Quizás si las cosas hubieran sucedido de otra manera, si tan solo los dos hubieran tenido una historia de amor, si tan solo hubieran deseado estar juntos y no por obligación. Los dos se hubieran enamorado, pero las cosas no siempre son así.
     

— Jungkook— Jiwoo entro a la habitación con su traje negro a juego con la camisa de color rosa que tenia puesta, el iba a ser su testigo— La abuela dice que bajes ya— miro con cara de tristeza a su cuñado, este no es un día nada feliz para todos, excepto para la abuela de Jimin, que esta saltando feliz de un lado a otro.

El omega le sonrio triste.

— En un momento bajo Jiwoo— le sonrió.

El alfa solo asintió y salio de la habitación cabizbajo.

Ya cuando Jungkook estuvo solo, se arreglo la corbata de color blanco, toda su vestimenta, tanto como traje, camisa, corbata, eran de color blanco, a la vista era un hermoso omega de 25 años que estaba por casarse ese día, pero la realidad era otra, el no quería casarse pero debía de hacerlo, no solo para no defraudar a su abuela, sino que también lo hace pensando en su bebe, en ese pequeño ser que no tiene la culpa de nada, aquel angelito que estaba dentro suyo. Lentamente puso una de sus manos en su aun plano vientre, sintió una calidez extraña pero reconfortante, su cachorro le decía que no debía estar triste, que el lo iba a cuidar.

El día anterior había llamado a Jin, le había contado todo, su Hyung prometio que estaria en su boda, el le había dicho que no era necesario, porque ¿como podría volar desde Japón en una sola noche?, pero su amigo fue terco, así que ese día puede que Jin este junto con el y se lo agradecería, era su amigo y necesitaba hablar con alguien acerca de sus sentimientos.

Termino de ponerse el velo, sintió mucho dolor, no solo porque lo estaban obligando a casarse, eso no lo preocupaba, a el le preocupaba dejar sola a su abuela, dejar a Eun Ja con cinco meses de embarazo, el ya no podría ayudar a su hermana en sus antojos raros, y todo por el error que cometió en Macao. Todo cambiaría desde este momento.

Con su ramo en manos salio, nadie podía notar las pequeñas lagrimas que se deslizaban por su rostro, el velo lo tapaba todo, así como una pequeña venda en sus ojos, pero cuando la sacara todo le caería como un sueño, tan de repente.

Bajo por los escalones uno por uno, a cada paso sentía una presión muy fuerte en su corazón, sentía que no podia respirar, pero se obligo a hacerlo. Ya cuando estuvo abajo vio a su abuela junto a Eun Ja, su cuñado estaba a un lado de ellas, todos lo observaban con la tristeza en sus miradas, el se abligo a sonreír, aunque nadie lo podía ver el seria fuerte, asi como lo fue toda su niñez y juventud. Siempre seria bueno, como recordaba en aquel sueño, donde su mamá le decía que debía ser fuere y siempre ser bueno, y sobre todo sonreír, sonreirle a las cosas malas, para que estas fueran buenas. Sonara estúpido pero a el le ayudaba en esos momentos.

— Mi niño— le dijo su abuela, a pesar de lo dolida que se sentía la señora, no iba a negar a su sangre, ella sabe que su nieto cometió un error pero no era para condenarlo de por vida, aquel "error" ya estaba echo y no había vuelta atrás. Se acercó a Jungkook y tomo sus manos, ella no era de abrazos o palabras bonitas, pero si era una de esas mujeres que te decían palabras ostiles que eran realistas — Esto no sera nada fácil Jungkook, pero debes de enfrentar los problemas— acarició un poco las manos que tenia agarradas, sintiéndose incómoda por el ramo— Se que tu vida sera feliz, aunque al principio cueste tu debes de seguir adelante, siempre contaras conmigo amor— le beso una de las manos— Eres igual a tu padre, igual de bueno, con esos sentimientos tan hermosos — su mirada se puso cristalina al recordar a su hijo.

— Lo si-ento — susurro Jungkook, aun se sentía culpable por haberle fallado a su abuela, que era como su madre—  en serio, abu-ela lo lamento tan-to.

— Jungkook — le reprendió— te dije que seas fuerte y mira con lo que me sales, basta de lagrimas amor— Era una alfa sobreprotectora y no le gustaba en absoluto ver a su nieto llorar — Basta de lagrimas, debemos de estar felices hoy, es tu boda y no quiero que parezca un funeral — Soltó las manos de Jungkook y busco en su bolso, tenia un regalo que darle.

De su bolso saco un cofre de terciopelo color negro, en el había un anillo de oro con pequeños diamantes incrustados en el, lo miro con amor, pues era el anillo que ella había comprado para su omega, y le tenia mucho aprecio.

—  Jungkook, toma —puso el anillo en la mano desocupada de el omega— es para tu boda— le dijo feliz.

— No abuela— quiso devolverle el anillo pero ella negó— abuela es tuyo, yo... yo no lo merezco.

La anciana bufo.

— Tonterías— Se dio vuelta y salio por la puerta— ¡Que no piensan venir! — grito desde afuera.

           ㅇ.ㅇ.ㅇ🌸ㅇ.ㅇ.ㅇ

Esto estaba mal, el ni quería casarse, el no lo quería hacer, pero, debía de hacerlo, bufando se acomodo un poco su ya demasiado des-echa corbata, bufando aun mas fuerte a su reflejo.

Se escuchó la puerta de su habitación ser abierta, por ella entro su abuela con un hermoso vestido de color azul, estaba muy linda pero la sombra de lo que iba a pasar ese día aun cubría su vista, el no quería casarse.

— Jimin, hijo— la anciana se tapo la boca con una expresión de amor y asombro— estas hermoso— soltó para acercarse, y abrazarlo con efusividad, al fin y cuentas era su querido nieto el que se casaba. Rechistando el alfa correspondió el abrazo, no podía negarle nada a esa hermosa mujer.

— Mi niño— dijo su abuela al separarse un poco, lo tomo de los hombros y lo vio con amor — espero que tu vida sea prospera y con total alegría— le dijo feliz, para empezar a acomodar la corbata de su nieto.

— Yo también lo espero— dijo de mala gana.

— Te espero abajo amor— lo soltó y salio a la primera planta, la boda seria en su jardín así que el solo debía de bajar y prácticamente pararse hasta que toda esta "payasada" pasara.

Sus manos viajaron instintivamente a el bolsillo izquierdo de su pantalón, debía de llamar a Hye Yin, lo había echo toda la semana pero ella no le contestaba, esperaba que hoy fuera la excepción.

Marco el numero y se lo acercó a el oído.

Un pitido... dos... tres... y contestaron.

— Hola ¿Jimin? — se oyó la voz de una dormilona Hye, eran casi las 10 am.

Dentro del corazón de Jimin se sintieron los pedazos quebrarse, el realmente amaba a Hye Yin, pero ahora debía de romperle el corazón.

—¿Jimin? —el sonido de su voz lo saco de su trance.

—Hola— respondió firme, sentía como un nudo se le formaba en la garganta.

— Jimin, que gusto oírte— le contesto muy feliz Hye Yin— lamento no aberte contestado— dijo triste, porque prácticamente había ignorado a el rubio por mas de dos semanas— lo siento.

— No importa Hye yin— le contesto, se estaba obligando a tragarse el nudo que se formo en su garganta, debía ser fuerte— ¿como estas? — Le pregunto.

Se oyeron varios suspiros del otro lado de la linea.

— Es impresionante Jimin— dijo feliz— sabes he llenado dos coliseos yo sola— exclamó feliz.

— Me alegro— le contesto— Hye, debo de decirte algo.

Del otro lado se escucharon los gritos de otras muchachas, al parecer todas estaban felices.

—  Jimin debo de cortar, me esperan abajo— dijo feliz— Te Amo, nunca lo olvides.

Y corto.

Dejo el celular a un lado y paso sus manos por su rostro, su mente le daba vueltas.

¿Cómo fue tan estúpido?

¿Cómo pudo haber caído en la trampa de ese omega?

Eran obvias sus intensiones, era obvio que lo querían atar a algo para tenerlo a su antojo.

Soltó un grito de frustración que fue tapada por sus manos, pero lo echo, echo esta, aunque el no seria tan tonto. El le haría unas pruebas de paternidad a ese engendro que crecía dentro de ese asqueroso omega.

El alfa creía que ese bebe no era suyo y que su abuela lo obligaba a casarse porque era su última opción. Camino por el cuarto buscando aquel anillo que había comprado, de nada servia guardarlo, el no había comprado un anillo nuevo por la desesperación y con lo confundido que estaba no podía pensar, además de que lo había olvidado por completo.

Encontró el cofre de terciopelo color vino, lo abrió y vio el hermoso anillo que antes estaba destinado a Hye Yin, pero que ahora seria de ese omega, un repentino disgusto creció en su corazón, el odiaba a ese omega castaño. Sin pensar mas en el asunto metió el cofre en su volcillo.

Salio y camino por el pasillo principal, al ser dueño de una de las empresas mas grandes de corea el tenia una mansión como vivienda, siempre estuvo acostumbrado a los lujos porque desde que nació era así, todo el mundo le daba lo que queria, no se le negaba absolutamente nada, y todo esto seria de su hijo.

Se detuvo abruptamente ¿Pero que estaba pensando? ese engendro de seguro no era su hijo, no debía de pensar así, le echo la culpa a su lobo que parecía estar muy feliz de que aquel omega lo engañara diciendo que ese bebe que tenia era suyo. Sintió un golpe muy fuerte en su hombro, le dolió, miro a un costado y se encontró con la mirada feliz de Hoseok, que tenia un brazo apoyado en el.

— Hola hermanito— rodó los ojos, ya iban días en que Hoseok lo llamaba así, pero no le disgustaba, de echo le daba miedo encariñarse con el cabeza de zanahoria, porque Hoseok se había cambiado el color de cabello tiñendolo a un Naranja, pero un naranja rubio, se veia bastante bien— dime como lo hiciste.

Algo confundido levantó una ceja, no sabia a que se refería Hoseok.

— ¿A que te refieres? – le pregunto.

Hoseok solo levantó las cejas, clara expresión de perversidad.

— Dime ¿como hiciste para conseguir a un omega y de pasó un hijo de la noche a la mañana?— le pregunto, el día en que comprometieron a Jimin el se fue a su casa y cuando despertó se entero de que seria tío y que pronto abria una boda, en si para Hoseok todo cayo como un balde de agua, había dejado a Jimin soltero en su oficina y regreso siendo esposo y padre, a sus ojos el rubio fue muy rápido y el quería un consejo.

Jimin solo rodo los ojos.

— Solo debes de ir a Macao y algún omega aprovechado te drogara y se ofrecerá delante tuyo —lo miro— es asi como lo conocí a el, el y su "cuñado" me echaron una trampa, y yo como un estúpido caí redóndito — un gesto odio se plasmó en su rostro.

Hoseok puso una cara de asombro, el no sabia que las cosas hubieran sucedido de esta forma, aunque algo en el interior de su corazón le decía que esto no era así, y que debía de oír la versión de la otra parte.

— La abuela nos espera— le dijo el rubio para seguir su camino, Hoseok se encargaría de descifrar toda la verdad.

En la parte de abajo todo era normal solo hasta salir al jardín trasero donde se realizaría la boda. El jardín estaba muy bien decorado, tenia unas bancas acomodadas igual que en una iglesia, en el frente de todo estaba un atrio, en el cual ya estaba el padre ensayando los votos mamatrimoniales, las bancas tenían adornos con telas de seda y pequeñas flores, todo parecía salido de un cuento de hadas, no sabia como es que su abuela pudo organizar esto en tan poco tiempo, solo habían pasado dos días desde que lo comprometieron a la fuerza con aquel omega, que hoy sería su esposo.

Pero que ni crea que le dejare las cosas fáciles -Penso-

—Jimin— oyó el grito de su abuela, camino hasta acercarse a ella.

— Si abuela— le dijo desganado, el no pretendía ser el perfecto novio feliz y enamorado hasta las yemas. No, el seria realista, y esto no lo tenia feliz así que no fingiria estarlo.

— Cambia esa cara– le dijo con una sonrisa— veras que esto no es del todo malo— le acarició el rostro con amor— En un futuro agradecerás esto.

Jimin rodó los ojos, como puede agradecer una boda obligada, eso no tenia lógica.

— Si, claro abuela — exclamo con ironía en su voz.

— Necesito que estés en el atrio—  señalo el lugar serca del padre, donde estaba Hoseok y su madre, la señora Jung estaba con un rostro de desagrado total, pero a el no le importaba en absoluto— En unos momentos llegara el novio— le dijo feliz su abuela, ella era la única que estaba como en las nubes feliz de este matrimonio, y el ya sabia el porque.

Sin muchos ánimos solo asintió y fue a tomar su lugar, no pasaron ni dies minutos cuando la música  (usual que sonaba en las bodas) comenzó a sonar anunciando la llegada del novio, un escalofrío recorrió su  espalda, sus manos empezaron a sudar, entrelazo sus dedos nervioso, las personas/invitados, ya estaban en sus asientos, en el lado izquierdo los invitados del novio alfa, y en el derecho los del novio omega. Entre los invitados de ese omega pudo distinguir a aquel hombre de baja estatura y regordete, el mismo que se había echo pasar por uno de servicio en el hotel de Macao,  su sangre hirvio en furia pero controlo su olor.

Como podría ser tan descarado -pensó- el había invitado a aquel alfa que (según lo que el pensaba) lo había ayudado a engañarlo, era mas que obvio que todo esto era un plan de ese alfa regordete, el "cuñado" y ese omega que se ofreció, el estuvo aun mas decidido que nunca, Juro que le sacaría la verdad a ese omega embustero.

○○○🌸○○○

Jungkook se sentía nervioso, ya estaba al principio del camino a el "altar" estaba a punto de dar el "si acepto", su abuela se puso a un lado de el y le ofreció la mano, ella lo entregaría, un poco nervioso entrelaso su brazo al de su abuela, ella le dio una sonrisa reconfortante pero el aun estaba muy nervioso y asustado, lo bueno era que sabia muy bien controlar sus emociones, el sabia hacerlo desde que tuvo memoria y es por eso que la mayoría de las personas lo veían como alguien tímido y sin carácter. El prefería pasar desapercibido aunque ahora era imposible, todas las miradas estaban en el.

La música empezó a sonar y el muy nervioso se aferro aun mas a el brazo de su abuela, sentía que en cualquier momento podría caer, sus piernas temblaban, se obligo a ser fuerte, el siempre se obligaba a ser fuere y dar una sonrisa.

Miro a el frente y empezó a caminar junto con su abuela, observo a aquel alfa, al parecer el no estaba nada contento con la boda, pero ¿quien lo estaba? Nadie, ni el estaba feliz, excepto la abuela del alfa que estaba con una inmensa sonrisa viéndolo, la mujer parecía buena pero Jungkook no podía confiar, esto del embarazo lo tenia muy alerta.

Ya estando a unos pasos de el alfa su abuela se detuvo, el evito mirar a el sujeto, no podría aguantar mirarlo, y no era por miedo o algo así sino que lo ponía muy nervioso, el alfa era muy guapo pero tenia una aura dominante alrededor.

— Park Jimin te entrego a mi nieto Jeon Jungkook— le tendió su mano y el solo se dejo hacer— espero que la prosperidad  reine en su hogar y que  ambos sean muy felices.

El alfa aun con la mente llena de rencor y pensamientos muy malos tomo la mano del omega, aquella mano era todo lo contrario a el, esa mano era cálida y suave, sus dedos eran largos y finos, una corriente recorrió por su columna, era único el toque de la piel de aquel castaño, ignorando lo que sentía el respondió.

— Gracias— fue lo único que pudo salir de su boca.

Ambos se pusieron frente a el padre. La boda transcurrió normal, llego el momento de los votos matrimoniales, ambos sabían que decir, ya conocían las palabras de un emparejamiento, solo era cuestión de pronunciar las palabras sagradas y Jimin fue el primero.

— Yo alfa — vio el anillo que descansaba en uno de los cojines espesiales que habían preparado para los anillos, lo tomo— Te acepto como mi luna— sin mirar a el omega tomo su mano y deslizo lentamente el anillo en su dedo— fuimos unidos desde el inicio de los siglos y lo seguiremos siendo hasta el final de ellos — entrelazo sus dedos con los del omega, era casi un ritual lo que hacían — ambos somos uno — termino de decir y soltó la mano.

Era el momento del omega.

— Yo omega, te acepto alfa— tomo el anillo que le había dado su abuela, este También estaba sobre un cojin muy fino al igual que el anterior, tomo la mano del alfa y lentamente deslizó el anillo en su dedo — Juntos somos uno y lo seguiremos siendo— al terminar de ponerlo hizo lo mismo que el alfa, deslizó su mano entrelazando ambas manos— hasta el fin de los siglos — y también solto la mano.

Al ya haber terminado los votos matrimoniales, el padre siguió con la boda, pasaron minutos de bla bla bla y finalmente llego el momento.

— Ambos sellaron su vida— dijo el padre—  la diosa luna los protege, de los siglos a los siglos amen. — cerro el libro— puede besar a el novio.

Jimin lentamente subió el velo de Jungkook, revelando asi al hermoso omega bajo el, si las cosas hubieran sucedido de otra forma quizás, solo quizás, el se hubiera enamorado de ese omega, pero la realidad era otra, y el le haría la vida imposible

Sin pensar mucho puso sus labios encima de los contrarios, fue un beso corto pero se sintió cálido y extrañamente delicioso, el sintió esos labios deliciosos y hasta quiso volver a probarlos pero se prohibió hacerlo. Los invitados gritaron efusivos, todos muy felices por la unión de una nueva pareja.

○○○🌸○○○

Tengo el miedo de que antes de leer este libro, hubieran leído un día con ella, ya que ahí hay puros spoilers 😶.

No lean ese libro aún, por favor. 🤕

           🌸Ever-Dreams🌸