La puerta de Taehyung sonó y después se abrió. Jimin apareció en el marco de la puerta. Miró a su amigo tan pálido y cansado, pronto corrió hasta él para meterse en la cama y abrazarlo fuertemente.

Jimin había recibido un mensaje de Hoseok donde le pedía cuidar de Taehyung y mantenerlo al tanto por si algo le sucedía, Jimin en ese momento no sabía lo que sucedía hasta que Hoseok le contó que él se encontraba en Daegu y Taehyung en casa.

—Lo siento tanto, Tae —le dijo triste.

—No fue tu culpa, Minnie —contestó sin ganas.

—Tampoco tuya ni de Hoseok —apartó unos cuantos cabellos que caían en su rostro—. Tienes que ser fuerte Tae, Hoseok me envió cientos de mensajes, incluso llamó para pedirme que te cuidara y que estuviera aquí apoyándote y claro que lo haré —le sonrió un poco.

—Gracias Jimin, lo aprecio mucho pero ahora quiero estar solo.

—No, olvida que te dejaré aquí sin protección y tan débil.

—Ellos no me harán daño, son mis padres.

—Nunca se sabe y por la forma en que tu padre reaccionó es mejor mantenerte vigilado para sus siguientes movimientos.

—Está bien, te puedes quedar, pero no los odies, ellos tienen sus motivos y creo en Hoseok, me quedaré aquí esperándolo.

—Entiendo, pero tienes que salir de casa, recuerda que comenzaste un contrato con Gucci ¡Con Gucci! ¿Estás consciente de lo que hablamos? No nos puedes dejar a Hye y a mi ahora que estamos como trainees por lo que tú ya estás dentro.

—Tomen mi lugar si quieren, ya no seguiré Jimin, no tengo ganas de nada.

—Eso se acaba hoy, no te dejaré en la cama todos los días. Alguien me comentó que no has comido desde ayer que regresaron de casa de Namjoon hyung, además, unas personitas vinieron para ayudarte.

—¿Quiénes? —preguntó.

—Ahora lo verás, pero primero necesitamos pararte de esta cama, darte una ducha, vestirte tan lindo como siempre, demostrarle al mundo porque trabajas para Gucci y después saldremos a almorzar juntos —Taehyung sonrió un poco por el optimista de Jimin.

El rubio se levantó primero de la cama para después tomar las manos de Taehyung y comenzar a sacarlo. Cuando lo logró lo empujó al baño, Taehyung comenzó a desabotonar su camisa lentamente mientras Jimin miraba que lo hiciera.

—Listo, me quité la camisa —le dijo mientras la dejaba en la ropa sucia.

—Todavía no terminas, quítate los pantalones —pidió. Taehyung suspiró y dirigió sus manos hasta su pantalón.

Jimin sonrió y se dio la vuelta mientras cerraba la puerta. Caminó al armario de Taehyung y buscó entre toda su ropa algo lindo y cómodo. Cuando escuchó el agua caer sonrió y volvió a caminar hasta el baño. Entró para dejarle un bóxer y después volver a salir, esperándolo en la cama con una gran sonrisa.

Después de unos minutos el agua dejó de caer, no tardó mucho cuando Taehyung salió del baño vistiendo su ropa interior mientras secaba su cabello. Jimin caminó hasta él, tomando su mano para dirigirlo hasta donde se encontraba la ropa que había escogido para este.

Lo miró vestirse y después lo sentó mientras corría por un cepillo y la crema para cabello. Cepillo sus cabellos un poco y de su bolsillo sacó un delineador. Delineó sus ojos, le colocó bálsamo labial y admiró su obra maestra con una sonrisa.

—Création parfaite —dijo sonriente mientras besaba sus dedos como típico cocinero francés orgulloso de su creación.

Taehyung se rio un poco, ahora se puso de pie para caminar por sus zapatos y colocárselos. Jimin lo tomó de su brazo, ambos bajaron a la sala, ahí se encontraban sus padres, Hye, Jungkook, Yoongi, Namjoon y Seokjin. Tae sonrió un poco, dejándose abrazar por la chica que se había lanzado a sus brazos antes que los demás.

La abrazó sonriente, después de ella los chicos reclamaron un abrazo de Taehyung. Los señores Kim miraban a su hijo recibir los abrazos con felicidad y emoción. Después de todos los abrazos Hye y Jimin tomaron sus manos para salir de casa.

—Taehyung lo intenta —suspiró—. Agradezco que tenga a Jimin para sacarlo de casa.

—Tranquila mujer, nuestro hijo no se iba a quedar en casa solo por Hoseok.

—Eres muy malo con ellos, acepté cambiar su relación, pero no esto —la mujer se levantó del sillón, molesta.

—Parece que ya lo olvidaste —bufó—. Tengo muchos planes para ellos dos, solo espera algunos años para que lo veas, su relación cambiará.

La mujer lo miró, pronto entendió y asintió rendida. Lentamente caminó hasta la cocina, perdiéndose ahí. El señor Kim miró los papeles que se encontraban enfrente de él, leyó la información y la volvió a guardar en la carpeta de Hoseok justo donde se encontraban todos sus papeles, como su acta de nacimiento y los demás papeles que guardaron desde su nacimiento.

🔥🔥🔥

Hoseok había recibido una llamada por la mañana, las clases estaban próximas por empezar y tenía que recoger sus libros para darles un vistazo antes de comenzar. Como su padre dijo, unos hombres fueron por él, al parecer la escuela también les informaba a sus padres.

Los hombres lo llevaron hasta donde comenzaría sus estudios la próxima semana. La Universidad Nacional De Daegu, su padre no perdía el tiempo, esa Universidad era la más prestigiada, para no decir que era la mejor y más privada de Daegu.

Suspiró antes de bajar de la camioneta y encaminarse hasta la entrada. Ahí un profesor lo recibió, Hoseok dijo su nombre y este automáticamente lo dejó pasar hasta la oficina del director, pasando por encima de los cientos de chicos que hacían fila por sus libros.

El director lo recibió y lo saludó alegre.

—Kim, que bueno es tenerte aquí, tu padre me habló de ti y de tus excelentes calificaciones en el colegio, también me comentó que tenías muchas invitaciones para varias Universidades, es un placer tener a otro Kim aquí.

—Sí, mi padre habla mucho.

—Y tienes el sentido del humor de tu padre —se rio un poco—. Bien muchacho, espero que estés preparado, tu padre habló muy bien de ti y de tus capacidades, no nos decepciones —le entregó unos papeles—. Este es tu horario, no lo pierdas, también llevas el número de tu casillero. Lee entre todas las actividades que establecemos y corre a inscribirte —le dijo—. En esta Universidad también nos preocupamos por la salud de nuestros estudiantes, es por eso que tendrás varias instalaciones a tu elección, las canchas, piscina, el estudio de canto, el estudio de danza y los gimnasios están abiertos todo el día, también contamos con varias actividades dentro y fuera de nuestras instalaciones, esperamos que pases unos increíbles cinco años con nosotros.

—Gracias. Al parecer mi padre también le habló sobre la licenciatura que quiero estudiar.

—Así es, licenciatura en derecho, es bueno, nuestros profesores son abogados, todos y cada uno de ellos. También cuentas con prácticas a nivel profesional.

—Que bien.

—Es magnífico, Kim —sonrió—. No te quitaré más de tu tiempo, te entregaré tus libros, los demás los irás recibiendo al inicio de clases —el director le entregó dos libros y Hoseok se levantó de su silla.

Tomó los libros e hizo reverencia para salir de la oficina. Miró las hojas que le había dado el director y caminó hasta las inscripciones de taller, tomó su favorita y después salió del lugar ganándose la mirada de varios de los estudiantes. Claro, pasó sin hacer demasiado esfuerzo, eso era algo que los había dejado boquiabiertos y con ganas de conocer al chico.

¡Hola!

¿Cómo están?

¿Qué les pareció el capítulo?

Tae lo dijo todo ya, en los próximos capítulos entenderán un poco más la situación

Por cierto, para no hacerlas esperar tanto y como ya saben, son cinco años, directamente me iré a la graduación para que venga el final del problema

Espero que les guste💜

¡Adiós!