"¡Buenos días hijos de puta! ¡Buenos días hijos de puta! ¡Buenos días hijos de puta!..."

Issei apagó su despertador de mala gana después de un minuto más o menos. Quería escuchar su voz... solo un poco.

Luego miré hacia el techo con los ojos entreabiertos mientras los eventos de ayer aún estaban frescos en su mente. Sintió nuevas lágrimas brotar al saber que a partir de hoy no habría más Kaichou. Se volvió hacia un lado y miró a su Coco Daki y le dolía el corazón... pero aún sintió que el calor nacido de la camaradería lo envolvía como una manta. Mitigó su pena y probablemente fue la única razón por la que previno salir de la cama.

Se sentó en el borde de la cama, respiró hondo y lo dejó salir lentamente. Luego le abofeteó la cara. El dolor punzante lo despertó, "¡Muy bien! ¡Empecemos el día!"

Hizo su cama, se metió en su Daki después de darle un último abrazo fuerte y se limpió para el día.

Después de su ducha, bajó las escaleras y dejó escapar un bostezo. Supuso que se acostó bastante tarde anoche. Se frotó los ojos al entrar en la cocina.

"Oye Issei... ¿dormiste bien?" preguntó su papá.

Bostezó, "lo mejor que pude".

Su madre colocó un plato de comida sobre la mesa y dijo: "Sé que puede ser difícil, Issei. Tu padre y yo estábamos bastante deprimidos cuando uno de nuestros ídolos favoritos se graduó cuando éramos más jóvenes".

La cara de su padre se arrugó y sollozó: "¡Miharu!"

Su mamá se secó una lágrima perdida, "Todavía no lo hemos superado si soy honesto. Entonces, si quieres quedarte en casa hoy, puedes hacerlo".

(TN: Estos si son buenos padres :,v)

Se sintió tentado... muy tentado.

...Pero eso no es lo que Kaichou querría.

Le dio a su madre una pequeña sonrisa, "Estaré bien, mamá".

Ella lo abrazó, "Eres un chico fuerte Issei. Ahora ven a comer."

Comió su desayuno lentamente mientras sus padres tarareaban una canción juntos, "¡Hasta luego! Mueva su mano suavemente. Nos vemos, nos vemos". luego se abrazaron mientras cantaban la siguiente parte, "No, no llores. Ah, porque siempre podremos mirar hacia atrás y ver a nuestros amigos allí".

Ver a sus padres así... le dio esperanzas. Incluso después de tantos años, mantuvieron ese amor por su oshi en sus corazones.

Termino su desayuno y se preparó para ir a la escuela. Todavía se sintió un poco somnoliento, así que fue a buscar una lata de café a la nevera. Metió la mano en la parte de atrás y fue a agarrar una de las latas.

No se dio cuenta de que una lata surgió con una ráfaga de luz dorada.

(TN: Primer accion del Sacred Gear)

"¡Entiendo!" dijo mientras agarraba una lata.

Ni siquiera tuvo la oportunidad de mirarlo cuando su madre habló: "Issei, vas a llegar tarde".

"¡Bueno! ¡Adiós!" dijo mientras tomaba su bolso y se ponía los zapatos.

"¡Que tengas un buen día hijo!" gritó su papá desde la cocina.

Su mamá lo despidió, "¡Tendré la cena lista cuando llegues a casa!"

"¡Hasta luego!"

Luego salió corriendo de la casa y se dirigió a la escuela. Abrió su lata de café, la bebió, la arrojó a un basurero cercano y rápidamente se estremeció cuando la cafeína lo golpeó.

Murmuró: "Woah, ese es un café fuerte".

Se sacudió el nerviosismo y casi corrió a la escuela mientras el café fuerte se abría paso a través de su sistema.

Hizo un buen tiempo y de hecho llego a la escuela un poco temprano. Decidió holgazanear un poco desplazándose por su Twitter mientras esperaba que sus amigos llegaran allí. Casi lloró cinco veces de todas las publicaciones de Coco mientras esperaba.

Guardó su teléfono mientras Matsuda y Motohama llegaban.

Matsuda parecía relativamente normal. Motohama, por otro lado, tenía los ojos hinchados debajo de las gafas.

Issei colocó una mano sobre el hombro de su compañero Tatsunoko, "Motohama. Entiendo tu dolor."

Su amigo sollozó, "Issei, duele".

Issei apretó los ojos mientras las lágrimas amenazaban con caer, "Lo sé".

Matsuda dijo solemnemente mientras su mano descansaba sobre el otro hombro de Motohama, "No le deseo ese dolor a nadie".

Motohama dijo mientras se frotaba los ojos: "Para un Fandead amante de Pettan, estás bastante bien".

Matsuda sonrió, "¡Y para ser un Tatsunoko amante de los Oppai, no eres tan malo!"

Issei sonrió, "Todos los oppai son buenos chicos".

Sus dos amigos asintieron con la cabeza.

Fue entonces cuando sonó el primer timbre.

"Es hora de ir a clase entonces", murmuró Issei.

Los tres caminaron por los pasillos y notó que los ojos hinchados y las narices rojas eran bastante comunes. Kaichou realmente se conmovió a muchas personas.

Sus primeras clases transcurrieron como de costumbre, pero cuando llegaron a la clase de arte... Fue todo un espectáculo.

La Toba Sensei, normalmente tranquila y amable, se veía... horrible.

Su cabello y ropa eran un desastre. Sus anteojos redondeados estaban sucios y torcidos. Tampoco hicieron mucho por ocultar sus ojos hinchados que hablaban de horas de llanto. También llevaba el leve olor a alcohol. Lo que explicaba por qué estaba acunando su cabeza entre sus manos cuando probablemente tenía resaca.

Fue bastante impactante verla asi y despues de que todos entraron en la sala, la clase se sentó en silencio sin saber qué hacer con su maestra en ese estado.

Toba Sensei miró hacia arriba y murmuró: "Es un período libre hoy. Haz lo que quieras y puedes agarrar el material que quieras. Simplemente no lo desperdicies."

(TN: Wow, de verdad esta deprimida)

Su cabeza luego se estrelló contra su escritorio.

Luego, la clase se dividió en sus grupos de amigos y comenzó a hablar.

Issei se sentó solo mientras garabateaba en su cuaderno de bocetos. Mientras dibujaba otro Kaichou, escuchó a Toba Sensei tarareando una canción familiar.

Baka Mitai.

Así que tenía razón, Toba Sensei era un compañero Tatsunoko.

Sabía lo que tenía que hacer.

Agarró un trozo de arcilla y se puso a trabajar. Como anoche, canalizó su amor y devoción mientras trabajaba la arcilla. Tarareaba junto con su deprimida maestra.

Sus manos se movían como si estuvieran poseídas.

El cuerpo fue primero. Se asegure de que los senos senos lo mejor que podrian ser. Lo siguiente fue el cabello, luego la ropa y finalmente los accesorios.

Sacó las herramientas de arcilla y respiró hondo. Lo sentí burbujear dentro de él. Esa fe que todos tienen en Kaichou. Tiró de él y llenó su ser.

Alcanzó su vértice y explotó hacia afuera.

Sus ojos se abrieron de golpe y sus manos se agitaron mientras se grababan meticulosos detalles en la arcilla.

Rias se congeló cuando una ola de fe poderosa la inundó. Se tensó instintivamente... pero por la falta de dolor punzante, eso significaba que no era de origen abrahámico y se relajó un poco.

Le envió una mirada a Sona. Luego, con un sentimiento compartido, acordaron investigarlo tan pronto como terminara la clase.

Issei salió de su trance y miró la pequeña estatua de Kiryu Coco.

Fue perfecto.

Una pequeña sonrisa suave, un suave saludo de despedida, el cabello flotaba en el viento inexistente, y lo más importante (en su opinión) sus senos eran abundantes.

Estaba tan distraído que apenas notó el timbre. La clase se vació rápidamente mientras se dirigían a almorzar y se quedó solo con un Toba Sensei gimiendo.

Recogió suavemente la estatua de arcilla y se acercó a su escritorio.

"¿Oye, Toba Sensei?"

Levantó la vista y se ajustó las gafas, "¿Sí, Issei?"

"Quería dejarte tener esto", luego colocar la estatua en su escritorio.

Luego entrecerró los ojos ante la estatua presentada... y rápidamente gritó: "¡¡Kaichou!!"

Ella comenzó a sollozar e Issei asintió en solidaridad.

Después de un minuto, se secó las lágrimas y se sonó la nariz. Toba Sensei luego le dio una pequeña sonrisa, "Gracias Issei. Es hermoso."

Issei se frotó la parte posterior de la cabeza tímidamente, "Bueno, no podría dejar a un compañero Tatsunoko en ese estado ahora, ¿verdad?"

Ella se rió entre dientes y se sonrojó avergonzada, "Supongo que sí. Realmente la extraño."

Issei se secó una lágrima perdida, "Sí, yo también, Sensei".

Se quitó las gafas y dijo con cariño: "Gracias, Issei. Lo digo en serio. Ahora dirígete a almorzar."

Parecía que estaba fuera de su funk ahora.

Bien.

Él sonrió, "¡Claro que sí, Sensei!"

Se lavó y salió del aula sintiendo que su vínculo con su oshi se profundizó.

Después de todo, ayudar a alguien que lo necesitaba era lo que ella hubiera querido.

Se esforzaría por seguir el camino de Kiryu. Tanto de Coco como de Kazuma.

(TN: Asi se habla)

Subhistoria # 1 - La tristeza de un maestro [FIN]

Rias llegó al epicentro de la ola de fe y demostró cómo el profesor de arte bastante desalinizado salía del aula. A pesar de su apariencia, su paso era de resolución.

Sona murmuró: "Un maestro nunca debería venir a la escuela con ese aspecto".

"¿Tal vez ella tenía una razón? Sé que no es la primera vez que la veo hoy un poco tosca" —respondió.

Tenía una suposición sólida de por qué una parte de la escuela estaba deprimida. Implicaba la pérdida de cierto dragón.

"Bueno, los otros no huelen a alcohol", se quejó Sona.

Supuso que era una evaluación justa.

Ella y Sona entraron al salón de clases y rápidamente se concentraron en el objeto rebosante de fe... una pequeña estatua extremadamente bien hecha de Kiryu Coco.

Lo miró más de cerca y se sorprendió por los detalles que se le pusieron. Ella quería uno ahora.

La presencia de la estatua también probó su pequeña teoría. Toba Sensei era un Tatsunoko.

La graduación de Coco debe haberla golpeado muy fuerte. Perder tu oshi es devastador.

Sabía que si perdía a Sui-chan o a Mousey, probablemente se encerraría en su habitación por un tiempo.

Se volvió hacia Sona, que miró fijamente la estatua con un poco de... ¿reconocimiento? Huh, ella no la tomó por alguien para estabilizar al día con VTubers... especialmente dadas las payasadas de su hermana.

Rias estaba bastante segura de que al menos un tercio del contenido de Serafall hablaba de cuánto amaba a Sona. Los otros dos tercios eran juegos y karaoke.

... Ella puede sintonizar ocasionalmente ya que Serafall fue bastante entretenido de ver. Fue especialmente divertido escuchar sus diatribas sobre incidentes diplomáticos sobrenaturales.

(TN: Eso suena a una gran cantidad de informacion clasificada divulgandose, quiero verlos)

Ambos fueron interesantes e informativos para escuchar, incluso si la mayoría de su audiencia los excusó cuando volvió a contar lo que sucedió en un juego que jugó.

Sus transmisiones de karaoke también eran sus favoritas, ya que Serafall tenía una maravillosa voz para cantar.

Pero, sobre todo, tuvo la pelea más divertida con otro VTuber que tenía un hacha seria para molestar con las chicas mágicas.

El hecho de que disfrutara mirándola probablemente haría que Sona se arrancara los cabellos.

Es por eso que se asegura de no mencionar la carrera de VTubing de Serafall en torno a Sona.

Dicha chica frunció el ceño y murmuró: "¿Quién hizo esto? Está absolutamente lleno de fe. Si no lo conociera mejor, asumiría que es un ícono religioso".

Sona tenia razon. La fe en esta estatua rivalizaba con algunos de los ejemplos de artefactos de la iglesia que su padre le había mostrado para que pudiera tener una idea de qué evitar. Estar en presencia de esos picaba bastante. En comparación, era bastante agradable estar cerca... ¿esto es lo que la gente normalmente siente con la fe? Podría acostumbrarse si fuera honesta.

...Aunque ella preferiría que fuera una estatua de Suisei o Ironmouse, preferiblemente ambas.

Se preguntó si hacían encargos.

Rias colocó sus manos en sus caderas, "Bueno, al final es inofensivo. Sin embargo, tal vez esté atento a quién lo hizo".

Sona suspiró y la miró, "¿Supongo que los quieres?"

"Si están preparados. Pero, sinceramente, probablemente les encargaría algunas estatuas" respondió con sinceridad. Si tuvieran potencial, no le importaría proporcionaría un lugar en su nobleza, pero aparte de eso, se contentaría con encargar algunas estatuas. Ella ya tenía lugares potenciales para ellos en sus estantes.

Sona puso los ojos en blanco, "¿Más para agregar a tus santuarios?"

"No son santuarios", replicó arrepentido sintiéndose un poco avergonzado. Su colección de merchandising no era tan mala.

"Rías, son santuarios. He visto fotos de iglesias con menos iconografía", dijo Sona inexpresiva.

Rias luego resopló sintiéndose aún más avergonzada, "Bueno, vamos. No queremos llegar tarde a nuestro próximo almuerzo, ¿verdad?

Sona sonrió, "No creas que puedes desviar la conversación Rias".

"No soy."

"Si lo eres."

"No, no soy".

Detuvieron su ida y vuelta por un momento y luego compartieron una risa.

Mientras caminaban hacia sus lugares respectivos para almorzar, Rias vio a la profesora de arte pasar junto a ellos... y se vio significativamente mejor. Todavía un poco despeinada, pero ya no pareció un desastre de resaca.

Rias sonrió y juguetonamente tocó una Sona en el hombro, "Parece que se recompuso".

Sona resopló, "Bueno, bien. Sigue siendo poco profesional... pero me alegro de que se sienta mejor".

Rias se rió, "¡Te importa!"

Su amiga se sonrojó un poco y se dio la vuelta, "Bueno, son personas que tienen sus propios problemas, así que podría darles un poco de holgura".

Rias solo sonrió ante el acto tsundere de su amiga. ¡Era tan linda a veces!

(TN: Acordado)

Pronto se separaron de Sona y se dirigieron a la oficina del consejo estudiantil y ella al edificio ORC.

Entró y vio a Akeno ya comiendo su almuerzo.

Su reina le dio una ceja levantada, "¿Un poco tarde hoy Rias?"

Se deslizó junto a Akeno y agarró un sándwich, "Bueno, supongo que sentiste esa pequeña ola de fe antes, ¿verdad?"

Akeno tomó un sorbo de su té y respondió: "Lo hice. Se sintió un poco extraño, pero asumo que no es un problema".

Rias asintió mientras le daba un mordisco a su sándwich. Después de tragar, respondió: "Alguien se dedicó demasiado a hacer algo en la clase de arte hoy".

"Oh, esa es toda una sorpresa. Entonces, ¿qué fue?"

"Una estatua de Kiryu Coco", todavía no podía olvidar la sensación de calidez que emitía la estatua.

"Ah, creo que ella fue la razón por la que lloraste ayer, ¿verdad?"

Ella se aturdió un poco. No podía negar que vio la transmisión y se sintió un poco emocionada.

Akeno luego tarareó: "Hmm, pensar que tienen suficiente fe en ella como para hacer algo así es interesante".

Rías asintió ante eso. La fe en ese nivel generalmente se encontraba solo en los más devotos y encontrarla fuera de la religión era un poco anómalo. Una anomalía interesante.

Su reina entrecerró los ojos, "Reconozco esa mirada Rias. Los quieres."

Rias tomó un sorbo de té, "Tal vez. Pero tal como le dije a Sona, me contentaría con encargarlos".

Akeno luego dijo inexpresivamente: "Ah, sí, tus comisiones. Eres un mecenas regular del renacimiento con la cantidad de dinero que le das a los artistas".

Rias levantó la nariz y resopló: "Puedo hacer lo que quiera con mi dinero, Akeno".

Akeno se rió, "No hay necesidad de ponerse tan a la defensiva Rias".

Ella le sacó una lengua burlona a su Reina, quien simplemente se rió de la vista infantil.

La charla sobre sus comisiones le recordó revisar el Twitter de uno de sus artistas favoritos. Eran Tatsunoko, así que probablemente publicaron algo. Sacó su teléfono, tocó su perfil y rápidamente se detuvo al ver su última obra de arte.

...Fue hermoso.

Issei estornudó y tuvo la sensación de que alguien estaba hablando de él.