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HeeSeung miró de reojo al chico que se encontraba a su lado y al cual había pisado sin querer, pensó que la mejor forma era disculparse. Así que acercó su mano al hombro del chico para llamar su atención.

—Disculpa por haberte pi... —dijo, pero desde las bocinas salió la voz de Jay interrumpiendo su conversación.

—¡Buenas noches a todos! Bienvenidos a esta lujosa noche de increíbles bandas. ¡Nosotros somos The Kingdom! —anunció para luego empezar a tocar.

El chico, cuyo nombre al parecer era Jake, le regaló una sonrisa algo tímida. Se le acercó un poco para susurrarle algo al oído.

—No te preocupes. —le dijo haciendo que HeeSeung se le erizara al vello por la cercanía.

Empezó a sudar sin haberse dado cuenta por el pequeño toque del castaño que le había hablado. La distancia y el silencio reinó entre los dos mientras disfrutaban del concierto.

Jay tocaba la guitarra eléctrica con emoción, mientras se escuchaban al unisono los gritos de las personas que saltaban al ritmo de la musica. HeeSeung se sentía algo extraño en el lugar, no era por la música o por las personas, era por quién se encontraba a su lado. Volvió a mirar a Jake y contempló su expresión de emoción mientras meneaba la cabeza al ritmo de la música. A HeeSeung se le escapó una sonrisa al verlo, pues él le estaba transmitiendo algo de felicidad con tan solo mirarlo.

Dos toques en su hombro lo hicieron girar, encontrándose con Ni-Ki, quien pasó su brazo por encima de los hombros del pelinegro mientras meneaba la cabeza con ritmo. HeeSeung lo saludó y regresó la mirada al chico, pero su corazón dió un vuelco cuando ya no lo encontraba su lado. Arrugó el ceño buscándolo por su alrededor.

—¿Qué te pasa? —preguntó Ni-Ki. —¿Buscas a alguien? —este dirigió su mirada también al lugar en donde la tenía puesta HeeSeung.

El pelinegro negó con la cabeza y se mordió el labio inferior, pensando. Observó más del concierto y aplaudió cuando la banda de Jay terminó de tocar. Se dirigió al frente junto con Ni-Ki cuando las personas empezaron a dispersarse.

—¿Y? ¿Qué tal? —preguntó Jay sentándose en la tarima.

—Nada mal. —bromeó HeeSeung.

—Mi papá toca mejor la guitarra. —molestó Ni-Ki.

Jay le dió un pequeño empujón y río.

—¿Hacemos algo? ¿Quieren comer o nos vamos a casa?  —cuestionó Jay acomodando la guitarra.

—Sí, hace hambre. —respondió Ni-Ki. Opino que vayamos al restaurante de comida rápida que queda más abajo.

—Me parece. ¿Vienes HeeSeung? —le preguntó Jay.

El pelinegro levantó la mirada e hizo una mueca. Se metió las manos en los bolsillos delanteros del pantalón y asintió.

—Iré, pero pagan ustedes. —rio.

—Bueno, yo invito. —dijo Jay pasando su brazo por encima de los hombros de HeeSeung mientras caminaban por el Club en busca de la salida.

—Por cierto, había un chico aquí. Parece que todos lo conocían. Apenas llegó, hicieron un escándalo. —comentó Ni-Ki captando toda la atención de HeeSeung.

—¿Si? No lo ví. —dijo Jay. —Tal vez sea algún modelo o algo.

—Eso pensé. —respondió Ni-Ki pasándose la mano por el cabello negro.

Cuando llegaron a la entrada un chico se interpuso en su camino con una sonrisa algo nerviosa.

—Ah, hola... ¡Jay! —saludó este.

—Am... ¿Hola? —Jay quitó su brazo de los hombros de HeeSeung para acercarse un poco al chico.

—Solo quería decirte que tú y tu banda tocan genial. Los he escuchado desde su inicio y bueno, soy su fan. —un par de hoyuelos se asomaron en sus mejillas.

Jay sonrió de vuelta y rio algo tímido.

—Ah, gracias por el apoyo. De verdad me hace sentir muy bien. —agradeció este.

—¿Es mucho pedir que me firmes esto? —en el campo visual de los chicos apreció un CD.

—Oh, ¿compras los CD? —cuestionó Jay algo intrigado haciendo que el chico asintiera. Este mismo le proporcionó un bolígrafo y Jay firmó la tapa del CD. —No escuché tu nombre.

—Ah, lo siento. Soy JungWon, Yang JungWon.

—Uhm, un placer JungWon. —terminó de firmar y se lo entregó sin antes guiñarle un ojo.

—Gra...gracias, Jay... —se despidió de este y caminó hacia la salida.

HeeSeung quien observaba la escena en silencio, siguió con la mirada a JungWon y arrugó el ceño cuando lo vio juntarse con 3 chicos más. Fue cuando lo vio. Estaba de perfil, riendo mientras JungWon le comentaba algo. Volvió a sentir ese hormigueo en su cuerpo y el sudor frío. Pasó saliva sin apartar la mirada del chico hasta que Ni-Ki se puso en su campo visual.

—Oye. Vamos. —lo jaló Ni-Ki fuera del Club.

HeeSeung seguía tratando de enfocar su mirada en Jake, mientras Ni-Ki lo arrastraba fuera del Club. Tuvo la necesidad de preguntarle algo más o incluso de hablar, pero entre más lo alejaban de él, más sentía que no lo volvería a ver.

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