La puerta fue golpeada ligeramente, Rosalie era quien tenía a Meredith en sus brazos con Emmett detrás de ella.

Entonces los Denali entraron al cálido hogar, Meredith vio a cada uno de ellos; una mujer tenía cabello rizado y rubio, la que estaba detrás de ella tenía el pelo largo y rubio pálido, recto como la seda de maíz. La otra mujer y el hombre a su lado eran de pelo negro, con un toque de un tono de oliva a sus complexiones calcáreos.

Los vampiros miraron a Meredith, llevaba un vestido de mezclilla azul de tirantes gruesos y debajo un onesie de color blanco, Alice había puesto un pequeño moño en su escaso cabello rubio y miraba a todos atenta.

"Ella es Meredith" dice Esme junto a la mujer de cabello oscuro.

"Oh, Rosalie. Es hermosa" admite la mujer acercándose. "Hola cariño, hola preciosa..."

Entonces Meredith sonríe y estira sus brazos hacía ella.

"A Meredith al igual que a Rose, le gusta que le digan lo linda que se ve" admite Emmett viendo como su prima carga a su hija.

"Y no es para menos!" admite la mujer de cabello rubio lacio acercándose a su hermana de clan quien sostenía a la bebé. "Carmen, tendrán que detenerme de comerme esos cachetitos rosados" dijo ella apretando suavemente su mejilla.

Cada miembro se presentó con Meredith, Kate llevó a Meredith a la ventana más cercana y le enseñó la vista mientras comenzaba a nevar.

"Y nosotros estamos del otro lado del río" dijo la vampiro mientras Meredith veía el horizonte. "Puedes ir cuando gustes"

"Kate, tiene sólo un año" le dice Irina con diversión mientras ve a la niña.

"¿Y? Nunca se es demasiado joven para saber a dónde ir..."

Irina pone los ojos en blanco antes de marcharse.

"¿Soy tu tía favorita verdad?" preguntó Kate en un susurro.

"Lo lamento. Pero el título de tía favorita, es mío" dice Alice llegando con Jasper detrás de ella. "¿No es así solecito?" preguntó Alice y Meredith suelta una pequeña risa mientras se agita en los brazos de Kate. "Ahora pequeña, es hora de tu siesta"

Entonces Meredith pone sus pequeños ojos en Jasper y estira sus brazos hacía él, después de todo, el empatico era su cojín de siestas favorito.

"Muy bien señorita" Jasper la tomó en brazos. "No cariño, no chupes tu dedo" dijo el retirando su pequeño pulgar de sus labios. Meredith pareció ofendida, ¿Cómo se atrevía a tanto?.

Entonces el rubio tomó asiento en el sofá más cómodo de la casa y Meredith se acomodó en su pecho.

"Creemos que Jasper es su tío favorito" dice Esme y aquello fue una gran ofensa para Edward.

"Depende del día de la semana" dice Edward rápidamente, se rehusaba a seguir escuchando que Jasper era el favorito, el rubio sólo sonríe.

Pero aquella semana, sería la más difícil para todos. Meredith empezaba a tener sus primeros dientes y eso la ponía muy irritable, lloraba casi todo el tiempo, Jasper siempre estaba ahí para usar su don y hacer que el dolor se fuera.

"Miren eso, le estan saliendo los dientes de abajo.." dijo Carlisle mirando a la pequeña. "Imaginen es pequeño objeto filoso saliendo de su suave tejido carnoso de su encía, es toda una agonía ¿verdad?" preguntó el hombre a la pequeña que lo miraba con sus enormes ojos llorosos.

"Que horrible. Yo digo que le compremos un Pony" dice Emmett viendo a la pequeña comenzar a sollozar nuevamente.

"Alice, trae por favor la mordedera que deje en el refrigerador para ella" pidió Carlisle y la joven se apresuró a ir por él.

En cuestión de segundos, Alice volvió y Meredith dejó de llorar. Todos se sintieron aliviados al verla tranquila.

"Muy bien, iré a preparar su comida" dijo Esme con una sonrisa antes de abandonar la habitación.

Los Cullen no sabían lo difícil que era cuidar de una pequeña bebé, ellos tenían suerte de no dormir porque a veces Meredith se despertaba llorando por las noches en busca de sus padres o algún rostro conocido. Esa noche fue el turno de Edward.

"Oye, tranquila tranquila" dijo él acercándose a la gran cuna. "¿Tuviste un mal sueño? Le dije a tu papá que ver coraje el perro cobarde tal vez te asustaria" Edward se inclina hacía ella y Meredith pega su cabeza a su pecho y Edward la toma en sus brazos. "¿O son tus dientes?" preguntó el suavemente dejándola recostada en su pecho. "Ven, quiero mostrarte algo" dijo el vampiro tomando el peluche de su cuna y yendo al lugar donde tenía su piano.

Acomodó a la pequeña en el porta bebes que está cerca y la dejó recostada en el banquillo con el asu lado.

"La compuse hace unos días para ti" dijo él suavemente y entonces comenzó a tocar. Supo al instante que la música la hizo sentir un poco más calmada, sus ojitos comenzaron a cerrarse lentamente, ella peleaba por mantenerse despierta, Edward la miró sonreír ligeramente antes de quedarse dormida, él no paró de tocar hasta que la melodia terminó y ella se había perdido en sus sueños.

https://www.youtube.com/watch?v=iU6PkF1t8No

|Esa canción me encanta y yo se que Edward compondria una canción de cuna para Meredith y esta canción es hermosa |

Entonces Edward la tomó con mucho cuidado, cuando la quiso dejar de regreso en su cuna, ella se negó a soltar su camisa pues se aferraba a él con sus pequeñas manos. El vampiro mira a la niña y niega ligeramente antes de ir a su habitación y recostarse en el sofá, tomó la manta de felpa que tenía sobre el respaldo de este y cubrió a su pequeña sobrina.

Lo más extraño sucedió, Edward bostezo y sus ojos lagrimearon un poco, entonces sus ojos se cerraron y su sueño se hizo realidad.

A la mañana si se despertó y sólo lo hizo porque un par de manitas tibias y suaves se colocaron en sus mejillas.

"Buenos días a ti también" dice él con una voz somñolienta entonces cae en cuenta de una cosa y de incorpora en la cama mirando a Meredith sorprendido. "¿Tú hiciste eso?" preguntó el cobrizo y Meredith sonríe ligeramente antes de querer bajarse de dónde estaba. "Muy bien, espera espera, espera no vayas a caerte" dijo Edward dejando que sus pies tocarán el piso, entonces Meredith hizo el intento por querer caminar pero sólo puso hacerlo cuando Edward se colocó detrás de ella y sostenía sus manos para que no cayera.

Por supuesto la cargó cuando la vio difigirse a las escaleras, la familia estaba en la cocina. Emmett hizo algún comentario sobre el cabello despeinado de Edward claro.

"Anoche, Meredith hizo que me quedara dormido" dijo el cobrizo y todos lo miraron sorprendido. "Si yo también puse esa cara"

Rosalie tomó a la pequeña en sus brazos, ella siempre supo que Meredith sería muy especial y sólo besó su mejilla antes de dejarla en su silla alta pues su desayuno estaba listo.

No saben lo mucho que me encanta que a ustedes les encante esta historia!