Epílogo

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Jungkook estaba nervioso y Hyunjin no dejaba de burlarse de él. Habían estado en la camioneta unas horas largas y no había dormido nada en el camino.

-Ya... Mi abuelita te va a amar -decía el niño.

Era como quien diría, la segunda o tercera presentación de Jungkook como el novio de SeokJin y viceversa. Primero había sido de forma muy relajada en aquel almuerzo con Nayeon y Chanyeol dónde se habían reconciliado. Aunque no estaban seguros aún de tener esa etiqueta, ya el resto sabía que eran algo exclusivo. Luego la fiesta en el club de Hyunjin, Jungkook tenía que admitir que había sido placentero ver a esas madres solteras desesperadas por su hombre, notar que de hecho, este estaba locamente enamorado de él. Y SeokJin había sido jodidamente demostrativo para las lenguas largas y ojos chismosos.

Aún reía cuando recordaba el rostro de esas mujeres.

Luego el aniversario laboral festejado en el bar Lips de SeokJin, mucha gente había quedado encantada con su hombre y no se sorprendía, SeokJin tenía una imán para el público.

Pero conocer a sus suegros era otro nivel, ni siquiera con Min Gyu había sido tan difícil puesto a qué primero habían sido amigos y todos lo conocían ya, decir que luego era el novio, solo era el paso seguro a qué sus padres lo adorarán más de lo que ya lo hacían en ese entonces.

Está presentación era muy nueva, lo hacía sudar.

- ¿Y si no me quieren? -fingía Jungkook más preocupación frente al niño.

SeokJin negaba riendo.

Hyunjin tomaba su rostro, detrás en el asiento y tiraba de Jungkook quien estaba en el asiento copiloto.

-Nadie podría jamás odiarte, Jungkookie. Eres increíble -decía alzando su brazo y gritandolo victorioso.

Dios, Jungkook adoraba a esa criatura quien lograba calmar sus nervios, porque SeokJin solo se reía de él. Bastardo.

Cuando llegaban a la casa de los padres del barman, Hyunjin salía corriendo hacia los brazos de una mujer que parecía más joven de lo que en realidad era. Se veía muy parecida a SeokJin, bueno, SeokJin a ella. Era realmente hermosa aún con su cabello canoso.

Jungkook estaba en pausa mientras SeokJin bajaba las maletas, se quedarían una semana allí y se preguntaba si iba a sudar todos los días así.

-Desencantado -decía el barman, tocando el hombro de Jungkook como si hubiesen estado jugando dicho juego con Hyunjin-. Vamos, quita esa cara de susto. Es más probable que yo le desagrade a ella y me dé un sermón de que te cuide a que sea de forma contraria.

Y Jungkook reía nervioso por eso, siguiendo los pasos de SeokJin mientras veía como la mujer dejaba de besar a su nieto y miraba finalmente en dirección a ellos.

-Seokjinnie, cariño -decía con dulzura extendiendo sus brazos-. ¿Tienes más tatuajes, hijo? -decía con preocupación.

SeokJin chasqueaba su lengua mientras dejaba las maletas-. ¿Qué cosas dices, mujer? Son los mismos. Abrázame -soltaba el barman, inclinándose para encajar en los brazos de su madre.

«Adorable» pensaba el pelinegro.

La mujer ahora lo miraba atentamente, de arriba a abajo, Jungkook no entendía cómo podía sudar tanto.

-Eres más guapo que en las fotos -mencionaba la mujer, tomandolo de los brazos y dándole un cálido abrazo.

Jungkook sonreía y SeokJin fruncia el ceño -. Yo no te mandé fotos de mi novio -decía confundido.

-Tú no, pero yo sí -respondía Hyunjin sonriente.

-Oh, gracias Hyunjinnie -mencionaba Jungkook -. Es un placer conocerla finalmente.

-Lo mismo, cariño -decía amorosamente, peinando el cabello de Jungkook, luego giraba y miraba a SeokJin quien le sonreía, pero la mujer le daba un chirlo en su brazo-. Cuídalo, Kim SeokJin.

Jungkook juntaba sus labios intentando no reir.

-De acuerdo, eomma. No es necesaria la violencia.

- ¿Dónde están mis muchachos? -decía un señor que salía de la casa. Hyunjin corría hacia el hombre gritando "hal-abeoji".

SeokJin se acercaba a Jungkook en ese momento-. Te dije que me golpearía a mí y no a ti

-Oh, cállate. Ella es adorable

-Lo es -decían, ambos charlando detrás de la mujer que podía oírlos y le sonreía a los dos amablemente.

- ¡A-ppa! -exclamaba SeokJin con brazos abiertos.

El hombre se acercaba y abrazaba a su hijo, SeokJin tenía una relación genial con ambos. Él ciertamente no había tenido un padre presente, pero era adorable ver al padre de SeokJin recibirlo así.

-Cuando tu madre me dijo que vendrías a quedarte una semana y que traerías a tu compañero contigo, casi me agarra un infarto de la sorpresa -decía el hombre.

Al parecer, SeokJin había heredado su humor de ambos.

-Los milagros ocurren, señor -decía el castaño, cortando el abrazo con el hombre y volteando en dirección a Jungkook-. Papá, él es mi novio: Jeon Jungkook.

El hombre miraba en dirección al pelinegro-. Así que tú serás mi otro muchacho de ahora en más. Bienvenido hijo, no hay devoluciones -decía el hombre, tirando de Jungkook para un abrazo.

Este no podía no reírse a carcajadas con eso-. Tranquilo, señor. No lo devolveré y es un gusto conocerlo.

Luego de las presentaciones y los chistes, se disponían a entrar a la casa, Hyunjin y SeokJin tenían su propia habitación cada uno cada vez que caían de visita a pasar algunos fines de semana. Pero SeokJin se sorprendía cuando notaba la cama de dos plazas en su habitación, antes tenía una de plaza y media.

- ¿Cambiaron la cama? -cuestionaba SeokJin.

-Tú padre insistió y yo estuve de acuerdo ¿O pretendías que Jungkook-ie durmiera en el piso? -decía la mujer, dejando un par de toallones en la punta de la cama.

SeokJin miraba a Jungkook con ojos libidonosos-. No exactamente, eomma -respondía.

La mujer palmeaba su espalda-. No seas sucio, Kim SeokJin. Ahora pueden tomar una ducha y bajar en unos momentos, el almuerzo está casi listo -decía saliendo por la puerta y girando una última vez-. Bienvenido Jungkook y si SeokJin te lastima, me avisas a mí.

SeokJin resoplaba mientras Jungkook sonreía-. La falta de respeto y confianza que mi propia madre me demuestra

-Oh, dramático. Cuida bien de él, es más hermoso que Nayeon, pero no le digas eso a mi adorada niña -decia la mujer con sorna.

-Oh, se lo diré. Tenlo por seguro -decía SeokJin.

-Oh, busca pleitos -decía la mujer en broma-. Bajen en cuanto puedan -sentenciaba, cerrando la puerta tras su salida.

Cuando quedaban a solas Jungkook suspiraba-. Tu madre me recuerda a la mía

-Mujeres que no dan vueltas con sus palabras -decia SeokJin.

Jungkook sonreía y se acercaba a él para tomarlo de la cintura.

-Entonces... ¿Esto es un festejo por cumplir casi medio año juntos? -preguntaba juguetón.

SeokJin lo abrazaba también y se hacía el pensativo-. Medio año, dios... No crei que llegaríamos tan lejos, pero todavía me siento muy apegado con tu bonito culo y como te ves.

Jungkook le daba un golpe en el hombro y SeokJin reía, pero no lo soltaba.

-También me siento muy encariñado con tu polla, que decirte -respondía de igual forma, SeokJin se vanagloriaba-. Estuve pensando... -decía de repente.

SeokJin fruncía el ceño-. ¿Debo preocuparme?

-Quiero hacerme un tatuaje -decía el pelinegro.

-Por favor no me digas que quieres uno a juego, porque eso es algo muy delicado -decía, casi hiperventilando.

Jungkook fruncia su ceño y lo golpeaba otra vez-. Sonaste jodidamente asustado, Jiiiin. Pero no, no quiero uno a juego, pero me gustaría que tú lo elijas y también la zona donde debería hacerlo.

SeokJin abría sus ojos y Jungkook veía el momento exacto de cuando sus pupilas de dilataban.

-Por favor no digas que tu firma en mi culo -soltaba con seriedad fingida.

SeokJin comenzaba a reír -. Pese a que es una gran idea, no. Porque significa que alguien tendría que ver ese bonito culo, tocarlo y apoyarse en él. No, no, no. Ni loco, eso es mío.

Jungkook comenzaba a reír-. Quien te ha visto y quién te ve tan posesivo -se mofaba el pelinegro.

-Bueno, puedes culpar solo a ti. Y si te molesta, mi padre ya te dijo que no acepta devoluciones -decía con su mentón en alto.

Jungkook se sorprendía cada día que ese hombre era suyo. Que ese tipo tan duro y sentimentalmente negligente y antiromantico-como lo había conocido-había decidido entregarse a él en cuerpo y alma, venciendo sus miedos y cambiando muchos de sus defectos para poder caminar a la par.

Todavía recuerda en ocasiones la primera vez que se conocieron. Sí, definitivamente había hecho click aún en ese entonces y con cada encuentro solo parecían enterrarse más en el otro. Y aunque había sido un camino con piedras e inseguro, lo habían logrado. Todavía discutían por algún que otra cosa, pero habían aprendido a comunicarse y corresponderse. Incluso muchos en el bar lips sabían que SeokJin ya no estaba disponible porque este lo decía sin tapujos, poniendo el limite y distancia que era necesario. Y Jungkook no había temido al pasado de SeokJin y sus ligues, simplemente miraba sus ojos y sabía que ese hombre lo amaba con locura.

Probablemente deberían de ponerlo en el libro de record Guinness por haber enamorado al barman más coqueto de todo Corea del Sur, porque joder que lo tenía comiendo de la palma de su mano y él estaba igual. Dándose la libertad de seguir soñando con la relación y familia que aún seguía deseando. SeokJin sabía que Jungkook todavía anhelaba lo que siempre había mencionado desde un inicio. Algo que él también había anhelado antes de cruzarse con Kang Joon quien, gracias a Dios, estaba más que en el pasado.

SeokJin cumplía con todo lo que había buscado y con aquello que no sabía que necesitaba. Un hombre con los pies sobre la tierra que se volvía un soldado cuando Jungkook lo necesitaba.

-Te amo, Kim SeokJin -susurraba, mientras acariciaba su rostro.

Jungkook ya lo había dicho meses atrás, luego del Te amo de SeokJin a él solo le había tomado un mes más para tener el coraje de decirlo, porque sentirlo, lo sentía hacía ya un buen tiempo. Aún cuando se negaba a admitir que SeokJin siquiera le atraía, Jungkook sentía que había mucho más.

-Sabes, creo que tú y yo estuvimos malditos desde un inicio, cuando me rechazaste desdel el principio, lograste que me obsesionara disimuladamente contigo-decía el barman.

Jungkook fruncia su ceño-. ¿Cómo que malditos?

-Para terminar así -decía SeokJin y reía a carcajadas cuando Jungkook hacía un puchero furioso.

-La palabra que buscas es "destinados" jodido insensible -decía empujándolo, pero SeokJin no lo soltaba, continuaba riendo y lo contagiaba, luego sentía sus manos en su rostro, acunandolo y mirándolo con dulzura-. ¿Qué?

-Nada, yeobo... -susurraba, acariciando el lunar debajo de los labios de Jungkook-. Sólo, te amo. Niño bonito y soñador empedernido.

-Y yo a ti mi jodido aguafiestas, al final si resultaste ser mi maní -decía Jungkook sonriendo.

SeokJin fruncía sus cejas confundido hasta que recordaba y reía gravemente-. Al parecer si estaba en ese pequeño por ciento de hombres que podían conquistarte.

Jungkook reía-. No, no lo estabas. Eres todo lo contrario, pero estoy bien con eso. Cómo dijo mi madre, eras lo que necesitaba, que irónico ¿No?

-Adoro la ironía -respondía SeokJin.

Jungkook reía con él y luego miraba en dirección a la puerta-. ¿Es muy imprudente ducharnos juntos y luego bajar?

-Nah, ya no existo para Hyunjin, sus abuelos lo complacen en todo y nadie subirá hasta que nosostros bajemos -mencionaba SeokJin alzando sus cejas reiteradas veces.

-No vamos a hacerlo en la ducha, Jin... ¿Cómo voy a mirarlos a la cara después?

SeokJin rodaba los ojos-. De acuerdo mi príncipe, solo nos ducharemos... Prometo no ponerte un dedo encima, niño bonito.

Jungkook reía para luego dejarse arrastrar a la ducha.

- ¿Creés que aún es muy prematuro para hablar de matrimonio? -se burlaba Jungkook de repente, mientras se desnudaban.

SeokJin lo miraba con una sonrisa burlona-. No yeobo, podemos hablar del matrimonio todo lo que tú quieras...

-Si algún día decido que seas mi prometido de verdad, sé que dirás que sí... ¿Cierto? Porque soy tu niño bonito y tu yeobo... Y me amas.

Jungkook batía sus pestañas mientras sonreía dulcemente, SeokJin relamia sus labios y se quitaba la última prenda de ropa.

-Yeobo, te amo con locura, pero ¿Y si digo que no? -se burlaba.

Jungkook entrecerraba sus ojos-. Oh tú vas a casarte conmigo, tenlo por seguro Kim.

- ¿Es una amenaza o una promesa? Ay, cariño... Tendrás que trabajar duro por ello

-Vivo duro, gracias a ti -decía Jungkook desnudandose-. Así que merezco totalmente un SÍ el día de mañana.

SeokJin abría la ducha regulando el agua y luego extendía su mano al pelinegro-. Ten cuidado -exclamaba cuando se hallaban juntos debajo del agua, tirando su cabello hacia atrás, hacía lo mismo con el de Jungkook-. ¿Estás seguro que el día de mañana querrás comprometerte a largo, laaaaargo plazo conmigo?

Jungkook sonreía con dientes y todo-. Bueno, tu padre dijo que no aceptaba devoluciones y hace mucho te dije que encontraría al hombre de mis sueños, me casaría con él y estarías en primera fila para verlo.

SeokJin abría sus ojos con una sonrisa dulce-. Tienes razón, si lo hiciste -susurraba-. Sería como súper primera fila

"Mmhp" tarareaba Jungkook.

-Bueno, tendras que complacerme constantemente, veinticuatro siete, si quieres una aceptación de mi parte.

Jungkook le regalaba una mirada del tipo incrédula y algo altiva-. ¿Y si digo que no? -se mofaba imitandolo.

-Oh, yeobo. Tú no puedes decirme que no -susurraba en los labios ajenos para luego darle de esos besos que dejaban a Jungkook sólo un poco desorientado y más enamorado.

Muchísimo más enamorado el uno del otro.

Fin.

Muchísimas gracias de corazón por el apoyo a este Jinkook y a mí. De verdad, desde que comenzó este dúo tuvo un gran recibimiento hasta el final. No siempre puedo responder sus comentarios como antes, pero los leo A TODOS y me encanta ver cómo se ponen en cada parte y con cada capítulo, siempre es inspiración y gasolina para el motor y así continuar escribiendo.

Hace poco no tenía ideas nuevas para este par, pero recordé en mis borradores una historia que les quedará.muy bien y tambien recordé el fanart que definitivamente será una historia futura OMEGAVERSE del Jinkook (tambien recordé un AU que tenía en mi viejo Twitter y nunca vio la luz porque me borraron la cuenta) cuestión se vendrán una nueva historia JINKOOK de mi parte, solo les pido tiempo. Es una promesa.

Espero hayan disfrutado de principio a fin esta historia y espero verlos en las próximas (especialmente a las only Jinkook que tengo como lectoras) y aquellas que me apoyan aunque el Jinkook no sea su Shipp principal pero les gusta mi escritura.

Digamos adiós a esta segunda historia exclusivamente Jinkook, adiós al yeobo niño bonito y al Barman, para nada heterosexual Playboy. Fueron un dúo que amé mucho y espero ustedes también.

Gracias por despedir otro fic conmigo, este año seguiré firme, gracias por haberme entendido en mi difícil proceso personal y haber dejado sus palabras de apoyo y consuelo.

Les dejo este bosquejo de Jinkook en lo que sería la ducha, pero no parece, bueno, lo intenté, lo terminaré de pintar para subirlo a mi Instagram luego
(ig: neditiomsart2)

Terminado UwU

Con amor niñita NanyKoo 💜

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