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—Sabes lo de On-jo, ¿no? —pregunta I-sak en un susurro sentándose junto a Cheong-San que regresó a verla inmediatamente—. Se le declaró a Su-hyeok.

—¿Y qué? —pregunta Cheong-San a la defensiva.

—Ve a consolarla, yo lo intenté pero no funciona —explica I-sak viendo como Cheong-San negó inmediatamente.

—Olvídalo, hazlo tú —responde Cheong-San con seguridad confundiendo a I-sak.

—¿Por qué te enojas conmigo? —pregunta la chica agotada viendo como Cheong-San negó ligeramente.

—¿Qué me importa a mí quién le guste a On-jo? —pregunta Cheong-San más molesto que antes—. Na-yeon perdió a su hermana, ¿por qué no vas a consolarla a ella?

—Olvídalo —dice I-sak molesta dirigiendo su mirada a Na-yeon que se mantiene callada—. Además ella no siente nada por alguien que no sea por ella misma, se ve que le dolió el sacrificio de su hermana menor.

Los dos jóvenes ven a Na-yeon que se mantiene sentada alejada del grupo, no tiene alguna emoción en su rostro más que molestia. I-sak se levanta de su lugar y camina hacia On-jo que se encontraba mirando por la ventana estando triste ya que no pudo despedirse de Su-hyeok.

—On-jo, no estés triste —pide I-sak llegando junto a su mejor amiga que regresó a verla—. Seguro Su-hyeok está bien, él y Ha-neul hacen un gran equipo juntos, los dos son atléticos y muy rápidos.

—Eso es verdad —susurra On-jo mientras sonríe ligeramente—. Los dos estarán bien.

—Pero... Cheong-San está raro —explica I-sak luego de tomar la mano de su mejor amiga que se mantuvo mirando por una de las ventanas del salón—. Está muy irritable, creo que le gustas, me doy cuenta con facilidad por su reacción.

—No, él no siente nada por mí —asegura On-jo mientras niega ligeramente—. Siempre me molesta y se burla de mí.

On-jo frunce el ceño ligeramente al momento de sentir que la temperatura en la mano de su amiga comenzó a cambiar, ahora está mucho más fría que antes.

—I-sak —susurra On-jo llamando la atención de la pelinegra que regresó a verla—. ¿Por qué estás tan fría?

—¿Qué? —pregunta I-sak confundida antes de ver como On-jo llevó sus manos entrelazadas a su mejilla en donde pudo sentir mejor la temperatura de la pelinegra.

—Tu mano está muy... —On-jo detiene sus palabras y ve asustada como de la nariz de su mejor amiga comienza a escurrir sangre.

—¿Está muy qué? —pregunta I-sak confundida viendo la expresión asustada de su mejor amiga.

I-sak se suelta de la mano de On-jo y seca inmediatamente la sangre de su nariz mientras que a su cabeza llega el recuerdo de que una zombie la mordió en la pierna.

—¿Qué pasa? ¿Estás...? —intenta preguntar On-jo sintiendo un nudo en su garganta.

—No, no me mordieron —miente I-sak secando la sangre que escurre de su nariz con velocidad—. En serio, de verdad que no.

Todos los presentes miran hacia las dos chicas, Woo-jin hace reaccionar a Dae-su que estaba quedándose dormido. Na-yeon mira a I-sak y no duda en levantarse de su lugar con velocidad.

—¿Te mordieron? —pregunta Na-yeon viendo el rastro de sangre que tiene I-sak en su nariz.

—¡No! —grita I-sak antes de correr hacia un espejo y ve asustada como sus ojos comienzan a tornarse rojos poco a poco.

—Oye, ¿estás bien, verdad? —pregunta Gyeong-Su preocupado acercándose a la chica lentamente que se mantuvo mirando por el reflejo del espejo.

—On-jo —susurra I-sak intentando ver bien pero comienza a perder la vista poco a poco.

—I-sak —responde On-jo caminando hacia su mejor amiga con seguridad y toma sus manos rápidamente.

—No soy como ellos, ¿verdad? —pregunta I-sak intentando mantenerse positiva pero el miedo comienza a recorrer su cuerpo.

On-jo asiente lentamente teniendo sus ojos llenos de lágrimas y no duda en abrazar a I-sak que intenta procesar que se convertirá como uno de los monstruos que están afuera.

—¿Qué hacen? —pregunta Na-yeon viendo la reacción de todo el grupo que se mantuvo callado dándole espacia a las dos chicas para que se despidan—. ¡Sáquenla de aquí! ¡Sáquenla de inmediato!

Los gritos de Na-yeon causaron que los zombies se alteraran y comenzaran a golpear las ventanas del laboratorio queriendo entrar a este.

—Carajo, van a saltar encima si sigues gritando así —recrimina Dae-su levantándose para evitar que las sillas de las ventanas se caigan.

—¡No! ¡Estoy bien! —grita I-sak alejándose de On-jo para ver a sus amigos que comenzar a bloquear las puertas queriendo evitar que los zombies entren.

Cheong-San no duda en acercarse a On-jo para tomarla del brazo con fuerza y la aleja de I-sak que comienza a temblar ligeramente.

—On-jo —susurra I-sak antes de que cayera de rodillas y segundos después cayera al suelo.

—Suéltame —pide On-jo con la voz rota viendo escuchando como los huesos de su mejor amiga comienzan a tronar con fuerza.

—¡Rápido! ¡Hagan algo! —exige Na-yeon desesperada mientras que algunos chicos tomaron unas sillas de madera con la cual defenderse.

I-sak comienza a moverse bruscamente antes de que se levantara haciendo un arco con su espalda, On-jo forceja con Cheong-San ya que quiere liberarse de su agarre.

—¡Se está convirtiendo en zombie! —grita Na-yeon mientras comienza a retroceder lentamente viendo a I-sak levantarse.

—No, I-sak no —susurra On-jo asustada viendo como su mejor amiga regresó a verla teniendo las venas de su rostro resaltadas—. I-sak, no.

Todos ven asustados a la que una vez fue su amiga antes de que esta se lanzara contra Cheong-San que la empujó lejos de él, el chico toma una silla de madera y golpea a I-sak con fuerza.

—¡Basta! ¡Te dije que no! —grita On-jo destrozada viendo a sus dos mejores amigos pelear siendo I-sak la que estaba dispuesta a matar.

Cheong-San toma otra silla queriendo defenderse pero el grito de On-jo hace que se detenga.

—¡Lee Cheong-San! —tanto el mencionado como I-sak regresan a verla pero es la chica la cual corre hacia On-jo queriendo atacarla.

Cheong-San corre hacia I-sak y la empuja consiguiendo tirarla por la ventana, la zombie se toma de la orilla de la ventana y tiene intenciones de caer sino fuera por On-jo que tomó su brazo con fuerza.

—¡¿Estás loca?! —recrimina Cheong-San quedando junto a On-jo e intenta hacer que esta suelte el brazo de I-sak—. ¡Suéltala! ¡Tienes que soltarla!

On-jo comienza a llorar viendo a la que una vez fue su mejor amiga, la zombie gruñe con fuerza queriendo morder a On-jo que se niega a soltarla mientras que a su cabeza llegan todos los recuerdos que vivió junto a I-sak.

—¡Oye! —grita Na-yeon hacia Cheong-San para patearle una silla de madera.

El chico se aleja de On-jo para tomar dicha silla y segundos después saca su cabeza por la ventana comenzando a golpear el brazo de I-sak para que se suelte.

On-jo ve caer a su mejor amiga pero cierra los ojos fuertemente sin querer ver la escena de esta tirada en el césped. Cheong-San regresa su mirada hacia On-jo que se mantuvo callada sin querer aceptar lo que acaba de pasar.

—On-jo —susurra Cheong-San tocando el hombro de su mejor amiga la cual regresó a verlo lentamente.

La chica ve a Cheong-San unos segundos antes de agacharse y romper en llanto, todos ven la escena algo decaídos, Nam-ra se mantiene sosteniendo la puerta con fuerza pero no evita sentir sus ojos llenos de lágrimas... ella jamás podrá despedirse de Ha-neul.

Gyeong-Su suelta algunas lágrimas antes de tragar con fuerza y hace pasar el nudo de su garganta.

—¡Vengan a sostener esto! —grita Gyeong-Su logrando hacer que su tono de voz no saliera roto.

—Vámonos, no aguantaremos mucho aquí —dice Cheong-San tras mantenerse callado por varios minutos.

On-jo es consolada por Ji-min y Hyo-Ryung que intentaban asegurarle que todo estaría bien aunque ni ellas se lo creían.

—¿Y cómo lo haremos? —pregunta Woo-jin sin dejar de ayudar a Dae-su.

—Con la cuerda de antes —explica Cheong-San antes de dirigir su mirada a su mejor amigo—. Gyeong-Su.

—¿Sí? —pregunta el chico regresando su mirada hacia Cheong-San que comienza a idear un plan—. ¿Qué? ¿Por qué me miras así?

—Sólo ábrela un poco para que quepa la manguera —explica Cheong-San intentando convencer a Gyeong-Su que negó inmediatamente.

—¿No es mejor esperar a los rescatistas? —pregunta Gyeong-Su sin querer hacer lo que sugiere Cheong-San.

—Moriremos todos —asegura Cheong-San.

—Esto nos matará más rápido, idiota —recrimina Gyeong-Su viendo indignado a Cheong-San.

—¿Esperar es lo mejor que podemos hacer? —pregunta Cheong-San con sarcasmo.

—A la mierda, es hora de dar lo mejor de mí —asegura Gyeong-Su acercándose a la puerta para comenzar a quitar algunas sillas con cuidado sin querer alterar todavía más a los zombies.

Gyeong-Su abre la puerta lentamente mientras que Cheong-San se agacha y extiende su mano queriendo alcanzar la manguera que se encuentra a unos cuantos metros, el chico maldice al momento de que otra zombie pasó cerca de su mano.

—¿Podrías dejar de respirar en mi nuca? —pregunta Gyeong-Su en un susurro hacia Dae-su que se encontraba detrás de él viendo a Cheong-San.

Cheong-San vuelve a maldecir por lo bajo al momento en que un chico infectado pateó la manguera un poco más lejos del salón, Cheong-San cierra la puerta antes de levantarse.

—¿Lo conseguiste? —pregunta Gyeong-Su en un susurro viendo a su mejor amigo que lo ignoró y abrió la puerta de la sala de suministros del laboratorio.

Cheong-San toma el brazo de plástico de un maniquí antes de hincarse y volver a abrir la puerta, intenta concentrarse pero los zombies alejan la manguera una vez más. Cheong-San sonríe con emoción al poder tomar la manguera contra incendios y cierra la puerta con velocidad para comenzar a jalarla.

—Presidenta, sostenga la puerta —pide Gyeong-Su hacia Nam-ra que asintió e hizo lo que le dijo mientras que el chico comenzó a jalar la manguera junto con Cheong-San.

—Ayúdenme a hacer nudos —pide Cheong-San antes de comenzar a hacer lo que él mismo dijo.

Ji-min se acerca a él luego de colgarse la mochila de provisiones de Ha-neul—. ¿Cómo lo hacemos?

—Enróscala y átala, como para que entre una mano o un pie —explica Cheong-San mientras que Ji-min le hizo caso junto con Gyeong-Su.

—En zigzag, átalos en zigzag, nudos cada 50 centímetros —explica Joon-young sin dejar de sostener las sillas de las ventanas.

Los tres comienzan a trabajar antes de conseguir enredar toda la manguera, Cheong-San toma aire antes de asentir con seguridad.

—Vamos —dice Cheong-San antes de caminar hacia la ventana junto con Gyeong-Su, los dos tiran la manguera sin poder ver hasta dónde llega.

—¿Sí podremos lograrlo? —pregunta Gyeong-Su con desconfianza.

—Bajaré a ver, vengan cuando les diga —pide Cheong-San saliendo de la ventana para tomar la manguera pero se queda mirando a On-jo.

—Baja de una vez —ordena Gyeong-Su dándole una ligera nalgada a Cheong-San el cual entró de nueva cuenta al salón—. ¿Qué haces?

—Gyeong-Su, baja tú primero —pide Cheong-San asustando a su mejor amigo que comenzó a negar.

—¿Por qué? ¿Viste algo? —pregunta el chico asustado viendo como Cheong-San negó—. ¿Qué hay ahí abajo entonces?

—Tú puedes, no lo pienses —pide Woo-jin animando a Gyeong-Su el cual comenzó a maldecir pero hizo caso de todas maneras.

Gyeong-Su comienza a rezar mentalmente mientras baja con sumo cuidado, maldice por un momento ser algo bajo de estatura ya que sus piernas no alcanzan las aberturas de la manguera.

—Carajo, qué susto —susurra Gyeong-Su viendo al zombie que se chocó contra una de las ventanas del salón al verlo—. Maldición, tú puedes Gyeong-Su, eres increíble.

La Señorita Park sale del estudio de grabación tras escuchar como golpearon la ventana, la mujer ve la punta de una manguera en la ventana por lo que no evita fruncir el ceño ligeramente.

—Quiero bajar primero —ordena Na-yeon empujando a Woo-jin y a Cheong-San que se encontraban vigilando que Gyeong-Su no se caiga.

—Uno a la vez —dice Cheong-San deteniendo con velocidad a On-jo—. Podría caerse si lo sacudimos mucho.

—No lo sacudiré —asegura Na-yeon antes de mirar hacia las ventanas del laboratorio—. ¿Cuánto tengo que esperar?

—Sólo un poco —pide Cheong-San antes de dirigir su mirada nuevamente hacia Gyeong-Su que batalla con sacar su pie de un nudo de la manguera.

—¡Gyeong-Su! —dice la Señorita Park con emoción al ver al joven por la ventana de la sala de transmisión.

—¡Señorita Park! —dice Gyeong-Su con emoción viendo que su profesora se encuentra perfectamente.

—Ten cuidado, no vayas a caer —pide la Señorita Park abriendo la ventana y ayudando a Gyeong-Su a entrar a la sala.

—¡Cheong-San! ¡La Señorita Park está aquí! —grita Gyeong-Su hacia sus amigos que se encuentran mirándolos.

—La Señorita Park está en el segundo piso —dice Cheong-San hacia sus amigos que siguen sosteniendo las puertas.

—¿En la sala de transmisión? —pregunta Dae-su sin dejar de hacer fuerza contra los zombies que intentan entrar.

Todos los jóvenes comienzan a bajar uno a uno, la segunda fue Na-yeon que fue ayudada por Gyeong-Su a bajarse de la manguera, luego fue Dae-su que abrazó con fuerza a la Señorita Park mientras los dos rompían en llanto, siguió Ji-min mientras llevaba la mochila de Ha-neul.

Joon-young tuvo algunas fallas técnicas ya que su pierna tuvo un calambre que lo dejó en el suelo de la sala de transmisión, los últimos fueron Hyo-Ryung junto con Woo-jin.

Nam-ra escribe con velocidad en un pos-tic para pegarlo a la pared pero se da cuenta de que los zombies comienzan a abrir la puerta poco a poco, la chica corre con velocidad hacia Cheong-San para bajar por la manguera.

—Han, estamos en la sala de transmisión, por favor ten mucho cuidado. Nam-ra —se lee en el pos-tic que escribió Nam-ra.

—Baja —ordena Cheong-San jalando a On-jo hacia la ventana, la chica mantiene la mirada baja mientras tiene sus ojos llenos de lágrimas.

—I-sak... —susurra On-jo con la voz rota.

—¡Reacciona de una vez! —pide Cheong-San nervioso viendo fijamente a su amiga—. ¿Quién no ha perdido a un amigo hoy? Piensa en todos los que murieron, Na-yeon perdió a su hermana menor.

—No queda nadie que quiera —explica On-jo lastimando a Cheong-San pero este no lo demuestra.

—Pero hay gente que te quiere —recuerda Cheong-San intentando no demostrar sus sentimientos—. Como tu padre y... tienes que sobrevivir por ellos, así que vamos.

On-jo duda un momento antes de tomar la manguera para comenzar a bajar, Cheong-San la vigila pero se da cuenta de que los zombies están entrando poco a poco.

—Vamos On-jo, vamos —pide Cheong-San viendo a su amiga bajar con cuidado por la manguera pero regresa su mirada hacia el interior del laboratorio viendo como los zombies lograron tirar la puerta—. Rápido, rápido.

—¡Agárrala! —pide Gyeong-Su hacia Dae-su que se encontraba junto a él para ayudar a On-jo a entrar al salón de transmisiones.

—Eso es, ya te tenemos —asegura Dae-su tomando en brazos a On-jo que le agradeció por lo bajo.

Cheong-San ve como los zombies comienzan a correr hacia él por lo que se sube al marco de la ventana.

—Dios mío, nunca te he pedido nada pero por favor no me dejes morir —pide Cheong-San en un susurro antes de lanzarse de espaldas al mismo tiempo que un zombie se lanzó hacia él.

Todos los jóvenes de la sala de transmisión ven asustados como tres zombies cayeron, ven como la manguera de incendios se mueve unos segundos antes de que decidieran inclinarse para investigar.

El capítulo iba a tener una escena de Ha-neul junto con Su-hyeok pero quedó demasiado largo entonces decidí dejarlo en el siguiente capítulo.

Denle amor a este capítulo y prometo subir el siguiente dentro de un rato <3

Nos vemos en una próxima actualización, si llegamos a veinte comentarios <3

Los amo❤️

🧬𝐌𝐎𝐀𝐍𝐀🧬

Esta es una historia original de Wattpad, actualmente igual se encuentra disponible en Inkitt y en Booknet, si la lees en otra plataforma se debe a un virus y una copia sin mi permiso.