SeokJin conducía aparentemente tranquilo hacia la mansión de sus "padres". En la parte de atrás iba una enorme jaula, con "algo" dentro.

Había hablado con JungKook seriamente la noche anterior después de sus momentos eróticos, por lo que su Lobo estaba alerta pero muy escondido en el fondo.

Sabían lo que tenían qué hacer, él llevaba consigo micrófonos del tamaño de una mosca y micro cámaras implantadas en sus gafas. Estas también le servirían como sensores para detectar el calor corporal que emiten los hombres Lobo por naturaleza, así sabría si habían más de uno secuestrados.

Por supuesto que sus padres no eran tontos, por lo que antes de salir lo habían rociado para encubrir su aroma real. Además, había tomado un supresor, todo para que el efecto fuese más duradero.

Había un enorme margen de error, pero era todo o nada, y SeokJin no estaba dispuesto a que su familia corriera más riesgos.

"Ya casi llegamos, amor". -Le dijo a su pareja a través del vínculo.

"¿Es necesario que esté en mi forma animal?" -Dijo con notorio mal humor.

Jin sonrió. -"Sí, sólo así creerán que te atrapé en el bosque".

"Y sí que me atrapaste." -Su tono sensual hizo que el de ojos (ahora castaños) se sonrojara.

"Compórtate, ya estamos aquí". -Estacionó el auto cuando las enormes puertas se abrieron para él.

"Todo saldrá bien". -Fueron las últimas palabras de Jeon antes que un par de hombres tomaran la jaula como si no tuviera una vida dentro.

SeokJin quiso gritarles que tuvieran más cuidado pues era su esposo a quién cargaban ahí, pero obviamente no podía decir nada.

—Vaya, vaya... -Una amarga voz femenina se escuchó cuando entró en la sala y la jaula quedó a su costado. —Así que por fin te dignaste en ver a tus padres.

—Hola, mamá. -Dijo neutral, aunque por dentro le daba asco llamarla así.

— ¿Qué me traes? -Preguntó la mujer observando la jaula cubierta por una enorme capa negra.

—Como te lo dije por teléfono, es un Lobo. Un pura sangre.

— ¿Y con qué objetivo lo traes a nosotros? -Cuestionó alzando su perfecta ceja y cruzaba sus brazos bajo el pecho.

—Sé que son cazadores, ¿o me equivoco? Podemos ganar mucho dinero con él.

— ¿De dónde sacaste eso?

—Simplemente lo sé.

SeokJin y la mujer llamada EunHa se observaron en silencio durante algunos minutos, ninguno daría su brazo a torcer.

Pero la mujer pronto se cansó y suspiró sonoramente. Regresando su vista a la jaula.

—Sí, somos cazadores de Lobos, en especial de los cambia forma.

— ¿Cambia forma? -La manera en la que Jin miraba "confundido" a la mujer ante eso era digna de un Oscar.

EunHa sonrió con malicia y llamó a uno de sus sirvientes, un enorme tipo llevaba con el otra jaula, y dentro estaba un Lobo negro.

—Jinnie, te presento a nuestra adquisición más veterana.

Al quedar al descubierto, vio a aquel Lobo encadenado del cuello y patas a la jaula. Tenía signos de tortura pero aún así, era tan imponente que incluso la presencia de un alfa como JungKook quedó en segundo plano.

SeokJin sintió su sangre arder en cólera, ¿cómo se atrevían a someter a uno de los suyos de aquella manera tan salvaje? El Lobo alzó su mirada, intensos ojos violetas lo miraban con fuerza. SeokJin sabía que había perdido el color de su rostro.

«No puede ser...» Susurró en su mente, su Lobo interno estaba eufórico, Kook lo sintió y no pudo evitar crisparse mientras observaba al otro Lobo en la jaula, aunque su brusco movimiento hizo que llamara la atención de la mujer nuevamente.

—Quiten la capa. -Ordenó severa mientras caminaba hacia él.

SeokJin seguía en shock mirando a aquel Lobo que también lo observaba. Pero cuando "su madre" se paró frente a él, tuvo que regresar a su papel.

JungKook quería lanzarse sobre la yugular de semejante aberración al tenerla de frente, la mujer lo miraba con detalle y asintió en aprobación.

—Es un Lobo precioso, hijo... Nos servirá de mucho.

— ¿Ese Lobo...? -Preguntó con voz calma, pero él no se sentía así.

—Oh él... -Dijo con desdén sin dejar de mirar a Kook. —Es nuestro premio mayor... De todos los que cazamos, sólo él sobrevivió; incluso al veneno que le disparamos hace años. -La mujer sonrió con sorna.

SeokJin casi se cae al ver sus sospechas confirmadas, pero cuando alguien lo sujetó de los brazos y lo lanzó al suelo de forma desprevenida. Sintió que su mundo se caía sobre él.

—Si el padre ha logrado sobrevivir todo este tiempo... -Escuchó la voz de aquel hombre que lo había "adoptado". —Su hijo puede ser el doble de resistente, ¿no crees?

SeokJin vio la sonrisa malvada formase en los labios rojos de EunHa mientras decía que se llevaran a los dos Lobos al laboratorio y a él... A él lo llevarían a la sala de tortura.

—Nunca fuiste bueno en nada, pero ahora... Que tú solito decidiste vendernos tu alma, pequeño Jinnie, traeremos a tu Lobo a la vida... -Lo tomó del cabello y le arrancó las gafas. —Y por fin lograremos que nuestros experimentos funcionen al tener la sangre de tres cambia forma.

Jin abrió sus ojos asustado. En su mente sólo vagaba JungKook y...

"¡JungKook!" -Gritó en su cabeza.

"Aún estoy vivo... Y tu padre también". -Declaró con dificultad.

Los ojos de Jin brillaron en lágrimas pero se negó a dejarse vencer, no permitiría que lastimaran a los suyos, nunca más.

Con fuerzas renovadas y sabiendo que sus primos y hermano pronto estarían ahí con la policía, su Lobo tomó parte de su cuerpo, EunHa fue testigo de como los ojos marrones de Jin cambiaron a violetas y un par de garras rasguñaron su traje carísimo haciéndolo pedazos, la mujer cayó de trasero al piso y gritaba como la loca que era.

"Su padre" lo sostenía con fuerza pero él, al ser un Omega furioso, no tuvo problemas para levantarse y de paso lanzar al hombre por los aires hasta que chocó contra la pared más lejana.

Lo que sucedió después fue como un borrón, SeokJin luchaba contra todos aquellos matones que se lanzaban contra él, la adrenalina de su Lobo enojado le impedía sentir el dolor que los golpes de sus contrincantes dejaban en su cuerpo.

En su mente sólo estaba ir a ese maldito laboratorio y sacar a su Kookie de ahí, justo cuando notó que más hombres lo rodeaban y él empezaba a cansarse, las puertas fueron prácticamente arrancadas y dos Lobos marrones entraron y atacaron a los hombres que les disparaban pero aún así no lograban acertar.

Jin volvió a luchar y no se dio cuenta cuando su hermano y Mark entraron directo al laboratorio, forzaron la puerta hasta que lograron abrirla y lo que encontraron dentro los dejó con la boca abierta.

Parecía un circo del horror, sangre por todos lados, restos humanos, jaulas destruidas, y dos Lobos, dos enormes Lobos negros tenían del cuello a los que parecían ser los que elaboraban los experimentos.

— ¡JungKook! -Exclamó al no saber cuál de los dos era su cuñado.

Pronto el llamado hizo eco y la cabeza del Lobo negro con ojos azules se alzó y soltó al hombre moribundo para correr hacia el hermano de su pareja.

— ¿Estás herido? -Le preguntó el mayor intentando revisarlo.

El Lobo negó pero lo instó en revisar al otro Lobo que después de soltar a su víctima, cayó inconsciente.

Mientras que en la parte de afuera, la policía ya había llegado y tenían capturados a los Lee, y los matones que estaban heridos. Gracias a NamJoon y HoSeok, ellos con su satisfactoria intervención durante todo el proceso, habían grabado los audios y videos antes que fueran arrancados de SeokJin. Rápidamente dieron aviso a la policía y estos llegaron para descubrir a los líderes de aquella red de cacería clandestina.

SeokJin vio cuando se llevaron a los Lee en la patrulla jurando venganza pero no le importó, él corrió hacia el laboratorio y se desplomó cuando JungKook en su forma de Lobo chocó contra él, sólo así Jin pudo abrazarlo y soltar sus lágrimas.

—Gracias al cielo, estás bien. ¿Te lastimaron? -Jin agarró la enorme cabeza del Lobo y miró esos ardientes zafiros.

El alfa negó y lamió el golpe que tenía en su mejilla con cariño. Pero esa alegría pronto se transformó en angustia cuando Jin vio a su hermano suturando una herida en lo que parecía ser el abdomen del otro Lobo.

Asustado se puso de pie y caminó sigilosamente hacia ellos, con Kook detrás.

Cuando por fin pudo visualizar la escena, el Lobo respiraba pausadamente y mantenía sus ojos cerrados. Parecía dormido.

—Pude detener el sangrado. -Dijo HyunJoon mientras Mark secaba el sudor de su frente. —Al parecer la lucha anterior derivó en que esos imbéciles que ahora están muertos, le incrustaran una navaja e intentaran abrir la piel. Aunque lograron herirlo, la piel de un Lobo es gruesa, por lo que no consiguieron el objetivo de matarlo.

SeokJin se arrodilló y con devoción acarició la cabeza de aquel Lobo, él lo sabía... Su Lobo se lo había confirmado... Ese que estaba ahí, era su padre. Aquel alfa que pensó haber perdido hacía veintitrés años...

—Papá... -Susurró y sus lágrimas salieron nuevamente.

HyunJoon y Mark lo miraban sorprendidos mientras que JungKook simplemente se recostó a su lado.

Esa aventura había sido una locura.