S E I S

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng
































Al salir de la habitación. Recordó que el cuerpo de Jinhyun seguía en el suelo y la sangre que salía de él, estaba llenando el suelo del baño y había salido hacia la habitación. Yoongi soltó un suspiro y sacó su teléfono del bolsillo y marcó el número.

— Woozi, ¡Amigo! ¿Cómo estás?

Hola, Min. ¿Qué trabajo tienes para mí?

— ¿Cómo sabes qué tengo un trabajo para ti?

Tú jamás me llamas y nunca me dices amigo... ¿Eso te da una respuesta?

— Está bien, necesito de tu ayuda.

Déjame y adivino..., cadáver.

— Acertaste. Te veo en casa, las otras llaves están bajo el tapete de la entrada.

Y colgó. Caminó por el pasillo y bajó las escaleras, y un dolor en la espalda le avisó que algo andaba mal con su cuerpo.

— ¿Qué mierda me habrá hecho? — se preguntó al sentir el dolor de espalda aún más fuerte. — Se siente como si me hubiera caído de las escaleras.

Llegó al primer piso y caminó hacia la puerta, la abrió y salió.

— ¿Debí advertirle a Woozi de Jimin? — cerró la puerta. — Dudo que baje. — sonrió y rodó la gran casa. Vio su auto de color rojo y se acercó a el, abrió la puerta del piloto, sacó las llaves y encendió el motor. — ¿Sangre? Sangre.

Se alejó de la casa y condujo hasta el hospital la cual envió a su pequeño por primera vez hace dos años atrás. Su teléfono sonó, enseñando en pantalla el número de Taehyung.

— Taehyung, ya voy en camino.

Más te vale, Min. Porque ya quiero empezar...

No era Taehyung.

— Jinyoung..., viejo amigo.

¿Cómo has estado, amigo?

Quién de los dos sea más hipócrita.

— Estaba bien sin escuchar tu voz, ¿Y la familia? Ah, cierto que no tienes.

Te gusta hacer bromas, Min.

— Ay, no era broma. Era un chiste.

No es gracioso, Min.

— Para mí lo es, ¿Sabes? Es divertido saber que maté a tu familia.

Y yo maté a tú pequeño...

La línea se quedó en silencio unos segundos.

— Y que bien te salió eso, Jinyoung.

Una risa áspera salió del auricular.

— Ven rápido, quiero verte la cara...

Y colgó. Yoongi dejó el teléfono en el asiento del copiloto y frenó ante el semáforo en rojo. Bajó la ventanilla y buscó en el compartimiento delantero que estaba frente al asiento del copiloto, una caja de cigarrillos. La cogió, sacó uno y buscó el encendedor, lo encendió y se lo llevó a los labios.

El semáforo se puso en verde y pisó con fuerza el acelerador haciendo que las llantas traseras chillaran con la carretera. Soltó el humo cuando ya casi llegaba al estacionamiento del hospital. Entró, detuvo el auto, apagó el motor y bajó de el. Se desabotonó el saco azul y caminó hacia las puertas deslizantes del hospital.

Las puertas abrieron cuando él se detuvo frente a ellos. Caminó por el pasillo y extrañamente todo estaba en silencio. Para su sorpresa, vio a Taehyung a lo lejos. De su cabeza brotaba sangra y estaba tendido en el suelo.

— Maldito bastardo... — Yoongi sacó el arma de su pantalón, la cargó y apuntó con ella, mientras se acerca a Taehyung. Llegó a él y lo movió con el pie. — Kim, arriba. — le dijo, pero estaba inconsciente.  — Malditasea, Kim. Taehyung, despierta. — lo movió más.

— ¡Yoongi! — el grito de Hoseok llegó a los oídos de Yoongi. Él se giró con rapidez, percatadose de que Jinyoung lo apuntaba con el arma.

— Hola, Min. — dijo Jinyoung con una sonrisa de oreja a oreja. Se había cortado el cabello y ahora lo tenia de un castaño claro. Vestía de pantalón caqui y camisa azul oscuro. — Tanto tiempo..., ¿Cómo está, Jimin?

— Ve y pregúntaselo. — respondió Yoongi y apuntó hacia Jinyoung.

Jinyoung le guiñó el ojo y cargó el arma con la que apuntaba hacia Yoongi. Los dos empezaron a dar pasos hacia atrás buscando esconderse o al mensaje esquivar las balas que pronto saldrían de las armas.

— ¿Qué se siente saber que te arrebataron a lo que más quieres? — le preguntó Jinyoung a Yoongi.

Yoongi ladeó la cabeza con una sonrisa cínica. — No lo sé, dime tú. ¿Qué se siente saber que no tienes familia?

La sonrisa de Jinyoung se esfumó por completo.

— ¿No te cansas? — dijo Jinyoung. — Han pasado dos años, ¿Por qué sigues igual?

— ¿Pretendias que iba a cambiar? — Yoongi empezó a reír. — ¿Por qué todos creían eso? Por favor.

— Tú solo no cambiarías, alguien te ayudaría...

— Déjame adivinar, era Jimin. — ahora era Jinyoung quien sonreía.

Yoongi vio por el rabillo del ojos a Hoseok y para su salvación, tenia un arma en manos. Yoongi sonrió y dejó de apuntar a Jinyoung.

— ¿Qu-qué estás haciendo? — dijo Jinyoung.

Yoongi le guiñó el ojo y levantó las manos junto al arma, en tono de que se rendía.

— Sé que te mueres por dispararme..., así que te dejaré que lo hagas. Pero, sé inteligente. Da en los puntos fáciles, no te compliques en darme en la cabeza o el pecho. Sí me matas, te matas. — sonrió.  — Adelante, dispara.

Jinyoung comenzó a reír como un psicópata.

— ¿Te estás escuchando, Min? Pides que te dispare. — Jinyoung dejó de apuntar y se frotó el rostro con la mano libre. — Vas a morir, sí dejas que yo dispare primero, Min.

Yoongi se encogió de hombros.

— ¿Y no quieres eso? ¿No quieres verme muerto?

— Te vale mierda la vida, Min.

— Sabes que tu vida va a valer una mierda cuando abres los ojos por primera vez y ves a un idiota cortando a tu madre.

— ¿Aún no superas el pasado, Min? — Yoongi le hizo una seña a Hoseok para que se acercara.

— ¿Y tú no olvidas a Yugyeom? — Jinyoung se jaló el cabello y gritó.

— ¡Eres un maldito! ¡Púdrete en el infierno!

— Qué halagador, me estás enviando a casa. — Jinyoung lo fulminó con la mirada y volvió apuntar con el arma hacia Yoongi.

Yoongi le sonrió. Jinyoung se llenó de ira.

— ¡Hoy será tu fin! — gritó Jinyoung.

Hoseok apuntaba hacia la cabeza de Jinyoung.

— Me haces un favor, Jinyoung.

— ¡VETE AL INFIERNO! — y antes de que él pudiera soltar el gatillo, Hoseok disparó desde la esquina izquierda del hospital. La bala fue disparada hacia el pecho de Jinyoung. Jinyoung soltó el gatillo, pero la bala solo salió sin darle a nadie.

Él cayó al suelo de rodillas y se podía notar la ira que tenía por su rostro rojo. Lágrimas salieron de sus ojos cuando Yoongi se acercó a él.

— Ve a dormir como papi y mami... — le dijo Yoongi e hizo un puchero. Acercó su mano derecha y le acarició el rostro. — Pero, no irás con ellos. Tú..., te irás con los demonios, Jinyoung. Dulces sueños. — y besó su frente.

Jinyoung empezó a escupir sangre y su alma dejó su cuerpo cuando cayó del todo al suelo. Yoongi se alejó y se acercó a Taehyung. Hoseok no tardó en acercarse.

— ¿Estás bien? — le preguntó Yoongi a Hoseok. Hoseok no le respondió.

Yoongi levantó a Taehyung y con ayuda de Hoseok lo arrastraron a un lugar más seguro.

— ¿Qué mierda fue lo que paso? — preguntó Yoongi. — ¿Dónde está Jeon?

— En cirugía.

— ¿Qué?  ¿Por qué? — Hoseok lo fulminó con la mirada.

— Le disparaste, Min. Te lo recuerdo. — Yoongi rodó los ojos y dirigió su atención a Taehyung, quien empezaba a despertar.

— ¿Estás bien? — le preguntó Hoseok.  Taehyung asintió y se llevó una mano a la cabeza para sentir la herida abierta y que aún brotaba sangre. — ¿Por qué no te quedaste conmigo? Eres tan egoísta, Taehyung. Siempre pensando en ti mismo.

Yoongi rió. Hoseok y Taehyung lo miraron. Se alejó de ellos.

— ¿Seokjin y Namjoon? ¿Los vieron? — Hoseok y Taehyung arrugaron el ceño.

— Ellos no están aquí, Min. — respondió Hoseok.

Yoongi se guardó el arma y se llevó las manos a la cadera. Soltó un fuerte suspiro. Su teléfono sonó. Lo sacó del pantalón y miró el número en pantalla. La llamada se cortó al instante y un mensaje apareció.

"Tienes 1 minuto para salir de ahí, sí no quieres morir en una explosión, Min. :) "

— Desgraciado... — murmuró Yoongi.— ¡Saquen a Jungkook de cirugía!

— ¿Por qué? — preguntó Hoseok.

Yoongi se acercó con rabia hacia él y lo cogió por el cuello de la camisa.

— ¡¿Quieres que muera ahí dentro?! ¡Sacalo! ¡Hay una maldita bomba! — los ojos de Hoseok se abrieron más de lo común. Empujó a Yoongi y salió corriendo en busca de Jungkook. — Salgamos de aquí, Taehyung. 

Taehyung lo miró.

— Debemos salvar a las personas que trabajan aquí, Min.

— Salgamos de aquí, Taehyung.  — Yoongi salió del consultorio en el que se había metido. Taehyung lo jaló del brazo.

— Aquí hay enfermeros, personas enfermas y doctores. ¿Vas a dejar que mueran aquí? 

— No es mi puto problema, Kim. ¡Solo déjame salvarte el culo a ti! — le dijo Yoongi. Él se soltó del agarre de Taehyung, pero Taehyung lo giró y lo agarró por el cuello de la camisa.

— ¡Me vas a escuchar te guste o no! AQUÍ HAY PERSONAS INOCENTES.

— NO ES MI PUTO PROBLEMA, KIM.

— ¿Vas a dejar que un idiota mate a muchas personas inocentes, Min? ¡¿POR QUÉ MIERDA NO TIENES CORAZÓN?! — Yoongi lo cogió por el cuello.

— Me importa una mierda esas personas, Taehyung. No es mi maldita culpa que el encuentro haya sido en un HOSPITAL DE ENFERMOS, IDIOTA. — Yoongi lo soltó y se soltó de él. Salió del lugar y vio a los enfermeros salir corriendo de lugar con niños, mujeres, hombres y ancianos.

— Sí tú jamás harás el bien, lo haré una vez yo, Min. — dijo Taehyung a sus espaldas. Yoongi lo observó irse por encima del hombro.  Tragó duro y se dispuso a caminar por el hospital y encontrar a Hoseok. Entonces escucho el grito de Taehyung avisando que había una bomba, idiota.

El teléfono de Yoongi empezó a sonar muchas veces. Mensajes aparecieron en pantalla.

"Cuenta regresiva desde ahora, Min"

"59"

"58"

— Maldito infeliz. — salió corriendo.  — ¡Hoseok! ¡Hoseok!

— ¡Min! — gritó Hoseok. Lo vio con Jungkook en la espalda, estaba inconsciente.

"56"

"55"

— Tenemos que irnos de aquí, ya. — le dijo Yoongi.

— ¿Dónde está Taehyung? — preguntó Hoseok.

— ¡Camina! — le gritó Yoongi.

Hoseok subió a Jungkook un poco más en su espalda y caminó junto a Yoongi para buscar la salida.

"54"

"53"

"52"

— ¡Todos afuera! ¡Ahora! ¡Ahora! — Taehyung gritaba y corría por todos los pasillos. Llegó al ascensor y lo pidió, las puertas se abrieron y ayudó a salir al anciano en silla de ruedas, a una mujer con su bebé y una enfermera. — Vaya afuera y aléjense lo más que puedan.

"51"

"50"

"49"

Cuando el ascensor estuvo vacío, él entró y presionó el botón con el número dos de cinco pisos. Tragó saliva y las puertas del ascensor se cerraron. Llegó al segundo piso y cuando las puertas se abrieron, vio a una familia y dos doctores. Él salió y los dejó pasar.

— Por favor, salgan del edificio y aléjense lo más que puedan. — y salió corriendo.

Corrió por el pasillo y fue empujado puertas de habitaciones en busca de personas. El segundo piso estaba libre. Corrió hacia las escaleras y las subió con destino al tercer piso. Soltó al aire que había estado guardando, mientras subía y empezó a correr por los pasillos.

— ¡Salgan del edificio! — gritó.

"45"

"44"

"43"

Taehyung se detuvo para tomar aire y seguir corriendo. Llegó a las salas de cirugía y entró.  Vio a tres doctores saturando el abdomen de una mujer.

— Tie-tienen que salir del edificio, por favor... — dijo sin aire.

Los doctores y la anastesiologa  lo miraron y se apresuraron en terminar con lo que hacia. Un doctor lo jaló del brazo.

— ¿Qué está sucediendo? — Taehyung pasó saliva para responderle.

— Hay... Una bomba...  — suspiró. — Deben salir ya.

"39"

"38"

"37"

"36"

Taehyung se alejó del doctor y entró a la segunda sala se cirugía. Avisó y salió. Soltó un grito de desesperación, la verdad quería salvar a alguien, bueno, a muchos. Miró su reloj de mano.

"34"

"33"

"32"

"31"

— ¡Mierda! — salió corriendo hacia las escaleras con dirección al cuarto  piso. Cuando llegó. — ¡Todos afuera! — gritó.

— ¡Ayúdame! — la voz femenina llegó a sus oídos. Taehyung miró a todos lados.  — ¡AYUDA!

Taehyung se acercó se nuevo a las escaleras y escuchó la voz. Subió corriendo y vio acerca una niña llorando desconsoladamente en el suelo. A su lado estaba una mujer, al parecer era su madre, quien estaba conectada a una máquina, pero se había desmayado. Ella lo miró.

— Ayúdame..., por favor.

"29"

"28"

"27"

"26"

Sabia que no quedaba mucho tiempo. Taehyung se acercó a la niña.

— ¡Sal de aquí! — le dijo. La niña negó y le agarró la mano a su madre.

— No la voy a dejar... — Taehyung maldijo en vos baja.

— Ve, yo la llevaré. — la niña no soltaba la mano de su madre. — ¡Ve! ¡Vete!

La niña a duras penas se levantó del suelo y corrió escaleras abajo. Taehyung miró la joven mujer y la agitó para que se despertara, pero nada.

La desconectó de la maquina y la cargó en su espalda. Bajó corriendo las escaleras con ella y por suerte un enfermero lo ayudó y bajó a la mujer.

— ¡Tiene que irse! — le dijo el enfermero.

— ¡Ve tú! Necesito saber si no hay nadie en el edificio. — le dijo Taehyung. El enfermero asintió y se llevó a la mujer.

Taehyung miró el reloj de nuevo.

"22"

"21"

"20"

"19"

"18"

Recordó que no había revisado bien el cuarto piso y corrió escaleras arriba. Mientras subía, marcó un número de teléfono.

Hoseok, Jungkook y Yoongi yacían afuera a la espera de Taehyung. Yoongi se encontraba con la cadera apoyada en su auto y tenia los brazos cruzados. Jungkook, que ya había despertado, estaba dentro del auto nervioso al ver que Taehyung no salía.

— Iré a buscarlo... — dijo Hoseok, pero Yoongi lo agarró del brazo. — Yoongi.

— Tú te quedas aquí.

— Es tú hermano, bastardo. ¡¿Vas a dejar que muera?! — Hoseok lo miraba disgustado.

— Es su problema, él quería salvar a las personas.  — dijo Yoongi.

El teléfono volvió a sonar con varios mensajes.

"Bendito seas, Min Yoongi. :)"

"9"

"8"

"7"

— ¡Queda poco tiempo! — gritó Hoseok al darse cuenta de los mensajes. — No logrará salir, Min. ¡Min!

Otros mensajes entraron.

"Feliz noche a todos. :)"

"2"

"1"

Y el edificio explotó. Jungkook salió del auto corriendo, pero Hoseok lo agarró.

— ¡TAEHYUNG! —gritó al borde de las lágrimas. — ¡Suéltame! ¡TAEHYUNG!

Yoongi se había quedado atónito ante la escena del edificio en llamas.

— Taehyung... — murmuró Hoseok y pasó saliva.

Yoongi miró a otro lado y caminó para entrar en el auto e irse. Volvió a mirar hacia el edificio con la última esperanza y la descartó al saber que él no salía. Entró al auto y encendió el motor y dio reversa, se fue.

Entre más se alejaba del hospital, más golpeaba el volante. Soltó un suspiro y se dirigió a su casa en total silencio.

Cuando llegó, salió del auto y se bajó de él. Buscó las llaves de su casa, pero la puerta estaba abierta.

— Woozi no pudo cerrar la puerta, que imbécil.  — dijo y entró.

Cuando cerró la puerta detrás de él, se encontró a Woozi contra el suelo bajo un gran charco de sangre. Yoongi corrió hacia la cocina y para su desgracia la puerta estaba abierta.

— Maldito, Park Jimin.  Te atraparé. — dijo Yoongi.

Su teléfono sonó. Él respondió.

¿Qué se siente no tener a tu juguete en casa?

Era Jimin.

— Muy listo, pequeño. Muy listo. Ya verás, vendrás a mí tarde o temprano.  Sabes que me perteneces.

Ojalá no te equivoques, Min. Podría ser al revés. Tú, venir a mí.

— No me gusta ser el juguete, pequeño.

Pero fuiste el de tu padre.

La risa cínica salió por el auricular. Yoongi apretó el teléfono.

— No te metas conmigo, pequeño. Me estas haciendo enojar...

¡Qué bien! Así me gusta.

— Jimin...

Yoongi...

Gimió.

— No hagas esto, pequeño.

Sabes que te gusta..., Mmmh~

Yoongi se mordió el labio inferior.

— Quiero verte...

Lástima, yo no. Hástela pensando en mí, supongo que llevas dos años así.

— Jimin.

Adiós, Yoongi.

Y colgó. Yoongi soltó un suspiro y salió de la cocina. Miró el cuerpo de Woozi y se colocó las manos en la cadera. La idea de descuartizar pasó por su cabeza. No la descartó. Se acercó al cuerpo y le sonrió.

— Voy a guardarte y pondré en la caja "Fue un gran trabajador. " — lo jaló por el pie y lo arrastró por el lugar hasta la cocina, dejando un rastro largo de sangre. — Vamos a divertirnos un poco, Woozi.



































[Smap]

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro