ᴜʙᴇʀ

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La cuarentena finalmente había terminado, y por supuesto, JiMin estaba totalmente feliz, ya podría asistir a fiestas, podría ver a sus amigos y porque no, tal vez y hasta pareja conseguía, ya que le había hablado a su ex para decirle que lo extrañaba, por el aburrimiento, obvio.

Este era el caso entonces, JiMin había recibido un mensaje de parte de su mejor amigo, Jungkook.
Lo había invitado a una “Convivencia” entre amigos que se habían graduado y que por culpa de la contingencia, no pudieron celebrar la graduación como se debía.

Pará ser más exactos, lo que el mensaje decía era “Peda entre compas, hoy en la tarde” Así que ahí tenemos, a un lindo azabache con curvas marcadas, y cuando digo marcadas, señores, me refiero a unas curvas MUY marcadas, eligiendo que ponerse, había sacado ya los jeans azules y la polera negra que le llegaba más abajo de los muslos y dejaba sus clavículas a la vista.

También estaba tendida en alguna parte de su habitación el hoodie que Hoseok le había regalado por su cumpleaños y bueno, toda su habitación era un desastre, era un mar de prendas. 

El punto es, Jimin ya había entrado en desesperación por no saber que ponerse, no sabía si por la noche quería ser un soft boy, o un e-boy. 

–Al chile me voy con esto–Dijo para ponerse la camisa blanca de manga larga (que llegaba a ser transparente), y unos pantalones negros, ajustados. 

Su pelo, que se había esmerado en dejarlo crecer, y que ahora tenía el tamaño perfecto, lo rizo ligeramente.
Fue hacia el baño donde tenía un bálsamo con sabor a cereza y lo colocó en sus suaves y muy bien cuidados labios.

Por último, buscó su perfume con aroma a bebé, el que nunca le fallaba y se lo puso por todas partes, en serio, todas partes. 

– Por si me besan –Puso perfume en su cuello – Por si me abrazan– Uno en el pecho y la cintura –Y por si se pasan– Por último, lo puso en su parte baja, nuestro protagonista era bastante precavido.

  Ya que estaba listo, revisó la hora.  –Holy shit–
Sí mis estimados, Jimin iba tarde. 

Salió lo más rápido que sus trabajadas piernas le permitieron y ya estaba afuera de su hogar, abriendo la aplicación de Uber e ingresó el lugar en el que se encontraba. 

No tardó mucho en que su teléfono le hiciera llegar la notificación de que alguien había aceptado la solicitud para recogerlo. 
A esa pequeña parte de su vida, le llamaba, felicidad. 

Pronto ya estaba frente a él, un auto blanco, la puerta del conductor tenía los vidrios polarizados y no se veía nada, de todas maneras, su apariencia era lo de menos, podría ser un anciano que buscaba secuestrarlo, pero él ya tenía sus audios de emergencia, sacados de Tik Tok, claro estaba. 

Subió al auto.  Al ver por el retrovisor, vio a un joven, con rostro como de Dios griego, el cabello negro y la piel canela. Sin duda alguna era el hombre más perfecto que hubiera visto en su corta vida. 

–Bien, ¿A donde lo llevo?– Su voz, Jimin se había sonrojado desde la primera sílaba que salió de la boca contraria. 

Quería contenerse, de verdad, Jimin hizo todo lo posible por no arruinar el momento, pero, no lo logro.  –– A tu cama, guapo–– Jimin le guiño el ojo y el conductor le sonrió de una manera coqueta. 

JiMin se sentía morir, el guapo y sexy conductor LE HABÍA SONREÍDO. 

Pero ahora necesitaba llegar a casa de Jimin, o bueno, ya no sabía si quería llegar o pasar más tiempo con él conductor que ni el nombre se sabía.

Y que por conductores así, si se dejaba secuestrar.

  ––Lo haría con gusto bonito, pero ahora necesito que me digas a dónde llevarte... ––JiMin ya estaba muerto, más que muerto.

Con las pocas fuerzas que tenía le dio la ubicación y emprendieron el viaje. 
Pero JiMin no hacía nada más que observar el fino rostro del conductor.

  ––Entonces... ¿Me piensas decir tu nombre, o te seguiré recordando como el chico bonito del uber?––Preguntó el conductor mientras lo veía por el retrovisor. 

––Me llamó JiMin pero puedes decirme El amor de tu vida––NamJoon alzó ambas cejas––Y... ¿Cuál es tu nombre? ¿O es que piensas secuestrar a este pobre chico?..

 ––Ganas no me faltan, mi nombre es NamJoon ––.Ahora fue su turno de guiñar el ojo.––Por cierto, lindo nombre, JiMin. 

Ya estaba, JiMim estaba muertisimo. ––Sabes JiMin, creo que nunca había tenido la oportunidad de viajar con un chico tan etéreo como tu. 

O POR DIOS, SU CRUSH DE UBER, AL QUE ESTABA SEGURO DE NUNCA VOLVER A VER LE HABÍA DICHO QUE ERA ETÉREO, bueno, JiMin no sabía que significaba etéreo, PERO SONABA BONITO Y ESO ERA MÁS QUE SUFICIENTE. 

––Y sabe, usted está como para echarle alcohol

––¿Alcohol?––NamJoon lo miró confundido. 

––Alcoholchon.

Aunque era poco, NamJoon sintió sus pantalones más ajustados de lo normal. Imaginar a JiMin en poses muy comprometedoras y él a punto de entrar...  Mierda, ahora sí que tenía un gran problema. 

Uno que JiMin no tardó en notar. ––Parece que alguien tiene un serio problema... ––Dijo JiMin de una manera inocente. 

–Joder JiMin...

––Supongo entonces que si yo fui el causante de todo esto, yo debería arreglarlo, ¿No?–JiMin se acercó a Nam y pasó su mano por su entrepierna. 

––JiMin... Ah... Aquí no.... 

––Bien, entonces para y podré hacerme cargo... 

NamJoon no lo pensó mucho y se estacionó en un lugar que realmente no importaba. 
Pasó a la parte trasera, donde JiMin lo esperaba con una sonrisa; rápidamente el menor se subió en su regaso, soltando jadeos y haciendo movimientos circulares con su cadera.

NamJoon tenía la cabeza hacia atrás al mismo tiempo que tomaba más caderas del menor. 
Unieron sus bocas en un fogoso beso, sí, con lengua y todo.  A NamJoon eso lo prendía. Pero vamos, él deseaba eso desde que lo vio subir al auto.

Técnicamente NamJoon estaba prendido desde que vio su rostro.  Ahora solo quedaba disfrutar del momento. 
JiMin bajó del regaso del mayor y empezó a bajar los pantalones del contrario. 

Sorpresa, el miembro de Nam era enorme, y no es de broma, en serio era enorme.
Tanto así que a JiMin le brillaron los ojitos de bambi (nada) inocente que tenía.

  JiMin metió todo el miembro del mayor en su boca, chupando como si fuese una paleta. Ambos se sentían en un cielo, uno muy ardiente. 

 ––Ah.. JiMin... Me... Me vengo...–– NamJoon se corrió en la boca de JiMin, quien por obvias razones tragó todo, dejando restos de semen en sus labios. 

Bueno, este era un buen momento para cancelar planes con JungKook. Ahora solo quería tener la polla de NamJoon en su culo.

  Entonces ahí estaban; el mayor empezó a desvestir al bello muchacho azabache mientras dejaba besos húmedos en su cuello, se deleitó al ver el muy bien cuidado cuerpo del menor, ni siquiera una chica podría ser como él. 

A decir verdad, NamJoon no había estado con ninguna chica, pero todas las que había visto alguna vez eran demasiado esqueléticas. 

JiMin soltaba jadeos al mismo tiempo que desabotonaba la camisa del mayor. 
Pará no hacernoslas tan largas, después de unos minutos, NamJoon y JiMin, dos chicos que se habían conocido en el uber, estaban teniendo sexo en la parte trasera del auto. 

NamJoon daba fuertes embestidas, haciendo gritar a JiMin (que lo que en un momento eran gritos de posibles dolores, ahora lo eran más que nada de placer).

––A-ah... ¡M-más!.... ¡A-ahí a-ahí! .... Oh... ¡S-si!...mhg...––JiMin tenía la espalda arqueada, lo que permitió que NamJoon pudiese tomar las caderas contrarias para profundizar más sus embestidas. 

––Mierda JiMin... Ah... Estas... Tan... 

––¿A-apretado? ¿B-bueno?... Mhg... Ah... 

Momento, era como si JiMin supiera lo que iba a decir. Aunque, obviamente no le iba a decir que sabía todo eso gracias a sus lecturas cochinas de wattpad. 

NamJoon terminó por correrse dentro de JiMin y este último lo hizo sobre el abdomen del mayor.  Ah, pero que buena anécdota tendría JiMin para contarle a Jungkook.

Se imaginaba diciéndole '' Oye JungKook, eh llegado tarde por tener sexo en un auto con un chico que acabo de conocer, ¡Era tremendo papi!, Y oportunidades así no se desperdician.''

 ––Te ves en la obligación de darme tu número de teléfono, JiMin el chico bonito del uber. 

––¿Para que cada vez que quieras follar, sea conmigo?  –

–– Idiota, a lo mejor y te llamo para una cita romántica en el parque, pero no sé, hay muchas posibilidades... 

––¿Entonces así es como conquistas a tus parejas? ¿Teniendo sexo y después los invitas a salir?––JiMin sonrió divertido. 

Y NamJoon no se contuvo y lo tomó de las mejillas para darle un beso, un beso suave.

  -–De verdad quiero tener algo contigo JiMin –– Los labios de NamJoon formaron una sonrisa rectangular. 

––Entonces hay que intentarlo ––JiMin devolvió la sonrisa y besó nuevamente a NamJoon.

Realmente no se esperaba que aquella fiesta en casa de Jimin, terminara en una cogida y luego en una cita. 





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A eso JiMin le llamaba
¡Parkour!

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