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—Felicidades Ha-neul —dice Na-yeon abrazando a su hermana menor con fingida emoción mientras que esta no evitó sonreír.

—Gracias Na-yeon —susurra Ha-neul sintiéndose un poco mejor con el abrazo de su hermana mayor.

—De seguro estaban algo ocupados o... —intenta explicar Na-yeon tras alejarse de Ha-neul para tomarla de las manos y verla fijamente.

—O les importo más el trabajo que el recital de su hija menor —responde Ha-neul en un susurro sintiendo sus ojos llenos de lágrimas una vez más.

—Ha-neul —recrimina Na-yeon por lo bajo viendo como su hermana menor negó inmediatamente y soltó sus manos.

—Tengo que irme a cambiar, ve tu primero —pide Ha-neul alejándose de Na-yeon para caminar hacia su camerino queriendo cambiarse.

—Han —intenta detenerla Nam-ra al verla caminar con velocidad hacia su camerino pero esta regresó a verla unos cuantos segundos fingiendo una sonrisa.

—Tengo que irme a cambiar presi, estoy bien —miente la chica antes de seguir su camino sintiendo como el aire comienza a faltarle.

Ha-neul se choca con algunas personas pero consigue llegar a su pequeño camerino, la bailarina cierra la puerta con fuerza y se recarga en esta teniendo su respiración agitada.

—Es tu obligación Ha-neul, no tenemos porque felicitarte —la chica ve su reflejo en el espejo del tocador del camerino y no evita soltar las primeras lágrimas.

Ha-neul dirige su mirada hacia una esquina de su tocador y frunce el ceño ligeramente al ver un hermoso ramo de flores.

—Sólo tienes una hora antes de que los admiradores de Ha-neul se den cuenta de que no esta —susurra Na-yeon hacia Gwi-nam que se mantuvo con su típica postura despreocupada.

—¿Por qué le haces esto a tu hermana? —pregunta Gwi-nam con burla viendo como Na-yeon puso los ojos en blanco.

—Eso a ti no te importa, ¿lo harás o no? —pregunta Na-yeon irritada viendo la burlona sonrisa del matón.

—Por supuesto que sí, fue un gusto hacer tratos contigo Na-yeon —el chico le extiende a la hermana de Ha-neul un billete de cincuenta mil wones.

Na-yeon toma el billete con una sonrisa y ve como Gwi-nam se escabulle para llegar a la puerta del camerino de Ha-neul.

—El amor no necesita ser perfecto, sólo necesita ser verdadero —lee Ha-neul en voz baja con una pequeña sonrisa en sus labios—. La única perfección que yo conozco eres tú, mucha suerte en tu recital hoy mi hermosa princesa bailarina. Con cariño, P.M

Ha-neul siente como la tristeza desapareció completamente de ella y fue remplazado por la emoción.

—Tú eres la única persona que logra sacarme una sonrisa en los momentos más difíciles —susurra Ha-neul tomando el ramo con cuidado para acercarlo a su nariz y oler las hermosas flores naturales.

—Sólo tienes que ir con ella y decirle, "hermosa Ha-neul, ya no puedo seguir ocultando esto" —habla Gyeong-Su intentando imitar a Su-hyeok que lo ve de mala manera—. "Yo soy el príncipe misterioso, yo seré quien te salve de la horrible bruja de tu hermana mayor para que nos escapemos, nos casemos, tengamos tres hijos y seamos felices para siempre".

Cheong-San estalla en carcajadas junto con Gyeong-Su pero ambos reciben un golpe por parte de Su-hyeok sin que alguno de los tres deje de caminar hacia la salida del Instituto.

—No es divertido, no tengo el suficiente valor para si quiera saludarla —admite Su-hyeok escuchando como sus amigos dejan de reírse poco a poco.

—Pues tendrás que buscar el valor cuanto antes porque alguno de los admiradores de tu princesa podrían robártela —recuerda Cheong-San regresando su mirada hacia el camino que da hacia el auditorio.

Tanto Gyeong-Su como Su-hyeok miran hacia esa misma dirección dándose cuenta de que la mayoría de los chicos tienen ramos de flores en sus manos y corren hacia el auditorio para felicitar a Ha-neul.

—¿Quién podría comprar un ramo tan grande? —pregunta Gyeong-Su confundido viendo como un chico lleva un enorme ramo de rosas rojas junto con algunos globos.

—Jamás voy a superar eso —susurra Su-hyeok sintiéndose ligeramente decepcionado de los pequeños regalos que le da una Ha-neul.

—Ha-neul no es así, a ella no le gusta las cosas costosas —asegura Gyeong-Su intentando animar a su amigo—. Si le dijeras la verdad, no tendrías porque estar preocupado de que alguien pudiera arrebatártela.

Los tres chicos siguen caminando hasta que Su-hyeok detiene sus pasos de golpe tomando una decisión.

—Le voy a decir —dice Su-hyeok de repente llamando la atención de sus amigos los cuales regresaron a verlo confundidos—. Le diré la verdad, le diré que yo soy quien le ha llevado obsequios desde que llegó a la escuela.

—Eso es todo campeón —se burla Cheong-San antes de ver como Su-hyeok se dio la vuelta para correr hacia el auditorio.

—Su... —On-jo pierde su sonrisa al ver como su enamorado corrió en dirección al auditorio junto con los demás admiradores de Ha-neul.

On-jo ve a I-sak la cual le dio una pequeña sonrisa y se acercó para tomar su mano demostrándole su apoyo.

—¡No, espera! —grita Gyeong-Su queriendo seguir a Su-hyeok pero se detiene al ver como su amigo ya se encontraba bastante lejos—. Lo van a linchar los admiradores de Han.

—¿Crees que deberíamos de acompañarlo en caso de que Ha-neul lo rechace? —pregunta Cheong-San hacia su amigo mientras que I-sak y On-jo se acercaron a ellos.

—¿Su-hyeok se le va a confesar a Ha-neul? —pregunta I-sak sorprendida viendo como los dos chicos asintieron rápidamente.

—Siempre creí que los ángeles no existían pero luego te vi a ti bailar en el escenario —Ha-neul da un pequeño salto en su lugar al escuchar una voz masculina detrás de ella.

—Gwi-nam —susurra Ha-neul sosteniendo el ramo de flores que le dio su admirador favorito.

—Estuviste perfecta ángel —asegura el chico caminando lentamente hacia Ha-neul luego de escuchar como Na-yeon cerró con llave la puerta del camerino.

—Ugh, deja la conversación para otro momento —susurra Na-yeon quedándose junto a la puerta para vigilar que nadie interrumpe a Gwi-nam y a Ha-neul.

—Lee Ha-neul, sé que no me conoces y que lo más probable ni siquiera sepas que estoy en tu mismo salón de clase pero necesito decirte algo —comienza a recitar Su-hyeok tras conseguir entrar al auditorio por la puerta de emergencia ya que la puerta principal estaba abarrotada de los admiradores de Ha-neul—. Yo soy el príncipe misterioso... no, sonará muy ridículo si se lo digo así.

Na-yeon escucha unos pasos y no evita ver en esa dirección estando completamente asustada, la chica suelta una maldición al reconocer a Su-hyeok el cual camina hacia ella.

La chica corre a esconderse olvidando que dejó con llave el camerino de Ha-neul y que ella junto con Gwi-nam comenzaron a discutir.

—Creí que cambiarías de opinión después de que me rechazaste pero ahora me doy cuenta que alguien te llamó más la atención —habla Gwi-nam con asco viendo el ramo de flores que tiene Ha-neul tiene en las manos.

—Te rechacé porque yo no estoy interesada en ti Gwi-nam, no podía engañarte aceptando ser tu novia cuando yo quiero a otra persona —admite Ha-neul sin ser consciente que empeoró las cosas.

Su-hyeok detiene sus pasos al escuchar el nombre de Gwi-nam siendo dicho por la voz de Ha-neul, el chico frunce el ceño ligeramente y se inclina ligeramente hacia la puerta para escuchar mejor la conversación.

—¿Es la misma persona que te dio ese ramo de flores? —pregunta Gwi-nam con burla dándose cuenta de como Ha-neul pegó el ramo de flores a su pecho.

—Sí —admite la chica consiguiendo que la sonrisa burlona de Gwi-nam desapareciera en menos de un segundo.

—Eres una perra ofrecida, tan sólo te dicen unas palabras bonitas y caíste enamorada de un desconocido —dice Gwi-nam con odio caminando lentamente hacia Ha-neul la cual comenzó a retroceder asustada hasta que esta chocó con su tocador.

—No tienes ningún derecho... —Ha-neul tiene intenciones de recriminarle por la manera en que le dijo pero suelta un pequeño grito asustada al momento en que Gwi-nam le arrancó el ramo de flores que tenía en manos para lanzarlo con fuerza al suelo.

Gwi-nam toma con fuerza las muñecas de Ha-neul y la pega a su pecho para comenzar a besar su cuello a la fuerza, la chica cierra los ojos fuertemente mientras comenzó a moverse con brusquedad.

—¡Gwi-nam! —grita Ha-neul intentando empujar al chico, intenta darle un rodillazo en su miembro pero el chico lo evita rápidamente golpeando la mejilla de la bailarina para tirarla en el suelo—. ¡No por favor, Gwi-nam! ¡Me estás lastimando!

Su-hyeok no tarda en reaccionar al momento de escuchar los gritos de ayuda de Ha-neul junto con sus sollozos de desesperación.

—¡Ayuda! —grita Ha-neul desesperada sintiendo las manos de Gwi-nam por todo su cuerpo—. ¡Suéltame por favor!

Su-hyeok intenta abrir la puerta pero en seguida se da cuenta de que se encuentra cerrada con seguro, el chico no duda en comenzar a golpear la puerta con su hombro para intentar abrirla.

—¡P-Por f-favor! —solloza Ha-neul comenzando a llorar con desesperación, la chica intenta tomar algo con qué defenderse pero lo único que encuentra es uno de sus zapatos.

Ha-neul golpea con fuerza a Gwi-nam en la cabeza consiguiendo que este la suelte unos segundos, la chica comienza a gatear con velocidad queriendo llegar a la puerta pero Gwi-nam toma su tobillo con fuerza para jalarla hacia él y se pone nuevamente sobre ella.

Gwi-nam rompe con fuerza la parte inferior del traje de Ha-neul dejando ver el sostén de esta, Ha-neul llora con desesperación hasta que escucha como la puerta se abrió de golpe.

—¡Suéltala! —grita Su-hyeok furioso tras conseguir abrir la puerta del camerino con una patada.

Su-hyeok corre hacia Gwi-nam para jalarlo con fuerza y lo aleja de Ha-neul, la chica se sienta sin dejar de llorar e intenta cubrir su cuerpo.

—¡Jamás vuelvas a tocarla! —grita Su-hyeok poniéndose encima de Gwi-nam para comenzar a golpearlo con odio.

Ha-neul se esconde en una pequeña esquina del camerino sin dejar de llorar asustada, la chica ve como Su-hyeok golpea a Gwi-nam hasta que este cayó inconsciente teniendo la mayor parte de su rostro golpeado.

—S-Su... —intenta hablar Ha-neul pero se le rompe la voz por el llanto—. Su-hyeok.

El chico se aleja de Gwi-nam para acercarse con velocidad a Ha-neul, el chico se hinca enfrente de ella y toma sus mejillas para que lo mire.

—Ha-neul, ¿estás bien? —pregunta preocupado Su-hyeok viendo como Ha-neul tiene sus ojos llenos de lágrimas, su labio inferior tiene un pequeño rastro de sangre por el golpe que le dio Gwi-nam.

—S-Su... Su-hyeok —solloza la chica temblando de miedo sintiendo su cuerpo sucio, el chico no duda en quitarse su saco escoltar para ponerlo sobre los hombros de Ha-neul.

—Tranquila, ya pasó —susurra el chico cerrando su saco con velocidad cubriendo la desnudez de Ha-neul—. Vamos, puede despertar en cualquier momento.

Su-hyeok ayuda a Ha-neul para que se levante, el chico se encarga de guardar todas las cosas de la bailarina mientras que esta se mantuvo llorando intentando procesar lo que Gwi-nam quiso hacerle.

—Ven, vamos —habla Su-hyeok cargando la mochila de Ha-neul junto con su mochila de danza y tomando el ramo de flores que él mismo le había obsequiado.

Su-hyeok le entrega el maltrato ramo de flores a Ha-neul para intentar distraerla, la chica camina junto a Su-hyeok luego de que este la abrazara por los hombros para guiarla a la salida de emergencia del auditorio.

—Voy a dañar mis zapatillas —susurra Ha-neul viendo que todavía lleva puestas sus zapatillas de ballet.

Los dos jóvenes se detienen pero Su-hyeok no duda en hincarse enfrente de la chica para apoyar el pie de esta en su rodilla, Ha-neul ve al chico sorprendida y no evita sonreír ligeramente al ver como este comenzó a desabrochar sus zapatillas.

Su-hyeok le quita las zapatillas de ballet y la ayuda a ponerse sus tenis.

—¿Ya estas más tranquila? —pregunta Su-hyeok volviendo a abrazar a Ha-neul por los hombros.

La chica seca algunas de las últimas lagrimas que derramó antes de asentir ligeramente sin dejar de caminar junto a su compañero de escuela.

—N-No sé cómo f-fue que pasó, estábamos h-hablando y de repente... —Ha-neul cierra los ojos fuertemente antes de negar sin querer recordarlo.

—Ya no pienses en eso —pide Su-hyeok sintiéndose culpable por no haber llegado antes.

—No puede pasar joven —habla el guardia de la zona departamental en donde viven los Lee.

—Viene c-conmigo —explica Ha-neul en un susurro llamando la atención del guardia que regresó a verla inmediatamente.

—¿Se encuentra bien Señorita Lee? —pregunta el guardia preocupado al ver el aspecto de la chica.

Su-hyeok evita que el guardia toque a Ha-neul, la chica ve a su compañero de clase unos cuantos segundos antes de ver al guardia.

—Sí, sólo serán u-unos cuantos minutos —asegura Ha-neul con una pequeña sonrisa hacia el guardia el cual analizaba a Su-hyeok.

—Está bien —dice el guardia antes de abrir la reja para que los dos jóvenes entren a la zona departamental más exclusiva de Hyosan.

Los dos jóvenes caminan en silencio hasta que llegan al que es el edificio de Ha-neul, la chica analiza el gran edificio unos segundos antes de mirar a Su-hyeok.

—Muchas gracias por haberme ayudado —susurra Ha-neul alejándose del agarre del chico para hacer una reverencia.

—No, no tienes porque agradecerme —asegura Su-hyeok tomando los hombros de Ha-neul con delicadeza para detener la reverencia.

—Es lo menos que puedo hacer luego de que tú me salvaras de Gwi-nam —explica Ha-neul en un susurro viendo fijamente a su compañero de salón.

Los dos jóvenes se ven fijamente varios segundos sin ser conscientes de que su miradas brillan con intensidad, el corazón de Su-hyeok palpita con velocidad mientras admira el rostro de Ha-neul y no evita pensar que es hermosa pese a la pequeña herida que tiene en su labio inferior.

—Ahora que lo pienso, ¿por qué estabas en el auditorio? —pregunta Ha-neul confundida recordando que la gente comenzó a irse luego de que terminó el recital.

—Bueno, y-yo quería... —intenta explicar Su-hyeok pero todo el valor que tenía para contarle sobre la verdad de los detalles que ella recibe desapareció de repente.

—¡Han! —los dos chicos miran hacia la puerta principal del edifico de Ha-neul del cual salió corriendo Na-yeon.

—Na-yeon —susurra Ha-neul mientras es abrazada con fuerza por su hermana mayor.

Su-hyeok suelta un corto suspiro antes de bajar la mirada queriendo darles algo de privacidad a las dos chicas.

—¿Qué te pasó? ¿Por qué llegas a esta hora? —pregunta Na-yeon alejándose de Ha-neul para verla fijamente—. ¡¿Qué te pasó en el labio?!

—Sólo es un pequeño corte, estoy bien —miente Ha-neul alejando la mano de Na-yeon de su labio lastimado.

Na-yeon dirige su mirada a Su-hyeok el cual se mantuvo callado en todo momento—. ¡¿Tú le hiciste esto a mi hermana?! ¡¿Cómo te atreves maldito imbécil?!

—No, Na-yeon —Han se pone enfrente de Su-hyeok evitando que su hermana lo golpee, el chico ve a su enamorada unos cuantos segundos sintiendo como el color subió a sus mejillas—. Él no me lastimó, él me ayudó.

—¿De qué hablas? —pregunta Na-yeon fingiendo demencia mientras se cruza de brazos.

—Te lo explicaré adentro, vamos —dice Ha-neul tomando la mano de su hermana con su mano libre para guiarla hacia la puerta del edifico en donde viven.

Ha-neul corre de regreso hacia Su-hyeok ya que recordó que este seguía teniendo sus cosas, la chica toma con velocidad sus cosas cuando su compañero de salón las extendió hacia ella. Han hace unos cuantos movimientos raros ya que no podía acomodarse muy bien con el ramo de flores que tenía en manos y mucho menos con su traje de danza roto.

—Muchas gracias otra vez Su-hyeok, prometo compénsartelo de alguna manera —asegura Ha-neul sintiendo la mirada de su hermana detrás de ella por lo que no evita sonrojarse.

Na-yeon se cruza de brazos impaciente y se mantiene mirando de mala manera a Su-hyeok el cual admiraba a Ha-neul en silencio.

—No es necesario —asegura Su-hyeok en un susurro pero no evita sonreír tontamente al ver a Ha-neul sonreír mientras bajaba la mirada.

—Es lo menos que puedo hacer, sin ti Gwi-nam habría... ya sabes —susurra Ha-neul sin querer decirlo—. Nos vemos mañana, ve con cuidado por favor.

Ha-neul mira hacia donde se encuentra su hermana mayor y duda unos segundos antes de mirar a Su-hyeok, la chica se acerca al chico para tomar los hombros de este y ponerse de puntas para dejar un tierno beso en su mejilla.

—Gracias —susurra Ha-neul antes de correr hacia Na-yeon que se mantuvo esperándola con impaciencia.

Las dos chicas entran a su edificio correspondiente pero Su-hyeok se mantuvo en su lugar en completo silencio, el chico parpadea confundido y da un paso hacia el edificio de Ha-neul pero esta ya no se encuentra afuera.

—Sabe mi nombre —susurra el chico con una tonta sonrisa en sus labios mientras llevaba sus dedos a la mejilla que Ha-neul había besado—. Y me dio un beso.

Su-hyeok comienza a festejar antes de tranquilizarse, el chico camina hacia la salida de la zona departamental sin perder la radiante sonrisa que tenía en su rostro.

Pobre mi bebé Ha-neul, dudé mucho en hacer la escena de Gwi-nam pero luego decidí que así le daba un poco más de drama.

Espero que les haya gustado el capítulo hermosas personitas, nos vemos en una próxima actualización <3

Los amo❤️

🧬𝐌𝐎𝐀𝐍𝐀🧬

Esta es una historia original de Wattpad, actualmente igual se encuentra disponible en Inkitt y en Booknet, si la lees en otra plataforma se debe a un virus y una copia sin mi permiso.