Me quedo en silencio, asimilando lo que Jungwon acaba de decir. La revelación de que Sunghoon, el mismo chico que me había invitado a comer como si no hubiera ningún problema, hubiera liderado una iniciativa para que chicos como nosotros fuéramos expulsados de la escuela, me deja perplejo.

Mi mente busca una explicación, una justificación, pero no logro encontrar ninguna que me haga sentir mejor.

—Sí, Sunghoon, Heeseung y Jay lograron que casi la mitad de los estudiantes firmaran esa petición —Continúa Jungwon, su voz teñida de un leve rencor—.Al final, no fue aprobada por el consejo estudiantil, pero el daño ya estaba hecho. Los rumores se esparcieron, y muchos chicos como nosotros optaron por dejar la escuela.

—Es increíble... —Le contesto, sintiendo una mezcla de incredulidad y decepción. Las piezas comienzan a encajar en mi cabeza, la razón por la que los chicos se sorprendieron tanto de que Sunghoon me hablara, por qué me sentía tan observado cuando estábamos juntos.

¿Era posible que Sunghoon estuviera actuando de manera interesada conmigo? ¿Solo quería aprovecharse de mí por lo que podía ofrecerle en la
clase de matemáticas?

—Sé que parece que Sunghoon es amigable —Interviene Sunoo, dejando a un lado su habitual tono bromista— .Pero en realidad, él siempre tiene una agenda detrás de cada cosa que hace. Y no me malinterpretes, puede ser encantador cuando quiere, pero jamás olvides lo que ha hecho en el pasado.

—Yo no sabía nada de esto... —Respondo, sin poder ocultar mi frustración.

—Nadie te culpa, Jake —Jungwon coloca una mano en mi hombro, ofreciéndome una sonrisa reconfortante—.Solo queríamos que supieras la verdad antes de que te acerques demasiado a él. No queremos que te lastimen.

Asiento, aunque mi mente sigue enredada en pensamientos. Me siento culpable por haber confiado en Sunghoon tan fácilmente, por haber ignorado todas las señales de advertencia. Pero también siento una punzada de duda. ¿Es posible que Sunghoon haya cambiado? ¿O acaso siempre ha sido una persona manipuladora que solo me vio como una herramienta?

—Gracias por decírmelo —Les digo al final—.Supongo que tendré que mantener la guardia alta de ahora en adelante.

—Eso es todo lo que te pedimos —Me dice Niki, sonriendo—.No dejes que Sunghoon juegue contigo. Si él quiere algo de ti, que lo gane de forma justa.

A pesar de sus palabras de apoyo, no puedo evitar sentirme desorientado. El resto del receso pasa en un borrón de conversaciones y risas, pero mi mente sigue anclada en la figura de Sunghoon, tratando de desentrañar sus verdaderas intenciones.

Me apoyo contra la pared del edificio, observando de lejos mientras Jake se ríe junto a su nuevo grupo de amigos. Mi pecho se siente extraño, una mezcla de molestia y... algo más. No lo entiendo.

Desde que lo conocí esta mañana, no puedo dejar de pensar en él. Algo en Jake me atrae de una forma que no esperaba, una sensación desconocida que me tiene inquieto.

Al principio pensé que era porque lo necesitaba para que me ayudara en matemáticas. A veces, ser el mejor no es suficiente cuando una materia se te atraviesa y no puedes darte el lujo de perder ni una décima.

Pero cuando me acerqué a él, cuando lo vi concentrado, con el ceño fruncido mientras resolvía ese maldito problema, algo hizo clic dentro de mí. No es solo que sea inteligente. Es diferente. Es... genuino.

Los chicos suelen seguirme, hacer lo que quiero, incluso Heeseung y Jay, pero Jake no. Pude verlo en sus ojos cuando me ayudó, no lo hizo porque quisiera ganarse mi favor o porque le importara mi estatus.

Lo hizo porque simplemente es así, porque disfruta lo que hace. Y por alguna razón, eso lo hace más interesante, más... atractivo.

Pero luego está el asunto de su "condición". Jay, Heeseung y yo fuimos quienes impulsamos esa petición hace un par de años.

En ese momento, me parecía lo correcto. Quería mantener la escuela "limpia", sin complicaciones. No quería tener que lidiar con chicos como Jake, con sus particularidades que hacen que todo sea más complicado. Pensaba que eran diferentes, que no encajaban aquí.

Pero ahora, todo eso parece una estupidez. Jake es... normal. No, más que normal. Es brillante. Y eso me asusta. Porque si lo que siento por él es real, entonces todo lo que creía, todo lo que defendí, está mal.

Suspiro y cierro los ojos por un momento, intentando aclarar mis pensamientos. Tal vez debería acercarme a él de nuevo, explicarle lo que pasó, que ya no pienso igual. Tal vez él podría entenderlo, aunque sé que será difícil. No será fácil borrar lo que hice, pero por alguna razón, siento que necesito intentarlo.

Abro los ojos de nuevo y lo veo, riendo con Jungwon, Niki, y Sunoo. Mi estómago se revuelve. Noto la cercanía entre ellos, la forma en que Jake encaja con ellos sin esfuerzo, como si siempre hubiera sido parte de su grupo.

Y de repente, siento celos. No es algo que me pase a menudo, pero aquí estoy, observando a Jake y deseando ser yo quien lo haga reír de esa forma.

Me aparto de la pared y camino hacia los baños, intentando calmarme. Todo esto es nuevo para mí, y no tengo idea de cómo manejarlo. He estado con otras personas antes, pero esto es diferente. Jake es diferente.

Y eso me aterra.

Cuando llego al baño, me apoyo en el lavabo y me miro en el espejo. No puedo creer lo que está pasando.

¿Cómo llegué hasta aquí? ¿Cómo es posible que el mismo chico al que hace poco hubiera ignorado por completo ahora me tenga en este estado de confusión?

Pero lo sé. Es él. Es Jake.

Y tengo que hacer algo al respecto, antes de que sea demasiado tarde.

Y sigo desempolvando historias para actualizar