Eleanora se destacaba en los terrenos embarrados, no es que se quejara, le encantaba el barro. Se paró al lado de la puerta del lado de Bella, mientras esperaba que ella saliera. Las nubes eran de un tono gris claro, derramando pequeñas gotas de agua.

"¡Bella!" una voz mortalmente familiar retumbó desde la casa, que estaba pintada de un tono descolorido de rojo, luciendo como un granero, todavía hogareño.

fue jacob El hombre que Eleanora había conocido en la Primera Playa. Ahora estaban en La Push, por qué motivo, Eleanora no lo sabe.

Olisqueó el aire antes de que su nariz se arrugara. "¿Eso es gasolina?" murmuró para sí misma antes de dirigir su atención al dúo frente a ella.

Eleanora escaneó a Jacob. Una sonrisa emocionada se grabó en su rostro, los dientes brillantes contrastaban vívidamente con el profundo color rojizo de su piel. Su cabello estaba suelto, cubriendo ambos lados de su ancho rostro.

Jacob había crecido en algo de su potencial en el último año y medio. Había pasado ese punto donde los músculos suaves de la niñez se habían endurecido en la sólida y larguirucha construcción de un adolescente, los tendones y las venas se habían vuelto prominentes bajo la piel marrón rojiza de sus brazos, sus manos.

Su rostro todavía era dulce como Eleanora había recordado cuando se conocieron, sin embargo, sus pómulos son más afilados, su mandíbula cuadrada, toda la redondez infantil ha desaparecido.

"¡Hola, Jacob!" Bella sonrió, haciendo que Eleanora la mirara mientras Bella sentía la conmoción correr por sus venas. '¿Cómo puedo estar tan emocionada si no es Edward?'

Él asintió de vuelta y la sonrisa volvió a dibujarse en su rostro. -Elizabeth, ¿verdad? preguntó, inseguro, retratando su falta de memoria de su nombre.

Ella dejó escapar una pequeña risa y negó con la cabeza. "Eleonora". corrigió, no con dureza, sino con firmeza, como un recordatorio para no olvidarlo de nuevo.

Eleanora miró a Bella por el rabillo del ojo, viendo a la chica Swan en un dilema con su mente. Dicha chica de repente salió de eso. "¡Creciste de nuevo!" ella acusó con asombro.

"¿Alguna vez va a parar?" Bella sacudió la cabeza con incredulidad, mientras Eleanora se levantaba, parpadeando, comparando su altura con la del hombre frente a ellas. "¡Eres enorme!" Bella se rió.

"Todavía un larguirucho, sin embargo," hizo una mueca. "¡Entra! Te estás mojando".

Él abrió el camino, retorciendo su cabello en sus grandes manos mientras caminaba. Sacó una banda elástica de su bolsillo trasero y la enrolló en un bulto.

"Hola papá." gritó mientras se agachaba para pasar por la puerta principal. "Mira quién pasó".

Billy estaba en la diminuta sala de estar cuadrada, con un libro en las manos. Puso el libro en su regazo y se dio la vuelta cuando vio a las dos chicas.

"Bueno, ¡qué sabes! Es bueno verte Bella". Billy y Bella se dieron la mano. Billy lo soltó y se volvió hacia el recién llegado.

Ella sonrió y se inclinó con respeto, su rostro mostró una expresión de asombro antes de que una sonrisa terminara en su rostro. "Hola, soy Eleanora Rosè Delacroix". ella presentó mientras sacaba su mano para un apretón, que él aceptó con gusto.

"Billy  Black". respondió antes de que sus manos se separaran. "¿Qué te trae por aquí? ¿Todo bien con Charlie?" preguntó, la última pregunta principalmente para Bella.

"Sí, absolutamente. Solo quería ver a Jacob, no lo he visto en mucho tiempo". Bella respondió.

Leonora sonrió. "Bella me dijo que lo siguiera". ella respondió, en parte mintiendo.

Los ojos de Jacob se iluminaron ante las palabras de Bella. Estaba sonriendo tan grande que parecía que le haría daño en las mejillas.

"¿Te puedes quedar a cenar?" Billy también estaba ansioso. Eleanora no sabía si la pregunta era para ambos o solo para Bella.

"No, tengo que darle de comer a Charlie, ¿sabes?" Bella negó.

"Lo llamaré ahora", sugirió Billy. Siempre está invitado.

Bella se rió para ocultar su incomodidad. "No es como si nunca me volverías a ver. Te prometo que volveré pronto, tanto que te cansarás de mí".

Billy se volvió para mirar a Eleanora, que estaba en silencio, escuchando. "¿Tú que tal?" preguntó esperanzado.

Eleanora suspiró y sacudió la cabeza. "Lo siento, pero estoy en una dieta estricta". ella respondio. Lamentablemente, no pudo comer lo que le ofrecieron, tuvo que hacer su propia comida.

Asintió con la cabeza y sus labios se transformaron en una sonrisa, devolviendo una luz de esperanza a sus ojos.

"Entonces, Bella, ¿qué querías hacer?" preguntó Jacob.

"Lo que sea. ¿Qué estabas haciendo antes de que interrumpiéramos?" Bella estaba extrañamente cómoda allí. Era familiar, pero solo distante.

Jacob vaciló. "Me dirigía a trabajar en mi auto, pero podemos hacer otra cosa...".

Eleanora parpadeó, su cabeza chasqueando entre ellos. '¿Cuál era mi propósito aquí?' preguntó en sus pensamientos.

"¡No, eso es perfecto!" Bella interrumpió, haciendo que Eleanora la mirara desconcertada. "Me encantaría ver tu coche".

"De acuerdo." dijo, no muy convencido. Está en la parte de atrás, en el garaje.

Ambas chicas saludaron a Billy, la otra hizo una reverencia mientras se despedían levemente.

Ambas chicas siguieron a Jacob, mientras él las conducía a la parte de atrás. Una espesa hilera de árboles y arbustos ocultaba su garaje de la casa. El garaje no era más que un par de cobertizos grandes que habían sido atornillados con las paredes interiores derribadas. Debajo de su refugio, levantado sobre bloques de cemento, estaba lo que les pareció un automóvil completo.

"Buen viaje. Un Volkswagen Rabbit 1986, clásico". Eleanora sonrió, asombrada mientras sus ojos indicolitas examinaban el auto que se estaba construyendo.

Jacob sonrió, apreciando su conocimiento sobre autos. Bella habló. "Jacob, ¿qué sabes de motocicletas?"

Leonora parpadeó. "¿Motocicletas? ¿Por qué necesitas algo de eso?" preguntó ella, con una ceja levantada en sospecha.

Bella la ignoró mientras miraba a Jacob en busca de una respuesta. "Algo. Mi amigo Embry tiene una moto de cross. A veces trabajamos juntos en ella. ¿Por qué?"

"Bien . . ." Bella frunció los labios, haciendo que los ojos de Eleanora se abrieran al darse cuenta.

"Tú no..." ella entrecerró los ojos, un pequeño ceño fruncido decoraba su rostro. "Tú compraste bicicletas, ¿no?"

Bella asintió con la cabeza y Jacob solo la miró, una cálida emoción pululaba en sus ojos. "Genial. Lo intentaré".

Bella extendió un dedo. "La cuestión es", explicó, "Charlie no aprueba las motocicletas. Honestamente, probablemente se rompería una vena en la frente si supiera esto. Así que no puedes decirle a Billy".

Leonora frunció los labios. Nos está tratando como esclavos que necesitan estar allí bajo sus órdenes. pensó con amargura. Está loca.

"Claro, claro", sonríe Jacob. "Entiendo."

Eleanora frunció los labios en una fina línea mientras los escuchaba, teniendo una conversación agradable mientras estaba parada allí, sin saber por qué tenía que estar aquí en primer lugar. ¿Un policía que mantiene a Bella fuera de problemas? 'Yo no soy el Jefe Swan.'

"Te pagaré." ofreció Bella.

Esto lo ofendió. "No. Quiero ayudar. No puedes pagarme".

"Bueno, ¿qué tal un intercambio entonces?" Bella continuó. "Solo necesito una bicicleta, y también necesitaré lecciones. Entonces, ¿qué tal esto? Te daré la otra bicicleta y luego podrás enseñarme". ella terminó.

Leonora frunció el ceño. "¿Lecciones? ¿Qué? ¿Cuándo conseguiste las bicicletas?" preguntó ella, desconcertada y agitada.

Como siempre, Bella la ignoró, ya que tanto Jacob como ella permanecieron en su burbuja de amor.

"Dulce-eet". dividió la palabra en dos sílabas.

"Espera un segundo, ¿ya eres legal? ¿Cuándo es tu cumpleaños?" Bella pidió una aclaración.

"Te lo perdiste," bromeó, entrecerrando los ojos con fingido resentimiento. "Tengo dieciseis."

"La edad es solo un número, depende de ti si haces lo correcto o lo incorrecto en la vida". Eleanora intervino desde un lado de ellos. 'Oye, tengo más de mil, ¿realmente importa la edad ahora?' pensó sarcásticamente, mientras sus ojos se apartaban de ambos.

"Me perdí la tuya, así que hagamos una fiesta conjunta para compensar". Jacob sugirió juguetonamente.

"Suena como una cita". Respondió Bella, haciendo que los ojos de Jacob brillaran ante la palabra fecha .

"Tal vez cuando terminen las bicicletas, nuestro regalo para nosotros mismos". añadió Bella.

"Trato. ¿Cuándo los derribarás?" preguntó Jacob, listo para comenzar, entusiasta para terminar.

Antes de que Bella pudiera hablar, Eleanora respondió. "En su camioneta. Ella los trajo hoy". señaló con el pulgar la dirección del camión.

"Excelente." parecía decirlo en serio.

¿Verá Billy si los traemos? preguntó Bella, insegura.

Le guiñó un ojo a Bella. "Seremos astutos".

Eleanora suspiró mientras los seguía. Se movieron lentamente desde el este, pegándose a los árboles cuando estaban a la vista de las ventanas.

Eleanora se apoyó en un árbol más atrás, todavía a la vista del dúo mientras pensaba en las decisiones de su vida. Este fue uno de los días que se quedó con Bella voluntariamente por más tiempo.

Jacob regresó, empujando las bicicletas una por una. Bella tomó el otro cuando se fueron y volvió al garaje mientras Eleanora se quedaba atrás.

Eleanora suspiró, sus ojos en el dúo, quienes estaban en su propio mundo. Desaparecieron cuando doblaron la esquina y ella tomó acción. Parecía que se olvidaron de su existencia, así que ¿por qué no?

Inmediatamente se dio la vuelta y trepó al árbol, sin perder el ritmo y se acomodó en una rama en lo alto de las hojas.

Se apoyó en la corteza y sacó su teléfono, decidiendo llamar a Edward sobre su paradero.

Esta va a ser una tarde larga. pensó mientras sostenía el teléfono en su oído, escuchó ojos que miraban al cielo que brillaba a través de las hojas a través de los pequeños huecos.

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