–Sasha, estás loca –Habló la joven de cabello rojizo. –No sé qué decirte–Murmuró.

–Boscha... Quiero a una Anne feliz, y pues... N-No es que Marcy no la pueda hacer feliz, pero... –En mis pensamientos solamente fluía el hecho en que Wu estaba haciendo todo mal, debería estar yo en su lugar.

–... Pero Anne es difícil de hacer feliz –Sonreí enternecida –Y lo único que quiero es que sea feliz

–Es raro–Murmuró la mayor.

–¿Qué cosa? –

–Las conocí desde primer año de secundaria, vi su relación crecer, se casaron e incluso planearon tener hijos frente a mí –Suspiró –Ahora estoy viendo cómo estás destrozada, aun así no quieres quedarte con los brazos cruzados.

Sasha asintió y se recostó en el sillón –Cometí una equivocación Boscha– Habló.

–Fue un mal entendido –Respondió Boscha.

–Cómo sea... Ya ni sé si sentirme mal por mí misma o por el hecho que llevas siete años enamorada de Anne y Marcy la conquistó en unos meses –Mencionó –¿Qué sientes cuando alguien logré en meses lo que intentaste por siete años?

–Se siente horrible–Suspiró –Pero ya me acostumbré, y creo que es lo que tú debes de hacer.

–¿Entiendes Sasha? –

Sasha asintió a duras penas y resoplo por encima del cojín del sillón. No, no entendía cómo debía de acostumbrarse a eso.