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⌜¡Hay un GAY entre nosotros!⌟

















Al día siguiente, me encontraba caminando por el solitario pasillo de la estúpida escuela. Llegué a mi casillero y lo miré con odio. Me acerqué para abrirlo y me encontré con tres papeles, los cuales cayeron a mis pies. Me mordí el labio inferior, Taehyung aún seguía enviando cartas. ¿Debería decirle que ya sé?

Miré a mi izquierda y derecha. No había nadie. Bien, los recogeré. Me agaché y levanté los tres papeles. Mi cuerpo empezó a temblar. ¿Qué? ¿A caso me gustaba Taehyung?

No, crees que puede ser Jimin.

—¿Cuándo te callarás? —murmuré para mí mismo y abrí el papel.

Día 03:

Hyuuuuuuuug, ¿Por qué tratas de encontrarme? ¿Sabes? Me alejaré de ti. Eres muy malo. No quiero que me encuentres, moriré de vergüenza.

¿Nos veremos en clase, hyung? Espero que sí.

Att: Tu enamorado.

Solté un suspiro. ¿Ya sabía entonces? Entonces, ya podría decirle. ¿Cierto? Abrí el segundo papel.

¿Sabes qué me duele? Qué seas un completo idiota.

Espero que cuando sepas quien soy, dejes a cualquier chica que te follas. Es malo para mí. :(

Att: Tu enamorado.

—No se cansa... —solté un suspiro y cerré el papel para leer el tercero. Pero, el timbre sonó haciéndome saber que tenía que ir corriendo a clase de geografía. Azoté la puerta de mi casillero, sin antes guardar los dos primeros papeles leídos. Me guardé el tercero y corrí en una maldita maratón hasta el salón 06. Llegué a la puerta y me tomé unos 0,02 segundos para respirar y entrar. Empujé la puerta con cuidado y desgraciadamente mi mirada se plasmó en la cara de Jimin, quien se encontraba serio leyendo un libro.

Ah, mi corazón duele.

Porque te gusta, idiota.

No hablas ahora, imbécil.

JAJAJA, te dijiste imbécil a ti mismo.

Solté un suspiro y entré del todo al salón. Agradecí a los cielos que el profesor no estaba y caminé a mi asiento. Lastimosamente, compartía clase con Jeon Jungkook, de geografía porque reprobé unas dos veces. Ahora, este se encontraba sentando en una silla a mi lado, mirándome con idiotez y una sonrisa fastidiosa.

—Buen día, Min. —dijo este, cuando dejé mi bolso en el piso y me senté, mirando la cabellera anaranjada de Jimin. —He escuchado que te tuvieron que sacar ayer de un bar, luego de dejar a Jinhyeon en un motel. ¿Qué fue lo que te pasó? Ni hecho mierda estás.

Miré de reojo a Jungkook y solté un suspiro. Empezaba a amargarme mi maldita mañana. Me crucé de brazos y me lamí los labios. Dejé caer mi cabeza hacia atrás y cerré los ojos fingiendo dormir para ignorarlo.

Anoche, no sé qué me había pasado. Solo fui con Jinhyeon a un maldito bar, luego de mucha charla, fuimos a un motel y cuando estuve besándola, todo iba mal. Yo, estaba viendo a Jimin como Jinhyeon. Eso suena muy acosador. Pero, así fue. Cada beso, caricia o toque, mi corazón se aceleraba porque pensaba en Jimin. Creo que ese beso me dejó muy confundido y ahora, no me sacó a mi "mejor amigo" de mi maldita cabeza.

Quien creería que por estar fingiendo dormir, me dormí.

Unos cuantos toques en mi hombro, me hicieron abrir los ojos de golpe para encontrarme con el rostro serio de Taehyung.

—Necesitamos hablar. —dijo este.

Oh mierda, se me va a declarar. AYUDA, AYUDA AYUDA. NECESITAMOS AGUA.

Cálmate, Min. Solo eres un gay más, ya está.

No soy gay.

A bueno, entonces ¿Por qué sueñas con Jimin que lo estás besando?

..., Fue una pesadilla.

—Yoongi, te estoy hablando. —Taehyung me sacó de mis pensamientos. —Necesitamos a hablar.

Mi cuerpo desarrolló una variación de temblores haciéndome sudar. ¿Qué? ¿A caso me gustaba Taehyung?

—¿Ahora? —pregunté y él asintió.

—Te veo en las gradas. —se metió las manos en los bolsillos delanteros, se dio media vuelta y caminó para salir del salón.

Miré a todos lados y me di cuenta que estaba solo. La clase se había acabado y nadie me había levantado. Que buenos amigos tengo.

Me levanté de mi silla y cogí mi mochila. Me pasé una mano por el cabello castaño y salí de ahí. Caminé con el pasillo, con la mochila en mi hombro y a lo lejos puede notar la cabellera anaranjada de Jimin. No lo sé, pero mi corazón dio un brinco. No ha hablado conmigo desde que llegue. ¿Tan mal me porté ayer? Creo que sí.

Pero, no debió besarme.

Vamos, sabes que te gustó.

ESO NO VA AL CASO, CONCIENCIA.

Uy, andas de groserito. Que Jimin te lama el culo.

Rodé los ojos y no aparté la mirada de su espalda. Entre más caminaba, podía ver lo que hacía. Vi una cabellera rubia frente a él, con quien se reía y disfrutaba del momento, Hoseok estaba hablando con Jimin. Dejé de caminar, mirando aquella escena de esos dos hablando amigablemente y me torné en una piedra. Solté un suspiro fuerte y mi rostro de arrugó. Tal vez, estaba enojado.

Estás celoso, Min.

DIJE QUE ESTOY ENOJADO.

No sé qué mierda pasaba por mi cabeza que decidí caminar hacia ellos dos y empujar a Hoseok apropósito impidiendoles hablar.

—¡Hey! Min, ¿Qué te pasa? —se quejó Hoseok.

Pestañeé antes de girarme para verlo y coloqué una sonrisa falsa. Me giré y ladeé la cabeza, aun sonriendo.

—No te vi. —mentí.

Hoseok arrugó el ceño. Miré a Jimin, quien se encontraba cabizbajo y empujé mi lengua dentro de mi mejilla. Se veía tan indefenso. Yo quería abrazarlo.

—¿Cómo mierda que no me viste? Te atravesaste en la mitad. —dijo Hoseok. —Pudiste también empujar a Jimin.

—Fue un accidente, rubio. Déjala fiesta en paz. —le dije sin apartar la mirada de Jimin.

—¿Buscas pelear conmigo, Min? —dijo Hoseok. —No te he hecho nada. Tampoco me meto en tu asquerosa vida.

Bufé y lo miré.

—Tanto escándalo por un maldito empujón. No aguantas nada, Jung. —le dije haciendo que Hoseok soltara una risa irónica.

—En serio eres un imbécil.

—Pero, este imbécil tiene novias. —dije con una sonrisa victoriosa.

El rubio me miró con una sonrisa y luego miró a Jimin.

—Ah que crees, yo también tengo algo con alguien. —arrugue mi ceño.

¿Por qué miraba a Jimin?

—¿Cierto, Minnie? —dijo Hoseok con una sonrisa.

¡¿LE ESTABA LLAMANDO MINNIE?! ¿A CASO LE DIJO MINNIE A MI JIMIN?

Esperen, dije "mi Jimin" .... A LA MIERDA TODO.

Miré a Jimin, esperando un "no" en negación, pero el solo levantó la mirada hacia Hoseok y le sonrió.

¿Por qué le sonreía? No, tenía que hacer una mueca de disgusto.

—Sí, estoy saliendo con Hoseok. —dijo Jimin.


































—Smap.

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