— ¡Debiste ver lo lindo que se veía! — dijo Félix.
— Lo sé, no tienes malos gustos... — afirmó Jeongin mientras daba una mordida a su sándwich.
— Realmente me daban ganas de declarar mi amor por él justo ahí, y luego darle un beso.
Jeongin alzó la ceja e hizo una mueca—: Diablos, suenas tan cursi — se burló para luego recibir un pequeño empujón por parte de Lee.
— Tú no me entiendes, en serio me gusta Seungmin — suspiró y dio una mordida a su propio sándwich.
— Entonces dile, no eres alguien que acostumbre quedarse callado. ¿Por qué repentinamente eres tan tímido?
Félix tragó—: Es extraño, ni yo lo sé. En la secundaria todo era más fácil.
—En la secundaria eras un hormonal.
—Y no conocía a Seungmin...
— Te daré un consejo, querido Félix— palmeó con gracia la espalda de el mayor—. Tienes que dejar de ser un gallina y decirle que estás enamorado de él desde que lo conoces. Si no lo haces entonces iré yo y le diré — finalizó tranquilamente y prosiguió la ardua tarea de terminar su delicioso almuerzo.
— Lo he intentado, pero siempre huye o nos interrumpen. La semana pasada estábamos en la sala de ensayo y me preparaba mentalmente para para decirle, así que bailé un poco para distraerme, entonces entró Jisung a charlar con él. Pensé que se iría rápido... ¡Pero se quedó el resto del ensayo!
Yang posó su mano en su mentón fingiendo pensar algo para ayudar a su necesitado amigo, pero el silencio en aquella cocina donde decidieron comer algo, fue interrumpido por dos chicos corriendo: Changbin y Hyunjin, mientras Chan entraba tras ellos caminando tranquilamente.
— Dice Seungmin que veremos películas en la sala — exclamó Changbin emocionado, pero Hyunjin le dio un pequeño golpe en la nuca.
— ¡Yo les iba a decir!
—Ibas.— se burló el contrario y volvió a correr hacia afuera, Hyunjin trató de alcanzarlo y Chris se mantenía tranquilo siguiéndolos.
Yang y Lee rieron. Después de recoger el pequeño desastre que hicieron en la mesa tras sólo haber preparado dos simples sándwiches, se dirigieron a la sala, donde los seis miembros restantes se acomodaban en el sillón.
Jisung murmuró algo a Hyunjin, el alto asintió emocionado, luego él pasó la voz a Changbin, Changbin a Chan, Chan a Minho, Minho a Jeongin y Jeongin sonrió enormemente.
— ¿Qué se dicen? — murmuró Félix a Seungmin, quien se encogió de hombros.
— No lo sé...
— Minnie bonito, Sunshine, los chicos y yo iremos a la tienda de conveniencia a comprar botanas — anunció Jisung mientras daba por iniciado su plan maestro.
— Pero... —Kim iba a hablar, sin embargo Han lo interrumpió.
— Nos dieron permiso, si es lo que te preocupa, Seungminie.
—Vámonos, chicos.— exclamó Jeongin a los demás y en menos de un minuto, Félix y Seungmin se encontraban completamente solos en casa.
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