Como ya se estaba haciendo costumbre, mientras yo terminaba de preparar la cena KiKi se encargaba de poner la mesa.

—¿Tu novia está bien?

—Creo que algo está molestandola

—Me sorprendí mucho cuando la escuche llegar en ese estado

—Me pasó lo mismo —Suspiré.— Ella no es de las personas que se ponen a beber de esa forma

—¿Entonces no te dijo que sucede?

Negué con la cabeza ante su pregunta, cuando despertamos horas después me encargué de mostrarle mi preocupación por ese extraño comportamiento suyo que había tenido desde que comenzó la semana pero lo único que salía de su boca era: Lo siento tanto.

La pantalla de mi teléfono que reposaba sobre la isla de la cocina se encendió con una llamada entrante de Haerin.

—Hola, cielo

—¿Estás ocupado?

—Estoy preparando la cena, eres bienvenida a unirte

—Gracias pero necesito que vengas a la estación de policía

—¿A la estación? —Dejé la comida de lado para prestar atención.— ¿Por qué estás ahí?

—Alguien entró a mi departamento —Murmuro débilmente.— ¿Puedes venir?

—Esta bien, iré enseguida

Terminé con llamada, apague la estufa y me quite el delantal mientras caminaba hacia la entrada

—¿Está todo bien?

—Alguien entró al departamento de Haerin

—Iré contigo

[...]

Cuando llegue a la estación de policía
me guiaron a una habitación donde el tonto ex prometido de Haerin y ella me esperaban nerviosos.

—¿Por qué está él aquí?

—Él trabaja aquí

—Eso es increíble

—Por favor, toma asiento

A regañadientes hice lo que él me pidió

—Señor Park, lo mandamos a traer por otra razón

—¿Otra razón?

Uno de los hombres que hasta ahora no había notado, se acercó a Taehyung para entregarle dos carpetas que puso frente a mi junto a dos memorias USB en una bolsita

—¿Qué es esto?

—Tengo entendido que tu hermano trabaja en una Academia de Artes en Londres, ¿es correcto?

—Es correcto —Respondí confundido

Taehyung abrió las dos carpetas para mi dejándome ver dos expedientes de chicas que nunca antes había visto en mi vida

—Lauren McMan y Amy Cleveland de veinte años. Hace tan solo unos meses desaparecieron después de terminar con sus clases, sus cuerpos sin vida fueron encontrados un par de semanas en un basurero

—Eso es terrible —Murmure.— Pero sigo sin entender

—Hasta ahora no habían podido hayar al culpable del asesinato de amabas chicas —Taehyung miró a Haerin y yo hice lo mismo.— Pero con su ayuda pudimos obtener evidencias para arrestar al culpable

—¿El culpable?

—En estas memoria pudimos encontrar fotografías y vídeos sobre ambas chicas teniendo relaciones sexuales con su profesor, quién en ese tiempo era tu hermano mayor, Park Jae Ha

Durante cada palabra de que salía de la boca de Taehyung, el malestar en el pecho se hacía cada vez más fuerte

—También pudimos encontrar las capturas de mensajes que solían intercambiarse, tal parece que ambas chicas comenzaron a amenazar a tu hermano con contar todo si él no les entregaba el dinero que estaban solicitando. A Jae Ha no le convenía eso por lo que terminó por violar y asfixiar a ambas chicas para después arrojar sus cuerpos sin vida en un basurero

—¿Cómo estás tan seguro de que fue él?

—Haerin encontró estás memorias junto otras cuatro que estaban en el departamento de tu hermano además de eso su rostro aparece en los vídeos

—¿De quiénes son las otras memorias?

—Apareces tú —Dijo la secretaria Kim por primera vez.— Son los vídeos que él solía grabar contigo

—¿Las torturas?

—Si

Miré las tres memorias marcadas con la letra J con odio pero lo que llamó mi atención fue la última que tenía una letra S marcada

—¿Y esta?

Tanto Taehyung como Haerin desviaron la mirada

—¿Quién aparece en esta? —Pregunté con un nudo en la garganta.— No se queden callados, díganme qué mierda contiene esta

—Shin Hye Sun

Sin pedir permiso tomé la laptop que se encontraba en el centro e inserte el USB que contenía únicamente una carpeta con un total de catorce fotos y tres vídeos, Taehyung y Haerin intentaron detenerme pero los aparte de un manorazo. Conteniendo las ganas de llorar decidí dar click a uno de los vídeos

Lo primero que escuche fue el grito desgarrador de Hye Sun

—Detente —Sollozo.— Estás lastimandome

—Cierra la boca, perra —Jadeo.— Voy a mostrarte cuan bueno soy

—Por favor... Duele...

—Tú eres mía —Gruñó.— ¿Qué tiene el imbécil de mi hermano menor que no tenga yo?

—Dejame ir...

—¡Quiero que digas que soy mejor que él!

Aquello fue suficiente para hacerme levantar bruscamente de la silla ignorando los gritos a mi espalda y la mirada llena de confusión por parte de KiKi quien me esperaba pacientemente

[...]

Cuando entre a la mansión de mis padres azotando la puerta me miraron asustados mientras que Jae Ha tenía la maldita mirada de siempre.

—Creí que no vendrías, cariño

Ignore a mi madre para arrojarme al cuerpo de Jae Ha hasta derribarlo sobre la alfombra descargando toda mi ira con cada golpe que daba mientras escuchaba los gritos de mis padres intentando detenermem

Iba matar al maldito bastardo con mis propias manos

—Detente Jimin —Escuche la voz de Haerin.— Por favor, detente

Sentí sus pequeñas manos aferrarse a mis hombros y después un fuerte tirón que me alejo por completo del cuerpo casi inconsciente de Jae Ha

—¿Qué está pasando?

—Park Jae Ha quedas bajo arresto...

No fui capaz de escuchar todo lo demás con claridad lo que todos estaban hablando en el comedor, mi madre entre sollozos fue guiada junto a mi padre hacia la salida por un par de policías que cargaban con el cuerpo tambaleante de Jae Ha

Pude sentir como la adrenalina iba disminuyendo y como mis manos sangrantes dejaban de temblar

—Jimin... —Dijo Haerin sosteniendo mi rostro entre sus manos.— Mírame

—Ella...

—Lo siento mucho —Sollozó.— No sabes cuánto lo siento

Haerin intentó abrazarme pero yo se lo impedí

—Vete a casa

—¿Qué?

—Quiero estar solo —Dije poniéndome de pie.— Vete a casa

—No voy a dejarte solo Jimin

—¡No quiero a nadie cerca! —Grité.— Por favor, quiero estar solo

Sin darle un último mirada subí a mi antigua habitación donde deje salir todo lo que había estado guardando desde que le di click al vídeo. Entre gritos arrojé todas mis cosas contra el suelo en un intento de sacar todo el dolor que quemaba en mi pecho

Quería morirme yo también