Capítulo tres

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¿Te parece bien que estudiemos después de clase en la biblioteca?

Jimin:

¿Qué biblioteca?

La del instituto, supongo.

Jimin:

¿Podemos ir a la biblioteca antigua?

¿La biblioteca antigua?

Jimin:

Espérame después de clase, aula 18.

Así es como el castaño termina fuera del aula 18 un miércoles lluvioso. Todos los alumnos pasan por los pasillos con los paraguas preparados entre sus manos y algunos incluso llevaban las capuchas de sus sudaderas puestas, lo cual hace que Jungkook sonría al recordar a "A" de pequeñas mentirosas.

Él sin embargo no viste más que su suéter viejo y azulado junto a sus skinny jeans negros. Así que se mentalista que va a mojarse en cuanto salga.

Sin embargo, Jimin no tarda demasiado en salir,dedicándole un movimiento de cabeza como saludo.

- Hola -Lo saluda jugando con las mangas de su suéter-

- Jungkook -Responde sin retener su paso-

- ¿A dónde vamos? -pregunta Jungkook siguiéndolo por los pasillos ya casi vacíos del instituto-

- A la biblioteca antigua, creía que ya lo habíamos hablado.

- Sí, bueno -Aprieta los labios- Tan sólo no entiendo por qué tenemos que ir allí mientras está lloviendo cuando tenemos una biblioteca aquí.

Jimin no dice nada.

Salen por la puerta trasera, dónde el parking para estudiantes se encuentra, dónde prácticamente no hay nadie.
Cuando salen del instituto, la lluvia cae suavemente y Jungkook se siente agradecido por ello. Es entonces que Jimin le indica cuál es su coche.

Un Jeep negro.

Al entrar en este el castaño se encoje en el asiento del copiloto, las gotas de lluvia que le habían mojado han causado que su piel se erizara y el frío que siente de repente le hace temblar levemente.

Pero Jimin parece darse cuenta de eso porque antes de empezar a conducir enciende la calefacción y la apunta hacia Jungkook.

- Gracias -dice notando como el calor sube hasta sus mejillas-

Y realmente quiere golpearse la cabeza contra la ventanilla del coche porque se está sonrojando por algo tan simple como porque haya puesto el aire caliente para él para que no tuviera frío.

¿Este es el Park Jimin del que todos hablan? ¿Ese del que los rumores dicen que es frío y cortante?

Lo mira disimuladamente mientras conduce, y siente la leve necesidad de descubrir quien es Jimin realmente.

- No sabía que había otra biblioteca -dice en voz baja, interrumpiendo el sonido de las gotas chocando con la ventanilla-

- Prácticamente está vacía siempre, está casi a las afueras de la ciudad.

- ¿Es por eso que vamos allí? -Pregunta- ¿No quieres que nos vean juntos?

Jimin le dedica una rápida mirada antes de volver a concentrarse en la carretera.

- No es eso.

Jungkook está seguro de que es exactamente eso, pero no dice nada. De todas formas no puede culparlo, si ahora aparecen juntos en la biblioteca del instituto los rumores irán peor.

Se mantiene en silencio el resto del trayecto, tan sólo con el sonido de la lluvia y la leve música que sonaba en la radio. Y cuando finalmente llegan y el Jeep se detiene frente de un enorme edificio de ladrillos rojos, Jimin lo mira con una mueca.

- Espera -dice antes de salir del coche-

Segundos después, Jimin le abre la puerta mientras sujeta un paraguas negro. Y para ser sincero, Jungkook tarda más tiempo del que debería en salir del auto.

Porque lo estaba procesando, el hecho de que realmente acababa de abrirle la puerta, y estaba sujetando un paraguas para que no se moje.

- Gracias -dice, escondiendo las manos en las mangas largas de su suéter y frunciendo levemente el ceño-

¿Esto realmente estaba pasando?

- No hay de qué.

Comienzan a caminar hasta la biblioteca, mientras Jimin mantiene el paraguas sobre Jungkook, únicamente sobre Jungkook.

Aprieta los labios y con una pequeña sonrisa nerviosa le dice;

- Hey, te vas a mojar.

Jimin lo mira, encogiéndose de hombros.

- Estoy bien, prefiero que no tengas frío.

Está tan malditamente confundido que no sabe que decir. Las palabras le causan una sensación que no sabe cómo describir. Pero si algo sabe, es que el sentimiento de su pecho es agradable.

- Gracias -Vuelve a decir en voz baja-

Y cuando levanta la cabeza para mirar al trigueño, su corazón se detiene cuando ve una pequeña sonrisa en sus labios.

- No hay de qué, Jungkook.


Una hora después se encuentran sentados en una mesa al fondo de la biblioteca.

Para ser sincero, nada más entrar,. Jungkook ha podido entender por qué Jimin prefiere venir aquí. El alto techo de madera y las enormes estanterías repletas de libros casi lo dejan sin aliento, sintiéndose un tanto pequeño en un lugar tan inmenso.

El pelinegro suelta un bufido que llama la atención del castaño, mientras Jimin pasa una de sus manos anilladas por su cabello.

- Hey, no te agobies -Jungkook dice suavemente-

Jimin lo mira con una pequeña mueca.

- Para ti es fácil, se te da genial.

El castaño le sonríe.

- Bueno, por lo que ha dicho el profesor Han, a ti se te daba igual de bien antes.

Jimin aparta la mirada entonces, comenzando a jugar con los anillos de sus dedos mientras se encoje de hombros.

- Supongo que después del verano estoy algo desconcentrado. -murmura-

Por su lado Jungkook aprieta los labios mientras asiente suavemente.

- Bueno, con un poco de ayuda terminará saliendo, no te agobies.

Jimin lo mira, y el castaño puede notar como la expresión de su rostro se suaviza.

- Eres adorable -Le dice dulcemente, y Jungkook siente que podría morir ahí mismo.

Nota el calor subiendo por sus mejillas y quiere salir corriendo porque ahora Jimin lo estaba viendo sonrojarse. El trigueño sólo estaba siendo amable con él y Jungkook sólo se estaba sonrojando como un idiota.

Pero para su suerte, el teléfono de Jimin comienza a sonar, captando la atención del pelinegro.

- ¿Te importa si salgo afuera un momento? Tengo que coger la llamada -Jimin dice, a lo que Jungkook asiente rápidamente-

- Para nada, no te preocupes -Le dice de forma nerviosa, intentando que los colores rojizos en sus mejillas no sean notables-

Jimin ni siquiera lo mira cuando se levanta de la silla y comienza a caminar entre las estanterías repletas de libros. Cuando Jungkook lo ve salir por la puerta, saca su teléfono del bolsillo de su pantalón, entrando rápidamente al grupo que tiene con sus amigos.

Jimin me ha aguantado el paraguas mientras caminábamos para que no me mojara.

Y me ha dicho que soy adorable.

¿En una escala del 1 al 10 que tan gay es eso?

Namjoon:

Gay no sé, pero en amabilidad se lleva un 10.

Taehyung:

7

Soohyun:

8

:)
Admitiré que no está siendo tan horrible como pensaba.

Va a leer la respuesta de sus amigos cuando Jimin vuelve con una expresión seria en su rostro.

- Jungkook, lo siento pero tengo que irme. -Es lo que dice tomando su material para guardarlo en su mochila-

- ¿Qué? ¿Por qué?

Jimin lo mira apretando los labios en una mueca.

- Una peque emergencia, te acompañaré a tu casa.

Frunce el ceño y siente la necesidad de insistir y recibir más información al respecto, sin embargo lo retiene y asiente-

- Está bien.

Cuando salen, la lluvia se ha calmado, pero aún así, Jimin abre el paraguas y lo pone de nuevo sobre Jungkook.

- No llueve casi, Jimin.

El castaño lo mira y se encoge de hombros.

- No importa, no queremos que te mojes ni tengas frío si podemos evitarlo ¿Verdad?

Esa sensación agradable se expande de nuevo por el pecho del castaño, haciéndole sentir confundido y reconfortante a la vez. No estaba acostumbrado a ser tratado de esa manera, así que tampoco sabe cómo reaccionar.

- Gracias -Jungkook susurra porque no sabe que otra cosa decir-

Jimin asiente, y Jungkook se pregunta cuando llegan al coche si Jimin realmente era así de amable y encantador con todo el mundo, si siempre era así y todo el mundo tiene la imagen equivocada del pelinegro.

Mientras Jimin conduce para llevarlo a su casa, Jungkook no puede evitar preguntarse si podría sobrevivir con esta nueva versión de Jimin que acababa de conocer.
















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