A altas horas de la madrugada todos se mantenían en tensión, una operación estaba por ser realizada y no sabían que resultados obtendrían.

En aquella sala, además de los doctores, se encontraban un chico que estaba por recibir una nueva oportunidad y otro que amó tanto que fue capaz de darlo todo para otorgarle a su amor más años de vida...

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Min YoonGi era un chico como cualquiera, a sus 14 años estudiaba, vivía con su familia y tenia amigos, todo parecía ir bien pero nadie sabe que nos depara el destino...

Lo que al principio parecía normal en él, cosas como la fatiga, aceleramiento excesivo del corazón al correr por distancias cortas e incluso esas leves punzadas no muy comunes en el pecho, resultaron algo peor. Una noche aquellas punzadas se hicieron mas fuertes hasta que el pequeño chico de piel blanca termino inconsciente en medio de la cena, cosa que alerto en demasía a sus padres.

La causa según los doctores, un leve aumento en una de las paredes del corazón, mejor conocido como miocardiopatía hipertrófica.

Y aunque en si aún no había nada de que preocuparse, los síntomas seguirían...

A sus 18 años lo mismo ocurrió en medio de la escuela, los doctores detectaron que dicha "mal formación" aumentó, pero, según ellos, aún así no habría de que preocuparse si se recibía en tratamiento adecuado.

Así pasaron los siguientes años para YoonGi, entre medicinas y visitas al Doctor, lo que le provocó una fuerte depresión que sin saber se convirtió en su eterna compañera, cosa que se daría cuenta mas adelante...

Al cumplir sus 24 años, ya siendo un hombre graduado, además de las oportunidades laborales las amorosas también llegaron a él, siendo robado su corazón por un joven de mejillas redondas y ojos sonrientes.

Después de dos años y medio de relación ambos comenzaron a vivir juntos, todo parecía ir en orden. A pesar de que su hogar era pequeño, su amor lo llenaba de calidez y pintaba con arcoiris hasta los días más lluviosos.

Eran felices, todo parecía un hermosos sueño.

Pero todos los sueños algún día terminan y para YoonGi era el momento de despertar.

Los síntomas se complicaron, la constante opresión en el pecho y la fatiga le impedían hacer muchas cosas comunes, sin contar que cada vez se ponía peor. Los doctores informaron que pese al tratamiento, aquel grosor en las paredes de su corazón seguía aumentando impidiendo su correcto latir y si eso seguía así en uno o dos años su corazón dejaría de latir por completo, la única forma de corregirlo, un trasplante.

Así fue como comenzó la espera, la espera de que alguno de los donantes legales falleciera y así poder dar esa segunda oportunidad a alguien, en este caso a YoonGi.

Nada ocurrió.

Todo siguió su rumbo sin ninguna noticia y esto se volvió una pesadilla, mejor llamada realidad...

Una cena de tercer aniversario.

Una pareja feliz pese a todo.

Una propuesta de matrimonio.

Y una gran noticia para el mayor de ambos... O almenos eso creyó el menor.

Jimin, novio de YoonGi, desesperado por conseguir el bienestar de su amado, ya que no soportaba verlo tan decaído y sin tanta vida como antes, recurrió a su última opción.

Mientras YoonGi se la pasaba trabajando en su propio motivo especial, buscando papeles, un juez, trajes y sobre todo un anillo... El motivo especial de Jimin fue convertirse en un donador legar y obtener el permiso para dar su vida por YoonGi.

Cosas muy distintas, pero ambas con el fin de hacer feliz a quien tanto amaban.

El gran día llegó, desde la llegada del sol a su ventana anunciando un nuevo día, la pareja se sintió completamente feliz y nerviosos, hoy era el día, su tercer aniversario.

Al caer la noche, la pareja fue a celebrar tan especial fecha, una cena romántica preparada por el mayor luego de un lindo día juntos.

Por un lado, Yoongi estaba nervioso a más no poder. Irónicamente su corazón latía acelerado como prueba y sus manos temblaban con levedad al momento de sacar aquél objeto de su bolsillo...

Por otro lado, Jimin no sabía cuál sería la reacción de su pareja, se sentía angustiado por lo que pasaría pero en su mente y corazón se repetía que era por él bien de su único amor, sin embargo, aún asi era difícil para él dar aquella noticia, pues sabia que tal vez su pareja no la tomaría del mismo modo.

Pero toda valentía en el menor se fue en el momento en que Yoongi de rodillas ante él comenzó a hablar, confesando cada uno de sus sentimientos y el anhelo de vivir siempre a su lado, argumentando lo mucho que lo amaba y lo importante que era en su vida, y sobre todo haciéndole aquella pregunta que volvió al menor un mar de lágrimas.

-Jiminnie... ¿Serias mi compañero eterno? ¿Irías conmigo al altar y formarías conmigo el fuerte lazo del matrimonio?

Fueron las palabras que derritieron el corazón del menor, quien sin pensarlos aceptó llenando de besos y abrazos a su ahora prometido. Aquel papel que mostraba el verdadero futuro del mayor quedó oculto, Jimin no quiso arruinar el hermoso momento, grave error.

Un anillo de compromiso.

Regalos para la feliz pareja de casados.

Felicidad y amor desbordando en cada poro de aquel par.

Y un suceso para nada agradable...

El día de la boda había llegado, la pareja de recién casados festejaba felíz. La familia y los amigos de ambos celebraban juntos.

Todo era hermoso y perfecto, tanto como soñaron y planearon juntos.

La pareja no podía estar más feliz, pues una nueva etapa juntos acababa de comenzar, ¿quién pensaría que dicha etapa sería la última?
¿Quien creería que ese día fuese el último de felicidad para el mayor, y el último de vida para el menor?

Nadie hubiese pensado que esa misma noche, mientras ambos hombres brindaban por su amor, Yoongi comenzara a sentir malestar.

El dolor punzante y la falta de aire que al principio ignoró, terminaron siendo un tormento que su cuerpo no soportó.

Quedó inconsciente.

Fue llevado al hospital.

Solo había una última solución.

Lágrimas de dolor, angustia y rabia.

Un nuevo ángel en el cielo.

Un alma completamente rota.

Una nueva estrella en la oscura noche.

Una eterna condena.

Jimin había dado su vida por Min YoonGi, su mejor amigo, su esposo y su único amor.