Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

























































Capítulo dedicado a taisabelen ¿Por qué? Porque sí <3









⌜¡Hay un GAY entre nosotros!⌟



































































Empujé la puerta de salida encontrándome con la espalda de Jimin y con su mirada puesta en su teléfono.

—Si estuviera cogiendo, no te estuviera respondiendo, imbécil. —dije, mientras bajaba las escaleras y caminaba a su lado.

—Bien, ¿Helado o videojuegos?

—¿Qué quieres tú? —¿En serio Min Yoongi le estás preguntando qué es lo que quiere él?

¿En dónde quedó el papacito inalcanzable en donde todos tenían que preguntarte si querías o no?

—Mmm, videojuegos. ¿En tu casa o la mía? —preguntó, mientras se ajustaba la mochila. Se pasó una mano por el cabello anaranjado y sonrió.

¿Saben? Jimin cuando sonríe se le desaparecen sus ojos. Se vuelven unas tiernas alcancías. Por eso le puse ojitos. Porque él me quitó el "ojitos de alcancía" Imbécil.

Estaba babeando. Sí, estaba babeando. Si no era baba, entonces no sé qué era lo que brotaba de mi boca al verlo.

—Holaaaaa, ¿Yoongi? Te quedaste mudo. —me dijo y yo tosí.

—Am, ¿Tu casa? —dije. La de él siempre está sola. ¿Por qué no jugar en ella?

Jimin asintió y los dos caminamos hacia su casa. Pero, había algo que me tenía incómodo. Es que..., al ver a Jimin agitarse el cabello, recordar la escena de su grandioso cuerpo. Había hecho que..., mi... ¡YA ESTO ES UN MALDITO INFIERNO!

Me aparté unos centímetros de Jimin y traté de ponerme la mochila, que había recogido en el salón mientras hablaba con él por mensaje. La puse en la parte delantera para que no se diera cuenta de mi maldita erección. MI MEJOR AMIGO ME HABÍA CAUSADO UNA PUTA ERECCIÓN QUE SOLO LAS MUJERES ME CAUSAN.

—Estás muy callado, Yoongi... —me susurró Jimin, muy cerca para ser exactos. Mi piel se erizó y maldije por dentro.

¡Tetas, vagina! ¡Tetas, vagina! ¡Pito, culo! Diosito, perdóname.

Mi entrepierna dolía y mi miembro palpitaba. Necesitaba atención lo más pronto.

Por favor, ahora no amigo. ¡ESTOY CON UN CHICO!

—Yoongi... —Jimin, dejó de caminar a mi lado. ¿Por qué se detenía? ¡NO! —¿Qué te pasa conmigo?

Pasé saliva y abracé mi mochila con fuerza, haciendo que mi miembro rozara con el. ¡AHHHH! Necesito una buena paja.

—Te estoy hablando, cabeza hueca. —volvió a hablar Jimin, detrás de mí. Dejé de caminar y me giré con la sonrisa más falsa que las Kardashian. —¿Qué te pasa? Has estado muy raro todo el día. ¿Es por ese chico?

—No, yo...

—¡Olvídalo! —estaba enojado. Se podía ver en su tierno rostro. Sus mejillas se hicieron grandes.

¡Aw! Quiero aplastarle las lindas mejillas. ¡AHORA NO CONCIENCIA GAY!

Ah sí, tengo ahora una maldita conciencia gay por Park Jimin.

—Jimin, yo ya sé quién es... —dije. Jimin, pareció estar sorprendido y también algo nervioso.

Un pequeño niño corrió por mi lado, haciendo que mi mochila se cayera al suelo, dejando a la vista mi gran problema y no hablo de billetes.

Mi mejor amigo, bajó la mirada de mis ojos a mi entrepierna dándose cuenta de mi estúpido y grande amigo. ¿Dónde está Flash en estos momentos para que me salve?

Vi a Jimin morderse y lamerse los labios, sin apartar la mirada de mi entrepierna. ¡Esperen! ¿Está nervioso o se está sabroseando mi erección?

—Uh, Min. Necesitas ayuda con eso. —se burló. ¡Ven! Es un completo idiota. —¡Qué bueno que vamos a mi casa! —sonrió y caminó hacia mí.

Se agachó, cogió mi mochila y se enganchó en su hombro izquierdo. Me cogió de la muñeca y tiró de ella.

—En solo tres cuadras llegaremos. ¡Tú aguanta amigo mío! —me dijo, mientras corría y tiraba más fuerte de mi mano.

¡Jimin! ¿QUÉ CARAJOS ESTÁS PENSANDO HACERME?

Mientras corríamos, tenía la increíble vista del trasero de Jimin. ¿Ya les dije que es muy grande? Bueno, se los repito otra vez.

¡Min Yoongi! Considérate gay.

Me estaba muriendo, tenía atracción física y sexual por mi mejor amigo. ¿Diosito? Soy yo de nuevo, me he estado portando mal. ¿Podría venir a darme unos buenos chanclazos?

Dios: Hijo, cómase a su mejor amigo. Fortalezcan amistad, amén. —cantos evangélicos.

Me estoy volviendo loco, como ya ven.

Bueno, luego de 15 minutos de haber entrado en la casa de Jimin. Me encontraba yo, en su baño. Golpeándome la cabeza contra la pared para matar a mi conciencia gay, pero entre más me golpeaba su trasero atormentaba en mi mente.

Entonces la idea gay llegó me pegó una bofetada.

—Bien, Min Yoongi. Solo está vez harás esto... —miré mi reflejo y solté un suspiro. —Trasero de Jimin, ven a mi mente. —desabroché mi pantalón, bajé mi cierra. Aparté mi ropa interior y saqué erecto doliente miembro.

Toqué mi glande y solté un jadeo. Abrí el grifo del agua y mojé mi mano. De paso, lo deje abierto para acoplar mis gemidos. Con mi mano húmeda, empecé a bombearlo con fina lentitud. Cerré los ojos, proyectando el delicioso culo de mi mejor amigo en mi mente. ¿Debería dejar de llamarlo mejor amigo? ¿Cierto? Sí. El delicioso de Park Jimin en mi mente. ¡Ah! Suena lindo así.

¡Concéntrate!

Empecé a aumentar un poco la velocidad, al sentir mi primer orgasmo al punto. El líquido preseminal se encontraba en mi punta y eso me dijo jadear un poco más alto. Seguí moviendo mi mano de arriba abajo, mientras movía mis caderas hacia delante. ¡Esto es jodidamente delicioso!

—¿Yoongi? —la voz de Jimin llegó a mis oídos. Pero, ¿Por qué se escuchaba tan sexy? —Yoongi... —llamó de nuevo.

Sí, Park. Háblame, eso funciona.

Mis ojos estaban completamente cerrados. Sumergido en el placer, empecé a escuchar la voz de Jimin en mi cabeza. Seguí aumentando la velocidad, siento mi miembro moverse en mi mano. Acaricié mi rosado glande y gemí por el contacto.

Fue ahí, cuando escuché la puerta cerrarse y sentí una mano pasar por mi cadera. Apartar mi mano y ese pequeña y tierna mano, tomó mi erecto miembro. Abrí los ojos exaltado y me encontré con Jimin detrás de mí. Traía una sonrisa algo seductiva. Pero, ¿Saben que es lo incomodo? ¡QUE SU ERECCIÓN ESTÁ ROSANDO MI MALDITO ANO!

—Considera esto como una venganza por tratarme mal, Min. —y su mano se movió muy rápido, haciendo que gimiera con más ganas.

Ah, Jimin. Nunca te imaginé de esta manera.

Su otra mano, bajó toda mi ropa de abajo y sentí su otra mano tantear en mi trasero. Pero..., Jimin...

Fue ahí, cuando dos de sus dedos se metieron en mi boca con rapidez.

—Chupa. —me susurró.

¿Por qué lo estaba haciendo? ¡Chupe sus dedos! Ay, no. Ya soy gay.

Los sacó de mi boca y en ese instante sentí su dedo húmedo en mi entrada.

AH NO, ESO SI QUE NO. 





























































—Smap.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro