Yoon Bum es un chico de aproximadamente diecinueve años, el cual esta cursando la universidad, con unas excelentes notas y unos pocos pero buenos amigos, su vida es—como el lo cree— un tanto normal y común. No tan extraordinaria, no tan salvaje, no tan alocada solo normal. Y el mismo piensa que es un chico normal, pero claro sus amigos lo describirían como una persona adorable y humilde.

Y como buena persona en la escuela, humilde y de gran corazón como era su cumpleaños numero diecinueve decidieron hacerle una amistosa fiesta familiar junto con sus pocos amigos a los cuales apreciaba mucho.

— Chicos, no tenian que hacer esto— Bum hizo una sonrisa avergonzada con sus labios finos causando a alguna gente sonreir por lo tierno que se veia con las mejillas ligeramente sonrosadas. — En serio, no debían.

Su mejor amiga, Jieun Min de cabellos largos y castaños con un corazón tatuado bajo su ojos izquierdo, camino hasta el llevando el gran pastel helado que le habían comprado para celebrarlo, con exactamente diecinueve velas puestas sobre el dulce alumbrando el rostro del cumpleañero ya que alguién se habia encargado de apagar las luces.

Miro a Jieun con una sonrisa a medias la cual la chica le regreso inconscientemente. Todos en sincronización y algo desafinados le cantaron las canción del felíz cumpleaños. Bum reia por algunas exageraciones que sus amigos hacían al cantar pero igual sacandole algunas risas.

Cuando todos terminaron aplaudieron lo cual Bum también hizo con alegría.

Min dirigió la vista al pastel para después mirarlo. — Vamos Bum, pide un deseo.

"Sin este mundo yo seria infeliz así que por favor, no me lo quiten" soplo las velas para después sonreir a todas las personas que se encontraban junto a el.

Taeyang Himura, un apuesto chico de ojos pardos cafes y un cabello despeinado de color negro, uno de sus amigos alzó la voz. — ¡Mordida, mordida, mordida!

Yoon Bum en ese momento tuvo ganas de huir, conocia bastante a sus amigos para saber lo que planeaban. Nego con cara de horror  y antes de poder correr sintio una porcion de pastel sobre su rostro, esparciendose de barbilla a cejas. Jieun Min solto una carcajada limpia.

— ¡Justicia por Yoon Bum!— Gi Lee un chico pelirrojo y de ojos castaños—otro amigo y compañero de facultad—, alzo su puño mientras gritaba haciendo que todos fueran por un trozo de pastel. La chica con el corazón debajo de su ojo izquierdo trato de huir pero antes de eso, un Bun vengativo le dio un buen abrazo esparciendo todo el dulce que se encontraba en su cara sobre el de la chica quien entre risas trato de alejarlo.

De pronto la sala de estar se hizo un caos, parecia una guerra de pasteles, algunas personas tomaron cojines, sillas o hasta la mesa para ocultarse y tirar a los enemigos.

Bum sintió como un pedazo de pastel caia sobre su ropa a lo cual entre toda la gente trato de localizar a la persona que lo había hecho, y ahí se encontraba, su padre con una sonrisa maliciosa. Rápidamente tomo un pedazo y antes de tirarselo sintio una silueta a su lado, volteando miro a su madre quien estaba casí impecable sin ninguna mancha sobre su ropa. La señora Yoon miro a su hijo con una ceja alzada a lo cual Bum sonrio.

Contaron hasta tres y juntos lograron lanzarle el pastel sobre el rostro y cabello a su padre quien duras apenas levantó una bandera de color blanco, ¿de donde la había sacado? Nadie lo sabia.

Vio a su madre ir hasta su padre para ponerse a su altura y darle un dulce besó sobre su mejilla sin pastel. Una sensación calida se extendió sobre su pecho al sentir y ver el amor que sus padres aun despues de muchos años seguia viviendo como la primera vez.

No se imaginaba una vida sin ellos y de solo pensarlo sus ojos comenzaban a aguadarse, pero los tenía aquí, junto con el celebrando su cumpleaños un año mas. Los amaba tanto que su amor no podia explicarse con palabras.

Después de un rato mas, donde hubo mas pastelazos y comida siendo lanzada todos empezaron a comer de la comida que no habia sido tocada, por que su madre lo habia prohibido y claro, nadie se atrevía a desobedecerla. Su padre lo habia aprendido por las malas.

— La verdad íbamos a detener Min para que no te diera el pastelazo de tu vida pero fue demasiado tarde— Yong Son, una chica de cabellos negros cortos le sonrió divertida. Era una vieja amiga de su vecindad así que le conocía desde hace mucho.

— Que buenos amigos tengo— giro los ojos divertido.

Son le saco la lengua con gesto infantil.

— ¡Bum, ven un momento por favor!— Min le llamo desde la puerta a lo cual el fue hasta donde le llamo viendo dos sujetos, altos, algo mosculosos pero no tan exagerados con rostros atractivos. Ambos miraron al cumpleañero con sonrisa amigable sobre sus labios. — Ellos son Dae-Hyun y Sangwoo, estan conmigo en clases.

— Un gusto, mi nombre es Yoon Bum— se presentó extendioendoles la mano, Dae-Hyun dio un suave apretón saludandolo. Pero cuando fue el turno de Sangwoo sintió como una corriente eléctrica pasar por su espina dorsal.

— El gusto es todo mio— le sonrio mostrando una dentadura completamente blanca y unos diebres alineados perfectamente.

Miro ambas manos la cual Sangwoo todavía no soltaba, pero no miraba ambas manos, lo  miraba a el aun con esa hermosa sonrisa sobre su rostro, una dulce y calida.

Dae-Hyun tosio falsamente haciendo  que Sangwoo reaccionara soltandolo rápidamente con una mirada timida. — Broo, no seas tan obvio— se quejo cuando sintio un codazo en su costilla por parte de Sangwoo.

— Pasen, por favor— Bum los introducio a su hogar donde se escuchaba música un poco alta, algunos familiares y sus amigos bailaban sobre la sala de estar, pero mas que bailar parecía que hacian un tipo de ritual o danza de la lluvia lo cual le hizo reir.

Sangwoo observo cada facción en su rostro y como pequeñas arrguitas se acumulaban debajo de sus ojos en sus notables ojeras, lo cual le parecía tierno, demasiado tierno para ser real. Sintio la mirada de Bum sobre sus ojos y rápidamente miro hacia otro lado algo apenado.

El señor Yoon camino a la sala de estar para recibir a los invitados pero al mirarlos de arriba a abajo solto un quejido.—Cariño, Jieun le trajo strippers a Bum, otra vez, ¡pasame la escoba, querida!

— Papa no— Bum nego rápidamente tratando de no reir por la expresión que ambos tenían sobre sus rostros asustados.— Son compañeros mios, tranquilo.

— Si, señor Yoon, nada de strippers esta vez— Min sonrio con inocencia. El padre de Bum le fulminó con la mirada.

La señora Yoon quien venia con la escoba sobre sus manos miro a todos confundida. — Falsa alarma, cariño, solo son compañeros de mi precioso angel y de esta diablilla.

La señora le pasó la escoba a su esposo quien le miro mal.

— Bueno, mucho gusto, soy la mama de Bum y ustedes, wow si que son jovenes apuestos, ¿alguno esta soltero?

— Mamaaaaa— Yoon Bum alargo la palabra algo apenado por las cosas que su madre habia dicho.— Me estas avergonzando.

— Mi amigo esta completamente soltero, sin compromisos ni ataduras— Dae-Hyun señalo a Sangwoo quien le miro con las mejillas algo sonrosadas. Pero no se nego solo sonrio hacia la señora Yoon y Bum.

— ¿No Sangwoo tenía no-? — Gi alzo la voz mientras comia a lo cual Son rápidamente le tapó la boca con una servilleta murmurando un "eres tan asqueroso"

— Ex novia, terminamos hace cuatro meses— admitió mirando a Bum quien alzo una ceja con una sonrisa pequeña sobre sus labios.

El hecho de que lo aclarara rápidamente le gusto de alguna forma. ¿La razón? No lo sabia.

— Bueno, nunca es tarde para conocer nueva gente y mi Bum esta cien por ciento soltero— le guiño un ojo a lo cual el mas bajo puso los ojos en blanco.

— Oh dios, no puedo creer que hayss dicho eso.

— Si, yo tampoco— su padre le miro mal una vez mas, puesto no queria que nadie alejara a su pequeño angel de el y lo corrompiera.

Una hora mas paso donde los adolescentes estuvieron bailando, riendo y platicando entre ellos, y en ningun momento Sangwoo se separó de el, de alguna forma su compañia le hacia sentir comodo, en ningun momento quizo separarse de el. Aparte de que olia muy bien, se puso a inspeccionarlo.

Su cabello era castaño oscuro sobre su nuca y todo el cabello de arriba era de un color castaño mas rubio. Lo cual le parecio fascinante ya que el solo tenia un tono de cabello el cual era negro y fácilmente la gente deducia que era un emo antisocial, lo cual era mitad verdad pero eso es una historia aparte.

— ¡Hora de abrir los regalos!— anuncio su madre. Todos se pusieron al rededor de la mesa donde Bum se puso en medio.— Primero que nada, quien le vaya a regalar un dildo por favor, sean mas originales, ya tenemos cuatro por sus últimos cumpleaños— rápidamenteTaeyang tomo su regalopara quitarlo de la mesa ganándose un pequeño zape por parte del Señor Yoon.

La mayoría fue ropa, discos de algunas de sus bandas favoritas, libros y un diário, el penúltimo regaló que abrio el cual era su de Abuela mejor conocida como Nana Yoon o solo Nana.

— Gracias Nana— le dio un beso en su mejilla haciendo sonreír a su nana quien le guiño un ojo.

— ¿Ya no hay mas regalos? — Gi pregunto a todos a lo cual una respuesta se escucho.

— ¡Falta el mio!— todos abrieron los ojos al ver el regalo que traia lo cual sólo era Sangwoo con un moño sobre su cabello y unas rosas sobre sus manos.

El señor Yoon estuvo a punto de correr para detener la escena pero su madre lo detuvo con una sonrisa emocionada de oreja a oreja.

— ¿Sangwoo...?

El chico con cabellos bicolor tomo las rosas fuertemente sintiendo los nervios sobre todo su cuerpo, abrio la boca para decir algo pero de su boca no logro sacar nada. Miro el suelo y una vez mas los ojos de Bum que lo miraban con calma.

Inhalo aire por la nariz para después soltarlo por la boca, suspirando.

Y sin mas, lo dijo;

— Yoon Bum, se que no me conoces pero yo a ti si y podria decirse que me atraes de una forma muy especial y por eso quiero que me des una oportunidad para salir contigo en un cita, ¿lo harías?

Todos miraban maravillados y expectantes la escena. Yoon Bum hizo cara pensativa mirando las flores para después tomarlas y sonreír, una sonrisa que llego hasta a sus ojos.

— Porsupuesto que si, Sangwoo.

Mientras que todos festejaban El señor Yoon lloraba en una esquina siendo consolado por su querida esposa quien se encontraba mas que felíz.

"Querido Diario; hoy fue el mejor día de mi vida, y estoy muy agradecido con todo lo que tengo. Mi familia, mis amigos y mi vida.

Pdt: Las flores que Sangwoo me dio huelen muy bien.

Se despide, Bum. ♡