❛ No me sorprende el hecho
de que seas modeló ❜

──✧Pov: Percy Jackson

La comida de la escuela estaba jodida, sin duda era un asco Pero valía la pena sino queráis terminar en la gradas del campo de Lacrosse como un rarito solitarios o esperan, yo soy ese.

Mis pies se apresuraron al caminar hacia mi destino final (las gradas), había perdido a Lysander al salir de clases, mi reacción fue ir con él a pedirle su quería almorzar junto a mi pero al verlo salir con  Stacy.  Me fui de ese lugar derrotado.

«por los dioses, ¿en serio pensé que un chico popular y hermoso como él iba a estar con alguien como yo?»

Lo comprendi desde el momento en dónde paso por mi lado agarrado de la mano de la morena, ambos corpantian una sonrisa cómplice y yo sentí un vuelvo en mi estómago, lo deje d pasar después de todo Leroy solo era un amigo.

Me senté en la banca del medio, ya que no me gustaba estar abajo ni arriba mi lugar favorito estaba en el medio de este. Suspiré para sacar mi almuerzo (que mi madre había preparado para mí) un sánguche y una botella de agua (el agua era de mi elección) sin duda todo lo que mi cuerpo necesitaba.

Tras el segundo mordisco en mi sánguche mis pensamiento más reflexivos salieron a la luz, como el hecho de que Annabeth (mi mejor amiga) me había confesado que le gustaban tanto chicos como las chicas. No era sorpresa para mí claro, Pero era un tema nuevo. No me causo incomodidad nada de eso.

Después de todo los dioses no tienen una sexualidad definida, las historias de Zeus y Apolo son un claro ejemplo de eso. Nunca lo había pensado, ya que al pensar como sobrevivir a las misión y también al descanso y la alerta de los monstruo, se dedicaba a vivir sus pequeños momentos con su madre me paz.

He escuchado de las hijas de Afrodita y los hijos de Apolo lo hermoso que era el sentimiento de amor y experimentar como enamorarse por primera vez, no me llamaba la atención, nadie lo hacía y sabía que para que una persona te atraiga nos guiamos por el físico (lamentablemente) y Lysander Leroy me había parecido un adolescente atractivo.

Parecía un modelo de esas revistas juveniles como las hijas de Afrodita tenían guardadas o vendían en el campamento cuando Quirón nos la veía o el señor D se hacía el ciego y no le daba importancia.

Pero mis pensamientos se interrumpieron por una voz.

—Jackson —era una voz grave pero dulce, casi hipnotizante.

Gire para mirar atrás de mi espada sorprendido, no esperaba verlo aquí.

—¿Lysander? —dije incrédulo al verlo parado al lado mio con un bolso negro en las manos.

Juego nervioso con las tiras de su bolso que colgaba de su hombro.

—Yo, lo siento si te interrumpo…—dijo de forma apenada y retrocedió un paso atrás. —puedo marcharme…

Lo interrumpo antes de que se vaya.

—¡No! —dije más alto de lo que me gustaría.

Me mordió la lengua avergonzado por mi tono de urgencia por como lo dije.

—No me molesta —dije para ocultar mis mejillas sonrojadas mirando mi sánguche a medio comer.

—En ese caso…— se sentó a mi lado y saco su almuerzo. —Te haré compañía Jackson.

Nuestras miradas cruzaron y no pude evitar caer rendida a esos ojos celeste claros, mi nervios me jugaron en contra cuando sentí mi estómago emocionarse por tocar su mano. Baje mi vista a lo que su mano sostenía.

Un envoltorio de ensalada y agua.

Mire incrédulo por segunda vez en su almuerzo y pareció notarlo porque soltó una risita.

—No te sorprendas, ser un modelo tiene su sacrificio —dijo mientras buscaba algo más dentro del bolso.

—No me sorprende el hecho de que seas modeló, me sorprende que tú estómago pueda resistir solo con eso —dije con un tono divertido para luego llevar mi sánguche a mi boca.

El no borro su sonrisa y eso ya me estaba alterado (mi estómago lo sabía) una vez que ya saco su tenedor destapó su ensalada.

—Es sorprendente el hecho de como tú cuerpo se acostumbra con una dieta después de tanto tiempo —dijo para llevar el tomate y la lechuga a su boca.

Fruncí el ceño.

—¿Dieta?

El asintió con la cabeza.

—¿Has probado una hamburguesa? 

El nego.

Contuve el aire en mis pulmones. ¿Cómo era posible que alguien no pruebe una deliciosa hamburguesa? Era un delito. Una vez que mi amigo ingirió su porción pudo hablar.

—Mi madre me ha criado desde niño para comer comida carne solo una vez al mes y eso al veces ni siquiera era carne sino un pedazo de pollo —finalizo para llevar la botella de agua a su boca y beber.

—¿Tu madre es vegetariana? —pregunte.

Él asintió.

—¿Tu lo eres?

Él nego.

—Entonces te llevaré a un Macdonald y tú comerás un combo especial de una hamburguesa completa.

Rio ante mi idea.

—Estoy seguro de que primero tenemos que convencer a mi madre de dejarme salir y dudo mucho de que eso pase —dijo con un tono triste antes de llevarse a comer otra porción de ensalada.

Acerque mi rostro al de él haciendo que deje de masticar y sus ojos se encontraron con los míos. Con una sonrisa ladeada le dije: —Tengo una fuerte convicción de hacer cambiar de opinión a las personas.

Sus mejillas se sonrojaron.

El final del almuerzo había acabado y mi compañero y yo tuvimos que marcharnos de nuevo a nuestros salones (ambos nos tocaban el mismo) caminando entre risas por el largo pasillo Lysander se propuso llevarme a mi casa luego de que yo hablé con su madre sobre nuestra posible salida al Macdonald.

Me puse nervioso, aparte de no tener otros amigos (que no sea Annabeth y Grover o hasta incluso Thalía) no se me daban bien las salidas sin causar problema… y con respecto a eso me había olvidado por un segundo de que era un semidios y posiblemente nos pondría en peligro en nuestra salida.

Decirle que no podía salir con él no era un opción, ya que yo era el más emocionado por eso, Pero rezarle a mi padre por cuánto unos minutos encubra mi aroma a semidios tampoco lo era, mayormente porque no me escharia.

Opte por la tercera opción, enfrentar mis problemas, iría con él, claro primero tratar de convencer a su madre (le rezo a los dioses por eso) excepto a Zeus seguramente el haría todo lo contrario.

Nos cruzamos con nuestros compañeros de curso, en uno de esos grupos estaba Stacy quien al ver a Lysander a mi lado lo llamo, me prepare mentalmente para empezar a caminar solo de nuevo pero mi sorpresa fue grata al verlo como ignoraba a la morena y seguí a mi lado.

Un pequeño sentimiento de satisfacción indico mi pecho.

Antes de sentarnos en nuestros asientos el agarró mi mano. —Te esperaré a la salida —dijo para luego marcharse hablar con Charlie.

Me quedo parado en medio del salón con las mejillas sonrojadas y mi corazón latiendo a mil por horas.

— Después de una década decidí volver a esta historia y posiblemente estará actualizando más seguido por ser para mí la última semana de clases para comenzar las vacaciones de invierno.

— Espero a que les guste el capítulo y no se olviden de votar y comentar ☺️

— Vean que hermoso el separador y la portada hecha por sammatown muchas gracias reina.