En estos momentos, el consultorio del doctor, que estaba atendiendo a Soobin, estaba impregnado de feromonas de tristeza y enojo.

"¿Quiere decir que a mi hijo le está afectando la separación de su padre y mía?" Preguntó Taehyung con confusión al doctor.

Jungkook estaba más atento a la reacción del omega, estaba preocupado de que esté tuviera un ataque.

"Primero tengo que dejarles claro que los niños que pasan con ellos no son algo malo, aunque me sorprende mucho lo que a Soobin le esté pasando". El doctor les estaba explicando la situación en la que su hijo se encontraba. 

"¿Pero estará bien, verdad?", preguntó con preocupación Jungkook.

"Claro que sí". Contestó con una sonrisa, "para ello necesita el apoyo de sus dos padres, tal vez sea incómodo para ustedes, pero si quieren que el lobo de su hijo se desarrolle como es debido, ustedes tienen que esforzarse". Comentó con una pequeña mueca.

"Haré lo que sea para que mi pequeño no sufra más". Taehyung habló rápidamente. 

"Bueno, creo que hablar de esto entre ustedes, yo les daré las opciones y ustedes tomarán la decisión". Jungkook simplemente asintió a las palabras del doctor.

Estaba claro que los exesposos darían todo para que sus hijos no sufrieran.

Los pequeños Jeon se encontraban en la sala de espera para niños del hospital, los dos se encontraban sentados en las sillas que estaban en la esquina de la habitación.

Soobin se encontraba jugando en el celular, un juego que desde hace días se volvió adicto a él.

"Soobin". Llamó Sana a su hermano.

El niño despejó su vista del celular para darle una mirada rápida a su hermana. "¿Qué pasó?", preguntó con curiosidad.

Sana se quedó quieta un momento antes de hablar. "¿Quieres algo?" Preguntó Sana.

Sin pensarlo mucho, Soobin asintió. "Quiero chocolate, mucho chocolate". Le respondió con una pequeña sonrisa.

"Entonces tenemos que llamar al tío Hyun y él nos lo traerá hasta aquí, le podemos decir que en menos de diez minutos lo queremos aquí". Sacó su teléfono y empezó a buscar el teléfono de su tío.

El pequeño empezó a negar con la cabeza, no quería meterse en problemas con sus padres. Él sabía que si quería algo, se lo tenía que pedir a sus padres, no a los demás.

"Eso nos meterá en problemas con nuestros padres, Sana". Apagó su teléfono para prestarle atención a su hermana. 

Sana frunció el ceño y se quedó callado unos segundos.

"Sabes, Soobin, papá Koo me dijo que si quería algo solo tenía que llamar a su asistente o a tío Hyun porque a ellos les paga para que sigan sus órdenes y como uno de nosotros dos va a manejar la empresa, también tienen que seguir nuestras órdenes". Hizo un gesto de obviedad después de decir todo aquello.

Soobin iba a decir algo, pero en la habitación entraron sus padres y el niño se paró rápidamente para acercarse a su padre Tae para que lo cargara.

Pero Jungkook se interpuso en el camino del pequeño.

"Yo te cargo, campeón". Con una sonrisa se agachó un poco para poderlo cargar, pero Soobin se hizo un lado y después regresó con su hermana para sentarse a su lado.

"Yo quiero a papi Tae, no a papá koo". Murmuró para después recargarse en el hombro de su hermana.

Taehyung sonrió por el pequeño berrinche de su hijo.

"Vamos a casa, niños". El omega les dijo y ellos asintieron, "Llegando a la casa tenemos que hablar sobre algo sumamente importante". Tomó la mano de Soobin y Sana la de su padre Jungkook.

Una vez llegaron a la casa, empezaron a cambiarse por algo más cómodo, todos menos Jungkook, ya que él no tenía ropa cómoda en esa casa. 

Jungkook se sentó en el sofá mientras esperaba a sus hijos y a Taehyung.

Se sentía algo cansado, pero también quería pasar tiempo con sus hijos y ayudar a Soobin a controlar aquellos momentos de llanto.

Y también darle atención a Sana, ya que su princesa puede llegar a pensar que quieren más a Soobin que a ella solo por ponerle más atención a su hermano.

Además, quiere ayudarla a entrenar ahora que iba a empezar a entrenar.

El primero en salir fue Soobin quien se acercó rápidamente a él para sentarse a su lado y abrazarlo.

Jungkook soltó una risita al sentir la respiración de su pequeño en su cuello.

Ahora entendía cuando se aferraba a él para aspirar su aroma, no era la primera y sabía que no sería la última.

Sana y Taehyung salieron juntos y se sentaron otro sofá. 

"¿Qué es lo que nos van a decir?" Preguntó con curiosidad mientras jugaba con la mano de Taehyung. 

"Es posible que esto los confunda, no obstante, es una decisión que tomamos por el bien de Soobin después de todo lo expresado por el doctor. Asimismo, para Sana, después de que comience a entrenar, requerirá la ayuda de alguien que le brinde apoyo para practicar en casa". Empezó a explicar y llevó su mirada a Jungkook pidiendo ayuda con la mirada.

"Bueno, lo que su padre quiere decir es que ahora vamos a pasar más tiempo todos juntos, ya que voy a vivir un tiempo de nuevo en la casa". Lo dijo de forma tranquila.

Taehyung simplemente asintió dándole la razón a Jungkook.

Los niños se quedaron callados por unos segundos. El primero de los niños que habló fue Sana.

"¿Entonces si puedo golpear a las personas?". Preguntó con emoción la pequeña.

Taehyung abrazó a su pequeña y asintió, "Claro que podrás hacerlo". Dejó un pequeño beso y se separó de la pequeña. "En un momento regresó, por favor, cuida por un momento a los niños, Jungkook". El alfa asintió y soltó un suspiro. 

El pelinegro sabía que el omega le dolía todo lo que estaba pasando, ellos habían decidido estar lejos del otro para poder sanar y parece que el destino no quiere eso.

"¿Quieres aprender algo, Soo?" Preguntó Jungkook, para cambiar de tema.

El niño negó, "Estoy bien así". Dijo para después acostarse en el sofá y poder dormir un rato.

"Tal vez más adelante te interese algo y, si es así, no dudes en decirnos, ¿está bien?" El pequeño solo hizo un sonido de afirmación.