debiste traerla contigo si planeabas dejarla sola, me pidió que no te marcara, pero Sheny esta furiosa también, habíamos planeado estar con ella hoy, bendito cumpleaños que tuvo esa niña.

Soy un imbécil.

Un completo imbécil.

—Al menos se la paso bien con nosotros, te alegrara saber que comió bien, que le gusto su pastel y estuvo sonriendo al menos —suspiro— ella no te dirá nada, dice que te entiende, pero eso no quita que yo te diga lo idiota que eres, Min Yoongi ya no eres tu nada más, le pediste una relación, atiende tu puta relación.

Me colgó, yo salí enfurecido del estudio, iba golpeando el volante, ¿Cómo pude olvidarlo?

"Ella no te dirá nada"

¿Cómo va decirme algo si nunca estoy en casa?, ¿Cómo le doy oportunidad de reclamarme algo?

Cuando llegue a la casa, ella no estaba adentro, la busque por las habitaciones, pero no la encontraba, hasta que salí al patio trasero, estaba abrazada de sus rodillas con un cigarrillo entre sus dedos, sobre la banca que tenía afuera.

—Aerin.

—Yoon —tenia los ojos algo rojos, tallo el rostro con las mangas de su suéter —Llegaste temprano.

—Rin, lo lamento tanto, no quería olvidarlo, no era mi intención.

Sacudió la cabeza, su nariz estaba algo roja también, es claro que había llorado, cada vez me sentía peor.

—Entiendo, tranquilo, Sheny y Hobi me pasearon toda la tarde, me la pase muy bien, tu debes de venir cansado, ¿Quieres que te prepare algo de cenar?

—Déjame compensarte.

—Cena conmigo, te traje un pedazo de pastel, estoy bien tranquilo.

Me tomo de la mano para entrar a la casa, me platico de todo lo que hizo con Hobi y su esposa, pero aunque ella pareciera estar tranquila yo me sentía como una basura.