Taladro enfermizo,

Ebullición en su cabeza,

Náuseas de esperanzas,

Sangre presente,

Inconsciente sufriendo,

Ojos decolorados y

No poder hacer nada.

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Gracias a SophieTellie por la hermosa portada ❤❤

-Volveré -Su susurro fue amortiguado por los cabellos rosados del menor que sollozaba contra su pecho sin piedad, sus pequeñas manos se aferraban con fuerza de la remera marrón del peligris, las lágrimas empapaban la tela y evitó a toda costa cruzarse con la mirada de Jimin. Sus largos dedos acariciaban con parsimonia la cabellera del menor de los Min, murmurando cosas para tranquilizarlo lo más que pueda, aspirando al aroma de durazno que desprendía gracias a su reciente rápido baño. El cálido sentimiento que envolvía su cuerpo era gratificante, ambos en su mundo olvidándose de que el mundo llegó a su fin desde hace días y las incontables muertes que lo acompañaron. Yoongi tuvo el deseo de quedarse pero sabía que tenía una responsabilidad que cumplir, sus labios ardieron sin razón alguna o bueno, él no le buscó una razón coherente, picaron al ver la piel expuesta de Jimin, su frente se dislumbraba y recordó la primera vez que besó aquella zona con tanta dulzura.

Esta vez no sería diferente.

Posó con delicadeza sus labios sobre la piel de Jimin, aferrando el agarre sobre su cuerpo y separándose al terminar, el rojo no se hizo esperar en el rostro del menor. Una fuerte tos provinó del pasillo y a los segundos apareció Hoseok.

-Yoongi, Changkyun ya quiere que bajes, deben irse para que no se haga de noche tan rápido -Tosió con una pequeña sonrisa, Jimin lo ve con ojos de cachorro y le sonríe para apasiguar su nerviosismo y angustia.

-Vámonos -Tomó su pequeña mano y caminaron hasta la puerta donde le dijo a Hoseok que se adelantara, se giró para ver a Jimin, sus mejillas abultadas y rojas por el reciente llanto, acarició esas zonas para eliminar el rastro de humedad, elevó su dedo meñique confundiendo a su hermanito-. Te prometo que volveremos...

Jimin apretó sus labios y jugó con sus deditos- "¿Por la garrita?"

Yoongi sonrió nostálgico por aquello y asintió- Por la garrita.

Y sus meñiques se entrelazaron sellando una promesa.

Bajaron a la primera planta y Yoongi se unió al grupo que iría a las afueras de la mansión, por otro lado Jimin fue a los brazos de Sana que lo recibió gustosa, sintiendo el miedo en el cuerpo del pequeño. Sus ojos se desviaron al peligris que estaba parado junto a los demás que saldrían, sus semblantes eran duros pero a la vez temían por sus vidas, por no regresar.

-Ya saben lo que tienen que cumplir, Seokjin está a cargo y Hoseok estará liderando la protección del lugar mientras que Nayeon se encargará de Jungkook, todos deberán hacer sus papeles sin rechistar y guardar la calma, sin peleas o esas estupideces por favor, si no regresamos antes del mediodía de mañana, váyanse y no nos esperen -Jimin tembló ante las palabras de su hermano, ¿abandonarlo? ¿Está loco? Él no se iría sin tener a su hyung a su lado, porque no tenía sentido sobrevivir si ya estás muerto por dentro.

Sus ojos conectaron y en ellos ambos se hablaron sin abrir la boca. Un "te amo" se escapó de la boca de Yoongi antes que la luz del exterior lo cegara al abrirse la puerta, Soonyoung junto a Hoseok y Dahyun los acompañaron hasta el portón con cuidado, a mitad del camino aún con el resto del grupo expectante, el pálido se detuvo para encarar al trío que se quedaría en la mansión.

-Necesito perdirles un favor -Hoseok alzó sus cejas esperando sus palabras y Soonyoung se acercó un poco más para escucharlo, la cercanía era para secretos, uno que no podían oír los demás-. Por favor... Cuiden a Jiminnie por favor, él... Él es muy asustadizo y-y tiende a entrar en pánico cuando está solo, por favor, sólo hasta que regresé -Sus ojos eran suplicantes perdiendo toda la superioridad que llevaba antes, asintieron con una leve sonrisa en señal de que aceptaron sus palabras.

-Descuida, no tienes ni que pedirmelo, hermano -Hoseok sonrió y Yoongi le correspondió el gesto aún cuando le parecía extraño el color de piel de su mejor amigo. El menor quitó su mano del hombro del peligris para acercarse a Changkyun y abrazarlo con fuerza y susurrarle un "cuídate mucho, te remato si no vuelves".

-Min Yoongi, seguiré tus palabras -contestó Dahyun y el nombrado ladeó una sonrisa.

-Sólo dime hyung -Y Soonyoung ahora fue el que habló, era un poco más bajo que él y mantenía un aire fresco que tranquilizaba a cualquiera, hasta fue como un sedante para Yoongi antes de irse.

-Lo cuidaré Yoongi... ¿Te puedo decir hyung? -preguntó abochornado, el pálido accedió sin muchas vueltas, le agradaba el chico-. Puedes llamarme Hoshi, hyung, así me decían mis compañeros -Y aires nostálgicos no fueron posibles alejar, pero la mano en sus cabellos fue como un apoyo para él, para su silencioso sufrimiento y la constante preocupación que tenía a su familia.

-Descuida Hoshi -Había notado el temor y el leve temblor que no pasó desapercibido para él-. Ellos te cuidarán muy bien, Hoseok es una persona salvaje, ya sabes, un animal -Ambos rieron levemente aunque su alrededor se los impedía por los gruñidos y el humo que se disipaba de a poco.

Las despedidas terminaron y con ello, la lejanía entre los Min comenzó, desde ese momento, algo cambiaría para todos.

Ya habían pasado dos calles con el mayor silencio, iban por detrás de los autos sin llegar a tocar alguno para no activar alguna alarma, sus corazónes latían con fuerza hasta no querían respirar por el temor a atraer a esas cosas hasta con el leve sonido de una exhalación tan inocente. El grupo se dividió en dos cuando Yoongi se pasó al otro lado acompañado de Namjoon, Changkyun cuidaba la retaguardia cuando retrocedieron al pasar un mordedor por delante de la fila, precisamente cerca de Chunghee que se guardó el oxígeno al ver el cuerpo moribundo balancearse de un lado a otro con un intestino sobresaliendo de su abdomen dejando ver sus órganos que producían náuseas en la muchacha que sintió arcadas. El resto estaba tenso pero una vez el muerto se alejó, siguieron avanzando en busca de aquella farmacia que podía salvar al pequeño Jungkook y llenar de medicina sus bolsos para futuras situaciones.

Yoongi posó su dedo índice para que hagan silencio cuando se asomó por el borde de aquel callejón donde habían cuatro mordedores a su alcance, debían matarlos sin hacer ruido y no atraer a más, porque no podrían con tantos. Namjoon fue el primero en atacar yendo en traición hacia uno de los mordedores llamando la atención del más cercano que fue tacleado por Changkyun y los demás se los dejaron al resto que sacaron sus cuchillas limpiando el angosto pasillo para verificar que la puerta que los adentra al almacen de la farmacia sea la que dijo Hoshi.

El primero en caminar a ella fue Namjoon y Yoongi, ellos eran los delanteros y los mellizos ocupaban el centro de la formación para lograr un equilibrio en ellos. Un gruñido al entrar advertía que no estaban solos, el peso sobre Namjoon lo hizo luchar y quien lo ayudó fue Changkyun que atacó la cabeza del mordedor presente que se inmovilizó al instante por fin descansando en paz, al parecer era el único mordedor allí, así que cerraron la puerta detrás de sí para avanzar a donde tenían que llegar, sudados y asustados de lo que se puedan encontrar.

La línea que se grabó cuando la puerta fue levemente abierta por el miedo, un ojo se asomó para verificar su interior, encontrando así un par de mordedores del otro lado del espacio, cuando estaba por mirar más allá, una sombra gruñona abrió paso cerca de ellos, el olor a putrefacción llenó las fosas nasales de Min que retrocedió conteniendo el ruido de sorpresa que casi lleva el plan directo al pozo. Sin quitar su vista de la grieta, estiró su brazo por detrás de su cuerpo para levantar sus dedos indicando la cantidad de enemigos que tenían, bajando y subiendo sus falanges y finalmente dándose la vuelta para indicar el número final.

Tragaron saliva.

"12 mordedores".

Los filos de sus cuchillas brillaron bajo la tenue luz y con la lentitud del mar en bonanza abrió la puerta sin dejar escapar un solo rechinido, su grupo avanzó y los suaves pasos era lo único que se lograba oír, Yoongi frunció el ceño sujetando la puerta cuando ningún mordedor se percató de su presencia mediante el olor. Miró a su equipo que atacaban a 2 de esas cosas en el lado más cercano a la zona de cosas de bebés, la imágen los perturbó, el póster de publicidad de un bonito bebé era pintado de rojo y bajo ello estaba la mitad de un cuerpo con las vísceras arrastrándose.

Por otro lado, Seokjin se arrodilló a un lado de la cama con un paño cubriendo su nariz y boca al igual que Nayeon, ambos observando a Jungkook que había despertado y susurraba cosas incoherentes a la vez que lágrimas se derramaban de esos hermosos grandes ojos que poseía.

-Ma-... mamá... Mami -Jalaba de la ropa de Nayeon con debilidad por su estado de salud, los presentes miraron entristecidos al niño que negaba con la cabeza de solo recordar escenas de su mami, de una vida tranquila para luego terminar en una masacre y el cuerpo podrido de la mujer que lo trajo al mundo para amarlo tratando de matarlo.

-Está empeorando... -susurró la chica por lo bajo secando un par de lágrimas que fueron causadas por ver al chico sufrir de esa forma tan cruel, Seokjin observó la mano de Jungkook y la tomó con delicadeza para no dañarlo en lo más mínimo, descubriendo los mechones de su mojada frente, una capa de sudor lo envolvía junto con respiraciones agitadas y muecas de dolor.

-¿Cómo? -Lo sabía, aún así necesitaba escucharlo.

-Hace media hora a comenzado a delirar y tener constantes desmayos por la fiebre... Los vómitos comenzaron y tengo miedo que los síntomas empeoren y aparezcan nuevos... Sólo hay pastillas para la menstruación y otras cosas, como decía, la gente que vivía aquí se la pasaban fuera de casa... -suspiró derrotada no sabiendo qué hacer más que cambiar el paño húmedo.

-Confio en que traerán las medicinas a tiempo... -La mujer miró el techo del lugar, aún inmersa en la situación en la que estaban, las personas en la que todo el grupo dependía y le entregaban su confianza estaban ausentes, estaba asustada porque no sabría que hacer si Jungkook empeorara y lo peor suceda.

Cuando estuvo por contestar, bruscos movimientos sacudieron la cama y fuertes arcadas le quitaba la respiración a Jungkook que intentaba no expulsar lo que intentaba salir. Un líquido amarillento se desbordó de su boca y lo primero que hizo Nayeon fue voltearlo a un costado para que no se ahogue con su propio vómito. Luego de aquello le siguieron una cordillera de tos que irritó más su garganta, arrancándole un llanto al menor.

-Duele... duele mucho... -lloró sin poder abrir los ojos del todo y no estando presente a la vez.

Seokjin fue por un vaso de agua, bajando al primer piso donde pasó por detrás de Sana y Chaeyoung que estaban haciendo guardia.

-¿Crees que estén bien? -Sana apretó los labios mirando la puerta de cristal frente a ellas, viendo el material que fácilmente se podía romper con unos cuantos golpes y esas cosas podrían entrar... Necesitaban madera.

-Sé que están bien... -susurró tratando de creerse sus propias palabras- ¿Y Jimin? -Miró detrás de ella dando con parte de una pared de madera y del lado derecho se encontraba la cocina.

-Umh... Creo que está en la cocina... No quiero dejarlo solo, ya sabes... -Bajó la mirada al recordar como el muchacho tenía en su rostro la perfecta definición de muerte en vida, un robot que hacía todo por un patrón-. Desde que se fue su hermano parece que se fue con él, se alejó y buscó refugio en la cocina, vi que estaba hirviendo agua -Chaeyoung miró a la contraria en busca de su opinión y la muchacha inició contando una anécdota de índole familiar.

-Yo tenía puras hermanas, siempre quise algún hermanito al cual consentir y jugar con él... Jungkook y Jimin son como unos niños que debo proteger, sé que no nos conocemos desde hace mucho, pero vi sus lados más vulnerables y sus llantos que sólo generaron en mí mi lado fraterno -Sus ojos brillaron al sumergirse en un mundo lleno de risas y rosa-. Ojalá los hubiera conocido en un mundo donde podamos ir a comer a un restaurante, o ir a la plaza o simplemente charlar sobre cosas tontas -Apretó el mango del cuchillo en su mano-, hay muchas personas buenas aquí, hasta el estúpido de Changkyun es bueno -bufó admitiéndolo ganándose risas por parte de Chaeyoung que no contuvo sus carcajadas, esos dos eran como perros rabiosos y disfrutaba verlos pelear por la mínima cosa.

-Sé que no es el mejor momento de la humanidad para comenzar a sentir -Chaeyoung susurró mirando el cielo llenas de nubes-. Antes de esto yo no sentía nada, comenzó a desinteresarme todo y trataba mal a mis padres, como típicos adolescentes rebeldes... Esa mañana mi madre me abrazó como nunca y mi papá me dijo que me amaba... No lo entendí en ese momento, pero cuando vi gente morir frente a mis ojos... Logré reaccionar -Una triste sonrisa se instaló en sus ojos creyendo que volvería a ver a sus dulces padres que aunque peleaban, seguían siendo las mismas personas que le decían todas esas buenas noches que ignoró, que con pequeños detalles le daban amor y les recordaba que era su más dulce caramelito.

Jimin vio a Seokjin llegar, quien abrió la canilla de agua con un vaso de plástico mirando de reojo al pequeño a su lado que miraba el contenido de la olla evitando observarlo a toda costa. El mayor suspiró posando su mano en la cabeza del muchachito quien saltó en su lugar de la impresión.

-No te preocupes, tu hermano volverá, él no te dejaría -Fue lo último que dijo antes de pasar el umbral subiendo las escaleras con lentitud, Jimin se giró a mirar el agua y apagó el fuego, iba a preparar comida para todos, pero su mente estaba en blanco. Se sostuvo de la cabeza con sus manos queriendo llorar de la frustración, necesitaba a sus padres, a su conejito rosado, a Yoongi...

Si algo le pasara, no se imaginaba conviviendo con todas esas personas aunque estuvieran Hoseok y Changkyun, era cobarde por rendirse sin haberlo intentado. No era fuerte, moriría y lo sabía, en algún momento sucederá y lo sabe a la perfección.

Miró sus manos levantando la vista de inmediato cuando algo oscureció y la luminosidad volvió de repente, Jimin no vio la sombra que pasó frente la ventana, estando lo suficientemente distraído para no haberse dado cuenta de aquello.

-Dahyun, ¿qué carrera querías seguir al salir del colegio? -Hoshi preguntó mirando el portón desde el segundo piso, tenía sueño y sus piernas comenzaron a debilitarse por los minutos interminables parado allí, luego de que Hoseok le enseñara un par de usos del arma, se quedó en completo silencio hasta ahora, estático y sin decir nada; por otro lado, Jaebum, que era el más "parlachín" estaba recorriendo el primer piso en busca de algo raro.

-Arquitectura -respondió entusiasmado-, aunque eso ya no es importante -suspiró volviendo a su postura recta.

-Bueno, creo que no deberíamos perder quiénes somos, es decir... Olvidar los sueños que teníamos, ya que éstos nos hace quien somos -El chico a su lado rió levemente golpeando su hombro sin agresión en sí, aunque dentro de él proceso a la perfección sus palabras, dándole la razón.

-¿De repente vas a filosofar? -Hoshi sonrió divertido pero una insistente tos nuevamente interrumpió su charla, pero esta vez era diferente.

Hoseok se tomaba de la garganta, cayendo su cuerpo sin fuerzas al suelo y sin obstáculo alguno, Hoshi rápidamente corrió a avisar a Seokjin mientras que Dahyun intentaba despertarlo...

¿Las cosas podían empeorar más?

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Perdón por la espera, ¿les gustó?

Y sí, merecen una explicación, no actualice (hasta estaba por mandar a borradores la historia) por diferentes motivos:

•El capítulo se me borró más de 4 veces (capítulo originalmente de +3k).

•Cuando estuve a punto de actualizar, la historia se mandó a borradores.

•Cuando estaba dispuesta a actualizar ayer por la noche; sucedió algo urgente que me impidió hacerlo.

Pero al fin volví y espero no tardar nuevamente, les doy una disculpa ❤

Nota actualizada:

Este es el penúltimo capítulo de los capítulos que tengo en borradores, es decir, en donde lo dejé. Así que se vendrán capítulos nuevos para los lectores que estuvieron presentes en su emisión. Mal para mí TT

Aún hay errores y faltas que debo corregir en estos y los anteriores capítulos. Me da vergüenza leer mis faltas gramaticales o de puntuación TTTTTT

©mysverse