ᘛ 01 : : CAPÍTULO UNO

i. ROBÓ DE SOMBRAS

ADRIK LLEVABA NAVEGANDO SOLA AL REDEDOR DE unos dos a tres años aproximadamente. No iba totalmente sola Reiv había decidido acompañarla como su navegante y a pesar de ser solamente ellos dos habían vivido bastantes aventuras, sobre todo cuando descubrieron un posible origen del de cabello bicolor. Habían conocido lugares y personas entre esas personas destaca un grupo pequeño de piratas los cuales se hacen llamar los Piratas de Corazón, quienes apenas inician en el mundo de la piratería, Adrik había quedado totalmente cautivada por el capitán Trafalgar Law. Oh ese hombre de aspecto sombrío pero que en realidad tenía un buen corazón, aunque un extraño sentido del humor. Había pasado con ellos dos semanas tratando una infección que Reiv adquirió.

Lo que más le había fascinado de ellos era que viajan en un submarino de color amarillo. En lugar de viajar sobre el agua ellos van por debajo, el doble de interesante según ella. Lamentablemente tuvieron que irse dos semanas después. Pero Adrik le había dicho a Law que algún día volverían a verse en algún lugar del nuevo mundo o que él sabría muy pronto de ella.

Luego de conocer a los piratas volvió al mar para conocer está vez a alguien más interesante.

Durante su camino se habían topado con cazadores de piratas, sus recompensas habían aumentado y quiera que no llamaron mucho más la atención de esos codiciosos hombres. De entre todos esos cazadores Adrik tuvo la oportunidad de conocer a un astuto cazador de cabello verde que utiliza una peculiar manera de pelar, no usaba dos katanas en realidad usaba tres. Lo había visto en acción y había charlado con él, a pesar de que Roronoa Zoro puede que tenga una cara de amargura total, tiene un buen sentido del humor, además se podía tener bajo control con una botella de sake. Y con unas cuantas botellas en la cabeza se hicieron buenos amigos.

Sin duda alguna la aventura le había salido bien a la rubia, pasaron peligros, conocieron lugares y todo. Pero así como todo había sido risa y diversión un punto en su camino se volvió lugrebe. Luego de aquella llamada que lo había cambiado todo.

No había mapa que la pudiera guiar hacia el paradero de su hermano adoptivo Ace. Aquel pecoso que había ayudado a encontrar a su padre un tiempo atrás, no se había equivocado cuando intuyo que al final ese intrépido muchacho sería parte de la tripulación de su padre. Y aunque no hubiera un mapa que la pudiera guiar la rubia estaba dispuesta a cruzar todo el océano con tan de detener las tonterías que Ace planea hacer sobre todo porque tenía un mal presentimiento, desde que Marco contacto con ella y le conto la mala noticia dentro de ella hábito la incertidumbre.

Desde un principio supo que Teach no era alguien de fiar, cuando lo conoció una alerta comenzó a sonar dentro de ella. En el fondo, se preguntaba cómo su padre pudo haber dejado que un tipo como aquel estuviera en sus filas.

Teach no era como se veía.

Adrik le había advertido a su padre que no se confiaran de Teach, pero parecía que todo el mundo había estado a gusto con su llegada. Parecía como una moneda de oro que a todos les gusta, menos a ella. Teach había intentado acercarse a su persona para hablar pero ella no se había dejado no necesitaba escucharlo y mucho menos entablar amistad.

Su temor se había vuelto realidad, sus pensamientos habían llegado a un límite en el cual casi predijo el futuro.

Recordaba esa noche en que llegó al Moby Dick, había una pequeña fiesta el ambiente alegré la envolvió. Todo iba bien hasta que le comentaron que había un nuevo tripulante y para su mala suerte cuando lo conoció supo que ese individuo traería muchos problemas.

Se lo había advertido a su padre, inclusive al mismo Thatch pero no le hicieron caso a sus advertencias.

Lastimosamente lo que había venido luego fue una total tragedia, la codicia humana siempre nos llevaría a cometer delitos con tal de obtener lo que otra persona tiene en su poder. Y esta vez, fué una fruta del diablo la que había provocado toda la tragedia. Quien diría que la manzana de la discordia fue una simple fruta de tipo logia.

El precio de la obtención de esa fruta fue muy alto, no valía la pena matar a otra persona. Pero la codicia siempre sería la que mandase, la que provocaría que una persona haga lo que sea necesario para obtener lo que tanto desea.

Y Teach había elegido la peor de las bajezas, había elegido asesinar. No era algo común y menos normal de ver pero no solo asesino, si no que lo había hecho hacía un compañero. Había violado totalmente una de las reglas principales de una tripulantes, el asesinato de un compañero.

Cuando recibió la noticia no había querido creerlo, pensaba que era una broma pero Marco, jamás jugaría con algo tan delicado.

Thatch había muerto a manos de Teach.

Una bala que lo había tomado por sorpresa, le había disparado por la espalda. Teach había sido tan cobarde que ni a los ojos pudo verlo, prefirió darle el tiro de gracia y luego escapar con la fruta del diablo como el criminal que es.

A Adrik le dolía saber que había perdió a un compañero a manos de otro. Le había dolido saber que pudo haber hecho algo para evitar la catástrofe. Thatch siempre había sido un hombre dulce con ella, le contaba historias, le preparaba su jugo favorito de arándanos.

Pero la razón por la que estuviera nuevamente en el mar no era por buscar a Teach. Tenía ganas de estrujarle el cuello con sus propias manos pero no valdría la pena, una escoria como aquella no valía la pena ni de buscar por mucho que estuviera ansiosa por verlo agonizar de dolor.

Todo se debía a qué Marco le había pedido que buscará a Ace. Ambos conocían al pecoso y sabían cómo era de imprudente, el comandante se caracteriza por su personalidad intrépida pero a la misma vez por ser un gran cabeza dura.

Marco temía por la seguridad de Ace por cómo es, estaba seguro que iría a buscar a Teach por venganza. Por lo mismo que le pidió a su pequeña rubia que lo buscará y detuviera.

Adrik contaba hasta el número diez.

Habían muchos lugares que pueden ir y buscar, no había destino en concreto al que pidieran ir. Lo único que les quedaba era esperar y desear que su intuición los fuera a guiar.

──y ¿hacia donde apunta la Log Pouse?── pregunta Reiv, sacándola de sus pensamientos.

Adrik alzo su mirada unos segundos.

──sigue apuntando hacia el frente, pero según creo nos dirigimos al triángulo demoníaco.── habló levantando la vista de la hoja dónde tenían las indicaciones.

Habían pasado a la ciudad de Water 7 hace unos días atrás con la intención de pedir indicaciones. Y saber hacía dónde se dirigían o donde podíamos ir, como también preguntaron si habían visto a Portgas D Ace por la ciudad.

Para su mala suerte él pecoso no había pasado por la ciudad. Los únicos piratas que habían pasado por ahí no eran importantes. Inclusive les habían dicho que el único pirata con sombrero era uno con uno de paja.

──¿crees que Ace vino por aquí?── pregunta Reiv, sacándola nuevamente de sus pensamientos.

──no estoy segura pero de alguna u otra forma tenemos que encontrarlo.

──me preocupa lo que vaya hacer.

──ya somos dos.

──bueno en ese caso, seguiremos adelanté y esperaremos que este triángulo no nos mate.

Adrik alzo una ceja.

Tantas historias que hablaban al rededor del mundo y el triángulo demoníaco es uno de ellos.

Se dice que en ese lugar hay centenares de barcos piratas que se han hundido debido al magnetismo que hay en el área. Tripulaciones completas que habían perdió la vida al ahogarse. No quedaba más que los barcos hundidos hasta el fondo del mar.

Y la rubia está a punto de comprobar si lo que decían es verdad.

Si sobrevivían quería decir que si había una forma de salir de ese lugar. Ya que también cuentan que ningún barco es capaz de escapar de ese lugar. Y Adrik quería ser la primera en comprobar dicha teoría.

──sigamos adelanté, navegante Reiv.── mando ella.── nos queda un largo camino por delante.

──por supuesto, solo insisto en que deberíamos de haber tomado otro caminó.

──¿tienes miedo?

──por supuesto que no.

La rubia asintió.

Sabía que el muchacho le tenía un poco de miedo a los horrores que habitan en el océano.

El barco siguió adelante era un pequeño velero suficientemente grande para ellos dos. Aunque no tan fuerte como para poder navegar en esas aguas.

Poco a poco el oleaje fue cambiando en esa área el mar se mantenía más inquieto las olas y el viento más violentas. Y el pequeño velero comenzó a verse afectado por el oleaje, el agua salpica por la bordes.

──no me gusta esto.── murmuro Reiv que desde el timón trataba de mantener el barco a flote.

──tranquilo hombre, hemos pasado peores cosas.── puntualiza amarrandose el cabello.── veras que salimos con vida y si no, contaran nuestras historias a futuras generaciones.

──¡NO DIGAS TONTERÍAS!── le gritó.

Adrik comenzó a reír por las palabras de Reiv, lo cierto es que el muchacho le tenía cierto pavor al agua.

De niño había caído al mar justamente cuando se formaba un tornado bajo el agua. El pobre había quedado tan traumado que pasó días sin siquiera acercarse a la orilla.

Mientras Reiv se mantenía en el timón Adrik comenzó hacer las maniobras aprendidas durante esos años. Había bajado la vela, amarrado está y había tomado uno de los remos con el fin de guiar al barco.

Aquel trabajo tenía que ser de dos o de ninguna forma el barco podría sobrevivir.

Había sido algo bastante complicado, el mar se había embravecido al punto en que forma grandes olas, el viento golpeó aún más fuerte y el ambiente había sido un poco más pesado trayendo consigo un sonido sordo y poco duradero parecía el final del océano pero al final aquellos dos habían logrado sobrevivir al triángulo demoníaco.

Mojados por el agua y cansados de tanto maniobrar para mantener a flote el barco ambos se dejaron caer sobre la madera húmeda, cerca del mástil.

Adrik tenía una mano sobre los ojos, se sentía un poco cansada sobre todo porque su ropa se encontraba húmeda.

──sobrevivimos.── murmura ella.

──fue un milagro.── responde él. Todavía no lo procesaba totalmente.── es un milagro que sigamos vivos.

──¿cómo sabes que estamos vivos?

Adrik se toco el mentón.

No tenía una respuesta para esa pregunta, nunca había pensado en su muerte y mucho menos en la misma.

Algunas veces llegaban preguntas a su cabeza tan extrañas como esa.

──ni idea pero sabremos de algún modo si estamos vivos o muertos.── responde.

──¿que clase de respuesta es esa? no quiero morir tan joven.── reclamo.

──relájate, ya te dije pronto averiguaremos la respuesta.

Reiv no había estado tranquilo pero prefiero no querer saber más del tema. Que Adrik le diga tan tranquila que había una posibilidad de que estén muertos lo abruma y asusta un poco.

Sobre todo cuando el a su alrededor había demasiada calma como para un gusto como el suyo.

── bueno levántate que vamos a seguir adelante.── mencionada ella tras haberse levantando.

──me sigue dando miedo que estés tan tranquila.

──ya te dije hemos salido de peores, y nunca nos pasó nada.

Reiv decidió ya no decir nada al respecto y decidió que lo mejor era hacerle caso.

Lo malo se encontraba cuando comenzó a sentir una mala sensación, como si esa sensación le estuviera avisando de algún peligro.

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La rubia abrió los ojos, frente a ella había un ambiente oscuro y hasta podía decirse que tenebroso. No tenía mucha fuerza y sentía que le dolía la cabeza cuando despertó totalmente se dió cuenta que se encontraba en una especia de castillo.

──Reiv.── lo llamo en medio de un susurró a su amigo el cual estaba a lado de ella.── Reiv, joder despierta.

El muchacho apenas hizo esfuerzo por moverse.

Ambos se encontraban amarrados con cadenas lo que impedía que pudieran moverse puesto que estás los mantienen cubiertos.

──¿donde estamos?── pregunto el de cabello bicolor.

──no tengo idea.── responde.── pero algo me dice que para salir de aquí vamos a tener mucho problemas.

Reiv abrió la boca para decir algo en respuesta pero una voz extraña y chistosa le había interrumpido.

──si es que pueden salir de aquí.── dice esa voz al fondo de la habitación.── pero nadie a logrado salir de aquí, así que deberían hacerse a la idea de que estarán aquí.

──¿quien eres? y ¿por qué nos tienes amarrados?── pregunto la rubia.

──los he traído hasta aquí por un propósito, quitarles su sombra.── habla el tipo que comenzó a reír de manera irritante.── voy a crear zombies tan fuertes con sus sombras. La hija de Barba Blanca será un perfecto experimento para el próximo zombie que vendrá a la vida.

Tanto Reiv como Adrik no entendieron lo que quería decir aquel tipo que aún no se había dejado ver.

──no se de que carajos estés hablando pero ¡sácame de aquí ahora!── exclamó ella enojada.

── no quiero ser un zombie.── comenta Reiv.

──me temo que ya es tarde para ustedes.── hizo una señala la cual apenas vieron ellos.── enciendan la luz voy a robar sus sombras.

Automáticamente una gran luz iluminó a los dos amigos dejándolos cegados por unos segundos. Sus sombras se hicieron grandes debido a la luz y la sonrisa que mostró aquel tipo se ensanchó.

Adrik achino sus ojos y entonces lo reconoció aquel que está por robarles sus sombras es nada más ni nada menos que Geko Moria, un pirata perteneciente al grupo famoso llamado los Shichibukai.

──deleitense con el espectáculo que voy a mostrar.── dice el Shichibukai riendo.── doctor prepare a los zombies.

──ansio esas sombras tengo el zombie perfecto para él.── señaló el médico loco con su dedo.

──señor, ¿puedo quedarme con la chica cuando acabé?── pregunto el hombre con partes de león.

──haz lo que gustes con ella, lo que me importa es su sombra.

El tipo de facciones con león clavo sus ojos en Adrik, la detallo con la mirada y se lamió los labios como un felino.

Adrik sintió náuseas, nunca la habían visto con tanta perversión como en esos momentos. Sentía asco así si misma.

──¡NO LA MIRES ASI DEPRAVADO!── exclamó Reiv enojado.── ¡ten respeto por una dama! maldito.

──SILENCIÓ.── grito Moria.── voy a llevar a cabo la recolección de sombras.

Y a continuación tomó la sombra de Reiv la cual se había levantando como si fuera una hoja de papel y a continuación la corto del mismo modo lo que provocó que el dueño legítimo de la sombra cayera en la inconsciencia.

Se había repetido el mismo procesó con la sombra de Adrik. La chica no pudo escapar habían pensado en todo al punto en que le habían colocado cadenas de prisma marítimo. Ese pirata se las pagaría muy caro cuando encuentre la forma de quitarse esas cadenas.

jane's note's

Y SE VINO EL PRIMER CAPÍTULO SJSJS

aún no aparece Luffy pero ojito en el siguiente si

más que todo fue para darle un buen inicio a la historia y el porque Adrik llegó a Thriller Barck y ajam

bueno espero les guste me emociona mucho este libro jsjsjs

se vienen cositas sjsjs

¿les gusto?

¿que esperan del siguiente?

¿alguna teoría?

hasta la próxima¡<3