Los empleados del reino acomodaron los platillos y el alimento en la mesa, en un momento más llegaba el príncipe.
YoonGi estaba en su alcoba tomando un baño, esperando a estar listo para salir e ir a recibir a su primo.

Por otra parte se encontraba JiMin suspirando como un loco enamorado la manta que anteriormente YoonGi le devolvió.
Parecía algo... Extraño, hasta parecía un enfermo aspirando aquella manta hasta acabar le aquel aroma tan varonil que desprendía el rey.

De vez en cuando fingia no hacerlo, por qué había momentos dónde algún otro empleado pasaba cerca de el y le miraba raro, y no quería que le siguiera viendo como un raro.

Regreso a su habitación y regreso la manta a su catre.

-— Uh, Aquí estás JiMinie... -— Escucho tras el a NamJoo. -—

-— ¿Me necesitaba?

-— Bueno, solo quería decirte que te fueras a dar un baño al lago, los empleados ya están yendo para allá, me asegure que tú fueras el último en ir... ¿Vas?

-— Claro, claro, pero... ¿Nadie me verá?, ¿Cierto?

-— Así es, el resto de empleados ya estás lavados, así que no queda ninguno, mas que tu. Vez con confianza, nadie más irá.... Si quieres puedo ir yo y esperarte tras unos árboles y----

-— No, está bien, confío en que no abra nadie, voy enseguida...

-— Por cierto, JiMin-ssi, te tengo una muda de ropa, pasas con la señora Lee, para que te la entregué. -— El menor asintió y con eso NamJoon se retiró.

Termino de acomodar la manta sobre su catre y se dispuso ir a buscar a la señora Lee.
Una vez está le dió la muda nueva, paso a retirarse e ir al lago.

"Fuchi" -— Se quejo Mochi. -— "Si que se dieron un buen baño los empleados JiMinie..."

JiMin solo esbozo una ligera sonrisita y nego con su cabeza. -— Supongo, hoy vendría aquel príncipe de visita y supongo que todos deberían de lucirse...

"Y... ¿Seguro no hay nadie aquí,Minie?, Por que entre tantos olores aquí, casi no pudo percibir algún aroma..."

-— Confío en NamJoo, ella dijo que no abría nadie más que yo aquí... Y supongo que es cierto, mira... No hay nadie aquí -— Miro a sus alrededores y asintió.

Comenzó a sacarse las prendas que llevaba por ropa, las puso sobre una grande roca empolvada, mientras que la nueva ropa la ponía sobre estás para que no se ensuciase con la tierra. También tenía una pequeña sábana que le serviría como toalla para secar su cuerpo.

Consigo llevaba una cubeta que la señora Lee le había entregado, con ello metió de su cuerpo al lago (no completo), tomo la cubeta y la llevo con agua y la vacío sobre si. Tallando con sus manitas todo su cuerpo.
El agua estaba fresca, y era totalmente agradable.
Además, después de eso se iba a sentir más que limpio.

Siguió tallando su cuerpo con aquella fresca agua.
Hasta que sintió como su lobo se tensaba y ponía a la defensiva.

-— ¿Que pasa Mochi? -— Pregunto JiMin algo confundido por el extraño comportamiento que tenía su lobito.

Obtuvo un leve gruñido en respuesta. Algo andaba mal...
Su celo no era, en absoluto no lo era.
Aún así, más extrañado, escucho unas ramas crujir.

Alguien andaba cerca.

Quizás eso era lo que tenía tenso a su Omega.
Salió lo más rápido que pudo del lago, y tomo la manta para cubrirse el cuerpo.

-— Valla... Que agradable vista -— Escucho tras el.
Giro en si,  trato de cubrir más su cuerpo y la marca en su cuello.
Sintió el pánico correr por todo su cuerpo al igual que sus nervios.
Quería correr lo más lejos posible de ahí.
Pero no podía, tal parecía que sus nervios se lo impedían...

Quería llorar, gritar, tratar de lanzarse enzima de aquel sujeto y golpearle con tanta fuerza, la cual no poseía.

Pues se trataba nada más, ni nada menos que... Del mismo alfa que le había hecho sufrir tanto en su infancia.

-— No pensé que encontraría tremenda hermosura aquí... -— Siguió hablando el alfa con gracia.

Tras el llegó otro tipo, JiMin no pudo encontrar aroma en el. Se debía tratar de un beta.

-— Seño----— Aquel beta no siguió con su habla, pues el alfa le había callado con tan solo una seña.

-— ¿Que hace un jovencito beta tan solito por aquí? -— Pregunto el alfa.

JiMin sonrió internamente , que bueno que aquel té le servía para cubrir su aroma.

-— ¿No piensas contestar chico bonito? -— Siguió el alfa.

-— Yo.... Supongo que sí estaba aquí solo... Era para algo.¿No cree? -— El alfa soltó una pequeña risa y asintió.

-— Cierto, cierto... Soy muy torpe.. -— "Y claro que lo es", se dijo JiMin.

-— Bueno, yo... Me voy -— Levantó su ropa en manos sujetando más la manta sobre su cuerpo.

-— ¿Por que la prisa bonito?

-— Señor.. Tengo mejores cosas que hace-----

-— Ah~... Eres un chico difícil, ¿Eh?, Está bien, bonito. Seguro y... Te veré luego -— Sonrió ladino.

Cómo odiaba JiMin de aquella sonrisa....
JiMin no rechisto mas, y partió la más rápido posible de ahí.

Mientras el alfa le veía con una mirada fija, como se retiraba de ahí....

-— Señor -— Se animó a decir de nuevo aquel beta. -— ¿Le... Gustó ese beta?

-— Sabes... No pensé que encontraría a otro chico bonito, tal parece que me llevaré a casa dos por uno.

-— ¿Dos.... Por uno?

-— Si, no me vendría mal tener conmigo un lindo beta como el, y a mi JiMin... ¿Eh?, No suena mal...

-— Usted... ¿Piensa llevarse a ese beta?

-— Claro, así que, investiga más de ese niño bonito, en especial llega con sus padres, dales una oferta, Cuánto ofrecen por su pequeño beta.  Apartir de ahora Minho.. tu trabajo será vigilar a ese lindo beta... Dejaré que Seunghoo se encargue de buscar a JiMin... -— Sonrió , giro de su cuerpo y palmeo los hombros contrarios, retirándose del lugar. -—

-— Claro, señor -— Hizo una pequeña reverencia y siguió las espaldas de su jefe.

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✨🥀
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JiMin paro de caminar estando ya un tanto lejos del lago y de aquel alfa. Se escondió tras unos árboles y termino de vestir su delgado cuerpo.

La ropa que le habían entregado era un poco más grande que la anterior.
No se quejo, le gustaba usar prendas grandes.

Llegó entre bufidos al castillo, obteniendo algunas extrañas miradas por algunos betas y alfas guardias.

Entre ellos obtuvo a un Hoseok muriendo de gracia por su comportamiento.

-— Pareces un pequeño polluelo enojado -— Le comentó el alfa mientras le seguía hasta la cocina. -— ¿Que paso para que estuvieras así de molesto, JiMinie? -—

-— Uh, Hoseok-ah... Yo... M-me caí ... -— Mintió.
Hoseok soltó otra ligera carcajada y palmeo la espalda del menor.

-— Que gracioso, hubiese querido estar ahí...

-— ¿Para... Ayudarme?

-— Para reírme -— Obtuvo una mala cara de JiMin y volvió a reír. -— Y después te ayudaría.

-— Ya Hyung... ¿Y Namjo-

Guardo silencio repentinamente cuando un fuerte chillido de cornetas se escucharon tocar.
Los guardias que hacian el la entrada comenzaron a hacer formaciones en esta, mientras los empleados del castillo salían y hacían lo mismo que los guardias.

A lo no tan lejos se pudo escuchar un grito que decía "Aquí con ustedes, el príncipe Kim".

JiMin y Hoseok se quedaron mirando hacia la gran puerta del castillo, que comenzó a abrirse.
JiMin giró viendo ahora la silueta de YoonGi, quien recién salía del palacio y se quedaba en el pequeño lobby de fuera.

"Se ve tan lindo" pensó en unisonó con su Omega.

Volvió a mirar hasta las ahora abiertas puertas, viendo cómo una carroza se adentraba.

-— Uh..¿Hoseok Hyung acaso ya-........? -— Volvió a callarse cuando vio la mirada petrificada del alfa a su costado. —- ¿Hoseok Hyung? -— Se animó a volver preguntar, pero este no respondía.

Observo más, y vio como algunos guardias se acercaban a la carroza y abrían la puerta de un costado.

Ahí JiMin vio como un chico alto , de piel canela y cabellos castaños bajaba vistiendo galante. Con una pequeña corona en su cabeza.
En ese instante supo que se trataba del principe.
Giro a ver a Hoseok, y se percató que este hacía con unas cuantas lágrimas escurriendo de su rostro.

Frunció su ceño, y jalo un poco de su brazo para que le hiciera caso, pero tal parecía anonado por el príncipe. Volvió a encarar al príncipe y este le dió una mirada a él, y después al alfa llorón que hacía a su lado, no hizo mueca alguna, simplemente les miró.

-—¿H-Hoseok? -— Volvió a preguntar ahora indeciso.

-— V-vamonos de aquí, JiMin... -—

Hoseok le tomo de la mano, y salió corriendo llevando casi a rastras al pequeño omega tras el.
JiMin pudo sentir una mirada fija en el. Y cuando intento volver y ver si alguien le veía, se percató que tanto alfa rey y alfa príncipe le miraban de mala manera....

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